“You saved him.” - “Tu lo salvaste.”
_____’s Point of View:
“¿Como estuvieron mi hijo y tu desde la última vez que os vimos?” Anne se volteó hacia mi después de secar sus manos en una toalla una vez que ella había terminado de lavar los platos.
Poniendo a parte el ultimo de los platos en el armario, sonreí, colocándome en un taburete de tres que estaban junto a otra al otra lado de la encimera. “Hemos estado bien, igual que antes para ser honesta.” Me reí ligeramente.
“¿Nada nuevo?” Ella se apoyó contra el fregadero, quedándose de pie al lado de donde yo estaba sentada.
Negué con la cabeza, metiendo un mechón de pelo detrás de mi oreja. “Realmente, no.”
Ella estrechó sus ojos hacia mi con escepticismo. “¿Hay algo que no me estas diciendo?”
Fruncí mis cejas, juntas, con confusión. “No...” Incliné mi cabeza hacia un lado, tratando de descifrar porque me ha preguntado eso. “¿Porque?”
Ella se encogió de hombros, agitando una mano con desdén. “Por nada... solo curiosidad.” Ella me sonrió cálidamente.
Le devolví el amable gesto. “¿Como has estado?”
“Como siempre; me quedo en casa, limpiando la casa, y lavando la ropa, charlando con las chicas al teléfono antes de que Edward venga.” Ella se rió vergonzosamente antes de continuar. “Hago la comida, Des regresa a casa y luego hago la cena.”
“Suena aburrido.” Reí.
Ella asintió con la cabeza. “No tienes ni idea.”
“No se como lo haces.” La miré, ligeramente desconcertada. “Yo nunca podría hacer la mitad de cosas que haces en un día."
“Todavía eres joven, cariño.”
“Oh, por favor.” Sacudí mi cabeza. “Me haces sentir como si tuviera cincuenta.” Rodé los ojos, sonriendo poco después-
“Basta.” Ella se sonrojó.
“Lo digo en serio Anne! ¿Cuantos años tienes de todos modos? ¿Veinte?”
Anne se rió. “Ojalá.” Lamiendo sus labios, ella negó con su cabeza. “Tengo treinta y siete.”
Mis ojos prácticamente casi se salen de sus órbitas. “De ninguna manera”
Ella asintió con la cabeza. “Lo se, soy vieja.”
“¿Vieja?!” Enfaticé, perpleja. “Mas bien joven! Eres madre de tre-- dos hijos y todavía te las arreglas para mantener un cuerpo así y trabajar tan duro como trabajas?” Elevé una mano. “No quiero ni imaginarme a mí misma dentro de diez años.”
“Silencio,” Anne esbozó una gran sonrisa. “Vas a estar tan guapa como ahora.”
Sentí mis mejillas calentarse. “Gracias Anne pero en serio lo dudo.”
“No importa cariño,” Ella puso una mano amablemente sobre mi. “Y no digas semejante cosa. Eres hermosa y mi hijo parece pensar lo mismo.”
Si mis mejillas estaba rojas antes, no podía imaginar lo coloridas que estaban ahora. Dejé escapar una risita de niña que hizo reír a Anne inmensamente, encontrando mi estado vergonzoso, adorable.
“Tu eres perfecta para mi hijo, ¿sabes eso?”
Mordí mi labio, mirándola por encima. “Gracias Anne.” Sonreí.
Ella hizo un gesto con su mano como para decir que no era nada mas que la verdad. “Lo digo en serio, ya sabes.” Ella asintió con su cabeza. “Se que lo he dicho antes, pero no creo que lo haya elaborado mucho.”
“No hay necesidad--”
“No,” Anne sacudió su cabeza. “La hay. Verás... desde la muerte de mi pequeña, las cosas han sido muy duras para nosotros y especialmente para mi hijo. He visto como de roto llegó a estar después de todo lo que había pasado. Lo he visto en su mejor y en su peor momento. Lo he visto con innumerables chicas y ninguna le hizo esbozar una sonrisa en su cara como tu lo has hecho.”
La parte de atrás de mis ojos pinchaba y en este caso, no pude contener mis emociones mas allá. Dejando que una lágrima se resbalara por mi mejilla, rápidamente la sequé.
“Nos han pasado muchas cosas y no importa lo que pasó en el pasado, todo lo que quería era que mi hijo fuera feliz y tu le das algo para ser feliz. Antes, el no tenía razon para sonreir. Ahora, la tiene.”
