El clima estaba muy frío, las familias estaban reunidas en el calor de sus hogares cenaban y brindaban, los niños esperaban impaciente la llegada de santa, todos disfrutaban la navidad.
A excepción de un chico alto de piel tostada, cabello de un tono verde oscuro, gruesos labios y hoyuelos que aparecian al enseñar su hermosa sonrisa. El solo quería descansar del día tan agotador que tuvo, en la tienda en la que trabaja, tener que soportar el malhumor de las personas de porque era muy tarde y no tenian el pavo listo, o que "el pequeño Jimin descubrirá que papá noel no existe si no llevaba su auto a control remoto a tiempo". Y todo con una gran y falsa sonrisa.
Sólo queria descansar, y olvidarse del estres que todo aquel ajetreo le causó. No odiaba la navidad para nada, más bien, el queria estar ahora con su familia, pero el tener que mudarse a los estados unidos para hacer crecer su popularidad como rapero underground lo impedía, ama la música, ama el rap, y si por expandirse como rapero implica viajar por todo el mundo el lo haría.
Llamaban a la puerta, el chico alto no queria molestarse y levantarse de su cómoda cama, volvian a llamar esta vez con un toqueteo más desesperado.
-Mierda- gruñó el de piel tostada. Y fue a atender de un muy mal humor a la persona que esté molestando a estas horas.-¿Qué?- observó el reloj de pared que se encontraba en la cocina de su pequeña casa.-¿Que mierda quiere?-Abrió la puerta y dijo esas palabras en un perfecto ingles. Sus ojos se abrieron de sobremanera al ver quien era la molesta persona que tocaba.
-H..hola- un bajo chico de piel casi blanca como la nieve y cabello negro, le hablaba tmblando por el frio.
-Oh hyung, lo siento pensé que era otra...- le expresó en coreano su lengua materna, pero dejó de hablar al observar como su mayor temblaba- entre por favor.
El mayor que usaba un gran abrigo se adentró a la casa de su menor, que estaba un poco caliente por la calefacción.
-Haré un poco de chocolate, tome asiento.- el alto fue a la cocina y el bajo a la sala a sentarse en el pequeño sofá.
El pálido chico observó lo pequeña que era la casa de su menor, como la cocina y el sofá estaban casi juntas. Y el baño, y una habitación estaban una al lado de la otra.
-Aqui tiene- le ofreció una gran taza humeante de chocolate caliente. El otro chico asintió agradecido tomando entre sus dedos la gran taza.
Se quedaron en silencio varios segundos, el de hoyuelos pensaba que hacia su hyung ahí, se imaginó que le pasaba igual que a el,se sentía solo y decidió venir a visitarlo. Pero aun asi es muy extraño, ya que, su mayor es muy tímido y las pocas conversaciones que ha tenido con este es sobre el rap, letras y melodias. Lo conoció en un concierto de Kanye West, al verlo solo en aquel concierto decidió entablar conversación con este, así supo que tenian los mismos gustos y casi las mismas metas, el queria ser un productor profesional y el alto un rapero profesional.
-Y...- observó al mayor beber de su achocolatada bebida.- ¿Qué lo trae por aquí?.
El peli negro se tensó al escuchar esa pregunta.
-Y..yo solo q..queria.
Lindo. Pensó el mas alto.
-d..darte un re..galo- bajó su mirada.
Su hyung es muy tierno, hay personas que dicen que es un pequeño gruñón, pero nunca lo he visto de esa manera.
-¿De verdad?- sonrío- No tenía porque- el pequeño en tamaño asintió. -Entonces espera llevare las tazas.
Fue a dejar las cosas en el lavavajillas y regresó a sentarse al lado de su mayor, buscó con la mirada su regalo.
-Tienes que- habló bajo, el chico tímido- cerrar los ojos.
-Me sentiré mal - cerró los ojos- no tengo nada para usted.
-no importa- se escuchó el gran abrigo caer al suelo.
El de lindos hoyuelos sintió el cojin hundirse a los lados de sus piernas, luego un cálido aliento en su rostro, suaves labios posarse en los suyos con delicadeza, sonrió al notar que su mayor era muy tierno dandole este tipo de "regalos". Pero se llevó una gran sorpresa al abrir sus ojos y encontrar a aquel tímido chico de piel blanca y labios rosas, en un muy corto vestido de maid. Sus manos fueron a la cuntura del contrario.
-Nam, s..se que estas triste y que..ria intentar animarte con un pequeño r..regalo- las mejillas del pálido tomaron un tono rosa, haciendolo lucir aún más tierno y a la vez sexy.
Mierda mierda mierda. Era lo que pasaba por la mente del moreno, si su mayor seguía así no sabia que podria llegar a pasar.
Sintió el pequeño trasero posarse en su regazo, esa fue la cereza en el pastel, para que sus sentidos explotaran y mandara todo a la mierda.
El mayor puso sus manos alrededor del cuello del menor y se acercó al rostro del mismo. El menor devoró esos pequeños labios, propinando mordidas, lamidas. Lo que volvía loco al menor, era escuchar esos pequeños jadeos que soltaba cada vez que mordia el labio inferior del mayor.
-Mierda Yoongi, estas loco al aparecerte así en esta casa- los pequeños pelos de la nuca de Yoongi se erizaron, al escuchar a su menor llamarlo de forma informal por su nombre.
