Esta es la historia de una chica como todos ustedes, de 16 años de edad, que perdió su inocencia desde muy pequeña.
Esa chica soy yo. Les contaré algo que muy pocos saben: desde que tengo uso de razón, cada vez que me pasaba algo malo o me daban ataques de ira me autolesiono. Obviamente, los métodos eran otros. Empezó con tirones de cabello, rasguños y puñetazos en las piernas, y a lo largo de los años ha ido cambiando.
A los 5 años mis padres se divorciaron, y esos ataques de ira se intensificaron. Mi madre no me daba atención, me comparaba con mi hermano mayor, y cuando me prestaba atención era para regañarme o pegarme.
Desde entonces desarrollé una autoestima extremamente baja.
Años después mi mamá se consigue un novio, que pasa a ser mi padrastro. A los 9 años mi madre había ido a hacer unos trámites, y me dejó sola con él. Ese día me violó y me amenazó de muerte. Este hecho robó totalmente mi inocencia, puesto que desde entonces padezco de androfobia (Miedo a los hombres), y no podía decir nada por la amenaza. Fue aquí cuando empecé a maltratarme con cortes hechos con cualquier cosa filosa que encontrara y dietas estrictas. Aún así, por le hecho de estar desarrollándose mi cuerpo engordaba.
Cuando entré a la secundaria conocí al primer chico que no me daba miedo o asco. Me enamoré de él, pero me rechazó y se puso de novio con una de mis amigas a la que le había hecho la promesa de no cortarme. Lo volví a hacer, desde luego.
Sin embargo, ahora luego de 5 años de espera finalmente estoy con él, fue una alegría inmensa cuando me dijo lo que sentía.
Aunque estoy por arruinarlo, como siempre con todo lo bueno.
Él está lejos, y conocí a otro chico que es parecido a él en ciertos aspectos. El hecho de sentir esto me hace que para mis ojos me vea como una puta... y ya no sé qué hacer.
Ahora, este desorden de sentimientos sumado a los problemas de mi casa me han hecho que la adicción a cortarme y sentir dolor se vuelva incluso placentera (Me excita sentir dolor)... Me siento un monstruo, sé que necesito ayuda... Pero no me gusta que la gente me vea débil. Así que nadie sabe que esto es lo que siento ahora.
Lo siento por extenderme, pero necesitaba decirlo de alguna forma.
Esta es la historia de una chica que perdió su inocencia y se volvió un demonio... a muy corta edad. Saludos, espero que todos los que estén leyendo esto puedan algún día salir de lo que están pasando. Sean fuertes, no se rindan, no quiero que nadie termine como yo. Saludos
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