“Yo...no se que ni siquiera que decir.” Susurré. “Estoy... sin palabras.” Chupé mis labios, tomando una respiración profunda antes de dejarla salir. “Eso significa mucho para mi Anne.”
Ella sonrió con tristeza.
“Cuando conocí a Harry por primera vez... yo sabía que el estaba roto y que había algo en él que lo hacía tan amargo.” Mordiendo el interior de mi mejilla, me moví en mi asiento. “Una parte de mi me dijo que no me involucrara con él, pero otra parte de mi me impulsó hacia delante.” Apartando mi mirada, parpadeé contra el resto de mis lágrimas. “Fue como si, estuviera destinada a estar con él...”
“Lo estas.” Anne caminó hacia mi. “Realmente eres un ángel enviado del cielo para proteger a mi hijo. Yo no pude hacerlo pero tu lo hiciste.” Unas cuantas lágrimas se deslizaron por sus mejillas, pero Anne no se molesto en limpiarlas. “Tu lo salvaste.” Ella susurró. “Tu salvaste a mi hijo... y estaré siempre agradecida por eso.” Inclinándose hacia delante, me envolvió en un abrazo, uno de los cuales, me fortalecían.
“¿Que está pasando aquí?” Me aparté en el momento en el que escuche la, o tan familiar voz que solía escuchar. Sollocé, viendo como Anne se iba inmediatamente, secándose las mejillas para limpiar las lágrimas.
“Nada” Anne sonrió, agitando una mano despectivamente.
“No parece que pasa nada.” Entrando completamente en la cocina, Harry pasó a nuestro lado. “¿Que pasaba?”
“Yo, ugh, tenía algo metido en el ojo y ______ estaba tratando de quitarlo.” Anne parpadeó sus ojos, sonriendo inocentemente hacia Harry.
Entendí a lo que Anne se dirigía con esto y asentí con mi cabeza, siguiendo el juego. “Cierto; La ayudé a ... sacar la cosa... de su ojo.” Sonreí, tratando de sonar convincente.
Harry nos envió una mirada rara. “V--Vale?” El se encogió de hombros. “¿Estas segura de que estas bien?” El me miró.
“Si.” Reí.
Anne sonrió, mirando con cariño entre nosotros.
“¿Mama?” Harry hizo un gesto con una mano en frente de su cara. “¿A que estas mirando así?”
Anne reaccionó, negando con su cabeza rápidamente. “Estaba distraída por un rato.” Rió. “Solo estaba recordándome de comprar la colada. Ya vuelvo.” Sonriendo, ella me envió un guiño como diciendo. “Ve con tu hombre”, de una manera apropiada, por supuesto, antes de marcharse.
Me reí ligeramente, sacudiendo la cabeza ante lo relajada y maravillosa que era ella.
Ojalá mi mama fuera así.
“Así que...” Harry maniobró su camino entre mis piernas, cada una de sus manos estaban posadas en a cada uno de mis labios contra la encimera. “¿Que estaba pasando realmente entre tú y mi mama?” El levantó su ceja izquierda, con una sonrisa en sus labios.
“Simplemente lo que ella te dijo.” Tensé una risa. “Ella realmente tenía algo en su ojo y empezó a llorar. Estaba tratando de sacárselo afuera y funcionó.”
“Mhm,” Murmuró él, mostrando su infame sonrisa. “Eso es interesante. Pero, que tal si esta vez, me dices la verdad?”
Me mordí mi labio. “¿De que estas hablando?”
“Creo que sabes exactamente de lo que estoy hablando, nena.” El murmuró, mirándome fijamente a los ojos.
Aparté mi vista.
Inclinándose, el plantó un firme beso en mi cuello antes de hacer su camino hacia mi mandíbula y mejilla hasta que sus labios rozaron contra mi oreja. “Mírame.”
Mordí mi labio, forzándome a mí misma para hacer lo que el me dijo.
“Cuéntame.” El deslizó sus dedos contra mi mejilla, sus nudillos pronto recorrieron hacia arriba y abajo lo largo de mi cuello.
Giré mis pulgares, sin saber si debía de decir algo o no. “Harry...”
“______.” Susurró, sus ojos color avellana estaban en los míos color chocolate. “Solo dime.”
“Vale...” Murmuré, balanceando mis piernas hacia arriba y abajo mientras estas rozaban contra el costado de Harry.
