— Bien.
— Bien.
— ¿Y ahora qué? —Me paso la mano por detrás de cuello, frotándola suavemente.
— Antes que nada hay algo muy importante que quiero hacer.—Dice en un tono picarón.
— ¿Besarme?.—Alzo las cejas y las muevo arriba y abajo varias veces.
No puedo creer que acabo de decir eso *Haciéndose bolita mentalmente*
— Noo... —ríe y mis mejillas comienzan a arder, mierda. — Bueno aparte, lo que quiero hacer es...
— ¿Qué? —Digo aún acalorada, maldición ¡Enciendan el aire acondicionado!
— Bueno —Se da la vuelta dejándome a la vista su espalda bien perfecta y definida.
Me muerdo el labio instintivamente. Lo veo que camina en dirección recta hacía donde yo estaba cuando entré, su mirada se dirige a la bolsa que está botada en el suelo y luego me mira con una sonrisa malévola. Rápidamente pisa la bolsa y la patea.
— ¡zayn eran pastelillos de colores!¡De colores! —Me acerco a él — Con la comidita no se juega —me cruzo de brazos.
— Más le vale a ese idiota el tal niall —Hace una mueca de asco a lo que yo suelto una risita —No volver a molestar, suficiente tenía con el otro idiota, ¿Cómo se llamaba?
—Harry, zayn, Harry—Niego con la cabeza.
— Bien, desde hoy si quieres comer algo me lo dices a mi ¿Bueno?—Se acerca invadiendo mi metro cuadrado.
— No losé —me pongo el dedo índice en la barbilla y Miro hacia arriba—¿Tienes entraditas mágicas?
—¿Entraditas mágicas?—ríe—No sé de qué me hablas.
—De esas que Te dejan entrar a lugares llenos de comida—Sueno lo más obvia posible, osea, Todos conocen esas entraditas.
Dah...
—No, pero puedo conseguirlas —Se cruza de Brazos y vuelve a su actitud de Chico malo.
—¡Ay entonces ya soy tuya!—me lanzo a sus Brazos para abrazarlo mientras me encaramo en él.
Siento como se tensa un instante por mi contacto tan repentino, aunque en realidad nunca había tocado a zayn. Solo ahora y bueno cuándo nos besamos, aunque ¡Él me tocó!
—Así Que...¿Eres mía?—Hago mi cara para atrás para mirarlo a los ojos, sus ojos amarillentos.
Me río nerviosamente. — ¿Yo? Yo no dije eso...ósea es un decir, tal vez escuchaste mal, porque he oído que hoy en día la gente está empezando a tener problemas auditivos, ya sabes por el calentamiento global, aparte que la economía...— Hablo lo más rápido posible.
—¿De donde sacas tanto cuento? Te advierto que me tomaré muy en cuenta lo que dijiste.
Siento que me vibra el cuerpo al escuchar su voz tan ronca y varonil, tan perfecta. Tal vez no fue tan malo no hacer la prueba...
Y dale con la prueba...
Miro sus labios, sus carnosos labios, que están tan rojitos tan besables. Me muerdo mi labio inferior y zayn dirige su vista a ellos.
Fuck.
Me intento soltar de él pero simplemente me aferra aún más.
—¿Por qué Te muerdes el labio?—Me pregunta con su sonrisa de lado, ¡WTF!
¿Cuándo se ha preguntado eso? ¡¿Que se supone que tengo que decirle?!
Oh zayn, me muerdo el labio porque tengo una inmensas ganas de que beses como nunca y sobre todo porque eres tan jodidamente guapo que me prendo entera cuándo me tocas.
Esperen ¿Yo acabo de decir?
— Y-yo no me estoy mordiendo el labio—Parpadeo varias veces, sé que empezaré a sudar, lo presiento.
—Yo creo que sí, de hecho está sangrando...—Mira mis labios y sonríe.
¡Ay tan solo bésame hijoheputa no ves que estoy ardiendo!
—Tal vez sea por qué ahora hay una plaga que hace que tengas picazones labiales en donde...
—Ya cállate.—me corta y luego me besa.
¿Por qué se siente tan bien cuándo él me besa? No sé debe de tener algún pacto con el diablo o qué sé yo. —Se me olvidaba decirte algo—se separa de mi—Mañana el servicio no estará así que tendrás que cocinar tú y hacer la cama tú.
Me suelto de él rápidamente, «Hacer la cama tú» ¿Cómo demonios se hace una cama? Nunca he hecho la cama, además de que aunque viviera en una cueva y toda mi vida, jamás haría una cama. Creo que tendré que buscarlo en YouTube.
