Al día siguiente muy muy temprano Mike y yo salimos para ir a ayudar a más personas esta vez a un pueblo a dos horas y media hacia el norte. Estaba recargada en la ventana, mirando uno que otro árbol, o maleza alejándose, y pensando, donde se acaba la tierra y empieza el cielo, pensado por que las nubes parecen estar planas por abajo y esponjosas por arriba, sintiendo esos horribles animales revoloteando en mi del solo recordar la forma de su sonrisa, Tom parecía ser un hombre demasiado atractivo, tengo miedo de sentir algo, no quiero enamorarme de alguien, ya no quiero sufrir como la última vez, por que la última vez casi me deshago, sentí lo mismo cuando conocí a Mike, por que todo era muy diferente, yo estuve con él cuando necesitaba a una amiga, y él estuvo para mi cuando necesitaba no estar sola, no había lugar al que no fuésemos juntos, él no era el hombre atractivo que es hoy, en aquel entonces era muy muy delgado y usaba lentes enormes, usaba un aparato en la boca, pero siempre vi lo que era él en su interior. Siempre tuvo una alma bondadosa, por que fue el único que quiso ayudar tan desinteresadamente, además de que me escribía poemas, y no le daba miedo recitar los para mi debajo del árbol frente a la universidad. Hay cosas que no pude cambiar de mi pasado, no lo e admitido a nadie pero, la belleza que tengo vino de una botella, solía rodearme de mujeres lindas, modelos, así que tuve una ligera obsesión sobre mi cuerpo, antes casi no comía y me temo hay secuelas que no puedo revertir, tengo varias operaciones, pero bueno, era muy joven y fácil de influenciar, ahora soy una mujer fuerte pero no lo fui siempre. Podia sentir una extraña sensación de que Mike me miraba de vez en cuando, fingiendo que quería ver algo de otro lado de la ventana pero ignorando me.
-Vamos Mike se que quieres decir algo - dije por fin algo harta de esperar a que el me lo dijera por si mismo - Te distanciaste de mi ayer, y somos amigos no quiero que haya distancia por que bueno, no se que haría sin ti, no podría sobrevivir ni un solo día sin ti, te necesito y no me da pena decirlo. He aprendido que más vale decir las cosas que guardarse las - me miró detenidamente, tragando saliva, dudando de decir algo -
-Hay cosas que nunca me has dicho, se que conozco casi todo de ti pero no entiendo por qué no hablas de tus padres, o por que nunca has querido ver ciertas películas conmigo. Quiero invitarte a salir, quiero hacer las cosas de una manera diferente y ayer cuando pude besarte, por fin después de todos estos años en que solo lo e imaginado no pude hacerlo, por que por primera vez siento que no eres tu, por que temo que me rechaces, que no sea lo suficiente para ti, me sigo sintiendo el joven alejado de todos, el que nadie entendía por qué una de las chicas más lindas de la clase se iba con el, por que cuando me tomabas de la mano al caminar de regreso al campus solo pensaba en gritarte que te amaba. Quiero solo saber que hay de ti, saber lo que no se, que no haya sombra, que seas franca conmigo y yo ser franco también - nunca he estado preparada para decirle a Mike sobre lo que fui, sobre lo que dejé atrás, pero no puedo, no todo, se iría al oír lo, no quiero que el también se vaya como me dejaron todos hace unos años, por que aún cuando amo la soledad y no me molesta ni me asusta estar lo, no quiero tener que estar así, no quiero tener que al llegar a casa y pensar que nadie me espera, que nadie me pensó, que egoísta soy, que egoísta e sido -
-Mike yo, no se que esperas que diga lo sabes todo, no hablo de mis padre por que no son santo de mi devoción, por que me abandonaron por no querer seguir sus pasos, sabes que me fui, que huí, que no tengo con quien ir en vacaciones, o en navidad, en año nuevo o que alguien me llame en mi cumpleaños, hay películas que no me gustan por que no me gustan y ya no siempre necesito un motivo. Solo que hay cosas que aún no puedes saber, se que quieres que te lo diga todo pero te pido estés en mi lugar por que hay cosas que simplemente me cuesta solo recordar, estuve contigo sin interés, cuando no tenías nada que dar, nada que ofrecer, en tus momentos más oscuros, solo por que necesitabas a alguien, que dejaras de estar solo, jamas pensé en solo hacer experimentos sociales, no quería llevarme con las chicas de las que yo parecía pertenecer, no es malo, yo te quería, te quiero Mike, y se que si me hubieses dicho todo no habría cambiado nada por que no estaba esperando un momento para huir - el auto se detuvo, habíamos llegado, y me reconforta que tuviésemos que trabajar por separado por que no podría enfrentar su mirada -