El agarró mi mano izquierda con la suya, entrelazando nuestros dedos.
“Estábamos hablando sobre ti.”
El sonrió. “¿Que pasa conmigo?”
“Nada malo... tu madre estaba solo diciéndome como de buena soy para ti.” Me sonrojé, enganchando mis dientes en mi labio inferior.
“Ella tiene razón.” El pasó su dedo por mi barbilla. “Lo eres.”
Sonreí.
Inclinándose hacia delante, el presionó sus labios con los míos. “Te quiero.” Murmuró.
“Yo también te quiero.”
Después de unos segundos de pie en silencio, Harry lo rompió. “Ven conmigo.” El sonrió. “Quiero enseñarte algo.”
Asentí con la cabeza, saltando del taburete y siguiéndole fuera de la cocina y subiendo las escaleras.
“Yeah, bro! A fo*llar!” Edward llamó desde el sofá haciendo que Des riera y que Anne golpeara la parte posterior de su cabeza.
“Gracias, mama.” Harry frunció el ceño.
“Ay! ¿Que demonios--”
Otro golpe! Se escuchó y me volví para ver que Anne le había golpeado una vez mas.
“¿A que venía eso?”
“Lenguaje!” Anne regañó.
“¿Que es esto? ¿Golpear a Edward en la cabeza?!” El gritó con incredulidad.
“Es lo que te merecías, idi*ota.” Harry escupió antes de rodar los ojos y caminar el resto del camino hacia arriba.
Cuando llegamos al final, se reveló un pasillo largo y estrecho.
“Por aquí,” Señaló Harry con su cabeza por el pasillo.
Seguí detrás de él hasta que se detuvo en frente de la tercera puerta a la izquierda. “Este,” El agarró la manija, abriendo la puerta. “es mi cuarto.”
Entré, mis ojos se agradaron mientras miraba en shock. Parecía como una habitación típica de un chico adolescente. Había varios pósters de jugadores de béisbol, baloncesto y hockey y algunos trofeos, fotos de familia y de amigos y una colcha normal azul y blanca, sus paredes estaban pintadas de azul marino.
“¿Esta es tu habitación?”
El se rió, moviendo su cabeza de arriba abajo. “Sip,” El hizo énfasis en la ‘p’ dejando ir mi mano mientras el sumergía las suyas dentro de los bolsillo de sus jeans, viendo todo su alrededor al igual que yo lo estaba haciendo ahora.
“Wow... es tan aparentemente normal en comparación con tu habitación ahora.”
“¿Que hay de malo con mi habitación ahora?” El me miró.
Me encogí de hombros. “Tu habitación es mas oscura... tiene ese mal parecer en ello. Esta parece mas... infantil.”
Harry se echó a reír. “Yo crecí fuera de esto, supongo.”
“Si,” Sonreí. “Tu cama parece tan pequeña.”
“Hace unos años desde no duermo en ella, Kels. Por supuesto que va a parecer pequeña. He crecido unos centímetros desde la ultima vez que me quedé aquí.”
“No puedo creer que haya pasado tanto tiempo...”
“Y que lo digas.” El murmuró, tomando una ultima mirada alrededor de la habitación antes de ladear su cabeza hacia la puerta. “Vamos; vamos a echar un vistazo a las otras habitaciones.”
Asintiendo con mi cabeza, salí con Harry detrás de mi. Caminando hacia delante, el me llevó a la habitación de al lado de la suya y en el momento en el que el abrió la puerta, supe que era la habitación de Edward debido a todos los varios elementos de hockey de dentro.
“Esta es la habitación de Jax--”
“De Edward, lo se.” Acabé por él con una sonrisa. “Me di cuenta.”
Harry echó un vistazo alrededor mientras yo estaba allí, no sintiéndome cómoda para caminar alrededor de una habitación que no me pertenecía.
De repente, Harry se echó a reír, sorprendiéndome. “¿El que esta mal?”
Harry negó con su cabeza, mordiendo sus labios para no reírse mas.
“¿Harry?”
“Edward esta tan jodido cuando lo vea abajo.”
Junté mis cejas. “¿Porque?”
Se agachó, agarrando una revista con su mano antes de volverse hacia mi. “Porque he encontrado esto escondido debajo de la cama,” El la sostenía en alto y casi me ahogo con mi saliva.
