De:
Para: Tom Holland
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Llevas tanto tiempo rondando en mi cabeza que necesito escribirte esta carta para que sepas lo que ocurre de verdad. De verdad que tu imagen está tan aferrada a mi alma que me resulta difícil imaginar que tú no lo sepas. Porque este amor ha de llegarte de alguna manera, aunque nunca podamos estar juntos, aunque nunca se materialice de forma física.
Pero no me quiero limitar a amarte en silencio, desde esta distancia que nos separa y necesito decirte que te quiero; que te querré siempre porque eres mi verdadero amor, ese amor de mi vida que nunca nadie podrá compensar. Ningún hombre ha sido capaz de sacarte de mi cabeza, así que no tengo más remedio que permanecer ligada a ti para siempre.
Y no me importa amarte desde este lado imaginario, no me importa que todas tus caricias, tus besos, tus abrazos y tus risas tengan lugar únicamente en mi mente. Porque la intensidad de este amor es máxima y lo estoy viviendo como nunca antes había vivido el amor.
Por eso voy a seguir amándote, voy a seguir imaginando cómo eres y voy a seguir disfrutando de este amor ideal, pero no irreal. No puede ser irreal cuando tu imagen aparece en los momentos más inoportunos y me saca una sonrisa, ni cuando se acerca a abrazarme y me estremezco, ni puede ser irreal la ilusión de imaginarnos haciendo planes. No es amor irreal, es amor ideal.