Zayn se quedo en silencio, intentando procesar lo que acababa de escuchar.
–¿Estas embarazada?
–Si.
–¿De cuanto tiempo? –le pregunto, con el corazón latiendo a toda velocidad.
–De tres meses y medio –contesto Alexis, mirándolo a los ojos.
Zayn miro inmediatamente el Jersey de chándal que llevaba, pero le quedaba tan grande que era imposible de saber…
Incapaz de permanecer sentado, se levanto y empezó a pasear por la cocina. No había que ser genio para saber que el niño que esperaba era, casi con toda la seguridad, hijo suyo.
–Y antes de que lo preguntes, si, el niño es tuyo –dijo Alexis entonces, confirmando sus sospechas.
A Zayn se le hizo un nudo en el estomago al recordar a otra mujer una vez había esperado un hijo suyo.
–Pero usamos preservativos.
–Si, pero uno de ellos se rompió –le recordó ella.
Zayn había imaginado que las posibilidades de dejarla embarazada por una sola vez era remotas. Aparentemente, estaba equivocado.
–Si, es verdad, lo recuerdo. ¿Pero porque no me lo habías contando antes? –le pregunto. Ahora entendía que hubiera insistido tanto en que la llevara a casa o que no hubiera querido quitarse el impermeable. Estaba intentando ocultarle el embarazo. Tal vez ni siquiera quería que lo supiera. –¿Crees que no tengo derecho a saberlo?
–No, no, no me vengas con esas –dijo ella entonces–. No te permito que te hagas la victima. Tu me mentiste sobre tu identidad y hasta esta mañana, cuando apareciste de repente en mi despacho y me dijiste tu verdadero nombre, yo pensaba que iba a tener un hijo con un hombre llamado Tom Zacharias –Alexis se levanto e iba a salir de la cocina cuando se lo pensó mejor–. Y para tu información, estuve buscando a ese hombre que no existe para contárselo y, naturalmente no pude encontrarlo –Luego tuvo que girar la cara para ocultar las lagrimas–. Cuando mis efuerzos no sirvieron para nada… no te puedes imaginar… me sentí como una tonta y lo pase fatal. Asi que no te hagas la victima.
Zayn se quedo donde estaba, inmóvil, mucho despues de verla salir de la cocina y correr a su habitación. Atónito, no podía creer como había cambiado su vida en las ultimas doce horas.
Cuando fue al colegio por la mañana no tenia en mente nada mas que hablar de su travieso sobrino con Helen Montrose y luego volver a la oficina para repasar los contratos y los planos de su nuevo hotel. Pero, aparte de descubrir que la señora Montrose ya no era la propietaria del colegio, la única mujer con la que había sentido la tentación de tener una aventura desde su aciago compromiso había reaparecido en su vida… y estaba embarazada.
La oidea de que iba a ser padre hacìa que experimentase un millón de sentimientos mezclados. De no haber sido por su ex prometida podría sentirse feliz por el niño que esperaba Alexis. Pero gracias a Gretchen Hayden y sus mentiras, no podía quitarse de encima una terrible aprensión.
Cinco años antes había dado creído tenerlo todo: un negocio prospero, una novia encantadora y un hijo en camino. Pero todo había cambiado cuando Gretchen decidió que la maternidad estropearía su figura y limitaría sus opciones si aparecía algo mejor en el horizonte que ser la esposa del propietario de un hotel.
Zayn tuvo que respirar profundamente para borrar amargos recuerdos del dìa que descubrió que su prometida había interrumpido voluntariamente el embarazo.
Debería concentrarse ahora en Alexis y en proteger al niño que habían creado juntos, pensó. Y estaba vez el resultado iba a ser diferente del que había sido cinco años antes. Esta vez no iba a confiar en que Alexis quisiera a ese niño; el mismo se encargaría de protegerlo.
Gran parte de su rabia desapareció al pensar que Alexis había intentado encontrarlo para contarle lo del niño y lo dolida que sintió al no poder hacerlo. Pero no toda la rabia.
El siempre se registraba en sus hoteles con nombre falso. Era la única manera de comprobar la calidad y el servicio que ofrecían a diario. Además, era una practica común que los hoteles no dieran información sobre la identidad de sus clientes. Si alguno de sus empleados hubiera roto el protocolo dándole a Alexis la información que pedia, en cualquier caso no le habría servido de nada.
Pero eso no explicaba que no le hubiera hablado del embarazo cuando se vieron esa mañana. Y también había tenido la oportunidad de decírselo durante el viaje al rancho…
Zayn tiro a la basura la comida que había sobrado y metio los platos en el lavavajillas. Le daría un tiempo para que se calmase un poco, pero luego quería respuestas. Y no pensaba irse a la cama sin ellas.
Con sus emociones bajo control una vez mas. Alexis se seco las lagrimas y se sentó al borde de la cama para mirar alrededor. La habitación estaba decorada con tonos melocotón y blanco roto. En cualquier otra ocasión le hubiese encantado porque era preciosa, pero en aquel momento le parecía una prisión, por bonita que fuera.
