Secrets || Antoine Griezmann||

By carlita1917

35K 1.1K 357

Imagínate tener un padre y no saberlo, haber pasado toda tu infancia y adolescencia en un orfanato sin saber... More

Capitulo 1
Capitulo 2
Capitulo 3
Capitulo 4
Capitulo 5
Capitulo 6
Capitulo 7
Capitulo 8
Capitulo 9
Capitulo 10
Capitulo 11
Capitulo 13
Capitulo 14
Capitulo 15
Capitulo 16
Capitulo 17
Capitulo 18
Capitulo 19
Epilogo

Capitulo 12

1.3K 49 14
By carlita1917

— Tened un buen viaje—. Se despidió Simeone.— Gio ya llegó a Italia y todo bien.—Anunció.— Cuidamela—. Se dirigió a Paulo y este asintió.

— Nos vemos en unas semanas—. Comentó Carla.

—Chauuu—. Dijimos Paulo y yo para después dirigirnos a la terminal que nos tocaba.

Después de esperar unos 30 minutos a que nos abrieran la puerta de embarque nos montamos al avión.

— España allá vamos—. Anunció Paulo.

Nos esperaba un viaje un tanto largo, y más a Paulo, ya que dos días después de su estancia en Madrid se iría a Turín.

Las primeras horas las pasamos hablando, hasta que el sueño pudo con nosotros y después de cenar nos acostamos unas horas. Para cuando nos despertamos, ya estábamos en territorio español.

— Paulo—. Lo llamé, él se levantó un tanto cansado. — Estamos en España.

—¿Cuánto queda?

— Mmm... Unas 2 horas.

— Genial, pues ale, a dormir—. Acto seguido me besó.

— Paulo. No. Arriba—. Gruñó.

— Es verdad. Tenés que contarme lo que quedamos—. Bufé y me eché para atrás, sabía que esto iba a pasar.

— Paulo lo nuestro... Es complicado, me encanta lo que tenemos, y si no fuese a trabajar en Madrid... Pero tú ya vas a empezar a entrenar, y yo la pretemporada... Pero estas semanas han sido lo mejor contigo, me has hecho olvidar a personas por momentos—. Lo besé.

— Tenés razón. Carla... yo te quiero. Y estas semanas han sido... Espero tener algo contigo más adelante. No me olvides.

— Disfrutemos de estos días. ¿Vale? Después, ya veremos—. El asintió y volvió a unir nuestros labios.

Me dolía tanto hacer eso... Pero era lo mejor, al fin y al cabo, no había olvidado a Antoine, no quería hacer daño a Paulo ni a mí y había mucha dificultad.

                               (...)

— He aquí, mi humilde morada...

— Es muy bonita—. Confesó Paulo entrando por la puerta de mi piso.

— Espero que te parezca bonita, es donde te vas a quedar por tres días.— Reí.— No es como tu casa, pero para dormir dos días te vale.

— Es perfecta, Carla—. Me besó.

— Anda, vete a deshacer la maleta.

Paulo se iba a quedar en mi casa los pocos días que iba a estar. Ya que era más cómodo para él y para mí. Mientras que Paulo deshacía la maleta, yo le mandé un mensaje a mi padre, Carla, mis hermanos y las chicas para avisar de que ya estábamos en Madrid.

Había quedado en ir a tomar algo con las chicas y les presentaría a Paulo.

Una vez que Paulo acabó de arreglar y ordenar sus cosas, nos fuimos a la cafetería en la que habíamos quedado con las chicas, estaban todas menos Sara y María, las cuales estaban de vacaciones con sus respectivas parejas.
La cafetería que habíamos elegido estaba un poco apartada ya que no queríamos que hubiese mucha gente por Paulo.

— Es aquí—. Le dije a Paulo entrando al local. — Allí están, vente—. Le di la mano y le llevé a la mesa donde estaban mis amigas.

— ¡Carla!

— ¡Lucía! — La abracé.

— ¡Carla!

— ¡Noa! — Hice lo mismo con Noa y con las demás.

— ¡Carla!

— ¡Amil!

— ¡Carla!

— ¡Luna!

Una vez saludé a todas y Paulo también nos sentamos y pedimos algo de beber.

— Con que Paulo Dybala, ehh...— Comentó Luna antes de darle un sorbo a su cocacola.

— El mismo.

— ¿Cuánto te vas a quedar?

— Esta vez estoy dos días sólo, Noa. Bueno tres si cuento hoy—. Rió.

— Pues... A ver qué hacéis vosotros durante dos noches en la casa de Carla ehh...

— ¡Amil!

— Amil tiene razón.

— Lucia no me esperaba esto de ti—. Reí.

— ¿Pero tú eres Mrs. Dybala o no?

