Los chicos sin duda aceptaron volver a ser una manada, solo me faltaba hablar contigo.
Me miraste sorprendido, trate de ignorar eso y concentrarme en soltar lo que tenia para decir. Aceptaste, pero antes de subir al auto en el que estabamos todos;me abrasaste.
Te había extrañado demasiado.
-Lydia