— ¿Stiles?—Talia gritó entre todo el bullicio, mientras todos gritaban "¡Estatales!—. ¿Stiles donde estas? ¡Stiles!
Su voz se perdió en los gritos y el bullicio de gente y jugadores que no paraban de festejar por la victoria de la escuela, pronto fue arrastrada por la masa de personas, chocando con fuerza sin querer contra una mujer.
—Disculpe—Talia pidió perdón de inmediato—. ¿Esta...
Su pregunta se había quedado en el aire cuando estuvo cara a cara con la mujer que había pasado a empujar sin querer; la tía de Allison, Kate Argent.
— Bueno, por lo menos no eres descortés—dijo Kate repasándola de arriba a abajo—. Viviendo sola todos estos años.
— Es difícil, ser cortés sin una familia que te enseñe por la culpa de un psicópata homicida—respondió Talia.
— Y ahora el psicópata homicida es tu primo...—dijo Kate haciendo que Talia gruñera—. Lo que me hace pensar...¿Como saliste sin miedo y sin ninguna herida?
— Si piensa que estoy involucrada en encerrar a mis mejores amigos para matarlos esta equivocada, solo mataría a quien quemo a toda mi familia.
—Entonces admites que matarías.
— Si, por que ya no le tengo miedo a quien lo hizo y como dice el dicho: ojo por ojo, diente por diente y ahora si me disculpa tengo que ir a buscar a mis amigos, dele mis saludos a Allison.
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Cuando Talia se encontró a Scott pudo ver que en sus ojos estaban llenos de irritación, sus manos hechas puños y parecía a punto de matar a alguien.
—Déjame adivinar ¿Jackson?—dijo Talia mientras iba hacia él y le ponía un brazo en los hombros.
—Déjame adivinar...—Scott lo pensó por un par de segundos—. Tú no odias a nadie mas que no sea Jackson así que no se me ocurren ideas.
— Kate—respondió Talia—. La muy descarada, por cierto has visto a Stiles?
— Nope
— ¿Donde se habrá metido ese niño?—dijo Talia mientras ambos iban a los vestidores.
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—De verdad los amo chicos, y los encuentro asombrosos jugando lacrosse, pero siempre pensé que el basquetbol era mucho mas genial.
—Que vergüenza, que vergüenza para tu familia—Danny dijo, Talia siempre se escabullía donde sea que Scott o Stiles estuvieran por lo que, que estuviera en los vestuarios con todos los chicos cambiándose o con solo una toalla no era un escándalo. Talia le saco infantilmente la lengua a Danny, el chico era muy agradable.
— A proposito McCall, disculpa aceptada.
—No me disculpe-dijo Scott confundido
—Cada vez que tuviste la bola, me pasaste .
—Cada vez que te la pase, anotaste.
—Disculpa aceptada—dijo Danny poniéndose la mochila y con la mano despidiéndose de Talia
En cuanto Danny salió de los vestidores, dejándolos solos, las luces se apagaron. Talia que estaba sentada como un indio en una de las bancas se paró y se puso a un lado de Scott protectoramente.
—¿ Danny?— pregunto Scott, Talia no podía negar que estaba asustada pero desde pequeña siempre ponía a sus amigos antes que ella, pero le tomo la mano a Scott, Scott encendió los interruptores pero nada pasó.
Una pelota de lacrosse se movió a unos metros de ellos. Scott fue el primero en avanzar seguido por ella. Scott se agachó para tomarla, avanzando al pie de la zona de duchas donde Derek Hale estaba parado.
—¡Derek! —Talia dijo con un suspiro, corriendo a abrazarlo. Derek respiro profundamente, aceptando el abrazo, poniendo sus brazos alrededor del pequeño cuerpo de su prima comparado al de él, la única demostración de afecto o contacto físico que Derek aceptaba era el de Talia, pero cuando dio ese respiro, Talia supo que algo andaba mal, era esa clase de gran respiro que dabas antes de decir algo grande, había algo mas oscuro en él que hizo que Talia lo viera confundida y retrocediera, tomando de nuevo la mano de Scott y sintiéndose como una niña pequeña.
—¿Dónde estabas? —Preguntó Scott, su tono rayando lo molesto—. ¿Tienes idea de lo que está pasando?
Derek no los miró a ellos, sino detrás de ellos. Talia volteó a ver en qué tenía la vista Derek, solo para encontrarse con un hombre de ojos azules, que para Talia era sumamente familiar, sostenía una raqueta de lacrosse en sus manos.
—No entiendo el lacrosse —exclamó.
—Fuiste tú —murmuró Scott incrédulo, Talia veía al trió de hombres sin entender de lo que estaban hablando.
—Cuando estaba en la escuela, jugábamos al baloncesto —continuó—. Un verdadero deporte. Leí que el lacrosse proviene de las tribus nativas americanas y que jugaban para resolver conflictos. ¿No es así? —Hizo una pausa, como si lo pensara—. Bueno, tengo un conflicto. Y necesito tu ayuda, Scott.
— Tals ¿por que no vas a buscar a Stiles?—dijo Scott un poco nervioso, Derek le había dicho que Talia no podía saber que Peter estaba vivo por que verlo en dolor la destrozaría pero ahora no estaba en una silla de ruedas, estaba vivo y sin quemaduras.
—¿Quien es él? ¿Como lo conoces? No me voy a ir sin ti—le respondió.
