Capitulo 5 ¿Por qué a mí?
Soy como un prototipo de "pégame pero no me dejes”, claro Tony no me ha puesto nunca la mano encima (golpearme) pero es como una analogía sobre mi relación con Tony.
Tony me frecuentaba cuando sabía que había casa sola.Me trataba con si fuera la única mujer en el mundo,me trataba tan bien, pero solo cuando estábamos solos.
En cambio en la escuela no solía hablarle, se la pasaba con sus amigos y ni siquiera se tomaba la molestia de voltearme a ver.Estábamos juntos de nuevo como si no hubiera pasado nada,él aparentaba eso y yo,pues yo seguía enojada por lo que me hizo pasar.
—¡Alexa!—Escuche un voz que atravesaba mis tímpanos—¿sigues aquí?
—Sí, perdón—es el maestro de historia que esta cara a cara conmigo, viéndome un poco desconcertado.
—¿Ahora me podrás contestar la pregunta? —Se paro delante de mí.
—¿Cuál pregunta? —Escuche unas cuantas risas después de preguntarle. —.Lo siento es que no me siento muy bien.
—Bueno es mejor que salgas a la enfermería—abrió la puerta esperando a que saliera—.Sino es que estas mintiendo ¿verdad?
Tome mis cosas y me salí sin reprochar nada.
Ahora no se a donde ir sin que un prefecto me encuentre, si voy a la enfermería me regresarían y el de historia no me dejaría pasar,y la orientadora me regañaria.Tan solo tengo que esperar una hora para que pase esta clase.
Recordé que el día en que llegue había una puerta trasera donde solo habían unos cuantos chicos,a lo mejor y no hay nadie.
Fui corriendo a la puerta trasera, tratando de que nadie me viera, cuando abrí la puerta para entrar se escucho que algo se golpeo,me asome y era Julián en el piso.
—Auch, perdón no lo quise hacer.
—Creo que te encanta pegarme chica mala.
—Me llamo Alex,no chica mala—le extendí mi mano para que se levantara.
—Gracias—tomo mi mano y se levanto mientras se sobaba con la otra mano su frente—.Creo que necesitare otra de tus cintas mágicas.
—Ahora no las traigo, prometo mañana traerte un cacho de cinta.
—Bien—me contesto la sonrisa mientras sacaba un cigarrillo de su suéter.
—¿Qué no se supone que no debes de traer esto aquí?
—Nadie se da cuenta—prendió el cigarro y empezó a fumarlo—¿Gustas?
—No,gracias.
Nos recargamos en la pared esperando a que pasara la hora.
—¿Por qué estás aquí chica mala?,perdón,Alex.
—El de historia me saco.
—Típica de él para no quedar en ridículo, que buena idea al venir aquí.
—Si verdad ¿y tú?
—Me toca español pero parece que esa clase solo es de belleza,así que decidí no entrar—se me iluminaron los ojos al escuchar que él pensaba lo mismo.
—Yo imaginaba que era la única que pensaba eso.
—Acabas de descubrir que no—sonrió y siguió con su cigarro—.Por cierto ¿ya no te ha molestado Shaila?
—Por ahora no—con que así se llama la ramera,Shaila.
No aguante las ganas y le pedí de su cigarro.
En eso escuchamos que alguien abría la puerta,cuando volteamos solo vimos a una mujer que daba miedo,era la orientadora con los brazos cruzados y su cara de furia al ver el cigarrillo de Julián en mi mano.Lo volteé a ver con ojos de pistola, sabiendo que a mí también me iba a tocar castigo. Que suerte...
Julián se muere de la risa. Si no me gustara tanto cómo se ríe, le hubiera soltado un zape.
En ese momento,no sé por qué, de repente estoy segura de que me voy a acordar de esa risa cuando tenga noventa años.
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ESPERO Y TE ESTE GUSTANDO,YA QUE HAS LLEGADO HASTA EL CAPITULO 5,GRACIAS.
Frase de hoy:
"Los animales son buenos amigos, no hacen preguntas y tampoco critican."
George Eliot