A.E.A.I. [Asociación Que Encu...

By FlorDai

36.7K 2.6K 417

Avery Duch no es de las que se mete en problemas. Sin embargo, toma una decisión demasiado errada que le tr... More

Sinopsis
Capítulo 1: "Asociación que Encuentra tu Amor Ideal"
Capítulo 2: "No me lo creo"
¿Actualización?

Prólogo

4.1K 410 14
By FlorDai

Ya no puedo soportarlo más. No se dan una idea de lo frustrante que resulta intentar llegar a un sitio y que por más empeño que le pongas, no puedas conseguirlo.

Y es que hace más de diez minutos que estoy intentando llegar a un cierto lugar de la universidad, donde colgado en el tablón de anuncios se encuentran las calificaciones finales. Sí, aquellas que definen mi aún incierto futuro.

El único problema es que mis piernas parecen no ceder ante mi esfuerzo de aumentar la velocidad. Siento como si estuviesen sumergidas en agua, y parecieran que solo he avanzado como cinco metros en quince minutos.

Necesito llegar a esas esperadas calificaciones a como dé lugar, y no importa si por alguna razón paranormal no puedo conseguirlo, tengo que lograrlo. Así que es entonces que respiro hondo y aumento la velocidad un poco más, a pesar de que me resulta inusualmente imposible hacerlo.

Observo a mí alrededor y caigo en la cuenta de que no he cruzado a ni un alma en lo que va de mi recorrido. A pesar de encontrarme en medio del pasillo repleto de puertas que conducen a aulas, y que a mi izquierda haya ventanas que den al campus, es puramente extraño que no vea a ningún otro estudiante merodeando por aquí. Me siento como si estuviese recorriendo la universidad un domingo por la mañana de manera ilegal.

Es entonces que comienzo a sentir el calor apoderarse de mi cuerpo por agotamiento, justo cuando el profesor Fisher hace su aparición triunfal frente a mí de forma inesperada y tengo que detenerme por puros reflejos.

¿Quién se interpone de tal forma delante de una persona que está corriendo hasta con la última gota de su ser?

Bueno, el profesor Fisher es una buena respuesta.

-Señorita, ¿podría bajar la velocidad? Está en una universidad, ya no es una adolescente hormonal como para trotar por los pasillos de la institución, ¿qué tal si golpea a cualquier otro estudiante?

El profesor Fisher es la primera persona que veo en los pasillos luego de más de quince minutos, pero dejemos que de igual forma prosiga, no sería nada bueno que me retenga por más tiempo.

-Yo comprendo que esté alterada por haber fallado en su examen final, pero no tiene por qué...

Dejo de oír lo que ese hombre está diciendo y me encierro en una frágil burbuja, repitiendo una y otra vez la misma palabra: "Fallado".

Claro que no tiene sentido, eso fue un error.

-Profesor Fisher, yo no he fallado.

-Ah, ¿podrá ser que todavía no ha visto los resultados? –pregunta sorprendido, notando que ha metido la pata hasta el fondo.

Instantáneamente mi respiración se detiene cuando oigo una lamentación de su parte, y me recorre un frío por toda mi espina dorsal. No sé qué es lo que sucede luego, porque todo se pone oscuro ante mis ojos y lo único que siento es un frío abismal.

De repente suena mi móvil con ese sonido tan monótono que vino con el mismo cuando lo compré. Se oye tan fuerte que me aturde y quiero que se detenga.

Así es que mis ojos se vuelven a abrir, pero ya no estoy en el pasillo de la universidad, sino que me encuentro en la sala de mi departamento, recostada en el sofá bajo una capa de apuntes y libros de la universidad.

Excelente, me he quedado dormida mientras estudiaba y he tenido una de mis típicas pesadillas pre-examen. Estupendo.

Y por si te lo estás preguntando, sí, suelo soñar que fallo en mis exámenes cuando se acerca la fecha de realizarlos.

Atiendo el teléfono de una buena vez porque anda pitando desde hace medio minuto y no lo aguanto más.

-¿Hola? –murmuro con voz ronca, y al instante noto el mal aliento que tengo. Me pregunto por cuánto tiempo he dormido.

-¡Feliz cumpleaños, querida! –grita mi tía desde el otro lado de la línea.

-Gracias, que emoción me da oír tu voz –respondo, intentando sentarme en el sofá sin aplastar las hojas de la universidad.

