Es tan extraño, debería sentirme bien, pero saber que mamá no está aquí me tiene intranquila, muy pronto comenzarán los problemas, siempre suceden porque no saben controlarse, aunque papá es muy estricto, llega de noche, así que mis hermanos tienen el tiempo justo para discutir y golpearse entre ellos.
Estoy segura que tendremos problemas para ir a nuestros institutos, quedan separados como las universidades de Ian, Élanie y los gemelos, creo que hablaré con papá cuando vuelva, si me voy con Hanne, Adrien y las mellizas a casa de la abuela nos quedará más cerca de nuestro colegio.
[...]
—Papá... —Mencioné de manera suave cuando él llegó, lo seguí hasta la habitación donde dejó su chaqueta.
—¿Qué sucede? —Pregunta sonriendo, a lo cual solo reacciono nerviosa jugando con la manga de mi chaleco.
—Tenía la idea de que... Bueno, quería preguntarte si podríamos Adrien, Hanne, las mellizas y yo ir a vivir con la abuela, sería más fácil ir a nuestros colegios en vez de que nos vayas a dejar.
—¿Y... Crees que es más fácil? Sabes a la perfección que ustedes con su abuela no se conocen mucho, ella apenas viene para sus cumpleaños, no conocen su carácter cuando se enoja o cuando vivan con ella. Definitivamente no, es mejor de que se queden aquí, Noelle, sé consciente, no pueden irse —Su tono de voz es frío, pero a pesar de eso la expresión de su rostro es relajada, quita la corbata de su camisa para luego sentarse en la cama—. ¿Qué clase de padre sería si no los puedo cuidar a todos? Celesstine me mataría.
—Tienes razón, papá. Creí que sería bueno para que no tuvieras tanto trabajo.
—Me las sabré arreglar —Asiento, de seguro si todos ponemos de nuestra parte podamos arreglar esto—. Ahora avisa a tus hermanos, pediré pizza para cenar.