“Imposible! ¿Es eso suyo?” La quité de su mano, mis ojos aterrizaron en al inquietante imagen en frente de mi.
“La encontré en su habitación debajo de la cama.” Harry se echó a reír, quitándomela.
“Oh Dios mío...” Interrumpí, sorprendida.
“Lo se. No puedo esperar a ver su cara cuando le suelte la bomba encima.” El se rió entre dientes, haciendo rodar la revista y escondiéndola debajo de la cama de Edward de nuevo.
Me estremecí, sacudiendo mi cabeza. “Salgamos de aquí.” Tomé su camino, tirando de él hacia afuera. “No creo que pueda soportar mas sorpresas.”
Harry rió, cerrando la puerta detrás de nosotros antes de pasar a la siguiente. “No te culpo.” Abriendo la ultima puerta, los dos comenzamos a entrar hasta que poco a poco Harry se detuvo en el interior, sus ojos se nublaron y su cara cambió completamente.
“¿Harry?” Me moví a su lado y al instante, supe porque se había quedado en silencio. La habitación estaba llena de pósters de bandas de chicos. Unos cuantos libros estaban esparcidos sobre una mesa, las paredes eran de color rosa claro. “¿Esta es la habitación de Jaz--?”
“La habitación de Gemma?” Él me miró.
Yo no dije nada, en cambio, miré hacia delante.
“Si.” El hizo una pausa, lamiéndose sus labios. “Si, lo es.”
Harry’s Point of View:
No era mi intención entrar aquí.
Tenía la intención de entrar en la habitación de mis padres pero por supuesto olvidé que su habitación era la que estaba antes de la mía y la de Gemma era la siguiente a la de Edward justo como lo había sido siempre.
Lo que me sorprendió mas fue el hecho de que todo estaba intacto. Dejado justo como había estado la noche del accidente.
Pensé que a estas altura mis padres habían quitado todo pero resulta que no lo hicieron.
La habitación de Gemma era el último recuerdo que teníamos de ella.
“¿Estas bien?” Susurró _____, haciéndome reaccionar.
Asentí aturdido. Aclarando mi garganta, suspiré. “Creo que sí...”
Ella sonrió suavemente, pasando una mano arriba y abajo de mi espalda. “¿Porque no vamos y --”
Negué con mi cabeza. “No...” Hice una pausa. “Quiero quedarme aquí.”
“¿Estas seguro?” Ella se mordió su labio, sus ojos eran penetrantes a través de un lado de mi cara.
La miré. “No puedo huir siempre.”
Ella asintió con la cabeza, sabiendo exactamente lo que quería decir.
“Vamos,” Agarré su mano, llevándola aún mas dentro de la habitación. “Quiero mostrarte algunas cosas.”
_____ me siguió mientras yo seguía mi camino alrededor de la cama de Gemma y sobre su cajón. Sentí mi estómago revolverse mientras miraba por encima una imagen de mi y Gemma unos meses antes de su muerte, justo después de que ella hubiera ganado la feria de ciencias de la escuela. Sonreí débilmente, inclinándome y presionando mis dedos sobre el cristal.
______ se quedó descansando a mi lado, con los ojos mirando por encima de la imagen antes de mirarme a mi. “¿Cuando fue eso?”
“Cuando ella gano la feria de ciencias,” Aparté mis ojos, dejándolos viajar en los chocolates de ______. “Ella estaba tan feliz de ganar... no podía dejar de lanzarnos a Edward y a mi caras.” Me reí entre dientes, sacudiendo mi cabeza. “Ella era tan malditamente competitiva.”
“Justo como tu.” _____ golpeó su cadera contra la mía, dándome una apretón a mi mano y sonriendo.
“Si,” Susurré. “Justo como yo...” Murmuré, apartando mi mirada para mirar al collar tirado en el escritorio de madera.
_____ pareció haberse dado cuenta de lo que estaba mirando porque le llamó la atención. “¿Que es eso?” Señaló ella.
Sentí la parte trasera de mis ojos pinchar.
“¿Harry...?”
“Tengo una sorpresa para ti, Jaz.” Sonreí, escondiendo una caja detrás de mi espalda sabiendo que se iba a volver loca cuando viera lo que le había comprado para su decimosexto cumpleaños.
“¿Que?” Ella gritó alegremente, saltando sobre sus pis, sin poder contener su emoción por mas tiempo.
