—En serio, basta _____ —Me dice molesto Justin.
Justin me lleva por un pasillo hasta la otra salida del local. Siento el frío de la noche llegar a mi cuerpo.
—No seas aburrido Justin —Le digo con una sonrisa coqueta.
Justin me mira por segundos.
—Ya basta, tus primos están enojados al igual que yo —Dice Justin mirándome.
—No he hecho nada malo —le digo inocente.
Justin me lleva hasta donde su auto y me suelta.
—Mira ____, estoy tratando de calmarme por todo lo que has hecho adentro —le digo y de apoyo en capo de su auto.
—¿Si? —espero mirándolo.
—He llegado a mi límite, no quiero verte ahí coqueteándole a todos los hombres que pasen a tu lado —me dice Justin—. Me estás volviendo loco.
—¿Y tienes pensado castigarme? —le digo mirándolo con una sonrisa coqueta.
Justin parpadea lentamente.
—¿Por qué eres es así? —subí una de mis piernas—. Me gustaría que fuera una forma como nos gusta.
Le abro mis piernas a Justin, mientras le sonreía coqueta.
Justin literalmente me queda mirando mi entre piernas, sorprendido ante aquella reacción mía.
De un segundo a otro, Justin me cierra las piernas y aprieta sus puños.
—¡¿Qué mierda te está pasando?! —me pregunta enojado.
Oh si, lo había hecho enfadar.
—¡Te subes al auto ahora! —me grita furioso.
Le sonrió.
—No me iré Justin, estoy soltera y puedo hacer lo que quiero —le digo tranquila.
Trato de caminar pero Justin me toma la cintura fuertemente.
Un ruido nos llama la atención y veo a algunos de mis primos salir.
—¿Qué hacen aquí? —les pregunto.
Nicolás me mira furioso.
—Se acabo el juego ____, Justin llévatela ahora —dice mi primo a mi ex novio.
—Yo no voy a ningún lado —Les digo.
Jorge se acerca.
—____ por las buenas o por las malas —me dice.
—No puedo dejar a las chicas solas —Les digo moleta por aquella escena.
—No te preocupes por ellas —Dice Nicolas—. Ahora Justin llévatela.
—Supuestamente yo era la aburrida —les digo furiosa.
Justin me abre la puerta y me siento en su auto. Él se da la vuelta y entra para encender el auto mientras doblaba mis brazos enojada.
—Vete a la mierda, tú y tu decencia Justin —le digo molesta por aquella situación.
—El molesto debería ser yo, prácticamente sigues estando soltera y te aprovechaste de eso. Olvidas que tenemos algo —me dice y lo miro—. Apuesto que no te gustaría verme con otra chica bailando de esa manera.
Lo miro disgustada.
—Te volverías loca de celos verme con otra chica bailando, pero aún así no lo hago, quiero otra oportunidad ____ —Me dice firmemente—. He esperado bastante y trato madurar, pero tú comportándote de esta manera se me hace difícil.
Suspiro aún molesta.
—Es mi problema ya no quiero seguir contigo —le digo.
Justin aprieta los puños en el volante.
—Tu siempre aceptas los abrazos y coqueteos ¿Por qué yo no? —Le preguntó y Justin sigue apretando los puños—. ¿por qué no puedo aceptar que le atraigo más chicos? ¿por qué no puedo coquetear Justin? Dímelo.
Justin mira a la carretera.
—Por fui un idiota ____ y lo acepto, pero también trató de no hacer más errores —Me dice—. No pensé que ibas a venir y aún así, no baile con nadie y mis ojos solamente estaba en ti. Como mis pensamientos solos están en ti, día y noche.
—No te creo —Lo miro.
—Claro que no crees porque no te lo he dicho pero te lo demuestro —me dice—. Pasó pendiente de ti las 24 horas del día. No le hecho nada a Santiago sabiendo que él tiene sentimientos a ti y respetado la decisiones de tus primos al alejarme de ti. No té obligado ni he tocado sin tu consentimiento.
Lo miro y si, Justin tenía razón.
—Ahora esto llego a su límite, no te veré menearte ante otro frente de mis ojos —me dice Justin.
—Son celos Justin —le digo.
—Bien son celos —me dice—. Admite que también estás celosa del poder que tengo sobre las chicas.
Alzó una ceja.
—Si lo admito —le digo.
