Mates (Camren G!P)

By turningpages97

581K 32.7K 17.3K

El pueblo de Campbellville, Ontario, Canadá siempre ha sido el hogar de Lauren Jauregui, donde dio sus primer... More

Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
N/A
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12 (Parte I)
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
¡Mi nuevo libro ya está disponible!
Capítulo 17
Fallas/errores en Wattpad
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25

Capítulo 12 (Parte II)

16K 1.1K 561
By turningpages97

N/A: Buena lectura...*eyes emoji* 

Camila's POV 

Tenía claro que ese no era mi lugar, ni el de otra muchacha que miraba todo con pánico al otro lado de la sala. Yo al menos lo estaba disfrazando muy bien mientras bebía agua de mi vaso rojo. Había planeado pasar un buen rato, bailar, quizás aventurarme a terminar con una jaqueca a la mañana siguiente, pero mis planes no podrían haber fracasado de peor manera y me cuestionaba con temor a mí misma: ¿En qué momento las cosas se me habían salido tanto de las manos? 

Al llegar ya se sentía la música retumbando por todo el suelo, la casa quedaba en el bosque, como la mía y la de la estúpida de Lauren, pero al otro lado de la ciudad, así que de cualquier manera no era cerca. Los vasos con alcohol rondaban de mano en mano hasta terminar en alguien que los quisiera, al igual que los cigarrillos. Fuimos presentadas a todos los compañeros de equipo de Troy, el novio de Ally. Más de la mitad no podía quitar sus ojos del vestido ajustado que llevaba Normani, pero a ella no parecía molestarle la atención que estaba recibiendo. 

"¡Chicas!" Troye aclaró su garganta al oír al muchacho desconocido. "Y chico." Rió y el de ojos claros le sonrió en agradecimiento. "Qué bueno que vinieron, necesitábamos más chicas lindas, las universitarias aún no llegan." Entrecerré los ojos algo ofendida. "Bueno ya saben, hagan lo que les plazca. El lugar no es mi casa, simplemente lo uso para fiestas, así que no se preocupen por nada." ¿Acaso es normal ser rico por aquí?

La música estaba a todo volumen, cosa que hacía dificultosa la comunicación. No era problema para las parejas que andaban besándose o casi teniendo sexo en cada esquina, pero para mí, que sólo había dado tres besos en mi vida y dos habían sido con una versión más actualizada de Rebelde sin causa, pero mujer, con unos ojos esmeralda matadores, unas manos fuertes pero delicadas y...¿De qué estaba habland- Ah, sí, el ruido era bastante ensordecedor, casi molesto. 

Visualicé a Dinah, alejándose y mezclándose entre toda la multitud de adolescentes y jóvenes adultos sudorosos junto con Normani. Rodé los ojos, sabía que ambas estarían ebrias en menos de media hora, probablemente rodeadas por babosos. 

"¿Quieres ir al jardín trasero? Oí a alguien diciendo que es mucho más tranquilo por allí." Troye sugirió alzando la voz. Lo pensé por unos momentos. Por un lado quería desatarme de mi lado hiper-responsable y subirme a una mesa a bailar, pero por el otro sabía que eso era sólo a causa del efecto que había dejado mi discusión con Lauren. Sólo quería demostrarle que podía ser de esas chicas que van a fiestas y se embriagan sin problemas...O tal vez sólo quería convencerme de eso a mí misma, porque también sabía que no era nada de eso. 

Asentí retándome por haberme rendido tan patéticamente. 

La música ya no aturdía en el jardín trasero, solamente algunas personas estaban ahí fuera, fumando y conversando de forma pacifica. Me sentí fuera de mi zona al ver a las otras chicas, con vestidos y faldas que dejaban a la vista detalles demasiado personales para estar así de expuestos.

"Más cómoda ahora, ¿verdad?" Lo miré y medio sonreí. 

"Mucho." Devolvió el gesto con la misma sonrisa y chocó su vaso con el mío. 

"Por nosotros, los inadaptados." Hizo un movimiento con su mano, agitando el vaso antes de darle un trago. 

"Por los inadaptados." Reí bajo y bebí lo poco que restaba de mi agua. Estábamos al lado de una barra de madera, que me sirvió como un buen soporte para mi brazo. 

