Son aviones del conocimiento,
que me ayudan a imaginar.
Son de distintos colores y tamaño,
cada uno es especial.
Son portales mágicos,
que me transportan de lugar en lugar.
Son hojas de oro,
que me acompañan en mi soledad.
Son reflejos y mi alma,
la que veo marcadas en él.
Son aventuras y relatos,
los que me erizan la piel al leer.
Son impredecibles,
al igual que el tiempo que me tomo.
Son diamantes ocultos,
como Don Quijote, Harry Potter y otros...
Son especiales,
cada uno tiene algo que contar.
Son valiosos,
tienen moralejas y soluciones para enfrentar.
Son un mundo, mi mundo.
Que me dan la libertad.
Donde mi reflejo es libre,
donde los libros me ayudan a caminar.