Estaba aislada en un rancho remoto con el hombre que le había mentido sobre su identidad y la había abandonado sin decir una palabra. El hombre que le había roto el corazón y la había dejado embarazada. Y por si eso no fuera suficiente, Zayn la culpaba a ella por no hablarle antes del embarazo.
–Esto es irreal –murmuro.
Pero lo mas increíble era que su vida empezase a ser paralela a la de su madres. Francesca Harper se había enamorado de un hombre que la dejo embarazada de gemelos y desapareció de su vida. Luego, diez años despues, el hombre había vuelto aparecer brevemente para retomar el romance, dejándola embarazada de nuevo. Pero volvió a desaparecer antes de que ella naciese. Y cuando Alexis y sus hermanos conocieron a su abuela paterna unos meses antes descubrieron que su padre había asumido una identidad falsa.
En lugar de Neil Owens, el artista que decía ser, su padre era el famoso play boy Owen Larson, el único hijo de Esmerald Larson, una de las mujeres mas ricas del país. Durante los diez años que habían estado separados, Owen Larson había tenido otros tres hijos, todos chicos y cada uno de una mujer diferente.
Era tan extraño y absurdo, que ni ella podía creerlo. Pero cuando Esmerald Larson se puso en contacto con ellos, Alexis, Luke y Jake había encontrado tres hermanos mas. Y Esmerald había recibido a los Harper como de su familia, dándole a cada uno un fideicomiso multimillonario y una de las muchas empresas del imperio Esmerald,S.A.
De modo que ella se había convertido en la nueva propietaria del colegio Premier y se había ido a vivir a Londres.
Pero nada de eso tenia importancia. Lo que era extremadamente desconcertante era que, como su madre, Alexis se había enamorado de un hombre al que había creido sincero. Y que, como su padre, Zayn había mentido sobre su identidad para evitar que lo encontrase.
Alexis sacudió la cabeza para apartar de sus tan perturbadores pensamientos. Tenia que intentar olvidar lo que no podía cambiar y solucionar el problema. A pesar de la tensión y los nervios que había experimentado, o porque no había terminado de cenar, el apetito había vuelto con fuerza.
Desgraciadamente, si volvia a la cocina se encontraría con Zayn y, aunque tenían muchas cosas que discutir y decidir, todavía no estaba preparada para volver a verlo. Además, el dìa había sido muy estresante.
Sin embargo, su estomago no dejaba de protestar y si espera mucho mas volverá a ponerse enferma.
Suspirando, se levanto de la cama, abrió la puerta y… se encontró con la cara de Zayn.
–Ah… perdona, no sabia que estuvieras ahì.
El puso las manos sobre sus hombros y Alexis noto que miraba su abdomen.
–¿Estas bien?
Aunque el roce de sus manos y el timbre de su voz la hicieron sentir un escalofrió, se obligo a si misma a disimular.
–Necesito comer algo.
–Si, seguramente no seria mala idea –suspiro el, soltándola. Alexis se daba cuenta de que también Zayn estaba incomodo con la situacion–. Ninguno de los dos ha terminado de cenar.
Se miraban buscando algo que decir cuando el estomago de Alexis volvió a protestar.
–Sera mejor que coma algo lo antes posible o lo lamentare.
–Si, claro –asintió el.
Cuando entraron a la cocina, Zayn abrió la nevera.
–¿Quieres un bocadillo o prefieras otra cosa?
–Un bocadillo y un vaso de leche será suficiente –dijo Alexis, intentando no pensar en lo guapo que era.
Se había puesto unos vaqueros gastados y una camiseta negra que destacaba los bien definidos músculos de su torso. Era, sin ninguna duda el hombre mas guapo que había visto nunca y había pensando en Aspen y lo pensaba ahora. Pero pensar eso era lo que la había llevado a la cama y a la situación en la que se encontraban en aquel momento. Debería de recordarlo y concentrarse en la conversación sobre el niño y sobre el papel que Zayn quería hacer como padre.
–Si me dices donde están los vasos yo misma serviré la leche –sugirió, apartando la mirada de sus bíceps mientras sacaba el cartón de la nevera.
–Yo me encargo de eso, no te preocupes. ¿Por qué no cortas el pan y buscas una bolsa de patatas fritas o algo asì?
Mientras el servía los dos vasos de leche, Alexis saco el pan y una bolsa de patatas de la despensa. Pero cuando todo estaba en la mesa tenia los nervios de punta. Los dos estaban siendo amables y educados, pero la tensión podía cortarse con un cuchillo.
–Esto tiene que terminar –le dijo.
Afortunadamente, el no se molesto en fingir que no sabia a que se refería.
–No quiero disgustarte mas de lo que ya lo he hecho, pero me apuesto lo que quieras a que la conversación va a ser tensa como minimo.
