—Ka... Kacchan... — No sabía como reaccionar, tener a Kacchan viendo fijamente en mi dirección, como si supiera que estoy aquí... Eso es...
—Izuku... ¿Por... Qué...? — Estiró su mano al frente de mi e intentó tocar mi cara, pero aquello fue imposible, puesto que solo me atravesó, y ante aquello soltó un afónico jadeo —E... Estas... — Lo intentaba una y otra vez, con el mismo cruel resultado —Esta frío... — Murmuró con una expresión de dolor.
¿Que debería decir...? E pasado todo este tiempo queriendo que pudiera escucharme, que pudiera verme y, ahora que puede hacerlo me parece tan irreal que no se lo que debería decirle.
—Lo siento... — Se me adelantó, con su voz quebrada y sus finas lágrimas se comenzó a disculpar —Perdoname Izuku... Por mi culpa estas... — Esta culpándose otra vez —Lo siento tanto... —
Tan frágil... Me duele tanto verlo frágil, débil... Así no es el Kacchan del que me enamoré...
—Kacchan... — Llamé su atención —No fue tu culpa lo que paso... — Debo hacerle entender, debo evitar que siga culpándose por algo que tal vez debía de suceder —Eso fue... Algo inevitable... —
—¿De... De que hablas...? — Sus ojos temblaban, al igual que sus labios —¿Cómo que... Inevitable...? —
—Tal vez... Yo debía... — Se que se enojará, pero aun así lo diré —Yo debía morir ahí... No había... —
—No me jodas... — Su voz se volvió sería, esta molesto —Era algo que se podía evitar... No me vengas con algo tan estúpido... Maldito nerd... — Hace mucho que no lo escuchaba llamarme de ese modo, lo echaba un poco de menos.
—Pero... Tu no podías hacer... Nada para evitarlo... —
—¡Claro que... — Trató de agarrame del cuello de mi gakuran, como era su costumbre cuando se enojaba, pero al ver como nuevamente su mano solo me atravesaba, la retiró —Pude haberlo evitado... Solo tenía que... Tratar te mejor... — Se colocó en posición fetal y hundió su cabeza en sus rodillas.
Lo se, creo que solo eso hubiera bastado... Pero no quiero que te sigas martirizando —Eso no es cierto... De todas maneras... Iba a pasar... —
—Eres un maldito mentiroso... — Ante sus palabras me exalte —Lo sabes mejor que nadie... Ese día te traté como a una mierda... — Esta aferrándose con fuerza a sus piernas, parece que... Se arrepiente demasiado por eso —Fui un completo imbécil... No tenía porque tratar te de esa forma... No había razones para que me enfureciera... Y aun así... —
¿Cómo pasó esto...? No te reconozco de ninguna forma, siempre habías sido fuerte, valiente, un poco insensible, arrogante e irrespetuoso... Pero ahora eres tan... Te pareces mas a mi o incluso peor... Esto te esta afectando demasiado, este sentimiento de culpa debe desaparecer... Y solo sucederá si también desaparece tu amor...
—¿Y? ¿Acaso hay algo que puedas hacer para revertirlo...? Kacchan... — Puedo ver como su cuerpo se estremeció... —Ya estoy muerto y eso nada lo cambiará... Ni tus disculpas o tus lágrimas... —
—¿Izu... Ku...? — Levantó su rostro con una confundida expresión.
Perdoname si esto te hace daño Kacchan... O si hace mas grande la herida y carga que tienes sobre tus hombros... Pero no quiero verte mas de esa forma tan débil... Tu no eres así.
—Si... Tal vez fue todo tu culpa... Ese día hiciste estallar uno de mis cuadernos de anotaciones... Me fui mas tarde de la escuela porque lo estaba buscando... Estaba deprimido porque siempre era objetivo de todas las burlas y humillaciones solo por el hecho de ser normal... Caminaba mas lento debido a eso... Y... — Sus ojos están temblando y lentamente el dolor se va plasmando en su cara —Y gracias a eso... Llegue a esa calle en el momento justo para ser asesinado por un villano... —
—Pe... Perdón... — Sus ojos se humedecen otra vez.
—¿Po-podrías dejar de disculparte...? No importa cuantas veces lo hagas... Las cosas no van a ser diferentes porque lo hagas una y otra vez... O porque llores todos los días... Tus lágrimas no me devolverán la vida... — Nunca e sido bueno para aparentar ser fuerte cuando me estoy rompiendo por dentro... Y justo ahora... Decir tantas cosas crueles a la persona que amo... Es realmente doloroso —A... Así que po... Por favor de-detente... Kacchan... —
Ah... Mis lágrimas salen sin mi consentimiento... No puedo mantener mi voz fluida... De seguro estoy haciendo una triste expresión con mi cara...
