Para ambos el tiempo pasaba de los más lento, Agus había tenido dos oportunidades para visitarlos pero el tiempo no era muy suficiente, eran pocas horas pero intentaban aprovecharlas.
Agustín había aprovechado para terminar los detalles de la casa, el cierto de Tin lo decoro un poco pues seguro Carolina también quería añadir algunos detalles. Compro algunos electrodomésticos y cosas básicas. Lo demás pensaba elegirlo con ella.
Sonrió al ver que la casa estaba lista. Su casa, la de su familia. Se emocionaba al imaginar todo lo que venía después de eso, tantas aventuras, tantos momentos. Imaginaba despertar con ella a su lado, desayunos en familia, ir al trabajo y de regreso encontrar a Tin corriendo por el jardín mientras Carolina intentaba que se estuviera quieto, fines de semanas de paseo y más cosas que hacían las familias.
El día esperado había llegado, el avión estaba aterrizando ya en su nueva ciudad, los dos se veían emocionados y el pequeño Tin algo asustado por la turbulencia.
Agustín quien los sostenía en brazos empezó a acariciarlo y jugar con él mientras Carolina buscaba el chupete en su pañalera.
.-¡Aquí está!.-Habló victoriosa y lo colocó en la boquita del pequeño.
Agus seguía meciendolo en busca de tranquilizarlo.
.-No pasa nada.-Le hablaba con cautela.-papá está aquí.
Entre los dos trataban de generarle paz al pequeño. Carolina acariciaba con las llemas de los dedos su pequeña y casi calva cabeza.
En cuestión de minutos ya habían llegado a la ciudad.
Carolina admiraba cada detalle del lugar.
.-Wow.-Estaba asombrada.-Es hermoso.-Dijo mientras miraba por la ventana del copiloto.
.-¿Te gusta?.-Preguntó sin despegar su mirada del tráfico.
.-¡Es magnífico! Las calles, las casas, TODO..-De verdad el lugar le parecía un sueño. Agus rió mientras giraba y veía sus expresiones..-¿ En serio acá? ¿Aquí vives?
Asintió.-Aquí viviremos. Me alegra que te guste y a el ver que también..-Señaló a Tin. Aprovecharon el semáforo para girar y mirar a el pequeño.
Tin también se encontraba asombrado mirando por la ventana.
.-¿Qué pasó?.-Preguntó Agustín jugueteando.
Tin volteo, lo miró confundido y lanzó una carcajada. Caro y Agus no pudieron evitar reír también.
.-Esta loquito.-Dijo ella.
.-En eso si se parece a ti..-Bromeó provocando un puchero por parte de Carolina.
.-¿En verdad tu decoraste todo esto sólo?.-Habían llegado a la casa y Carolina había quedado sorprendida por el trabajo de Agustín.
.-Yo solito.-Dijo con orgullo.-Sólo deje algunos detalles para que los elijamos juntos.
.-Gracias..-Por instinto lo abrazó.-Todo está perfecto. Me ha encantado y a Tin tambien ¿Cierto bebé?
Como siempre el sólo reía, aún no comprendía muy bien..
Carolina recorría asombrada todo interior de la casa, miraba cada detalle.
.-¿Podemos hablar?.-Dijo Agus y ella lo siguió hasta el comedor junto con Tin.
.-No debiste gastar tanto, no quiero ser una carga.-Habló ella.
.-Deja de decir éso. Si fuera millonario te hubiese comprado una mansión.-Carolina rió por lo que el había dicho.-Pero ese no es el tema.
.-¿Entonces?
.-Quiero que seas una chica normal. Y no, no estoy tratando de decir que eres anormal.-ambos rieron.-Me refiero a que te preocupas tanto por Tin que te olvidas de ti, no te importa nada de ti.-Eso hizo sentir mal a Carolina. Había malinterpretado.
Miró su cabello, estaba ligeramente maltratado, su ropa era linda pero no como la que usaba antes, no llevaba ni una sola gota de maquillaje y llevaba unas ojeras.