–Si, claro –asintió ella, sacando una bolsa de pavo en lonchas–. Pero esperar no va a solucionar nada. ¿Por donde quieres que empiece?
–Iremos a mi estudio cuando terminemos de comer. No creo que sea buena idea interrumpir otra vez la cena, ¿no te parece?
–Probablemente no –asintió ella.
Los dos permanecieron callados mientras comían, pero mientras limpiaban la mesa Alexis estaba impaciente por tener esa conversación. En realidad seria un alivio quitárselo de encima.
Zayn era un hombre de negocios, como sus hermanos, y no tenia la menor duda de que empezaría a exigir y decirle lo que esperaba de ella. Pero gracias a que había tenido que lidiar con Jake y Luke desde que era pequeña sabia defenderse a si misma y había decidido lo que estaba dispuesta a conceder y lo que quería a cambio. Y cuanto antes lo supiera Zayn, mejor.
Unos minutos despues estaban en el estudio y Alexis miro a su alrededor antes de sentarse en su sillón de cuero frente a la chimenea. No iba a sentarse en la silla del escritorio como si fuera una empleada hablando con su jefe.
–¿Cómo va el embarazo por el momento? –le pregunto Zayn, apoyándose en la repisa de la chimenea–. ¿Has tenido estos problemas a menudo?
–No, la verdad es que no –Alexis se encogió de hombros–. Aparte de un par de semanas con nauseas matinales, todo esta yendo muy bien.
–Mientras comas a menudo.
–Eso es.
Cuando descubrió que estaba embarazada había esperado que Tom Zacharias, el hombre que le había hecho el amor con tanta ternura, se mostraría su no feliz al menos interesado por su hijo. Y, aparentemente, Zayn estaba interesado. Pero no podía olvidar que el le había mentido. Confiar en el seria una ingenuidad por su parte.
–¿Cuándo sabrás el sexo del niño?
–No lo se. El lunes tenia que hacerme una ecografía pero no se si podrá decirme el sexo tan pronto. Además, ahora tendre que cancelar la cita.
–No, no habrá que cancelar nada. Llamare a mi piloto para que venga con el helicóptero desde Londres.
–¿Pero no habìas dicho que estábamos atrapados aquí hasta que dejase de llover?
–Te he dicho que no podíamos volver en coche a Londres, pero nunca he dicho que estuviéramos atrapados. Además, eso fue antes de saber que tenias una cita con tu ginecólogo –sonrio Zayn–. No te preocupes, ire contigo a esa cita y a todas las demás hasta que tengas al niño.
Alexis hizo una mueca de sorpresa.
–¿Por qué?
–¿Creias que no me iba a interesar por el niño? –había un cierto tono de desafio en su voz.
–Si quieres que te diga la verdad, no sabia si estarías interesado o no –contesto Alexis–. El hombre al que creía conocer ni siquiera existe.
El brillo en los ojos mieles de Zayn la dejo sin aliento.
–Cariño, la única diferencia entre Tom Zacharias y yo es el nombre.
–¿Enserio? –lo reto ella, ignorando el calor que evocaba ese recuerdo y concentrándose en la desilusión que se llevo despues–. ¿Normalmente utilizas a las mujeres para luego dejarlas sin decir adiós?
–No, no fue eso lo que paso –replico el, sacudiendo la cabeza–. Esa mañana tuve que volver a Londres…
–La verdad, no me interesa –lo interrumpió Alexis.
Ella tenia su orgullo y no le apetecia escuchar que se había marchado porque estaba aburrido o que lo que había entre ellos iba demasiado deprisa y había querido evitar una escena desagradable.
–De lo único que debemos hablar es de que va a pasar ahora. Soy perfectamente capaz de cuidar del niño, asì que ni quiero ni necesito ayuda económica de tu parte. Lo que quiero es saber si vas a asumir alguna responsabilidad. Si querrás visitarlo cada dos fines de semanas, una vez al mes o nunca.
Zayn dio un paso hacia ella.
–Quiero estar totalmente involucrado en la vida de mi hijo, Alexis. Y en cuando a la custodia, los derechos de visita y la pensión económica no hay necesidad de firmas ningún acuerdo.
–¿Qué quieres decir? –pregunto Alexis.
–Yo creo que esta claro.
–¿Quieres la custodia del niño?
No esperaría que se la diese, ¿verdad? Porque si era asì iba a encontrarse con una batalla legal inesperada.
Zayn la miro desde arriba como solían hacer sus hermosos cuando querían regañarla por algo.
–No estoy diciendo que quiera la custodia, Alexis. Pero pasar tiempo con el niño no será un problema porque en cuando volvamos a Londres vamos a casarnos.
N/A ¿Como andan? Hoy no es viernes pero queria subir un capitulo, porque se que algunas se quedaron con la duda de como reaccionaria Zayn, asì que aqui esta. Gracias a las chicas que estan votando, enserio no saben cuando significa para mi que les guste.
Le dedicare el capitulo a las 3 chicas que han comentado, gracias por comentar<3