No puedo mantener una pequeña farsa cuando Kacchan se esta quebrando más y más por cada palabra que digo...
—Izuku... — Con un adolorido rostro estira otra vez su mano hasta mis ojos... Quiere detener mi llanto... Pero no puede... Su tacto no lo siento —¿Por qué...? ¿Por qué no puedo tocarte...? — Lo intenta una y otra vez, cada vez con más rabia, con más impotencia —¿¡Por qué!? —
Por favor detente, no importa cuanto lo intentes Kacchan... Tus manos no llegaran a mi... Estamos en mundos diferentes.
—¿¡Por qué no puedo!? ¡Mierda! — Genera una pequeña explosión con sus manos... Sus lágrimas son mas de impotencia que de tristeza ahora mismo... Al igual que sus expresiones... ¿Tanto quieres detener este llanto...? Kacchan.
—Por favor... Ya no lo intentes más Kacchan... Es imposible... —
—¡Callate! — No se va a detener... Esa obstinación irracional... La echaba en falta... Pero duele...
—Lo siento... Kacchan... — Sin que pudiera oírme me disculpé... Y con lentitud dirigí mi mano hasta el hilo rojo que esta atado a mi meñique.
—¿Qué estas...? — Se detuvo de golpe, pero de seguro Kacchan no puede verlo... Esta roja y fina maldición...
Apenas lo toco mi pecho comienza a doler, a quemar... Como si algo estuviera siendo arrancado desde lo mas profundo de mi muerto corazón.
—I... Izuku... — El cuerpo de Kacchan comienza a tambalearse, toma con fuerzas su cabeza y pecho.
Kacchan... ¿Lo sabes...? El dolor mas fuerte es aquel que arranca sin piedad tu amor... El hilo rojo que me ata a ti es la manifestación de nuestro amor correspondido... ¿Pero de que sirve si no lo podemos expresar...? ¿Si solo nos esta lastimando...?
Desdé el día que nos declaramos yo e tenido en mis manos el poder para decidir si mantenerlo o eliminarlo... Pero deshacer este intrincado nudo duele lo suficiente como para hacer que lo pienses dos veces... Porque... Estoy destruyendo algo que por años se aferro a nosotros como una raíz...
—Izuku... — Su voz cada vez es más suave.
mientras mas desenredado esta el hilo, puedo sentir como el dolor se vuelve insoportable... No quiero seguir... Pero si no lo hago esto solo sera una carga para Kacchan... Tengo que...
—Detente... — Un cálido toque se siente en mi mano —Sea lo que... Sea que... Estés haciendo... Detente... —
Con mis ojos abiertos hasta mas no poder, puedo ver como la mano de Kacchan que tiene amarrado el hilo... Esta tocando la mía...
Se siente cálida... Esta sensación la había olvidado por completo...
—Esta... Esta helada... — Sus ojos lentamente se iban nublando, humedeciendo...
Pero... Yo solo te daría frío... Robaría tu calor...
—Lo siento Kacchan... Pero esto es lo mejor para ambos... —
Cuando ya pude quitar el último nudo de esta cruel maldición, tus ojos se volvieron opacos y perdiste el conocimiento... No sin antes pronunciar por ultima vez mi nombre... Con tu voz entrecortada y tus cálidas lágrimas
—Esto... Es lo mejor... — Me intentaba de convencer mientras retenía mis gritos... Y aquel salado liquido recorría mis mejillas... Sin detenerse...
(...)
Lentamente la luz se colaba por las cortinas, golpeando sus ojos, obligándolo a despertar.
Soltó un pequeño gruñido y con dificultad fue despegando sus párpados.
—¿Que... — Sentía su cuerpo pesado, cansado por alguna razón, sus ojos dolían ligeramente —¿Por qué... Me duele todo el puto cuerpo...? — Se preguntó levantándose con dificultad, haciendo sonar cada hueso de su cuerpo.
Con lentitud comenzó a caminar hasta la puerta de su habitación para dirigirse al baño.
—¿Katsuki...? — Una voz conocida lo llamó antes de que pudiera adentrarse a aquel lugar.
Como era su costumbre no dijo nada, solo la miró con su ceño levemente fruncido, ese era un saludo para el rubio.