-¿Acaso... tienes resaca? –pregunta con un deje de emoción y una pizca de esperanza.

-No, me he quedado dormida en el sofá mientras estudiaba y acabo de despertarme.

-¡Avery! –grita de repente y dejándome sorda-. Es domingo por la noche, para colmo es tu cumpleaños y tú... ¿estudias?, pareces la bisabuela Adelaida.

-Ya... -mascullo, moviendo mi cuello de un lado a otro, intentando disminuir el dolor por haber dormido en mala posición.

-¿Y bien? ¿Has planeado una fiesta?

-Digamos que sí.

Saber que mi tía Dorothy no puede pasar mi cumpleaños número diecinueve junto a mí me trae una gran desilusión. Quizá porque desde que vivía con ella que siempre me había organizado las fiestas, encargándose de absolutamente todo, y eso es porque mi tía tiene una habilidad nata para realizarlas.

Pero este año es diferente.

A no ser que pueda preparar mi cumpleaños desde Inglaterra, cosa que veo un poco lejano.

-Te extraño mucho cariño –dice sonando igual a su hermana, quien también era mi madre.

-Y yo a ti, será mejor que aprendas a usar con más rapidez el Skype, necesito ver a mi tía Inglesa –me burlo.

-Eso es hasta que tu tío se decida en comprar una nueva computadora, cosa que veo difícil por el momento... -me río porque él es anti tecnología-, ¿Y bien? ¿A qué hora llegarán tus amigas?

Observo el reloj colgado en la sala y me contengo de gritar para no dejarla sorda.

-¡YA!

-¿Qué? ¿Cómo?

-¿Recuerdas que me quedé dormida? Oh dios santo, he perdido la cabeza.

Mientras me pide calma, yo agarro todas las hojas desparramadas y las guardo en mi bolso sin importar cuanto se vayan a arrugar. No puedo calmarme sabiendo que llegan en cualquier momento y yo sigo vestida de indigente.

Voy directo a mi habitación y agarro cualquier cosa que no sea mi pijama, o en su defecto, leggins.

-¿Qué has preparado para cenar?

-Pizza –digo jadeante, correr no es lo mío.

-¿Tú las has hecho? Me sorprendes...

-No, he pedido delivery, no me gustaría ser la causante de la muerte de algunas de mis amigas.

-Buen punto.

Coloco música aleatoria, que no tengo idea de lo que es pero parece decente y me doy cuenta que estoy en el elevador con mi tía Dorothy aún al celular.

-Lamento no haberte podido llamar antes cariño, pero hoy me han enloquecido en el empleo y recién he tenido la oportunidad de llamarte.

-No te preocupes, de por sí estando agotada me has llamado a altas horas de la noche, ¿no?

-Sí, aquí son las tres de la mañana.

-Gracias tía, me ha alegrado muchísimo tu llamado.

-Igual a mí, te quiero cariño, disfruta de tu día.

-Envíale un saludo al tío, ¿sí?

Entre despedidas, el elevador se detiene y guardo mi celular en un bolsillo de mi chaqueta. Mis amigas no han tocado timbre pero yo ya sé que están aquí simplemente porque son las más puntuales del mundo, y en eso nos parecemos entre todas.

Observo más allá de las puertas de cristal y las observo a las tres hablando entre sí, sin notar que estoy acercándome.

Bien, ya entiendo que soy un fantasma pero podrían disimular que no, gracias amigas.

Abro la puerta y de inmediato descarto la idea. Definitivamente soy material frente a ellas, porque que saltan hacia mí entre abrazos, haciéndome retroceder unos pasos para no caer de lleno al suelo. Escucho cosas como "Feliz cumpleaños Avery", "Avery la abuelita" o "Cómo creció nuestra niña"

Bueno, digamos que nosotras somos felices a nuestra manera.

Tengo la suerte de que la puerta principal del edificio se cierre sola, así que me echo a andar por los pasillos hasta el elevador con mis amigas que me arrastran un poco apresuradas.

¿Qué les sucede? Ni que cumplir diecinueve años fuera la octava maravilla del mundo.

-Tenemos que hablar muy seriamente –dice Chloe en el elevador con una sonrisa similar al gato de Alicia en el país de las maravillas. Si eso es seriedad...