-No eres del todo honesta, yo si lo e sido contigo, no pido mucho, no pido mucho - se salio sin decir nada más, me sentía sentenciada, bajo la mira, estaba haciendo se real mi pesadilla, estaba perdiendo a mi mejor amigo -
Baje del auto y fui a hacer mi trabajo, para ser realistas estoy más relacionada con las decepciones y con estar sola que con el hecho de que alguien decida estar a mi lado. Y así trabajamos hasta las cuatro de la tarde, ya no sentia los dedos, no aguantaba los oídos de tener el estetoscopio, y moría de sed, necesitaba sentarme un momento, pero siempre había alguien más que atender. Lo único que compensaba todo eso que estaba sintiendo era saber que ayudaba a alguien que lo necesitaba. Terminé, muy cansada, subí al auto, esta vez en la parte de adelante como copiloto, y fueron horas muy largas, me acomodé en la ventana y me dormí disfrutando la brisa. Al llegar el golpe de la puerta al cerrarse me despertó, Mike había salido rápido del auto. Fui hasta la mesa esperando comer algo, ya moría de hambre. Nadie se fue a sentar, nadie solo yo, me llevaron un plato de guiados no sabían nada mal, y cerveza de raíz. Comí sola hasta que a nada de levantarme de la mesa, Tom se sentó a comer junto con Emma y otras personas, así que pedí más guisantes solo para no irme a acostar y sentirme sola.
-¿Llegaron hace mucho? - preguntó algo curioso mientras se sentaba a mi lado -
-No, no hace ni media hora, solo que aparentemente mi compañero no tiene hambre, ya vendrá cuando él lo desee. Y ustedes ¿Qué tal estuvo? - cambié más rápido de tema para que no me preguntaran sobre Mike -
-Fue maravilloso, ayúdamos a unos niños e incluso jugamos con ellos fue muy emocionante y gratificante, me siento muy feliz y tranquilo. Pero no hablemos de eso, supongo que también ustedes tuvieron un día gratificante, además se van mañana así que no me interesa hablar de trabajo - adoro ese brillo en sus ojos, me pierdo en ellos, como cuando miras al sol y después solo vez una mancha brillante, así me siento - Por favor cuéntame más de ti, que solo quedan unas horas -
-Pues dime entonces, dame tus preguntas y luego yo haré las mías, después de todo solo quedan unas cuantas horas - terminamos de comer juntos haciéndonos preguntas de todo tipo, aveces evadir algunas cuantas cosas y también distorsionaba la realidad. Dejamos la mesa y fuimos a sentarnos a una banca debajo de un árbol, estaba cayendo la noche -
-No puedo creer que jamás hayas probado el pan de pita has llegado hasta la tierna edad de que ¿27? Pareces joven, yo calculo que tienes esa edad - sonó algo molesto con decir que tenía esa edad, como si algo no cuadrara -
-Te equivocas Tom no tengo veintisiete, ni por asomo aún que me alaga que me digas eso, me haces sentir más joven. Pero vamos estas solo un poco alejado -
-Una mujer que pudo admitir ser más grande y que quiere decir su edad, no sucede todos los días, pero bien voy a intentar, que tal Amm... ¿Veintinueve? - negué con la cabeza - Treinta y uno y es lo último por que no creo que tengas más de treinta años, y si dices que si me quedaré estupefacto -
-Pues quiero ver tu cara por que en realidad tengo treinta y cinco, y se que me veo más joven uno o dos años más y me ayuda, todos creen que no paso de veintisiete, me hacen sentir más joven - Tom estaba boquiabierto, no creía lo que había dicho -
-No puedo creerlo es que en realidad luces más joven, parece mentira, aún que me agrada saber que tenemos casi la misma edad. Sabes he pensado que bueno cuando estemos en América podríamos vernos, quiero decir si te parece bien o si tienes tiempo para ello es que aún tenemos platicas pendientes que me temo no podré completar en una noche o en una mañana - me miró a los ojos y de nuevo mi corazón latía muy rápido, pero es que no se que hacer o decir, me tiene bajo su hechizo, quiero verle de nuevo pero siento que no podré safarme de el -
