—No, jamás, no quiero.— quinta vez en la noche que volvía a decir lo mismo, pero en verdad no quería quedarme a dormir aquí.
Estaba caminando de un lado a otro por toda la sala, estaba desesperada —Vas a desgastar tus zapatos. Sólo deja de moverte, me está doliendo la cabeza por tu culpa.
Mi paciencia era la que se estaba desgastando.
—No quiero quedarme aquí.— dije horrorizada ante esa idea, me ponía los pelos de punta tan sólo imaginarme eso.
Se levanta y viene hacia a mi, me aprieta los hombros tratando de calmarme, como si pudiera, con eso sólo está logrando alterarme más.
—Tomare un taxi.
—No creo que alguien se atreva a venir por ti con esta tormenta.
Mierda, no lo había pensado antes. Era cierto, lo más probable era que ningún taxista quisiera venir por mi con esta tormenta. Sólo ocupaba a alguien con un carro.
—Tal vez, pero no te preocupes, ya veré como le hago.
¿Alguien? Claro, Alex si aceptaría.
—No seas terca Emily, está muy fuerte la tormenta y es más fácil que te quedes aquí.
—Me rehusó a quedarme a dormir aquí, no quiero ser una más de las mujeres que traes aquí para poder revolcarte con ellas. No caería tan bajo.
Salí de ahí, no lo soportaba, era asfixiante estar ahí adentro con él.
Le marque a mi mejor amigo, esperaba que si me pudiera ayudar —¿Alex?
—¿Emily?
—¿Me podrías hacer un favor?
—Claro que sí, me encanta que me debas favores.
—¿Podrías venir por mi?
Creo que por el tono de mi voz, se dio cuenta de que no estaba para bromas.
—Si, sólo pásame la dirección y estaré ahí en 5 minutos.
Era reconfortante saber que podía contar con él, para lo que fuera. Siempre me sentiría orgullosa de tener a un amigo como él.
[...]
Día nuevo, así que nueva actitud.
Además, toda la noche me la había pasado pensando en la situación en la que me encontraba y su posibles soluciones, y encontré una, se podría decir que era la más fácil.
Y la más cobarde, la solución fácil para escapar de todo.
Necesitaba un cambio de aires, simplemente una nueva vida y la única forma de lograrlo era cambiando de ciudad, necesitaba mudarme.
Pero antes tendría que ir a la empresa de Landon, por mi renuncia y por mi liquidación, tenía que tener dinero si quiera sobrevivir. Tampoco era como si me fuera a quedar sin trabajar, pero sabía que no era fácil conseguir trabajo y me podría tardar un tiempo en lograr conseguir uno.
Pedí un taxi ya que mi carro se había quedado en el centro comercial y no había tenido tiempo para ir a recogerlo, pero tendría que ir por él si quería agilizar las cosas.
Pero mis planes se fueron a la basura cuando llegue a la empresa y me encontré con Margaret —El señor Evans te está esperando.
Mierda, no quería verlo de nuevo, estuve tentada a irme pero recordé lo que le había dicho Landon la noche anterior y lo cual estaba en lo cierto, tenía que aprender a hacerme responsable de los actos.
Subí a su oficina, de todas las personas que se habían subido al elevador inicialmente sólo me había quedado yo hasta el final, hasta el temido último piso.
Y vaya que si era temido, y tenía su razón, ahí se encontraba el ogro de Landon Evans, creo que hasta un ogro daba menos miedo y era más agradable.
Tengo que admitir que todo el transcurso de la recepción hacia la oficina de Landon me lo pasé mordiéndome las uñas, estaba demasiado nerviosa, mejor dicho, estaba aterrada.
Algo me decía que después de esta platica ya no tendría escapatoria.
Antes de abrir la puerta, inhalo y exhalo varias veces tratando de regular mi respiración, pareciera como si haya corrido un maratón, desde que había llegado al piso pareciera como si mi corazón haya sufrido algo pero había empezado a latir desenfrenadamente.
Abrí la perilla de la puerta de la manera más lenta posible, estaba buscando cualquier excusa para retrasar el momento.
Estando ya adentro cerré los ojos para inhalar su fragancia, siempre me había parecido una fragancia exquisita, con la cual todavía se siguen deleitando mis fosas nasales.
-—Toma asiento.— su tono brusco me devolvió a la realidad.
A la jodida realidad.
Lo obedezco y ya estando sentada empiezo a alisar mi falda tratando de relajar mis nervios pero estos aumentan cuando siento como su mirada recae en mi.
—Sería bueno tener claros algunos aspectos de este matrimonio.
—¿Sabes? Yo lo veo más como un contrato.
—Tómalo como prefieras.
—Continúa, hasta ahora es la única cosa que me importa que salga de tu boca.
—Primero que nada, quiero aclarar que este contrato durará mucho tiempo.
Trate de que mi voz no saliera temerosa, pero falle —¿Cuánto es mucho tiempo?
—Toda la vida, es decir, hasta que uno de los dos muera.
—Si entendí desde la primera vez a que te referías.— lo mire mal.
Ahora me tocaba atacar a mi.
—Quiero cuartos separados.
Si teníamos cuartos separados no serían tan malo vivir en la misma casa. Trataría que la convivencia entre los dos fuera mínima.
—Eso no es relevante, lo arreglaremos después.
—¿Disculpa?— me levanté exaltada de mi lugar —Para mí si es relevante, porque yo no pienso compartir nada contigo, no quiero tener que dormir en la misma cama que tu y mucho menos tener que besarte.
Recordé un punto muy importante, puse las manos en el escritorio y me incline un poco hacia adelante para poder verlo mejor a la cara.
—¡Ah! Y tampoco pienso tener sexo contigo.
Tenía que decir eso, era una forma de ponernos un límite a ambos, porque era mujer y había la posibilidad de que muy en el fondo, pero muy en el fondo, tuviera el deseo de acostarme con él, pero muy en el fondo.
—Estas equivocada Emily, este matrimonio es con sexo.
No iba a ceder, eso jamás —Sin sexo.
Jamás digas jamás, Emily.
—Esta bien, si piensas que vas estar toda la vida sin tener sexo por mi esta bien, pero te advierto Emily, que las consecuencias que tendrás si algún día te descubro un amante serán horrorosas, convertiré tu vida en un infierno.
—Supongo que también aplican para ti.
—Te equivocas, la que no quiere, eres tú, así que yo me veré forzado a buscar en otra parte lo que no tengo en casa.
¿Qué mierda?
—Si serás imbécil. ¿Pero sabes que? Me vale una mierda lo que hagas con tu vida.
—Tienes el resto de la tarde libre, pero en la noche pasare por ti, desde hoy te vendrás a vivir conmigo.
¿Mudarme? ¿hoy? ¿Tan pronto?
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N/A
Nuevo capítulo, uju. ¿Qué les pareció? Las cosas complicadas ya están empezando, ósea la convivencia entre Emily y Landon.
¿Cómo creen que será la vida de ambos bajo el mismo techo? 7u7
Espero ver sus estrellitas brillando y todas sus opiniones en los comentarios.
Una pregunta MUY IMPORTANTE ¿Les gustaría saber el punto de vista de Landon? ¿o es muy pronto? Espero su respuesta T-T