* Sigue narrando George*
-PERO QUE MIERDA HACES???-grité a Terrens con los colmillos blancos y puntiagudos afuera, estaba muy furioso
-Te dije que me las iba a pagar, ya está-dijo con una leve sonrisa maléfica y también con los colmillos afuera
-*miré a Jhade y volví la mirada a Terrens con los ojos del color como normalmente se me ponían cuando quería matar a alguien... Rojo- Vete de aquí o si no quieres que te quite la vida ahora mismo y sabes que soy capaz de hacerlo- dije haciendo un gran esfuerzo en contenerme para no matarla, ella solo miro a Jhade y de nuevo volvió esa sonrisa maléfica a su cara
-esto no ha acabado George Brocke, esto no ha acabado-dijo por último y se fue, rápidamente me acerqué a Jhade y vi que le salía sangre de la boca, nariz y de la ceja derecha, apoyé su cabeza en mi brazo
-George...-susurró con una lagrima resbalándose lentamente por su mejilla y la sequé con mi pulgar
-todo estará bien linda, tranquila-dije y le besé la frente, ella cerró los ojos quedando inconsciente seguido de eso cargué su cuerpo casi desnudo e inevitable de desear y la recosté en la cama, salí literalmente volando de la habitación dirigiéndome donde estaban mis cosas en otra habitación, busqué la crema que siempre curaba mis heridas y regresé donde se encontraba Jhade, se la unté en las partes que tenía sangre. Se me hizo difícil soportar ver la sangre y no probarla, pero lo logré, las heridas se curaron al minuto y despertaría como en 5 minutos, así que uní nuestros labios en un corto beso, labios que ya había probado en tantas noche y decidí bajar a llamar a los demás... y mentir, si, de no hacerlo pensaran que yo fui el que hizo que se desmallara o algo por el estilo.