Amaneció y estaba lloviendo, eso quería decir que tenía que ir en auto al trabajo y no caminando como lo había hecho estos últimos días.
Me levanté de mi cama y vi que Camila se empezó a mover porque estaba haciendo frío.
Tomé las cobijas y la cobije bien para que no se enfermara.
Me fui a mi baño e hice mi rutina diaria.
Salí y Camila estaba dormida todavía, "no irá", pensé ya que por su pierna, no podía ni trabajar.
Hice mi café y fui a ver si mis padres estaban ahí, pero solo me topé con Margot.
-Buenos días Margot ¿mis padres? -Pregunté tomado un sorbo de mi café.
Margot: ellos se fueron en la madrugada, dijeron que los llamaras para hablar ya que se tuvieron que ir por una emergencia- dijo Lauren mujer mientras barría el suelo.
-Gracias Margot y por favor, tómate el día libre, está lloviendo y ven dentro de tres días ¿si?- dije sonriendo, sabía que los días libres la ponían feliz porque iba a visitar a su hija.
Margot:Gracias señorita Lauren, usted es un ángel- dijo y me sonrió- me voy ahora para que usted tenga más tiempo con la señorita Cabello.
-Está bien, adiós- dije y ella se fue de donde yo estaba.
Aunque estaba lloviendo, la vista de mi jardín no cambiaba, las flores formaban una J en el césped y la fuente estaba funcionando aunque el agua se salía.
Volví porque me dio frío e hice el desayuno para Camila.
Mientras se hacían las tostadas, fui a ver si Camila ya había despertado.
La vi sentada en la cama frotándose los ojos y bostezando, parecía una bebé.
-Buenos días- dije entrando de golpe a la habitación.
Camila: ¿que hora es?
-Las 7, tengo que ir a trabajar, pero tu te quedas aquí en la casa.- dije aun en la puerta.
Camila: Ah- dijo secamente.
-¿que te pasa mi vida? ¿te sientes mal? - dije acercándome a ella.
Camila: no la verdad no me siento mal, pero me pone triste no poder estar con mi familia.
- Cariño, ¿quieres que te lleve con tus papás? - pregunte y ella asintió como una bebé. - Todo por ti bella- me acerqué más a darle un beso hasta que "Tin" sonó la tostadora- el desayuno está listo, ya vuelvo-dije y corri a la cocina a preparar su desayuno.
Desayunamos y ayude a Camila a ducharse, lógicamente después de dos orgasmos la ayude.
La lleve a su casa y me asegure de que todo estuviese en orden para que Camila se quedará ahí.
Volví a mi trabajo pero todo era aburrido sin la mujer mas sexy de el mundo como secretaria.
Cuando era hora de salida, llame a Camila y me dijo que se iba a quedar en casa de sus padres a dormir, bueno, dormiré sola.
Llegué a mi casa y sentí esa soledad otra vez de el vacío.
Ese silencio que me recordaba tantas cosas.
Simplemente extrañaba a Camila y la quería cerca, no podía estar sin ella.
Antes de ir a dormir llame a Camila para ver si aun estaba despierta y me dijo que si.
"¿A que putas vas a venir Lauren Michelle?"- dijo enojada por la que otra línea.
-"Quiero verte"- dije en un tono triste.
"Yo también pero ¿no te puedes esperar mañana?"- dijo en tono enojado otra vez.
-"no"- dije secamente.
"Bueno, te espero abajo"- dijo y colgó.
Salí en mi auto aun en pijamas y conduje rápidamente para la casa de camila.
Llegué y ella estaba ahí en muletas en la puerta.
-Hola- dije tímidamente.
Camila: ¿a que viniste?- dijo en un tono serio.
-A verte- dije con decepción.
Camila:Ah como sea, dame un beso y vete, mis padres y sofi ya están durmiendo- ella se acercó y la esquive.
- Perdón si te hice bajar con tu pierna así- dije secamente y me dirigí a mi auto.
Camila me gritaba pero no quería escucharla, me sentía mal.
No quería sentirme sola y ella no me quería cerca.
No se si estoy exagerando, pero es lo que siento.
Camila P.O.V
Lauren se fue en su auto rápido y yo no entendía porque.
La llamé 15 veces y no contestaba.
No podía dormir, necesitaba saber que le pasaba y porque se fue así.
Me sentía estupida por no poder caminar e ir a correr por ella.
Me sentía inútil.
Le dejé 378 mensajes de texto, para que cuando los viera me llamara.
Me quedé dormida por el simple hecho de que me dolía la pierna y tome una de mis pastillas para ello dolor, las cuales dan sueño.