“¿Te lo debería de dar ahora o debería de esperar hasta mas tarde...hm...” Sonreí, tocando mi barbilla fingiendo que estaba pensando en que hacer.
“Ahora!” Ella gritó con entusiasmo. “Dámelo ahora, por favor!”
Me reí entre dientes, negando con mi cabeza. “Bien... ya que es tu cumpleaños y todo.” Sonreí mientras mostraba el brazo que había enroscado alrededor de mi espalda, hacia delante, dejando al descubierto la caja negra de terciopelo. “Feliz cumpleaños Gemma.”
Cogiendo la caja de mi mano, ella levantó la tapa antes de lanzar un suspiro animada, sus ojos se abrieron en shock. “J-Harry...” Ella susurró, sin aliento. “Esto es hermoso.” Suavemente envolviendo sus dedos alrededor de la cadena del collar que le había comprado, lo levantó.
“Me alegro de que te guste. Vamos, déjame ayudarte a ponértelo.”
“Vale.” Ella sonrió, entregándome el collar antes de darse la vuelta y sostener su cabello.
Caminé detrás de ella, poniendo mis brazos detrás de ella antes de colocar el collar alrededor de su cuello, cerrándolo en la parte de atrás. “Ya esta.” Susurré.
Volviéndose, rápidamente envolvió sus brazos alrededor de mi. “Gracias, gracias y gracias! Lo amo tanto!”
Sonreí, orgulloso de mi mismo. “De nada Jaz.”
“Eres el mejor hermano del mundo!”
Me reí entre dientes, apretándola con mas fuerza contra mi cuerpo.
“Fue el regalo que le había comprado para su decimosexto cumpleaños.” Susurré, todavía en la neblina del flashback que había recibido.
“Es hermoso.” _____ me sonrió.
Esbocé una pequeña sonrisa en respuesta. “Eso es lo que ella dijo cuando lo vio.”
_____ se inclinó, presionando sus labios contra mi mejilla antes de alejarse.
Volviéndome para mirarla, dejé escapar un profundo suspiro. “Desearía que ella todavía estuviera viva hoy...”
“Lo se...” _____ susurró, acariciando mi hombro con su mano. “Pero, no pienses de esa manera, ¿vale? Estoy segura de que ella te esta mirando ahora mismo, orgullosa. Has recorrido un largo camino, ya sabes.”
Asentí con mi cabeza. “Lo se.”
“Y a ella no le gustaría que vivieras en el pasado.”
“Tienes razón.” Obligándome a apartar mi mirada de la mesa, envolví mis brazos alrededor de la cintura de mi chica, llevándola mas cerca de mi. “Ella te hubiera querido.” Murmuré en su cabello después de que ella pusiera su mejilla contra mi pecho.
“¿En serio?” Pude sentir su sonrisa contra mi, sin atreverme a moverme y romper la comodidad entre nosotros.
“Claro que si, vosotras habríais sido mejores amigas también.” Sonreí. “Solo puedo imaginar sobre lo que hablaríais...”
“No te hagas ilusiones, chico grande. Tú no serías el tema de nuestras discusiones.”
“Nunca dije que fuera yo.”
“Pero lo estabas pensando.” _____ rió.
Me encogí de hombros. “Hablas de mi a mi madre, es simplemente común que hablaras a mi hermana sobre mi también, si ella todavía estuviera viva.”
“Oh Dios mío, Harry,” _____ rió. “No hablo sobre ti con tu madre. Nosotras solo... comentamos sobre ti.”
“Es lo mismo.” Defendí, riéndome entre dientes.
_____ rodó sus ojos, dándome un simple empujón. “Además,” Ella enfatizó queriendo continuar lo que estaba diciendo. “Ella solo quieres saber como te van las cosas.”
Arqueé una ceja. “¿Y tu le dijiste?”
_____ se encogió de hombros. “Si...” Cuando ella vio la mirada que le di, ella rápidamente negó con su cabeza. “Por supuesto que me aseguré de dejar los detalles sobre las cosas que estoy segura que a ella no le gustaría saber.” Ella me dio una mirada de exasperación.
“Bien.” Le di un beso en la frente. “Lo último que necesito es que ella sepa que todavía voy por ahí haciendo las cosas que hago.” Murmuré.
“¿Entonces, porque no lo dejas si es una molestia?”
Me aparté de _____. “¿Que?”
“Solo estoy diciendo... si es un problema, ¿Porque simplemente no ... lo dejas?” Ella dijo con indiferencia.