-Esta bien, de hecho creo también que no tendré tiempo para acabar mis preguntas, así que por eso acepto, eres un misterio que quiero resolver - de su cartera sacó un pequeño papel donde ya estaba escrito su número de teléfono, solo espero que no se lo dé así de fácil a todas las chicas -
-Puedes llamarme a cualquier hora pero creo que ahora es justo que tu me des tú número - sacó otro papelito y una pluma, me lo pasó y yo escribí con calma mi número de teléfono y luego le devolví el papel el cual guardó en su cartera - Sabes me agrada tu compañía doctora Alcázar, es la primera doctora que no habla y habla de su trabajo y que ayuda desinteresadamente -
-Puedes decirme Madelein, creo que a empezado a gustarme - admití -
-Bueno Madelein ya es algo tarde y creo deberíamos ir a dormí, mañana se iran de aquí temprano, debo admitir que es muy triste, me agradas y las tardes son más divertidas con tus chistes, no todos son malos - reí sonoramente al igual que el -
-¿Alguna vez te conté de uno de mis amigos que bebió demasiado? El muy tonto no podía ni caminar, lo llevamos a su casa casi cargando, y al cruzar la calle se tiró al piso se hincó, y se puso a pedir perdón a Dios - Tom se río mucho casi se le iba el aire, supongo que es más por el tono en que digo las cosas que por lo que digo - Fue muy gracioso -
-En definitiva debemos vernos cuando estemos en América tienes muchas cosas graciosas que contarme Madelein - se puso serio y me miró directo a los ojos - Oye tus ojos se ven más azules con la luz de la luna - me sonrojé por su comentario, oculté mi rostro mirando hacia otro lado -
-Es hora de dormir Tom creo que ya es muy tarde, aun que espero estés para decirnos adiós por la mañana no podría irme sin tus saludos extraños -
-Ten lo por seguro - nos fuimos hacia nuestras carpas,Tom me acompañó a la mía y después se fue, las luces ya estaban apagadas, Mike ya estaba durmiendo y me agradaba la idea de no hablar con el -
Intenté dormir pero no dejaba de pensar en Tom, ya quiero volver a Nueva York, y que él vuelva también para salir, aún tenemos muchas cosas que contar nos. No puedo esperar. Por la mañana muy temprano me di una ducha rápida, me puse ropa cómoda, Jeans, una blusa color azul algo pegada con el logotipo de la fundación médica, y botas, acomodé mi cabello el cual se ondulo de inmediato, y puse algo de maquillaje en mi rostro, no quería verme pálida para despedirme de Tom. Salimos y ahí estaban los organizadores, nuestros guías y Tom junto con Emma
-Bueno es momento de partir, no comeremos por que al parecer sufrimos de mareos y es probable que vomitemos el avión - dije graciosa y todos rieron, todos menos Mike-
-Ha sido todo un placer doctora, es una salvadora, no hay firma de agradecer lo que hizo, siempre será bienvenida aquí, con los brazos abiertos y esperamos que vuelva pronto, le prepararemos sus guisados favoritos - todos me abrazaban, me hacía sentir llena de energía -
-Claro que si, volveremos en unos meses, debemos arreglar asuntos ahí, también ayudamos a gente que lo necesita, pero en cuanto pueda lo dejo todo y vengo a verles, aun no me voy y ya los extraño - dije algo triste -
-Vamos no empieces a llorar por favor - dijo gracioso Tom y me extendió los brazos para despedirnos, me acerqué a sus brazos y al completar nuestro abrazo me sentí completa, me di cuenta que había estado fragmentada todo ese tiempo, y ahora el me completaba, había algo que me hacía sentir protegida pero libre, y creo que el sintió lo mismo, lo podía notar por su latir acelerado - Tienes mi número, marcarme y yo también te llamaré, nosotros nos quedamos solo dos días más, y al llegar prometo invitarte un café - asentí -
-Bueno Tom nos vamos, debemos llegar temprano, espero tu llamada y me debes ese café no voy a olvidar lo nunca tendrás que pagarme o te buscaré y haré que te arrepientas - el río y yo también, iba a extrañar lo en verdad -