Abrí los ojos de repente. "¿¡Dónde ha quedado Ally!?" Troye se atracó con su agua por culpa de la risa incontrolable que le agarró. Tuve que dar algunas palmaditas en su espalda alta para que pudiera recuperar el aire, y aún después de eso, él seguía riendo. 

"Tranquila," Tosió. "fue con su novio a bailar, o eso escuché que le decía a Dinah." Coloqué una mano en mi pecho. 

"Qué alivio, creí que la habíamos perdido en el genterío." Negó con una brillante sonrisa y al acabar su bebida lanzó el vaso en un cesto cercano. 

No llevaba cuenta de cuánto tiempo teníamos, apoyados contra esa barra, hablando sobre cosas totalmente irrelevantes y poco constructivas, posiblemente había sido casi una hora. Hacía rato iba sintiéndome extraña, como si algo me preocupase pero no tenía idea qué. O tal vez mi yo interior me estaba advirtiendo algo que yo no estaba captando. Mi boca se había comenzado a secar y necesitaba otro vaso con agua. 

"Oye, iré a buscar a Ally, me acaba de enviar un mensaje." 

"¿Qué dijo?" Pregunté intrigada.

"Su novio ya se pasó un poco de copas y él le dijo que sería mejor que estuviera con nosotros los sobrios inadaptados." Largó una corta carcajada. 

"Ve, yo también debería entrar por un poco de agua." Ese algo hacía que mi estómago se revolviera. Mi mano viajó hacia éste disimuladamente. 

"¿Quieres que vaya contigo y luego paso por Ally?" Fruncí el ceño. Al menos quería demostrarme que sí podía pasar cinco minutos sola sin meterme en problemas.

"No, ve por ella, la cocina queda al otro lado de la sala." De cierto modo dudoso, asintió y al entrar nos separamos. 

Me sorprendió no ver a Dinah y Normani bailando por ahí con algún muchacho, pero la sorpresa realmente fue encontrarlas bailando una con la otra, y la más grande sorpresa llegó cuando las vi besándose mientras varios cerdos se reunían para canturrear o babear animándolas. Sonreían y empujaban a cualquiera que se les acercara demasiado. Esas chicas siempre sabían qué hacer para animar la fiesta y no salir perjudicadas en el intento. 

La mesada de granito estaba cubierta por latas de cerveza y bebida energética. Me dirigí hacia el grifo y llené un vaso con agua. 

"Nena, ¿no quieres algo mejor que eso?" Un aliento horrible inundó mis fosas nasales. Sólo negué sin mirarlo. "¿Te comieron la lengua los ratones o qué?" Rió y su asqueroso olor hizo que me dieran nauseas. 

"Aléjate, por favor." Pedí cortésmente. 

"Oh, vamos, mira-" Se tambaleó alcanzándome su vaso y tapé mi nariz. 

"En serio, no quiero, gracias-" Mis corazón comenzó a latir como loco, asustado, cuando el ebrio tomó mi brazo y se arrimó, observando mis pechos en el proceso. 

"Sólo bebe un poco precissa." Intenté zafarme sin enfurecerlo, no quería que además de borracho pervertido se convirtiese en uno violento. 

"Deja de mirarme así y suéltame, por favor." Sonrió grande. 

"No hay much ahí, per son bastante bonitos." Se tropezó con sus palabras en medio de hipidos. Alzó las cejas de manera sugerente. 

Estaba por llorar si no me soltaba el brazo, pero en eso...

"Te ha dicho que no, hermano." Un muchacho alto se le paró delante, cortando el contacto. El ebrio bufó y se largó farfullando algo incomprensible. "Lo siento, no te había visto, hubiese venido antes." Estiró su mano para que la estrechara. Con mis inseguridades, seguí la corriente y devolví el gesto amablemente. Por alguna razón el revoltijo en mi estómago ahora me perturbaba mucho más. 

"Soy Nicholas." Sonreí como pude. 

"Camila." 

Lo único que no sabía, era por qué, a pesar de no ser ese aroma asqueroso a alcohol, algo me decía "Sal de ahí."

-

Lauren's POV

Intenté por casi media hora volver a llamar a su número, enviarle textos, pero no había respuesta excepto por la de la contestadora. 

"¡PUTA MIERDA!" El dispositivo se hizo trizas contra la pared del granero. "¿¡POR QUÉ ME HACES LAS COSAS TAN DIFÍCILES!?"