— Si lo que te preguntas es que si somos novios es que no—. Contestó Paulo y pude notar un poco de desanimación en su voz.

— Es algo raro—. Dije. Vi que la cara de Luna y Noa era un poema. — ¿Qué pasa chicas?

— Emm... ¡Nada! — Dijeron al unísono.

— Es que no se pegáis mucho...

— Luna, no me la pegáis. ¿Qué pasa?

— Ha entrado Antoine Con Dennise—. Dijo Noa.

— ¿Aquí? — Pregunté poniéndome nerviosa, Paulo lo notó y me dio la mano, él no sabía nada de lo de Antoine.

— Si.

— Y viene hacia aquí.

— Mierda.

— ¿Qué pasa?— Preguntó Paulo.

— ¿No se lo has dicho?

— ¿Decirme el qué?

— Tampoco era como para decirle, Lucia—. Pero me callé al ver a Antoine y su supuesta novia al lado mía.

— Hola chicas.

— Hola Antoine—. Dijeron todas.

— Hola—. Comenté casi sin mirarle a los ojos. No podía, no todavía.

— Carla... Esto... Te presento a Dennise, Dennise te presento a Carla.

— Ya nos conocemos—. Comenté.

El ambiente se había vuelto tenso, bastante.

— Emm... Antoine, Paulo, Paulo, Antoine. Aunque puede que ya os conozcáis.

— Sí.

Mientras todos tomaban asientos otra vez, pues, Antoine y Dennise se quedarían con nosotros, Antoine me agarró del brazo.

— Tenemos que hablar.

— No es el momento ni el lugar—. Le dejé con la palabra en la boca. No quería hablar ahí, y mucho menos delante de todos y menos de Paulo, el no tenía por qué saber nada.

Estuvimos manteniendo una conversación, o más bien estuvieron, yo me mantuve ausente durante casi toda la charla, intentaba estar lo más distante de Antoine.

— ¿ Y qué haces aquí Paulo? ¿Fichas por el Real? — Preguntó Antoine y Paulo rió.

— Qué va, no. He venido a acompañar a Carla unos días y luego voy a Turín. Nos conocimos en Argentina y me ha convencido para quedarme unos días en Madrid.

— No sabía que estuvieseis saliendo.

— No lo estamos—. Dije metiéndome en la conversación ya que me estaba enervando. — Hay ciertas cosas que nos lo prohíben, tenemos algo raro—. Sonreí falsamente.

— Pues Antoine y yo estamos genial, llevamos ya... un tiempecito...con algo raro.

— Ya. Se ve que a él lo de tener una relación no le va—. Comenté recordando.

— Carla...

— Pues no le iría contigo, porque...

— ¿Pedimos algo más? — Preguntó Antoine cortando la conversación.

— Mejor nos vamos—. Dije cogiendo de la mano a Paulo. — Ya veo que sobramos. Adiós chicas, quedamos otro día—. Me despedí de las chicas y salí de la cafetería.

Al llegar a casa, Paulo no tardó en preguntar por Antoine, nos sentamos en el sofá y se lo conté todo, acabé llorando en su hombro y el me daba besos en la cabeza y me acariciaba la espalda.

— Me Tenés acá para todo—. Decía el de Turin.

— Lo sé Paulo, gracias por todo. Te quiero. Pero creo que todavía no le he olvidado.

— Me tenés acá para todo—. Repitió.

Más tarde nos fuimos a acostar, cuando ya estaba en mi cama tumbada y a punto de dormirme, sonó un mensaje.

                         Antoine

Escúchame Carla por favor, tenemos que hablar.🙏🏽

   Quedamos mañana y me explicas las cosas, pero no sé si cambiaré de opinión.

Continue Reading

You'll Also Like

2.9K 158 7
"𝘠 𝘢𝘶𝘯𝘲𝘶𝘦 𝘱𝘶𝘥𝘪𝘦𝘳𝘢 𝘩𝘢𝘤𝘦𝘳𝘭𝘰 𝘵𝘰𝘥𝘰 𝘥𝘦 𝘯𝘶𝘦𝘷𝘰, 𝘴𝘦 𝘲𝘶𝘦 𝘷𝘰𝘭𝘷𝘦𝘳𝘪𝘢 𝘰𝘵𝘳𝘢 𝘷𝘦𝘻 𝘢 𝘷𝘰𝘴" Una noche en la qu...
165K 11.9K 82
El mundo de Elizabeth o Liz como sus amigos le dicen cambia radicalmente al firmar ese contrato. En su trabajo no solo pudo combinar sus pasiones, el...
4.8K 62 17
Cada historia será diferente, ante todo pido respeto y que opinen q les gustaría tener
324K 24.8K 53
Historias del guapo piloto monegasco, Charles Leclerc.