—Bien —dice él.
—Bien —le digo yo.
Nos quedamos unos segundos de silencio hasta que lo miro.
Quería disfrutar y ya lo había hecho, pero agradecía por una parte que Justin y mis primos me detuvieran, quizás que hubiera hecho en realidad.
—Dime por qué me has besado ayer —me dice Justin.
Me quedo segundos en silencio.
—Tú sabes la respuesta —le digo y Justin sonríe.
—Pensé que serías más mujer al decírmelo —Justin me dice.
Lo miro por segundos hasta que sonrió coqueta. Me quito el cinturón de seguridad y Justin me mira.
—Póntelo —me dice serio—. _____
—No podré hacer esto entonces —Me acerco a él mientras conducía.
—¿Qué estás haciendo? —me pregunta—. _____, olvídalo. Ahora no, y tampoco es el momento.
—Shh....te gustara —le digo tranquila.
—No...____ basta y —me dice.
Le sonrió coqueta.
Bajo el cierre mientras Justin conducía.
—Quiero jugar Justin —le digo.
—Te detendré ____, en serio basta —me dice serio.
Abro su pantalón descaradamente y tomo su boxer.
—_____ si lo haces no hay vuelta atrás —me mira fijamente—. No lo hagas.
—Quiero hacerlo —Lo miro sería directamente.
Justin me mira y traga fuertemente.
Sacó su erecto pene con cuidado de no hacerle daño y lo miro por segundo haga que empiezo acariciarlo de arriba hacia a abajo.
Justin mientras tanto estaba empezando a estar más nervioso mientras conducía.
—Justin con la vista al frente —le digo coqueta.
Justin respira pesadamente mientras empiezo acariciarlo.
—¿Te gusta? —le preguntó inocente mientras lo miro.
Justin alza un poco más sus caderas para que apreciara más su placer.
—No esperaba esto —dice con la voz entre cortada.
—Me gusta hacerlo —le digo excitada.
Nos quedamos en silencio. Justin conducía mientras yo lo acaricia tranquilamente. Las venas de sus manos estaban más marcadas de lo común.
Lo únicos sonidos que escuchaban eran nuestras respiraciones y el sonido de fricción de mi mano con su aparato.
Justin de pronto se detiene un lugar de la carreta donde se podía la luz de la luna.
—No aguantaré si sigues así —Justin saca mi mano de aquello y me toma de las caderas—. Te haré el amor aquí mismo.
Me muerdo el labio por aquella revelación.
Justin en seguida me sube a regazo mientras yo me dejaba. Su erecto aparato estaba en mi zona del vientre.
—Me vuelves loco —me confiesa.
Me acaricia el rostro.
—Me subiré el vestido —le digo. Justin me sonríe.
—Esa mi tarea mi amor —me dice sonriendo.
Cuando éramos una pareja habíamos aprendido que mientras hacíamos el amor, hablábamos poco o pocas veces hablábamos bastante.
—Con cuidado —le digo mientras me subía el vestido.
Justin me mira y veo el placer en sus ojos. Sus manos acarician mis mulos y me da un casto beso en los labios para guiarlo después hasta el cuello.
—Te haré al amor —Me susurra—. Con una condición.
—Dímela —mientras cerraba mis ojos cerradas.
—Dame otra oportunidad —me dice y disfruto de sus besos en el cuello.
—Mm...podría pensarlo si me haces el amor —le digo coqueta y bastante feliz.
Justin sube sus manos hasta mis brazos y me los acaricia.
—Extraña tu piel, tu aroma, tu cabello....todo de ti mi amor —me dice.
Justin era un amante empedernido.
—Por favor..hazme tuya de nuevo —le digo.
Justin me da besos hasta llegar a mis senos y los tomas entre sus manos para jugar con ellos.
—Son preciosos —me dice y mi excitación crece.
Lo miro sonrojada.
Adoraba eso.
—Quiero que me cabalgues sobre mi —me dice mirándome.
Sonrió ante aquello.
—Primero deberíamos haber tenido una cita —Bromeo y Justin me mira para tomarme de la cintura.
—Te llavero a una —me dice mira dime—. Te lo prometo.
Lo miro por segundos y nos besamos.
Siento sus labios estar al mismo nivel que los míos.