Mi horario todavía no acababa, pero no podía quedarme ahí un segundo más sabiendo que Camila se encontraba en ese lugar. 

¿Y ahora qué demonios haría? La fiesta de Matt podía ser en cualquiera de esas casas en medio del bosque que siempre renta. No podía rastrearla a tantos kilómetros sin una prenda de su ropa o cualquier cosa que tuviese su perfume. ¡Idiota! Había partido en pedazos mi única chance de saber dónde sería esa fiesta. Zayn y Jeremy no estaban ahí, mucho menos Vero. Gruñí pasando mis manos y enredando los dedos por mi cabellera. 

Sólo queda recorrer, en algún momento podré comenzar a percibir su perfume. 

Presioné un botón rojo y detuve la producción de la máquina. Velozmente me coloqué mi chaqueta de cuero, y salí de ahí. Luego tendría tiempo de disculparme con mi tío, Camila...Ella era lo importante ahora. 

Maldita sea su maña testaruda de querer siempre saber todo, o aunque sea aparentarlo. 

No podía ir con mi auto, Zayn me lo había pedido prestado y aunque quisiera no podría andar entre los árboles con una camioneta de ese tamaño. Mi motocicleta tampoco era una opción para ir en medio del bosque. Debería ir a pie. 

Mi mente me hacía imaginar escenarios horribles de todo lo que le podía ocurrir a la morena, mi sangre hirviendo dentro de mis venas y mis ojos rápidamente tornándose dorados al recorrer las casas. No había nada por ahí, absolutamente nada. 

A medida que pasaban los minutos mi ritmo cardíaco aumentaba, y las casas pasaban, o más bien yo pasaba frente a las casas, pero ni siquiera me paraba a ver si no encontraba su olor impregnado en el aire. Podía sentir mis latidos mucho más claro de lo normal, tanto que me asustaba que fuese una especie de señal. 

¿Por qué carajos no fui a su casa y la até a su condenada cama? Hubiera sido mucho más práctico.

Balbuceaba maldiciones e insultaba todo lo que se me cruzaba por la cabeza. 

Ya basta. Deja de pensar en lo peor.

Me intenté convencer a mí misma, y entonces comencé a oírlos. Sus pesados jadeos y las hojas secas crujiendo debajo de sus pisadas...Estaba corriendo. Camila estaba corriendo, y yo no era capaz de adivinar adónde. 

¡LO SABÍA! ¡SABÍA QUE ESTO SUCEDERÍA! 

"¡CAMILA!" Grité con todas mis fuerzas pero no había caso, ella podía estar en cualquier lado, y alguien estaba persiguiéndola. Estaba en peligro.

Mis pies actuaron más rápido que mi cabeza, y pronto me largué a correr hacia donde creí, había un pulso y una respiración agitada. 

A-aléjate, por favor no t-te acerques. 

Paré en seco, mirando hacia todos lados. Camila no estaba ahí, pero su voz parecía seguirme, y si no me hablaba a mí... 

"¡HIJO DE PERR-¡Ugh, m-mierda!" Chillé y pasé mis manos por mi cara. Esto jamás había pasado. 

Mis ojos ya no eran verdes, mis manos no eran de un tamaño normal, mi dentadura se alargaba y afilaba dentro de mi hocico, y mis uñas crecían puntiagudas, de un color más amarillento. Para cuando me quise dar cuenta, mi ropa ya estaba en retazos pequeños, esparcidos por el suelo de tierra. Miré mis garras por unos segundos. Jamás me había convertido sin la intención de hacerlo. No tenía idea de que fuese algo posible, pero al menos no era la transformación completa, aún podía mantenerme de pie y mis manos mantenían su forma, sólo que de un tamaño más grande y cubiertas por el fino pelaje negro, al igual que el resto de mi cuerpo. 

"Hijo... de..." Mi pulso parecía un martillo, tuve que sostenerme con la ayuda de un árbol.

Alcé mi cabeza cuando sentí una punzada al pecho. Venía del noreste, su voz resonaba desde esa dirección.

Por favor no...

Sacudía mi cabeza tratando de aliviar mi dolor, ella estaba cerca, y por más que me desgarrase por dentro, si me forzaba a dejar de oírla, la perdería. 

Por favor...