-Hasta pronto, nos vemos en América, intenta no tener aventuras graciosas sin mi, cuídate - nos separamos del abrazo, tome mis maletas y caminé hacia la aeronave, era momento de irnos, al subir y después de cerrar la puerta me sentía tan triste, no quería irme, quería más tiempo con el, con ellos -
El avión despegó y pude ver a todas esas personas diciendo adiós, me puse muy sentimental, todo eso que hacía por los demás me había salvado, ellos me ayudaron más de lo que yo lo hice por ellos, me puse a llorar cuando el avión se estaba alejando, decía adiós también, a mis nuevos amigos, a los niños que ayude, a todas esas personas, al quedar ya alejado y no ver ni siquiera un punto que indicará su sitio limpie mis lágrimas y suspiré hondo, era momento de seguir adelante. No quise habar con Mike, ni lo hice, sigue poniéndome como victimario. El avión nos dejó en París para abordar el avión a Nueva York. Al bajar del avión Mike se fue, abordó el primer avión y yo decidí pasar mis últimos días ahí ¿Por qué no? si aún tenía tiempo. Me hospedé en un pequeño hotel cerca del centro. Esa misma noche me duche, me puse un vestido amarillo y unas sandalias de color negro, deje mi cabello suelto, no dejo de amar mis rizos, y me maquille, no mucho pero si lo suficiente, tome mi bolso y lo cruce en mis hombros, salí a caminar por las calles disfrutando del aire, fui a un restaurante y me senté en la pasadena, pedí un buen vino y una pasta. Era un lugar magnífico. Caminé un poco más por la calles, iba caminado tan tranquila tomando fotografías con mi nueva cámara, cuando alguien en bici se estampó contra mi, estaba algo desconsertada, levanté la mirada asobando mi cabeza por el golpe, y alguien se agachó a ayudarme, me dolía un poco la cadera y las manos por el golpe, había sido bastante fuerte aún que sonó peor mi caída por que todos habían detenido su paso y nos miraban.
-Perdona de verdad no me fije - reaccioné y vi a un apuesto joven de cabello negó y ojos azules con ropa casual - Voy a revisar te parece peligroso, pudiste haberte fracturado algo -
-Esta bien yo puedo sola - dije levantándome, sacudí mi trasero y asobe mis muñecas - Soy médico no te preocupes - el me dió una amplia sonrisa -
-También lo soy señorita, y creo que fue bastante duro ese golpe, temo que se haya fracturado algo por mi culpa. Soy yo quien no se a fijado y por mi culpa se ha dado un golpe muy fuerte - se veía en su rostro la preocupación, reparé en su rostro, no parecía parisino, tenía el cabello corto, de color azabache, ojos muy azules y una sonrisa algo familiar, vestido con una camisa blanca con rayas de color azul y pantalones negros, pude ver la bici aun lado aun en el piso, parecía estar de paseo también -
-No lo creo, me dolería más de lo que ya me duele, se lo aseguro estoy bien, no debe preocuparse, viviré - el sujeto río ampliamnete y yo también - Bueno tenga cuidado y preste bien atención - me di la vuelta y seguí caminando -
Pase dos días en París, probando su comida más tradicional y bebiendo vino, no mucho pero si lo suficiente, caminando por su bellas calles, hasta que aborde el avión a Nueva York, no me quedaba de otra, pasó el fin de semana y ni una llamada de Mike, no entendía por qué el no podía ponerse en mi lugar. No salí esos dos días, me quede en casa viendo películas y comiendo, recordando a Tom, y recordé el número que me había dado, quería llamarlo y pensaba ya se ha ido de Sudán podrá responder el teléfono y no es tan tarde, quizá pueda contestar y hablar conmigo un poco, temía llamarle, después de todo solo había pasado un día que había vuelto a América, quizá este ocupado, quizá el deba llamar no me vería bien llamando yo, dejé mi celular en la mesa de centro como esperando por una llamada, no llamará si no lo haces tu vamos, no hay nada de malo en que tu lo llames, quizá espera a que tu... Esta sonando, sonaba y era de un número desconocido, tenia mi bolso aún lado saque mi cartera como loca y saque el número de Tom, coincidía, casi gritaba. Contesté lo más rápido que pude, tenia nervios de hablar, era más difícil de lo que creía.