—Pensé que... Ya estabas en la escuela... — Dijo la mujer, ligeramente preocupada y sorprendida.
—Aun es temprano ¿Por que mierda iría a esa estúpida escuela a estas horas? —Era una pregunta retórica, su madre debería saber que él prefería llegar justo a tiempo a clases.
—¿Eh...? — Se le quedo viendo sin creer lo que su hijo decía, parecía diferente a como lo era últimamente.
—No me mires de esa forma tan desagradable, vieja bruja — Sentenció para luego adentrarse al baño y comenzar su ruidosa rutina.
(...)
Como siempre llegó justo antes de que sonara la campana que daba inició a la jornada escolar, sin ánimos caminaba por los pasillos.
—Buenas... — Saludó a sus compañeros al entrar al salón y se disponía a entrar para sentarse en su lugar de siempre, pero a medio camino algo llamó su atención —Ey... — Llamó a uno de sus amigos.
—¿Que sucede? Katsuki — Estaba ligeramente sorprendido de que le dirigiera la palabra.
—¿De quien mierda es eso...? — Apuntó al pequeño florero blanco con una flor que descansaba sobre un pupitre desconocido.
—¿Eh...? ¿De que hablas...? Es de Dek... Midoriya... — Respondió confuso.
—¿Quien era ese? — Arqueó una ceja, sin recordar a un sujeto con ese apellido en su clase.
—¿A... A que estas jugando...? Katsuki... No es divertido... — Los ojos de sus compañeros temblaban ligeramente, mientras una gota de sudor surcaba sus mejillas.
—¿De que mierda ha... — No alcanzó a terminar, sintió un ligero peso por uno de sus hombros y espalda alta —¿Que quie... — Pensó que alguien lo estaba tocando, pero al voltearse para ver de quien se trataba no vio a nadie —¿Que mierda...? — Murmuró, sintiendo un ligero escalofrío recorrer su cuerpo —Esta haciendo frío... —
—¿Frío? ¿Estas enfermó Katsuki? Estas actuando extraño... — Mencionó preocupado uno de sus amigos.
—¿¡A quien le dices que esta actuando extraño!? — Gritó, como era su costumbre, exaltando y sorprendido a todos sus compañeros.
—Lo... Lo siento... — Susurró algo asustado.
—Tch... — Sin darle mas importancia a las palabras de los demás se dejó caer en su asiento "Mi cuerpo se siente pesado, me duele la cabeza y este estúpido escalofrío que recorre mi cuerpo..." Comenzaba a divagar con sus pensamientos, ciertamente molesto.
—¿Ka-Katsuki? — Lo llamó uno de sus compañeros, que lo miraba aterrado —¿Po... Por qué estas llorando...? —
—¿Eh...? — Rápidamente dirigió su mano hasta sus ojos, donde el salado líquido salía con suavidad, de manera lenta, calmada —¿Por qué...? — De inmediato trató de detener sus lágrimas, pudiendo hacerlo a los pocos segundos —¿Por qué mierda estaba...? —
—¿En serio estas bien...? —
—¡Callate! ¡Solo me entró algo al ojo! — Exclamó, queriendo evitar que otros se preocupasen por él.
(...)
—Ah... Lo siento Kacchan... Yo no quería... — Con fuerza abrazaba a su rubio amigo, sus lágrimas caían de forma caudalosa, sin frenos, atravesando el cuerpo de quien tenía rodeado con sus brazos.
Con todo lo que podía mordía su labio inferior, reteniendo los gritos que se escapaban de su boca mientras sollozaba.
—Esto... Esto es lo mejor... Este sufrimiento... Desde un principio debía ser... Unilateral... — Murmuró Dejándose caer de rodillas en la dura cerámica... —Lo siento... Kacchan... Esta maldición... No puedo quitarla de mi corazón... Perdoname... — Hundió su cabeza en la espalda baja de quien amaba.
(...)
—¿Eh...? — Lentamente corrió su mirada hasta la ventana, viendo el cielo despejado pero se sentía como si —¿Por qué... Esta lloviendo...? — No sabía porque, pero una gran tristeza lo comenzó a invadir, y mas qué sentir como si estuviese lloviendo, era como si... —Esta llorando... —
BAD END
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Hola, disculpen la demora, lo feo del cap y la ida de olla.
Espero sea de su agrado >////////<
Gracias por sus comentarios y/o votos, en verdad los quiero >/////////<