Conocerte fue una de las mejores aventuras que he podido tener. Recuerdo aún con exactitud ese día que me desperté a las 7 am para prepararme, a las 9 de la mañana me pasarían a buscar para ir a Tecnopolis.
Al llegar en la entrada había muy poca gente, recuerdo que mi madre y mi hermana tenían ganas de ir al baño por lo que yo decidí acompañarlas, la cola era larga y tardaba muchísimo en avanzar, empecé a entrar en una desesperación cuando por fin nos dejaron entrar y luego de un rato pudimos volver con mi padre y mi hermano, quien estaba igual de emosionado que yo.
Luego de unos minutos abrieron las puertas y pudimos entrar. Con un mapa en la mano mi familia y yo nos acercamos a preguntar donde estarías de tantos lugares, fuimos a el que más cerca estaba, no nos equibocamos, llegamos demaciado temprano, tanto que tuvimos que esperar 4 horas bajo el cielo nublado que en este momento parecía estar soleado para mi.
Al entrar fui con mi hermano de la mano ya que tenía miedo de que se perdiera, nos hicieron sentarnos en el lugar más lejano, pero aún así estaba feliz, al entrar el precentador todos nos quedamos callados, pero cuando tú entraste...
Todo era muy distinto a lo que me imaginaba, pensé que no iba a poder verte de tan cerca y respirar el mismo aire que tú, recuerdo perfectamente como ibas vestido: jeans negros, unas zapatillas del mismo color, la remera que te habías comprado en LA, que por cierto te preguntaron por ella, tu saco de ocelote de Minecraft y la gorra que habías intercambiado con Ro.
Al finalizar la charla te fuiste, no sin antes decir que nos volveríamos a ver.
Nos llevaron a otro lugar en el que nos enseñaron una especie de receta para hacer un bizcochuelo, pero mi hermano y yo estabamos que no podíamos esperar más.
Luego de eso nos llevaron a un lugar, ese lugar en el que tú grabaste pero en ese momento se me hacía tan irreconocible. Entraste, yo sentí como todos mis sentidos eran solo para ti y para nadie más.
Nos hiciste formar una fila que llegaba hasta el final de la sala, me salí por un momento de ella para saludar a Ceci Saia, otra de mis idolas, ese si que fue el mejor día de mi vida, cuando volví a la fila con mi hermano estaba tan nerviosa que estaba temblando.
Solo quedaba una persona frente a mi la cual se fue rápidamente para darme paso a mi. Nunca olvidare ese "venga abrazame" y una risa seguida en mi oído, te susurré lo mucho que te quería en el medio de ese abrazo que esperaba que fuera interminable.
Al pasarte el celular estaba temblando y al parecer te diste cuenta ya que me dijiste "ay, pero si estas temblando" a lo que yo solo reí, tomaste una foto y yo desvíe mi mirada para tomar mi libreta, no me había dado cuenta de que habías tomado otra foto y me escrachaste, pero no podía quejarme, me devolviste el celular mientras que te despedías de mi con esa hermosa sonrisa que tienes, mientras le pasaba el celular a mi hermano me mirabas con esa hermosa cara, me sentía feliz, esperé a mis hermanos para salir y una vez lo hice fui corriendo a los brazos se mi madre llorando, no podía creer que eso realmente estaba pasando.
Con mis padres y mis hermanos nos fuimos a comer aunque yo realmente me había quedado sin hambre, seguía sin comprender lo que había pasado, pero sin embargo fue el mejor día de mi vida...