-Narración-
-Freddy... Freddy.... -Repetía una y otra vez el de cabellos azabaches- ¡Freddy, mierda!
El castaño se despertó sobresaltado, ya era jueves, el día anterior las clases se habían cancelado por una excursión para los de cursos menores, así que se quedaron jugando videojuegos como el día anterior, hasta tarde y hoy.... Se habían quedado dormidos...
-¡Mierda! ¡¿Qué hora es?! - preguntó el castaño y miró hacia el reloj más cercano.
-La una y cuarto (N/A: en mi país las clases acaban a las 2:30, así que aquí también.) - dijo el azabache tranquilamente, como si el tema no fuese con él, cómo si él no fuese tarde.
-¡Joder! ¡Llegaré tarde al examen! - dijo y salió corriendo.
Llegó justo cuando la clase de tecnología estaba por empezar, sus amigos empezaron a preguntarle el por qué de su tardanza, esto molestó mucho a la otra personalidad, que no veía en ellos intereses amistosos, sólo veía gente estúpida enamorada de su osito, comenzó a cantar otra vez, esto le relajaba, e inconscientemente también atraía al otro chico.
Por otra parte, Freddy se sintió agobiado, y a la vez se conmovió un poco, por fin había gente que se preocupaba por él.
-Sólo me quedé dormido, todo está bien- dijo el chico sonriendo, los demás copiaron su sonrisa expresando un poco de alivio, todos excepto el pelirrojo, que le importaba poco, la verdad.
-Muy bien, jóvenes, tomen asiento, el examen está por empezar.
-Fred... - sólo hizo falta esa palabra para que el de ojos vacíos tomara el control y empezara a escribir, con un rostro, eso sí, de aburrimiento.