Abro la puerta de mi departamento aún a los empujones por parte de mis amigas y entramos. Se quitan los abrigos con una rapidez increíble y se acomodan en los sofás de la sala de estar. Bueno, supongo que es momento de llevar las chucherías antes de cenar, así que mientras tanto, llamo al delivery y ordeno las pizzas.

-¡Avery! ¿Qué esperas para venir? –grita Amber.

-Estoy yendo.

Salgo de la cocina con unos cuencos repletos de papitas, cheetos y demás comida chatarra pero que definitivamente son "llenadores de almas".

Entonces, me detengo precipitadamente al ver a las tres de pie frente a mí con una sonrisa de oso. Sabía que algo tramaban.

-¿Qué... sucede?

-¡Feliz cumpleaños! –gritan todas al unísono y sacan un paquete que estaba oculto detrás de sus espaldas.

-¡Chicas! Ya les dije que no debían de molestarse.

-Deja de ser tan quisquillosa y ábrelo, ¿qué esperas?

Entre sonrisas cómplices y miradas incrédulas, procedo a abrir el paquete con sumo cuidado.

Bueno, no es nada extraño como imaginaba, sino que se trata de una hermosa gabardina para el invierno que se aproxima como huracán. Oigan, es que me está encantando...

-¡Esto es bellísimo! Muchas gracias –digo emocionadísima, hacía tiempo que quería algo así.

Me lo pruebo sobre mi ropa pero... Me queda un poco grande.

Genial.

-Puedes ir a cambiarlo mañana, no te preocupes.

Así que eso es lo que voy a hacer cuando termine mi examen final, pero que decepción me da que no me quede. De todas formas, lo que me han regalado ha sido hermoso y no me puedo quejar.

-Espera –dice Hannah, que hasta ahora se había mantenido callada.

-¿Qué? –pregunto alarmada.

-Falta algo más.

Abro el paquete un poco para notar que dentro hay un papel. Que idiota, creo que es una carta hecha por ellas y ni siquiera me había dado cuenta de que estaba dentro. Lo saco lentamente mirando a mis amigas. Tienen brillos en los ojos y ahora entiendo tanto entusiasmo, así que leo detenidamente las palabras y creo que me está por dar algo. No puedo creerlo, y es tal mi asombro que comienzo a leerlo en voz alta frente a ellas.

¿No encuentras pareja? ¿Te has desilusionado incontables veces? ¿Cansada/o de falsedades?

No te preocupes, para eso estamos nosotros, la mejor asociación de los Estados Unidos...

A.E.A.I. [Asociación que Encuentra tu Amor Ideal]

No esperes más, en simples pasos puedes tener a aquella persona que siempre has soñado... COMPLETAMENTE GRATIS.

Y debajo simplemente deja la información para comunicarse. Que linda broma, ¿saben? Ahora me arrepiento de no haber cocinado yo misma la cena para intoxicar accidentalmente a alguna de mis amigas.

-Que graciosas –contesto sarcástica al ver que ellas se parten de la risa-. Muy linda broma.

Me acaban de llamar solterona.

Bueno, en realidad puedo llegar a serlo. Digamos que nunca he tenido pareja ni ningún acercamiento amoroso con algún chico, pero mis estudios realmente me lo impiden, no tengo tiempo para algo como eso por más que quisiera. Además, en mi defensa, sí me gusta alguien pero esa es otra historia.

-Querida Avery, esto no se trata de una broma.

-¿De qué hablan?

-Verás, tú vas a llamar a esa asociación en este mismo momento –agrega Hannah, con convicción.

Realmente no puedo creer lo que estoy escuchando.

Continue Reading

You'll Also Like

40.1K 4.6K 20
Bradley tiene una nueva oportunidad de recuperar su estatus, aun si eso implica perder su orgullo ante Max. Quedando a su merced, estará dispuesto a...
119K 8.9K 26
Hazel, una chica que es famosa en la escuela por agarrar a patadas a todos y ser muy extrovertida y Noah, la chica mas popular de toda la escuela, a...
43.5K 8.6K 17
Aquí puedes leer el cómo el presidente electo de la República está obsesionado conmigo. *Novela corta
1.9M 134K 90
Becky tiene 23 años y una hija de 4 años que fue diagnosticada con leucemia, para salvar la vida de su hija ella decide vender su cuerpo en un club...