¿Recuerdas del chico que te hablé?
¿el cual me invitó a cine?
Bueno, fue el mismo que rompió mi corazón.
Todas la citas que tuvimos, todo el tiempo que pasamos...
No fue nada más que diversión para él.
Porque yo no le importaba realmente.
No sé donde está mi amor verdadero y no te quiero llamar una mentirosa madre, pero creo que lo has hecho,
Me has mentido.
Ese amor del cual me hablaste en tus cartas para mi es algo considerado como inexistente.
¿En dónde encontraré a mi media naranja?
No lo sé.
¿Será él el indicado?
Me temo que eso tampoco.
Te aseguro que después de estar reflexionando un rato, llegué a la conclusión de que solo hay un amor que perdura.
El amor de una hija hacia sus padres.
El amor de una hija hacia su madre.
Un amor que ninguna barrera puede romper, ni siquiera la de la vida y la muerte.
Te ama por siempre,
La hija que nunca te conoció.