Justin tranquilamente levanta mi vestido y se acomoda; su mano mueve la tela de mi ropa interior y Justin se introduce en mí.
Un mar de sensaciones viene hacia a mí.
—Oh.. —Gime roncamente Justin cuando entra en mi—. Si...si.
Colocó mis manos en sus hombros y mis piernas sus rodillas.
—Móntame mi amor —me dice excitado.
Me empiezo a mover de arriaba hacia abajo, prácticamente estaba saltando sobre él. Justin apretó mi trasero y con su boca tomo uno de mis senos.
—¡Ahh.....ah! —Grite mientras lo cabalgaba.
Justin se deja disfrutar mientras yo saltaba. Sus manos ahora estaban en mis dos pechos y él disfrutaba como loco.
—Si...así —me muerdo el labio—. Justin....Justin.
Veo a Justin quien se muerde el labio al igual que yo. Sus manos me dan unas palmadas en el trasero para que siguiera.
Varios minutos más así, Justin y yo estábamos llegando al orgasmo.
Mi ex novio estaba mirándome mientras me movía.
De pronto había llegado a mi orgasmo y Justin me había agarrado las caderas para tomar el mando.
Gemí duramente mientras él daba unos segundos más de placer para llegar su propio orgasmo.
Un sonido ronco salió de sus labios. Respire profundamente mientras traba de tranquilizarme. Justin al igual que yo teníamos es capa de sudor de placer.
No salí de él y en cambio me acuerde en su pecho.
Justin respiraba aceleradamente al igual que yo.
—No pensé que íbamos hacer el amor —me dice Justin.
Él me acaricia la espalda.
—Yo quería hacerlo desde hace mucho tiempo contigo —le digo.
—¿De verdad? —me pregunta feliz.
—Si, quería hacerlo —Le digo.
Nos quedamos unos segundos en silencio para sentir nuestras respiraciones mezcladas.
Justin me empezó a caricias mi espalda mientras yo sentía el ladino de mi corazón.
—Eres hermosa —me dice.
Sonrió.
—¿Qué me has hecho ____? —Me pregunta—. Estoy locamente enamorado de ti.
—¿Después todo lo que ha pasado entre nosotros? —le preguntó.
—Estoy loco por ti —miro a Justin.
Y lo beso. Gimo al sentir nuestras partes unidas.
Justin baja mi vestido tranquilo y cubre mis senos con la tela del vestido.
—Hace frío, es hora de descansar —me dice tranquilo.
—Quiero seguir —lo miro por segundos.
Justin sonríe.
—Descansaras y luego comerás, pienso seguir haciéndote el amor toda la noche —Justin me acaricia el rostro.
Con cuidado me levanta y saca su aparato de mí. Gemimos y Justin se ordena mientras yo seguía mirándolo.
Después de aquello Justin me sienta en el asiento de copiloto y se saca su chaqueta para dármela a mí.
—Descansa —Me dice.
—Me dará sueño —Le digo con una sonrisa.
Justin enciende el auto.
—No lo creo —me mira coqueto—. Si manejo quiero acariciarte todo lo que no puede en estos meses.
Sonrió como estúpida ante aquello.
—¿Dónde vamos? —Le preguntó cómoda en el asiento.
—A un hotel —Me dice.
—¿No será muy costoso? —le preguntó.
—No te preocupes mi amor, lo pagaré yo obviamente —me dice Justin.
—Me gustar... —Justin me interrumpe acariciando mis muslos.
—Shh...descansa mi amor, no te preocupes de nada —Miro a Justin quien seguía manejando.
Me había venido el sueño fuerte.
Cuando llegamos a un hotel, me sorprendí que fuera tan llamativo. Justin pagó por el día de mañana y la noche de hoy, así que cuando subimos a la habitación pidió servicio a la habitación.
—Colócate cómoda y descansa mientras esperamos la comida —Me dice Justin y le asiento.
Descanse en la cama mientras veía a Justin hablar por teléfono y asegure que eran con mis primos y alguien más; pero poco me importó.
Minutos después llegó la comida y Justin la recibió.
Todo se veía delicioso, incluido mi ex novio.
—Ven conmigo —Me dice Justin para que me sentara a su lado.
Justin prácticamente me dio de comer y agradecí eso, tenía mucho sueño para darme cuenta de lo que hacía.
—Justin tengo sueño —le digo mirándolo.