-Follame Kim Namjoon- con una grave voz, que salió de la garganta del mayor. Nam tomó a su tierno hyung llevándolo a la habitacion, comiendoselo a besos en el camino. Lo tumbó en la cama devorando el cuello del más pálido, dejando marcas de dientes en su camino hasta su pecho, el cual dejó al descubierto rompiendo aquel molesto pedazo de tela. Mordió uno de los rosados botones, haciendo gemir de placer a su mayor.
-Ahh~- el mayor mordió su labio inferior con fuerza. Luego jaló el cabello de Nam al observar que se dirigía a sus piernas.
-Yoong- el mayor fue rápido y lo calló con un húmedo beso. Bajó por su cuello y apretó el gran bulto que atrapado estaba en esa pijama de osos. Bajó aquella estorbosa prenda junto a los boxers rojos. Observó el gran miembro venoso y lamió sus pequeños labios.
Namjoon tenía la mejor vista, era mejor que los videos pornos que su primo taehyung le enviaba de vez en cuando, esto era real su hyung Min Yoongi, el tímido chico que quiere ser un compositor, le estaba haciendo el mejor blowjob de la historia. La pequeña lengua se retorcía en la cabeza de su miembro, luego metía toda la extensión en su boca no dejando nada al la vista. Su trasero se podía ver levantado por el vaivén que requeria el trabajo. Tomó la nuca de su hyung y comenzó a mover sus caderas de una manera bestia, penetrando la boca del mayor tocando la garganta del mismo.
-M..mier- soltó todo su esperma en la boca del mayor, observó al contrario tragarlo y mirarlo sonriente.
El chico maid, se recostó en la cama de su menor abriendo las piernas enseñando algo de la ropa interior de encaje negra que tenia.
-Viniste muy preparado ¿No es así hyung?- Nam alzó el corto vestido notando las hermosas piernas de su mayor que no dudó en morderlas, cerca de su entrepierna, logrando sacar un fuerte gemido de su mayor. Bajó hasta llegar al duro pene que lamió sobre la tela. El chico maid se retorció, quitó la bonita tela de encaje con cuidado no queria romperla, alzó las caderas de su hyung topandose con la rosadita entrada, pasó su lengua una y otra vez para luego meter con cuidado su dedo índice.
-umh - escuchó un quejido de molestia, proveniente de su timido mayor. Se alzó para llegar a los labios de este y distraerlo con hambrientos besos. Insertó un segundo dedo y los movió como si se tratasen de tijeras.- M..Más- el menor sonrió de lado.
-¿Que quiere hyung? -un tercer dedo yacía en la entrada del mayor.
-J..Joder nam- el mayor tiraba de la estorbosa camisa de nam.
-No puedo entender...- se hizo el depistado y sacó sus dedos de la caliente cavidad.
-Metemela Maldición- decidido mirando suplicante a los ojos del peliverde.
-Que boquita- rió nam al saber que tenia bajo control a su mayor. Primero quitó su camisa que al parecer a yoongi le molestaba y mucho, lo segundo que hizo fue posicionar su palpitante miembro en la ya dilatada entrada del mayor, metió solo la punta que enloqueció por completo al pelinegro.
-S..si Joder- movía sus caderas para adentrarse más. El mas alto que ya estaba completamente dentro, tomó las piernas de yoongi, rompiendo sin querer (o no) las medias pantis negras, e inclinándose hacia delante para tener mas espacio y así comenzar el lento vaivén, Min se sostenia de la gran espalda de Kim.-R..rápido- y así comenzó un rápido movimiento de caderas que hacia mover hasta la cama. El pequeño en estatura dejaba marcas de rasguños en la espalda del mas alto.
Tocando el punto dulce que hacia temblar a yoongi, queria hacer algo antes de correrse, empujó al más alto y este cayó por la sorpresa. Pensó que el mayor estaba enojado por lo rapido que iba y lo estaba lastimando hasta que lo sintió arriba de el.
-¿Quieres cabalgarme?- el pálido asintió, se auto penetró con el pene contrario y comenzó a dar pequeños brinquitos con ayuda del menor, que sostenia su cadera y aveces apretaba su trasero.
-Mierda Yoongi me vendré en cualquier puto instante- le dijo el de piel bronceada, quitando por fin el vestido de maid, admirando con mas determinación el frágil cuerpo de su mayor pequeño, pálido y muy apetecible. Subía y bajaba con sus labios entre abiertos soltando gemidos y con un poco de saliva en las comisuras de estos.
-M..me v..veng- Namjoon empezó a mastubarlo con rapidez esperando que su hyung soltara todo.-Ah~- todo el cuerpo del pequeño chico se tensó y de su miembro salió disparado su semen manchando el pecho del contrario y algunas partes de las blancas sabanas. El mayor cayó agotado en la cama aún con el menor dentro. Quien comenzó a moverse muy rápido, alzó una de las palidas piernas llevandola a su hombro.
-Ahm Joder.. mjj.- gruñia el menor- Mierda- soltó sus calientes líquidos en el interior de su mayor, respirando con un poco de dificultad. Salió y miró el pálido cuerpo del mayor aún temblando por el gran orgasmo.
-¿T...te Gus..to?- El menor se recostó a su lado mirándolo sonriente.
-Fue lo mejor.
-Feliz navidad.
Y no solo esas familias disfrutaron de la navidad y sus regalos, si no que, tambien lo hicieron Min Yoongi y Kim Namjoon y lo repetirian todos los años.