“No puedo hacer eso.” La miré fijamente como si fuera la cosa mas obvia del mundo.
“¿Porque no?” Ella ladeó su cabeza hacia un lado, mirándome con curiosidad.
“Porque no puedo. Es una parte de lo que soy. Además, no hay manera de salir. Una vez que estas dentro, eso es todo. Tu estas dentro para siempre.”
“Oh,” Ella asintió con la cabeza, presionando sus labios en una linea firme. “Lo entiendo.” Sonriendo, ella se encogió de hombros.
“Lo siento.” Susurré
“No tienes que disculparte.” Ella agitó una mano con desdén. “Solo estaba preguntando. Además, ya te dije que estoy bien con ello. Te he aceptado por quien eres. No quiero que cambies.”
Sonreí, besando sus labios suavemente. “Lo se, pero también se que es una mier*da preocuparse por mi todo el tiempo pero te prometo que, no dejaré que nadie te toque. ¿Vale? Te protegeré no importa lo que pase.”
Ella sonrió cálidamente. “Lo se y estoy muy agradecida por eso.” Inclinándome, ella envolvió mis labios en un beso, alegremente le devolví el favor, agarrando sus lados y deslizándola cerca.
Lamiendo su labio inferior, ______ aceptó contenta mi invitación, mi lengua se deslizó dentro y luchaba por la dominación contra la suya.
Pasando sus manos por arriba de mi espalda y en mi pelo, _____ tiró de los extremos, el beso se tornaba mas caliente cada segundo que pasaba.
Me aparté y poco a poco comencé a mover mis labios por su cuello, succionando y mordiendo a lo largo del camino, _____ dejó escapar un suave gemido.
“Harry...” Murmuró.
Dejando besos mojados con la boca abierta alrededor de todo su cuello, no quería nada mas que arrancarle la ropa y fo*llarla sin sentido ahora mismo.
Justo cuando me aparté y estaba a punto de empujar mis labios contra los suyos, ______ llevó sus manos a mi pecho, deteniéndome. Sin aliento, se lamió los labios. “No lo hagas.”
“¿Porque no?” Me quejé infantilmente, disparándole una sonrisa seductora. “Te deseo tanto ahora mismo.” Me moví para besarla una vez mas pero _____ no se movió.
“Harry!” Susurró ella. “No ahora mismo y especialmente no en la habitación de tu hermana!” Ella regañó y me miró con incredulidad.
Echando mi cabeza hacia atrás, deje escapar un suspiro, gimiendo levemente. “Esta bien...” Volví a mirarla. “Tienes razón.”
“Se que la tengo.”
Me reí entre dientes, sacudiendo mi cabeza. “Vamos, mejor que nos vayamos antes de que mis padres realmente piensen que estamos haciendo algo aquí.” agarrando su mano, entrelacé nuestros dedos juntos antes de echar un ultimo vistazo alrededor de la habitación e irnos, asegurándome de cerrar la puerta detrás de nosotros.
Bajamos las escaleras, Edward y mi padre estaban viendo TV al igual que ellos hacían cuando nos fuimos.
“Oh, mira finalmente quien bajó. ¿Fo*llaron como yo había predicho?”
Le lancé una mirada. “Cierra la pu*ta boca!” Gruñí.
“Lenguaje!” Mi madre gritó desde la cocina.
Lancé mis ojos confusamente hacia la dirección en la que mi madre habló. “¿Como escuchó ella eso?”
“Tengo oídos como un halcón.” Mi madre caminó fuera de la cocina y entró en la sala de estar, lanzándome una mirada de complicidad. “La comida esta lista.”
Mi padre saltó del sofá, estirándose. “Muy bien chicos, suficientes discusiones, vamos a comer!” El impulsó su puño mientras reía.
Edward se puso de pie, siguiendo a mi padre mientras _____ y yo caminábamos detrás de ellos. Al entrar al comedor, me senté al lado de mi padre mientras ____ ayudaba a mi madre a sacar los platos de comida.
Una vez que toda la comida estaba en la mesa y todos nos habíamos sentado alrededor de la mesa, decidí dejar que el karma le pasara factura a Edward. “Así que, Edward...” Interrumpí irónicamente, cogiendo un trozo de pan antes de mirar hacia donde Edward estaba sentado.
El miro curiosamente, preguntándose lo que quería. “¿Que?”
“¿Desde cuando lees playboy?"