Estaba llorando. Sus sollozos llenando mi cabeza. Era insoportable, pero en un momento sólo se detuvo y fui capaz de oler su perfume. 

¡NO! 

Aullé y me eché a correr, buscando señales con cada uno de mis sentidos. Luego de unos minutos di a parar dentro de un pequeño cementerio de pueblo. El viento golpeaba contra las copas de los árboles, causando ese sonido característico que no me dejaba concentrarme del todo en la tarea principal: rastrear a Camila. 

Había varios olores: Colonia barata de hombre, particularmente apestosa, hojas secas y ramas, ese olor a lluvia que predecía un diluvio aproximándose, y...

Fresa. Su shampoo de fresa.

Lo sabía, ella se encontraba a pocos metros. Caminé por la tierra, evitando las hojas para no llamar la atención indeseada de algún par de oídos. Solamente debía agudizar un poco mi audición u olfato y lo conseguiri- 

Crack.

"Suelta-¡mmm!" Le había tapado la boca y la tenía en el suelo, las vibraciones lo delataban. 

"¡Cállate!" Oí una voz masculina sisear, estaba casi segura de que el olor intenso a perfume de hombre venía de mi derecha. Pero había un centenar de plantas crecidas y vegetación por todas partes, un paso en falso y ese imbécil podría lastimar a la ojimarrón. 

"MMM-¡No! ¡Ayuda, por favor!" Logré localizar movimiento entre un par de arbustos en específico. 

"Quédate quieta, mi amor, no quiero lastimar tu lindo rostro." Era mi oportunidad. La ventisca movió la mata de verde y ésta se hizo a un lado para dejar ver la espalda de un hombre, que por su voz, no pasaba de los diecinueve. Apostaba a que Camila forcejeaba debajo de él, por lo tanto debía ser cuidadosa. 

"Por favor, déjame ir." Un jadeo salió de su boca, escuché un cierre bajándose y todo lo que vi fue de color rojo.

No. No lo harás. Te mataré antes.

Me lancé encima suyo como un toro envistiendo al torero, atravesando el matorral, lo empujé con suficiente fuerza como para que saliese despedido lejos de la morena. El cuerpo del tipo se estrelló contra un árbol, dejándolo inconsciente de inmediato. Gruñí, me hubiese gustado quitarle la vida al malnacido por haber tocado a Camila, quién sabe qué clase de planes horrendamente repugnantes tenía pensado llevar a cabo con ella...

Tensé la mandíbula y apreté mis puños. 

Crack.

Recordé la otra presencia y mis ojos se abrieron de par en par. Volteé a verla, quizás bruscamente, porque ésta me vio aterrada, arrastrándose lejos de mí. O tal vez era sólo por mi aspecto.

"No...No me lastimes, por...Por f-favor." No me reconocía. Era comprensible, no llevaba mi ropa y mis ojos no eran verdes en esos momentos. Para ella yo era un monstruo. 

"Camila." Puse una mano en mi pecho, a ver si así entendía que yo no era el enemigo, que sólo quería ayudarla. Obviamente mi voz no era la misma, mientras que normalmente suele sonar bastante profunda, este era un tono propio de cualquier típico demonio de película de terror. 

"¿Q-qué vas a hacerme?" Preguntó aterrada, sus ojos seguían derramando lágrimas y su rostro contorsionado del miedo. No había cómo calmarla si continuaba acercándome a ella mientras lucía como un enorme engendro. La pequeña figura de la morena temblaba y mi alma se sentía estrujada. ¿Sería la mejor idea mostrarle a Camila mi secreto para calmarla? La respuesta no sería inmediata ni clara para cualquier otro, pero para mí, que solamente deseaba verla dejar de llorar y que su miedo se disipase, era nítida como el agua. 

Haría lo que fuera...

Gruñí. 

Frente a sus ojos, mis manos, pies, pelaje, garras, todos los aspectos sobrenaturales volviendo a esconderse dentro de mi ser. Mi cuerpo regresando a su estado normal, de humana. Excepto por mis irises, que no volverían a ser verdes hasta después de unos minutos de calma, todo en mí ahora debería verse familiar para ella, esperaba que incluso menos intimidante a pesar de mi miembro, pero no podía hacer mucho por cambiar eso más que taparme y esperar que la oscuridad fuese suficiente como para no dejarla verme enteramente. 