—Se me olvidaba decirte algo.
—¿Qué?—Se cruza de Brazos y me mira serio, ya volvió el antiguo zayn.
—Mañana tengo que ir a dar unos exámenes para no reprobar, en la mañana a las 8:30, los doy y me vengo.
—Está bien, yo Te llevaré.
—No es necesario, yo puedo ir sola.
—Dije que yo Te llevaré.
—zayn...
—Basta.
Doy un suspiro frustrado y me resigno a ir con él, como quiera.Mejor para mí, pero conste que no es mi culpa si todas las putitas se quedan con la baba colgando.
—Tengo sueño zayn.
—Yo también.
—Mejor me acostaré.
—Yo también.
Río y niego con la cabeza, Aunque pueda ser bien detestable no deja de darme risa su actitud.
(...)
—Gigi despierta...—Alguien me remuevo de mi hermosa cama.
—Mhm...—Me quejo y enrollo más en la cama.
—Gigi despierta tienes que ir a la escuela—me destapan y siento el frío en mi piel.
—¡No mamá no quiero ir a la escuela!—chillo.
—Soy zayn, no tu madre Gigi. Tienes que ir a dar los exámenes, levántate llegarás tarde.
Estiro mis brazos sin aún abrir los ojos y siento algo duro, creo que es el torso de zayn. Agarro su polera y lo tiro hacía mi aún yo estando de lado.
—Tengo frío tápame—me cubro con su polera.
Escucho una risa ronca y después su polera se separa un tanto de mí. Pero lo vuelvo a jalar a mí.
—Mira Gigi sé que Te mueres por estarme tocando todo el día—Dice en un tono arrogante—Pero si no te levantas te levantaré.
Lo suelto y lo aparto de mí.
—zayn Te aconsejo que corras, me levantaré y no quiero que te asustes.
—Ya te he visto en la mañana mujer, Anda levántate.
—¿Y?
—Luces igual de hermosa al despertarte, ahora levántate. Te espero abajo.
Tragué el poco líquido que tenía en mi garganta y abrí mis ojos. ¿Él dijo lo que yo escuché que dijo? Cuándo me refriego los ojos y mi vista va poniéndose clara lo veo salir de la habitación ya vestido. Según lo que vi, se vistió bastante informal, como un chico de su edad.
Me levanto de la cama a regañadientes y la miro un instante. Creo que tengo que hacerla, gruño y luego me rasco la oreja. ¡No sé cómo se hace una jodida cama!
¡Ya sé! *Se le prende una lucecita en la cabeza* Comienzo a acomodar las sábanas de abajo lo más que puedo y el cubrecama de encima lo estiro lo más que puedo haciendo que se vea impecable.
Nunca juzgues a un libro por su portada.
Acomodo los cojines y se ve perfecta. No era tan difícil.
Camino hacía el baño y luego de vaciar vejiga, me lavo los dientes y la cara. Iré a desayunar primero.
Bajo las escaleras y encuentro a zayn sentado en la mesa con varias cosas que comer, me siento y saboreo las cosas que hay.
—Ya hizo la cama.—Le digo orgullosa.
— ¿Enserio? —Suena sorprendido. —No creí que supieras hacer una cama.
— ¡Pues si sé!—Digo ofendida, Bueno sé más o menos.
— No seas tan gruñona.
—Mira quién lo dice—Bufo.
— Apúrate que llegarás tarde.
— Tranquilo que no me demoro nada en comer.
— No sé por qué pero Te creo—ríe.
—zayn...¿Puedo hacerte un pregunta?
—Dime—Su compostura se derecha y me mira fijamente.
—¿Quién es Ella?
—¿Quién?
—La chica de tus fotos.
Su rostro se coloca serio y noto como aprieta la mandíbula. Sus ojos se oscurecen y sus manos sueltan el servicio que estaba entre sus manos para presionar sus puños.
¡Mierda! Soy una estúpida, tú y tu bocota ¿Por qué tenías que hablar de ella? ¡Ah! Idiota, idiota.
—Nadie—Dice cortante y frunce el ceño—Ella no es nadie.
Me estremezco ante la mirada de zayn, se le ve muy molesto.
Bien ahora cuidado con lo que dices, no la cagues, no la cagues.
—¿Ella te dejó?—Se levanta de la silla bruscamente haciéndome brincar del susto y me mira fulminante.
—Te espero afuera—No me mira y se larga con pasos firmes.
Ya la cagaste, ya la cagaste, ya la cagaste, mierda, mierda.
Ya la cagué.