-Hola Madelein - dijo la otra voz al lado del teléfono, Sonreí y por la forma en que se escuchó él también lo hacía -
-Hola Tom, es un gusto volver a escucharte. Imagino que no hace mucho llegaste a América -
-Llevó aquí apenas un día y medio el vuelo se retrasó. Estoy apenas acomodando mis cosas en el hotel - Sonreí de felicidad, si estaba cerca quizá podríamos salir a dar un paseo cuando esté libre - Solo que estoy en California debo terminar mi trabajo aquí, solo serán un par de días es muy tedioso en realidad ya quiero descansar lo necesito, solo quiero dormir - dijo con pesar y resopló -
-Lo imagino, yo debo trabajar mañana y por la noche bueno ya vi mi lista de cirugías, quiero meterme bajo una roca y no salir jamás, aún que creo que e vivido debajo de una todo este tiempo, pasé cerca del cine y vi que saldrá una película sobre King Kong ¿Puedes creerlo? Recuerdo que sólo había una y es muy vieja, creo que ya vivo debajo de la roca - reí y el también solo que de manera nerviosa, no sabia nada sobre la película y es más solo vi al enorme simio en la portada -
-¿Viste el reparto? - preguntó algo impaciente -
-No, solo al enorme primate en la portada, no quise acercarme a ver tenía algo de prisa, aún que suena buena película creo que iré a verla no lo se -
-No te la recomiendo dicen que es pésima, no deberías verla tiene malas críticas y aún no se a estrenado, de hecho se estrena en dos días en Nueva York, no debes verla es pésima, mejor ve el perro bombeo -
-No veré el perro bombero, vi una parecida y el perro no apagaba el incendio el título fue una farsa - se río bastante fuerte que parecía estar en alta voz -
-Cuando esté en Nueva York, cumpliré mi promesa, debes de contarme de esa película de un perro bombero -
-Hecho, ve y descansa Tom parece que estas cansado, duerme come y relajate es necesario y camina, siempre sirve ver la puesta de sol te lo recomiendo -
-Lo haré, descansa Madelein, hablamos pronto - sonríe y colgué la llamada, casi quería gritar y brincar por toda la habitación -
No hice nada diferente al otro día en la revista, ya era más tranquilo, no había más reporteros, ya lo habían olvidado todo, trabajé con calma, y luego fui al restaurante por mi comida, fui a mi puesta del sol y caminé hasta el hospital, entré a mi consultorio y me cambié, había ajetreo por que habían médicos de intercambio, estarían con nosotros por varias semanas, salí donde el jefe daba los honores de presentación, me acerqué a Mike pero el se fue de mi lado como si fuera un bicho raro, no va a hacerme sentirme mal por que ya lo he pasado pésimo esto solo es una mala fase.
