5:15 am
—amigo, no sé qué pude haber hecho mal. no responde mis mensajes, me mira mal...¡ni siquiera me llamó como dijo! —contaba michael a su mejor amigo luke, con un tono que reflejaba su estado de ebriedad.
luke era consciente de que pudo haber hecho algo que a kat no le gustara, pero no iba a desperdiciar la oportunidad de que ella no estuviese con su platónico. en ese sentido, luke es muy egoísta.
—tal vez está en su periodo, tuve muchas amigas que actuaban así.
—no...no creo que sea eso. t-tal vez le llame. —sacó su celular del bolsillo delantero de su pantalón, y antes de que pudiera llamar a kat, luke puso su mano como interrupción.
—no le llames, así le harás pensar que estás siendo muy molesto.
—uh...¿tú crees? —dejó su celular en la cama de su amigo.
—yo creo, además no puedes pensar bien. bebiste mucho -recostó a michael en su cama—. debes descansar, son las 5 am
—n-no, estoy bien...sólo quiero hablar con kat.
—pero podría enojarse si te oye en ese estado, ¿no crees?
—ugh, creo que sí. pero no entiendo qué hice para que se enojara. soy un pedacito de mierda. —una lagrima cayó de su ojo.
—no, no lo eres. al menos para mí.
—tal vez no lo crees porque...somos... amigos. —luke se recostó a un lado de michael
—quizás es por otra cosa. —rió acercándose más a su amigo.
—¿qué cosa?
-que tú...me...—luke se detuvo por un momento, no creyó que michael tan fácilmente pudiese sacarle las palabras a luke. no, no lo haría, no es el momento —me...—pensaba en una excusa, y en ese momento el teléfono de michael recibía una llamada.
—oh no, creo que es kat —sacó su celular del bolsillo y revisó el contacto que estaba llamándolo—. sí, es kat.
—deberías actuar normal, supongo.
—¿hola?, ¿bebé?....no...no, estoy bien...sí, sí...estoy en casa...¿irás?, ¿ahora?...está bien...bye, te amo más. —colgó la llamda.
—¿pasó algo?
—quiere visitarme e irá a mi casa, creo que tendré que irme.
—mikeyyy —chillaba como un bebé— estoy muy solo, ¿puedes quedarte otro rato? —le miraba con una carita tan tierna que michael no pudo ni levantarse de la cama para irse.
—owww, no le puedo decir que no a esa carita. —apretó sus mejillas.
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11:22 pm
luke estaba tan feliz de poder tener a michael para él sólo. no quería que kat lo volviese a tocar. sólo él queria tocarlo y justo ahora lo hacía; mantenía su mano en la cintura de michael, dentro se su camisa, mientras acariciaba la zona, admirando a su deseable amigo.
—mikey, ¿por qué eres tan lindo?
—no lo soy. tú eres lindo, ¿sabes?
—creía que no.
—tienes lindos ojos, y una nariz muy fina. siempre quiero besarla. y tus labios...son muy rosados y tienen un brillante piercing —describía michael mirando a luke— y eres rubio, uno muy bonito —alborotaba su cabello, luke seguía con una sonrisa.
—yo amo todo de ti. y a tí te amo.
—yo también te amo.
—quisiera que fuese en serio.
—pero en serio te amo.
—no, no lo haces como yo.
—¿cómo lo haces tú?
—yo lo hago de verdad y con todo mi corazón. tú tienes a dos personas en él y yo sólo te tengo a tí.
—¿no quieres a nadie más que a mí?
—no, nadie me hace falta si ya te tengo, mikey. —acercó más a michael con un empujoncito, juntando su pequeño pecho con el suyo.
el instante en el que ambos tuvieron la mirada clavada en el otro era eterno. ninguno quiso hacer nada más que observar, imaginarse diferentes puestos, que tal vez no fuesen amigos. al menos ese era el caso de luke. michael sólo miraba.
luke tocó los labios de michael con su pulgar, imaginaba cómo debería sentirse tocarlos. chocó su muslo contra la entrepierna del teñido, el último mencionado gruñó. luke rió ante el tierno pero provocativo gesto.
—¿qué tan ebrio estás, mike?
—lo suficiente para hacer cualquier tontería contigo. —sonrió.
luke tomó la cara de michael para besarle en la mejilla, era lo más cercano a un beso en los labios y por eso le encantaba. además, ésta vez fue un poco más cerca de los labios de su amigo.
—luke...—no dejó hablar a michael, porque había vuelto a besar en el mismo lugar.
—¿mmh?
—eres mi amigo...y...—hubo 4 segundos de silencio, seguido de que michael besara la mejilla de luke.
afuera se escuchaban golpeteos hacia la puerta, alguna novia molesta tocaba ésta.