Justin parpadea lentamente.
—Haremos el amor mañana —me dice acariciándome la mejilla—. Acuéstate que yo ordenó esto y después me voy a tu lado.
—No tengo pijama —le digo a quien Justin sonríe.
—Duerme solo en ropa interior —me dice y siento mis mejillas sonrojarse.
—Está bien —le digo.
Justin movió las cosas para ordenarlas mientras yo me sacaba el vestido y los tacones para dormir.
Las sabanas estaban frías y me acurruqué de tal manera de no sentir frío. No me había dado cuenta cuando me había quedado dormida cuando Justin se había acostado a mi lado.
Había dormido plácidamente toda la noche. Sentía el cuerpo de Justin pero no me molestaba, al contrario me gustaba.
La luz del día y las caricias de Justin me había despertado. Cuando lo veo acariciándome el hombro con una sonrisa fue lo más sexy que he visto.
—Al fin despertaste dormilona —me dice con una voz ronca.
Trago fuerte.
Lo miro.
—Te ves hermosa —me dice Justin con una sonrisa.
Me empezó a doler la cabeza y no sabía por qué, no había tomado la noche anterior.
—Tengo que levantarme —Dije tratando de huir.
Justin me mira y de pronto me giro rápido para levantarme lo antes posible, no me doy cuenta cuando las sabanas de la cama se enrollan en mis piernas y caigo medio cuerpo abajo, mientras piernas estaban amarradas y tenía mis senos al aire con solamente la parte de abajo de mi ropa interior.
Gruño por el dolor y me siento avergonzada por la situación. Justin en seguida me ayuda a levantarme.
—Tienes que tener cuidado —Justin me toma entre sus brazos.
Él solamente estaba en boxer, yo con solamente con mis bragas y mis senos al aire. Era una situación muy comprometedora.
—¿Te duele algo? —Me pregunta y me niego—. Descansa.
Lo miro.
Recordé todo lo que había pasado los días anteriores y el día de ayer.
Justin me mira los senos descaradamente y me siento cohibida.
—No me mires —le digo tapándome.
—Son preciosos —Me dice él sin vergüenza—. Me gustan mucho.
Lo miro fijo después busco mi vestido y lo tomo con los tacones.
—¿Qué haces? —me pregunta mirándome algo molesto .
—Tenemos que irnos Justin —le digo.
—Tenemos el día —me dice.
—Si pero me quiero ir —le digo mirándolo.
—¿Por qué? —me pregunta molesto.
—Por qué si Justin, porque debo hacerlo —le digo mirándolo.
Justin aprieta sus puños.
—¿O sea para ti solamente fue un juego lo de ayer de refregarte de esa manera? —me pregunta molesto—. ¿Y qué hay de mi? ¿Soy siempre el idiota que lo arruina? Porque te lo recuerdo que en ningún momento te pedí que hicieras lo que hiciste.
Lo miro molesta.
—Justin no volveremos —le digo y Justin me mira serio.
—Ayer no lo parecía —me dice acercándose—. Ayer hicimos el amor en el asiento de mi auto, acuérdate y no parecía que me quisieras lejos.
Me paso la mano por la cabeza y suspiro.
—Quiero las cosas a mi manera Justin —le digo y él relaja la expresión.
Justin me mira confundido.
—No te entiendo, primero quieres no volvamos después que si, después que no —me mira fijamente
Me muerdo el labio nerviosa.
—Dime algo —me dice mirándome.
De pronto dejó los tacones y los tacones aún lado. Justin me sigue mirando.
—Hazme el amor nuevamente —le digo mirándolo.
—¿Qué? —Justin me mira sorprendido.
—Hazme el amor —le repito.
—No entiendo a lo que juegas, prácticamente quería salir arrasando de la habitación y ahora me pi... —Callo a Justin con un beso.
Al principio se resiste pero después sus brazos rodean mi cintura desnuda. Caminamos mientras nos besábamos para caer en la cama. Justin sube una pierna mía a su cintura.
—¿Por qué te gusta volverme loco? —me pregunta entre besos.
—Porque me encantas —lo beso tranquilamente.
Justin me empieza a dar besos en cuello mientras yo lo abrazaba.
Después de hacer el amor en la cama del hotel, Justin y yo estábamos abrazados completamente desnudos.
Él me acariciaba los hombros.