Caí al suelo de rodillas, completamente desnuda ante su persona. 

"Oh dios-" Jadeó antes de chocar su espalda con un árbol. 

"Camila..." Hice un intento por ponerme de pie con lentitud, una de mis manos haciendo seña de que mantuviera la calma. 

"¡No, no!" La observé preocupada. "¿Q-quién eres tú? ¿¡Qué hiciste con Lauren!?" En verdad quería que su miedo se desvaneciera.

"Camila, juro que soy yo, no voy a hacerte daño-" 

"¡ALÉJATE!" Posó sus manos en el tronco y comenzó a ayudarse con éstas para poder pararse. 

"Soy yo, por favor confía en mí." Insistí en súplica. "No tengas miedo, no te haré nada." Rezaba por que me creyera, pero muy en mi interior sabía que no sería tan fácil. Acababa de enseñarle todo de mí, literalmente todo. 

"No, no puede ser. T-tú...Tú no eres humana." No, no lo era, pero jamás la lastimaría. ¿Cómo rayos iba a probarlo? 

"Esta," Recorrí mi cuerpo con la vista. "esta soy yo, Camila." Sus ojos, que habían cesado de lagrimear previamente a causa de la impresión, volvían a aguarse aún más que antes. 

"¿L-Lauren?" Hizo su rostro ligeramente hacia un lado, su expresión no variaba del temor y eso me destrozaba. Asentí.

"Si me dejas, juro que puedo explicarlo todo." Di un paso hacia adelante y Camila atinó con uno de sus brazos a mantener la distancia. 

"No." Negó con vehemencia. Sus palabras, por más mínimas que fueran, se quebraban. "No te acerques. P-por favor." Sollozó. Eso era todo lo que necesitaba oír. Ya sabía que Camila jamás me querría cerca de nuevo. 

De repente el cuerpo del muchacho inconsciente se movió. Más precisamente, había movido su mano. Devolví mi mirada a la de Camila y recién ahí noté la mano que mantenía presionada sobre su estómago. Su blusa era negra, pero podía ver la mancha todavía más oscura, la tela pegándose a su piel y las gotas corriendo hasta el borde de sus jeans. 

"Por dios, estás-" 

"Ungh..." Soltó un gemido de dolor antes de dejarse caer, por suerte la había atrapado a tiempo. Los desmayos eran algo común si se perdía esa cantidad de sangre. No quería imaginar las consecuencias que dejaría esto para un cuerpito tan frágil como el de ella, pero me aferraba a la esperanza de que simplemente hubiese sido un desmayo por culpa de haber visto la sangre y no la anterior. 

"Mierda." No tenía suficiente tiempo como para oler a ese tipo ni averiguar de quién se trataba. Tenía que llevarla a un lugar seguro. 

Nota: Whoops! *Alza las cejas con una sonrisita* Las cosas se ponen interesantes...¿No?

PD1: Desde ahora habrá algunos detalles que serán explicados más a fondo, espero que se aclaren todas sus dudas. 

PD2: No tuve tiempo de editar el cap completo, así que ya saben, si hay algún error, comenten :) 

Si les gustó, por favor voten, comenten, compartan, pásense por mi otro fic, y tengan un bellísimo día/noche *heart emoji*

Continue Reading

You'll Also Like

54.1K 1.6K 71
Gabriela Rodríguez (Gabi) tenía todo lo que cualquiera deseaba, era una joven con un futuro prometedor en el mundo del modelaje, era una chica amable...
34.1K 2.7K 17
Fue sometida a pruebas, a ver como las personas que mas amaba sufrían y el saber que su hermano la traicionó siendo una víctima más de C.R.U.E.L. Des...
815K 86.9K 136
1era y 2da temporada ♥️ Sinopsis: En donde Jimin es un Omega mimado y Jungkook un Alfa amargado, los dos se casan por sus propias conveniencias. ⚠️...
2.3M 235K 132
Dónde Jisung tiene personalidad y alma de niño, y Minho solo es un estudiante malhumorado. ❝ ━𝘔𝘪𝘯𝘩𝘰 𝘩𝘺𝘶𝘯𝘨, ¿𝘭𝘦 𝘨𝘶𝘴𝘵𝘢 𝘮𝘪𝘴 𝘰𝘳𝘦𝘫...