.-Tienes razón, se que mi aspecto físico no es bueno y me miró horrible pero Tin es mi prioridad...
.-No, no.-Interrumpió antes de hacerla sentir peor.-No hablaba de eso.Tu sigues siendo la más hermosa y siempre lo serás.-Logró sacarle una sonrisa.-Me refería a que no te preocupas por como te sientes, si necesitas algo pero yo te entiendo, se que Tin es todo para ti y eras lo único que el tenía, la única que se preocupaba por el y tenías que buscar lo mejor..-Ella asintió.-Ahora somos dos, podemos ayudarnos. Turnarnos quien lo atenderá por las noches cuando llore, quien le da de comer, podemos hacerlo entre los dos o cuando alguno este cansado el otro pueda ayudarle. Si algún día quieres ir a un spa, o no se relajarte a algún lugar sola puedes decirme y yo me quedo , si te sientes mal debes dejar que te atiendan. No se si me estás entendiendo..
.-Lo entendí todo. Te agradezco que te preocupes por mi.-No sabia exactamente como responder.-Eres tan bueno.
.-Lo hago por que los amo, me preocupo por los dos y no quiero que a ninguno le pase nada. Además la responsabilidad es mía y tuya..-Ambos se miraban fijamente. Bastaba con una mirada que decía todo lo que sentían.-Maduraste muy rápido pero aún queda ese lado inocente en ti. Sigues siendo mi bebé ¿Recuerdas que así te decía?
.-Claro que recuerdo. Te reías de mi y me molestabas.-Hizo un puchero.
.-¿Viste?.-lanzó una carcajada.-Justo ahora hiciste como bebé.
.-Bebé.-Tin había dicho su segunda palabra.-Bebé.-repitió.
Agus se levantó y lo tomo en brazos.-Tu eres bebé.-Trataba de explicarle..-Tu eres bebé y yo papá.
.-Su segunda palabra fue bebé y no mamá.-Se hacía la indignada.
.-Tranquila. Estoy seguro que pronto dirá mamá.-Sonrió.-A ver Tin, Di mamá.-Hizo una pausa.-Ma-Má..
Luego de varios minutos intentandolo decidió darse por vencido. No logró que Tin dijera mamá.
(...)
Luego de un par de semanas la casa ya estaba en orden. Ese sabado Agustín y Carolina habían despertado temprano para terminar los últimos detalles. El lunes ella empezaría la Universidad así que habían planeado pasar todo el fin de semana disfrutarlo juntos.
.-¡Despierta Dormilon!.-El pequeño ya había despertado unos minutos antes pero cuando escucho ruidos de sus padres decidió fingir cubriendose con su oso de peluche.
.-¿Dónde está bebé?.-Hablo ella intentando jugar.Ya había notado que Tin estaba despierto. Quito el oso y se encontró con una gran sonrisita.-Me quisiste jugar una broma eh!
.-Será un travieso.-Dijo Agus y ella rió.
Carolina le sonreía de la misma manera a Tin, le hacía gestos graciosos y más.
.-Mamá.--Tin estiró sus brazitos en busca de los de su madre. Carolina accedió y cuando lo tuvo en sus brazos no pudo evitar llorar de felicidad había esperado tanto ese momento.
Agus se acerco y acarició su espalda.
.-Mamá, papá.-Habló de nuevo Tin.
Carolina tu Agustín se miraron y sonrieron orgullosos.
.-Mamá y yo te amamos pequeño.
Agustin se acercó y los abrazó, necesitaba ese abrazó, necesitaba de ellos, de cuidarlos, tenerlos con él.
.-Los amaré siempre.
.-Nosotros a ti.-Dijo ella.
El pequeño besó la mejilla de sus padres y ellos se emocionaron aún más. Siempre estarían juntos y siempre se amarían a pesar de los problemas. Ahora podría decirse que estaban comenzando a ser una familia felíz.
Fin.
Gracias por llegar hasta aquí.
Falta el epílogo ❤