—Eres única.. —Me dice.
—No me parezco a la chica con senos grandes —me burlo mirándolo.
—No me he acostado con nadie además de ti y tampoco me he bajado desde que rompimos —me dice.
—Pueda que no te crea —le digo mirándolo.
—Pregúntale a Bash o a Santiago —me dice calmado—. La única que estaba en mi cabeza eras tú pero también mi padre y mi hermana.
Sonrió por aquello.
—Yo no me he acostado con nadie —le digo.
Justin me sonríe.
—Solo eres de besos cariño —Me dice mirándome—. Chase.
—¿Cómo lo sabes? —Le digo confundida—.¿Cómo no estas molesto?
Justin parpadea lentamente y sonríe.
—Madure —me dice tranquilamente—. Sé que no eres capaz de acostarte con nadie más porque tú eres una chica sentimental, no eres de un acoston solamente. Por lo de Chase lo sé porque los vi varias veces.
—¿Por qué no hiciste nada? —Le preguntó confundida.
—Porque sabía que tú no lo querías a él como a mí —me dice—. Tenemos una historia _____. Un par de besos con otros chicos no lo van a cambiar. Aunque con Santiago te confirmo que quería partirle la cara pero ustedes también tiene una historia y lo respeto. Pero yo te vi antes que todos ______.
Justin prácticamente me deja sin palabras.
—De verdad estoy enamorado de ti y creo que nuestro rompimiento hizo que maduráramos —me dice.
—A mí no tanto —le digo.
—Si, si lo hizo —me dice Justin—. Ya sabes lo que quieres cuando lo quieres y eso me gusta, porque sé que eres independiente y no necesitas de nadie para salir adelante.
¿por qué me decía todas es cosas?
—Dame otra oportunidad —me dice Justin mirándome.
Lo miro por segundos.
—De todas maneras te la iba a dar —le digo.
—¿En serio? —Le asiento—. Wow...pensé que no.
Niego con la cabeza.
—Tu mismo lo dijiste, te amo porque tú viste más allá de mi misma que las demás personas e incluso yo misma. Tenemos una historia de amor Justin y eso no va a cambiar —le digo tranquila.
—¿Significa que volvimos? —Me dice con una gran sonrisa mientras sus ojos brillaban.
—Si pero —le digo.
—¿Pero? —me mira.
—Quiero que las cosas sean de esta manera —le digo mirándolo—. No quiero celos, quiero que le digas todos que tienes novia al igual que yo diré que tengo novio, no dormirás en mi habitación a menos que yo lo quiera, si vas a ir de fiesta ve tranquilamente pero avísame donde estás al igual yo lo haré; por seguridad. Quiero que me digas las cosas que sientes y piensas además de las que te suceden.
Justin asiente.
—Última Justin, no quiero que seas un imbécil —le digo mirándolo.
—¿Soy un imbécil de verdad? —me pregunta preocupado.
—No lo eres pero a veces te comportas como uno —le digo.
—Cumpliré todo —me dice Justin.
Justin me abraza para darme un beso en cuello.
—Yo también quiero condición estable —me dice él.
—Dilas —le digo.
—Quiero una foto desnuda de ti —me dice sonriéndome coqueto.
—¿Que? ¿por qué? —lo miro extraña por aquello—. Sabes que no lo haré.
—Tendré tu foto desnuda para masturbarme todas las noches que no esté contigo —me susurra al oído—. ¿No te excitada saber que me toco por ti?
Me muerdo labio.
—Justin —le digo algo molesta por su broma.
Justin se ríe suavemente.
—Solo es una broma a menos que tú quieras —Me dice.
—No, no quiero —le digo—. Otra cosa.
Justin me mira.
—No te preocupes de Chase o Santiago. Para Chase no soy su tipo, Santiago sabe que no pasara nada entre nosotros —le digo.
—¿Jared se ha vuelto a acercarse a ti? —niego inmediatamente—. Me alegro que no te haya tocado.
—Una vez me invitó a una cita —le confieso a Justin, quien me mira sorprendido—. Pero lo rechace suavemente.
Justin sonríe.
—Te haría el amor de nuevo hermosa.
—Oh basta de cursilerías —le digo y Justin me empieza acariciar las caderas—. ay... Justin.
—Ay...Justin —me imita—. Me encantas cuando haces eso.
Sonrió feliz.