-Bien entonces les diré en que áreas estarán los médicos, traten los bien, aprendan ambos de esta experiencia - me puse la bata y acomodé las plumas en el bolsillo al igual que mi gafete con el resorte de submarino amarillo - Para Cardiología doctor Mike le estará ayudando el doctor Boneta, convivan y hagan medicina - un apuesto joven de cabellos cafés ondulados, y ojos marrones además de una sonrisa que derrite a cualquiera alzó la mano -
Para plástica se unirá a cubrir el área hasta que el doctor Max regrese el recién graduado doctor Cameron le daremos toda nuestra ayuda - solo pensaba no quiero nadie a mi lado hago todo sola y así soy feliz, pero tengo a cargo dos áreas es imposible, pero bueno casi no estoy aquí que más me da, así puedo ir a comer y alguien dará mis consultas mientras soy la doctora eficiente - Doctora Alcázar, el doctor Malek estará con usted en traumatología y para pediatría tendrá que esperar un poco más - antes de terminar hizo énfasis en mi - Se que no suele hablar mucho, solo Mike la conoce pero haga un esfuerzo por favor -
-Haré lo que pueda no prometo mucho - dije con sinceridad y todos rieron como si fuese un chiste -
-Ve doctora es agradable hable mas de señal de vida. Ahora nuevos peces naden hacia su líder - basura pensé, me di media vuelta para irme pero me llamaron de nuevo - Aun no se vaya voy a presentarlos a ustedes dos, son los más importantes de este hospital aunque me cueste aceptar lo, pero lo negaré con las de gineco ellas son especiales - los nuevos peces como había dicho el jefe estaban distraídos y algo alejados de nosotros - Chicos vengan aquí los presentaré con nuestros miembros honoríficos - se comenzaron a acercar a nosotros, Mike me seguía evitando -
-Vamos Mike deja de actuar como adolescente, jamás te e pedido nada igual entiéndeme - Mike rodó los ojos y miró hacia otro lado - Oh si ignorame -
-Pero aún no digo nada - negué con la cabeza - Bueno él es el doctor Cameron estará a una puerta de ambos si necesita ayuda por favor apoyen lo - un hombre algo joven de cabello color zanahoria y ojos azules, con su pijama azul que se enmarcaba a sus pronunciados músculos bien trabajados, poso su mirada en mi - El doctor Boneta es muy bueno solo denle impulso - este doctor tiene una mirada muy fuerte, y me mira extraño, comienzo a creer que tengo algo en la cara - Y por último el doctor Malek - apenas se acercaba a nosotros, y cuando lo vi bien no lo creia, fue el mismo tonto que me atropelló en París, se notó su cara de pena pero tenía que ser presentado aún cuando pidieron ser tragados por la tierra y peor estaría en mi servicio - El doctor Malek excelente en fractura y dislocación. Madelein por favor por favor interactua con el mundo que te rodea, te fuiste de vacaciones y nadie lo supo, a Mike lo extrañaban las enfermeras y las pasantes de viste ver esas preguntas - me dió un codazo y me guiñó el ojo - Por cierto tu nombre se escucha extraño como de abuela de la segunda guerra a mundial, sin ofender -
-Si bueno yo no lo escogí, iba a protestar pero el padre me aventó agua en la cara y bueno no salio bien dejemos lo en Alcázar - todos rieron con mi chiste, insisto no tiene gracia - Bueno vayan a trabajar es tiempo -
De nuevo regrese a mis pensamientos y caminé hacia mi consultorio casi era hora de la comida no habría consultas. Malek me siguió a mi consultorio, yo me senté en mi silla y el enfrente del escritorio.
-Bueno Malek todo aquí es muy fácil solo hacemos cirugías agenda das y consultas, rara vez vamos a urgencias ahí hay traumatología mala, aléjate de ellos su ego es enorme - saqué un dulce de un cajón y me lo comí -
-Quería discutir lo que pasó en París no fue mi intención de verdad estaba muy distraído, primero no se preocupe no haré algo así aquí de verdad -
-Esta bien Malek eso ya pasó, solo concéntrate aquí es importante, puedes comer y cuando no hay nada que hacer alimento a mis peces - señalé mi pecera detrás llena de peces de todos los colores - O nos deslizamos en silla por el pasillo es muy entretenido aunque mi juego favorito es la pelea con la maquina expendedora. Disfrútalo es la gloria, ahora a bien yo llego aquí por las tardes tu igual solo estamos aquí hasta máximo la una, y si vas a practicar esto es importante - el sonreía por mis comentarios, eso ya era Incomodo - Ahora vamos al comedor ya es hora además es privado -
Salimos al pequeño comedor que es del tamaño de una oficina, con una pequeña alacena de comida, donas, café y panecillos, una mesa y unos sillones con televisor y nuestro aparato de juegos.