—Talia... —comenzó Derek.
—¿Quien es él, Derek?—pregunto Talia— No me mientas, la familia no se miente.
—¿Ella es, Derek?—el hombre dio un paso adelante, acercándose a Talia, pero Scott puso un brazo alrededor de ella—. ¿Ella es Talia?
—¡No te acerques a ella! No te ayudaré a matar gente —exclamó Scott,
—No quiero matarlos a todos —dijo él, Scott frunció el ceño, confundido—. Solo a los responsables —explicó—. Y eso no tiene que incluir a... —paró, como si no recordara el nombre. Volteó a ver a Derek para que terminara por él.
—Allison —completó Derek.
—¿Estás de su lado? —Preguntó Scott a Derek, como si no pudiera creerlo—. ¿Olvidas que mató a tu hermana?
—Fue un error.
—¿Qué? —exclamó Scott.
—¡BASTA!—la atención de los tres hombres se puso en Talia—. ¿Él mato a Laura? ¿Él mato a Laura y dices que fue un accidente? ¿Y que responsables? ¡Solo díganme que diablos esta pasando!
— Los responsables Talia, mi dulce Talia, los responsables de que no seamos una familia, de que no estuve aquí para ti todos estos años...—dijo mientras se acercaba mas a ella.
— Para—le dijo Scott
— ...de que has tenido que sufrir todas tus lunas llenas sola, sin alguien que te guiara...sin tu padre.
Talia rió.
— ¿Tú? Tú no eres mi padre, mi padre esta muerto, murió tratando de salvarme de el incendió ¿cierto Derek?— cuando Derek no respondió, Talia insistió—. ¿Derek?
—He esperado este momento, Talia, sanandome célula por célula, imaginando el momento de ver tu rostro...
— Usted no es mi padre, no,..no sabes nada de mi...
— Es verdad—admitió—. No se mucho de ti, pero recuerdo tu peluche de lobo, era tu favorito, trate de enseñarte a jugar basquetbol pero no seguimos después de que tu tía lo prohibio porque eras muy pequeña, tu prima Cora y tu nunca se llevaron bien, te encantaban los panqueques con naranja y cuando no podías dormir Talia te cantaba...
— En Diciembre—Talia termino por él, confundida—. No! Tú no...tú no puedes...
— Soy Peter, Talia, soy tu padre. De verdad no quise que nuestro encuentro fuera en estas condiciones . No somos los malos del cuento, en serio. Creo que están equivocados respecto a nosotros —dijo Peter tranquilamente—. Solo queremos que alcances tu máximo potencial —señaló a Scott—. Y poder ser por fin una familia y vengarnos de quien te alejo de mi.
—¿Matando a mis amigos? —preguntó Scott.
—A veces, la gente más cercana a ti, es la que te detiene.
—Si evitan que me convierta en un psicópata como tú... puedo aceptarlo.
—Tal vez... —empezó a decir Peter acercándose a Scott. Talia estaba confundida ¿Que debía hacer? él era su padre...el hombre por el que había llorado y aveces buscaba consejo, estaba vivo pero era un asesino?—. Podrías ver las cosas desde mi perspectiva —súbitamente Peter encajó sus garras en el cuello de Scott.
—¡Scott! —gritó Talia acercándose a él — Suéltalo, por favor, por favor, no le hagas daño ¡ÉL ES MI FAMILIA!
—Se que lo entenderás y cuando todo esto haya acabado, seremos una familia.
Peter soltó a Scott y se acerco a Talia, la chica estaba completamente paralizada, le puso un cabello detrás de la oreja y le sonrió, Talia sentía su garganta seca y apretada.
—Lo prometo.
—¡Scott! —exclamó Talia, arrodillándose al lado del chico cuando éste cayó al suelo, agonizando de dolor con sangre emanando de su cuello donde Peter había clavado sus garras. Peter dio la media vuelta y se fue mientras Derek simplemente se quedó parado.
Scott se retorcía en el piso, sus ojos pasando de totalmente blancos a un amarillo lobuno. En su cabeza veía todo lo que Peter había pasado en el incendio, todo lo que había visto y cómo había asesinado a los participantes del incendio pero sobre todo vio a Peter desesperado, buscando a una pequeña niña
—Talia? Talia?! donde estas?
Vio a una niña rubia abrazada a un peluche de lobo, llorando a lagrima viva y Scott tuvo la necesidad de proteger a la pequeña niña que no paraba de llorar mientras el fuego consumía todo a su alrededor.
— ¡Tia Talia! ¡Papá ! ¡Papá !
—Sh...shh...tranquilo, yo...yo te tengo, estarás bien— Talia le hacia cariño y masajeaba la espalda de Scott, tratando de calmarlo, luego vio a su primo—. ¡Vete de aquí!
—Tals... —intentó decir Derek.
—¡Vete! ¡Todo este tiempo sabias que mi padre estaba vivo! ¡No te quiero volver a ver! Pensé que eras mi familia, pero ahora me doy cuenta que solo Scott y Stiles son mi familia, no puedo confiar en mi propia sangre...
—Peter es tu padre Talia, vamos a hacer pagar a quienes nos separaron, él es tu padre y quiere estar contigo...
—Si algo le pasa a Scott o a Stiles o a cualquier otra persona que yo quiera, Argent no te matara, ni yo lo haré, pero me encargare de que jamas pises este pueblo otra vez.