-Esto es una broma - dijo Malek al entrar y ver todo lo que teníamos para comer, entraron también los otros dos doctores junto con Mike, me senté en la mesa pero gire a ver el café así que me levanté a servirme un poco, y a ponerle hielos, y sobretodo por una rosquilla -
-Cuidado cenicienta la carroza se vuelve calabaza a las doce - dije graciosa y todos rieron, menos Mike quien se sentó lo más alejado de mi -
-Es un placer doctora, vi su trabajo en conecciones celulares y me parece magnífico, además de su trabajo con el sistema inmune de verdad es grandioso trabajar a su lado - me reía bobamente y creí que eso le molesto un poco al pelirojo -
-Perdón no te molestes es que nadie me lo ha dicho, creo que me adapté a mi título - mordí mi dona y di un trago a mi café -
-¿Por qué no lo bebe caliente? Es normal beber café caliente por las noches - el joven de cabello castaño me Sonreía raro, ya me había hartado de eso -
-Odio el café o cualquier bebida caliente, así soy yo, hago cosas raras lo anticipo, solo para que no se asusten después - fui por otra dona, ya llevaba tres -
-¿Cómo qué? - dijo Malek -
-Mal hecho en preguntar marinero - dijo Mike mientras se servía café y se sentaba aún lado de Malek -
-Ya lo verán no se espanten, pero en especial es importante los horarios de comida se respetan mucho, no podemos venir a otra hora, bueno si se puede pero no hay tanta comida -
-Es muy graciosa - dijo Mike, no lo entiendo. Me levanté y fui a encender la tele y estaba el programa de Graham Norton mi favorito - Odio ese programa no tiene nada de bueno -
-Es mejor que el programa del dieciséis de enero, hasta yo me fastidie o el programa del nueve de octubre esta vez conseguí los lentes exactos - subí el volumen y acomodé el cojín del sofá -
-Si, si es el día del cumpleaños de John Lennon, creo que se tatuó The Beatles pero no podría aseverar lo -me acomodé después un segundo y fui por mi taza y por otra dona - Y si, nadie se explica por qué come tanto y no engorda, al contrario parece estar más delgada y no no tiene problemas de tiroides - Mike volteó a ver la tele mientras me servía café - Madelein mira quien esta en la tele -
-Si es del nuevo el mono que toca la trompeta recibirás un golpe - voltee a verlo y me señaló la pantalla -
-Es el inglés del viaje - me acerqué a la tele y ahí estaba el, siendo entrevistado, subí el volumen y hablában de la película de Kong, no me había dicho que era actor, y yo no tenía ni mínima idea de que lo fuera, insisto viví debajo de una roca al parecer, y el sonaba interesante, incluso había ganado un premio de oro, me sentí mal, como engañada, no entendí por qué no dijo nada, quizá no le interese ni como amiga, mis sentimientos y mi ánimo estaba decayendo - Quien lo diría aún que creo que lo pensé un momento lo vi en el cartel central -
-Esa película será genial, ese actor es muy bueno a hecho muy buenos personajes de verdad, esa película será la sensación - ahora Malek estaba siendo blanco de una mirada algo inquisidora - Y tiene muchísimas fans -suspiró, estaba siendo insoportable a propósito, por eso me hablaba, sabia lo de Tom y era como una forma macabra de hacerme saber que con el no habría nada, no sabia si defenderme con palabras o atacar - Pero The Night manager fue mucho mejor te presto los CDs te encantará, es fabuloso que con esa fama le guste ayudar a niños desamparados y coquetear con doctores locos - si eso era para mi, actuaba como niño, los demás pasantes sentados en la esa se quedaron serios, era claro que solo era un pelea, me levanté y fui hasta Mike, acaricie un cuello con dulzura y sonreía tierna, Mike creía que no lo se, lo besaría -
-A esto me refiero con que suelo hacer cosas raras - me acerqué a él y golpee su cabeza en la mesa y puse su brazo detrás de su espada, se necesita fuerza para arreglar huesos - No decides por mi Mike, lo hago yo - y por último dije en su oreja, los tres sujetos nos veían raro, asustados supongo - Tienes cola que te pisen amigo, las cosas son así tu hablas yo hablo - solté su cabeza de golpe y este se golpeo con más fuerza de la que lo sostenía - Y no me iré de aquí por por que este también es mi espacio, así que voy a comer y ver la tele - saqué una rebanada de pizza del míni bar y fui al sofá a comer, en definitiva me sentía pésimo de saber que Tom me había mentido. Vi mi teléfono, Tom iba a llamar, así que lo apague -