–yo si se porque lo esta– me dice, le miro
–¿por qué?
–una niñata saca de quicio a cualquiera, por eso esta molesto– se tumba en el suelo– hasta yo me enfadaría si estuviera con una niñata como tu
–cállate……– le digo en un susurro
–¿sino que?– me dice mientras se pone de pie
–te voy a pegar, te lo aseguro
–no te creo…– dice, me esta empezando a enfadar
–cállate gay, que no me conoces enfadada………
–pues ven…- se pone flexionando sus rodillas y con sus manos moviéndolas, para que me acerque
–no me tientes……
–ohhh, la niñata tiene mie…….– no le deje terminar porque me abalance a el y empecé a pegarle en el pecho
–eres de lo peor……
–me duele, me duele– empieza a decir Arthur y me detengo– me duele– vuelve a repetir
–¿qué te pasa?– le digo asustada, cuando quiero separarme, no me deja , no se como lo hace, pero termino debajo de el
–te lo crees todo– dice sonriente– yo no te voy a pegar, porque eres una mujer, aunque a veces lo dudo………por lo salvaje que llegas a ser……– intento salir de la encerrona pero no puedo, estoy atrapada
–¿qué me vas hacer?–le digo, el sonríe mas y empieza hacerme cosquillas
–Arthur, para, para–empiezo a reírme y a la vez a quedarme sin aire, porque Arthur no para de hacerme cosquillas– para……– cuando ya no puedo mas, saco la fuerza donde no tenia y logro empujarle, lo único que siento es que ya no esta encima mío y que el aire vuelve a mis pulmones– idiota, hubiera preferido que me pegaras–le digo aun tumbada en el suelo, no escucho a ese ser, me siento – ¡MADRE MÍA! –logro decir mientras me acerco
–creo que me he roto la cabeza–dice de lo mas tranquilo, pero como puede estar tan tranquilo, tiene toda la cara llena de sangre, me pongo de pie y voy corriendo a por una toalla
–toma, ponte en la cabeza y has presión–le digo nerviosa y siento una mirada penetrante– ¿¡qué!?– digo
–no se como decirte, en nada seré medico – me dice
–cállate–empiezo a buscar las llaves de mi coche– ¡donde esta mis llaves!– digo desesperada
–¿estas?– dice el ensangrentado con las llaves en su mano
–¿aun con tu cara ensangrentada eres arrogante?– me acerco y le quito las llaves- tu sigue haciendo presión en la herida y vamos– digo nerviosa, mientras estoy saliendo de casa, cuando llego al coche me doy cuenta que no me esta siguiendo y lo veo en la entrada– ¡sube al coche!– grito
–¡que no es nada!– me dice, me acerco con rapidez y le cojo de la mano para llevarle al coche– ¡auch!– se quejo cuando toque su brazo
– ¿qué no es nada?, creo que tienes roto el brazo o algo por el estilo– digo levantando mis manos– ¡sube ahora!– le digo, sin mas sube, al único hospital que se me viene a la mente es donde esta haciendo las practicas Diego.
Entramos a urgencias, busque mi móvil y empecé a llamar a Diego para comentarle lo que le ha pasado al ser pero nada que ver, me acerque corriendo al mostrador y le dije que le pasaba a Arthur, nos hicieron sentar.
–¿quieres tranquilizarte?- me dice Arthur aun con la toalla en su cabeza haciendo presión
–no hay eficacia, porque no te meten para curarte la herida que te he hecho y lo mas seguro tienen que escayolarte el brazo, ¡te he roto el brazo!– digo–me siento culpable…………
–niñata que no fue queriendo– me mira
–¿qué?
–no fue queriendo, ¿verdad?– dice
–claro, te odio, pero para hacerte daño de esa forma…no– me pongo de pie, tengo una idea– ¡voy a buscar a Diego!
–¿para que?
–hay que tener algo de privilegio, ¿no?- digo– ahora vuelvo– mientras me adentro a la entrada principal del hospital, me acerco al mostrador para preguntar por Diego, me dice que se encuentra en la segunda planta en la habitación de los internos, así que me dirijo a la planta, mientras subo en el ascensor, mi corazón empieza a saltar de euforia porque voy a ver a Diego. “espero que el también se alegre cuando me vea” pensé.
Cuando abro la puerta de la habitación, momento que el corazón empieza a detenerse y mis lagrimas están amenazando en salir, lo único que encontraba en mi mente era…… “vete, sal corriendo, ¡ahora!”, es lo que hice, salí corriendo, pedí el ascensor pero se me hacia tan lento a que llegara.
–¡muévete!– levante la voz, no se movía el dichoso ascensor– no llores, no llores– me repetía– ¡lento!– grito, decido bajar por las escaleras, cuando doy uno pasos…
–¿Vale?– escucho a Diego haciendo que se active mis lagrimas, sin mas salgo corriendo por las escaleras, no quiero verlo en estos momentos
–como, como pudo hacerlo……– fui corriendo hacia urgencias mientras me limpiaba las lagrimas, intercepto a Arthur
–¿estas bien niñata?– me pregunta
–¿podrás regresar a casa solo?– le digo, mientras lucho para que las lagrimas no salgan
–si, ¿ pero qué te pasa?– me pregunta
–el idiota que tienes por mejor amigo–las lagrimas no las pude controlar– espero no verlo – me marcho sin decir mas, subo en el coche y acelero lo mas que pude hasta llegar al mirador, freno de golpe y salgo, empiezo a gritar para desahogarme, lo único que pasa por mi mente en estos momentos es la imagen de Diego y aquella estúpida chica, ¡ah si! Y sus labios unidos– ¡¡ah!!– volví a gritar y llorar, tras varios minutos ahí y coger aire y soltar durante mucho tiempo y pensar en otra cosa que no sea regresar al hospital y buscar a esa cualquiera que beso a mi NOVIO, regrese a casa, cuando entre a la residencial.
–Philip– dije
–Dígame –me dijo con amabilidad
– si viene Diego Vehi por aquí, no le dejes pasar, ¿entendido?, te prometo que si lo veo aparecer cerca del residencial o en casa, hare que te despidan– dije –lo prometo– acelere, haciendo que no me respondiera, cuando estoy llegando a la entrada de casa, diviso un coche tan conocido…………es de Diego, no quiero hablar con el, no quiero ni verlo, doy al botón para que se abran las puertas del garaje, al ver las puertas abiertas……acelero y entro a mi casa.
–¡Vale!– escucho a Diego, pero no lo hago caso y entro a mi casa, no quiero verlo, de verdad, porque si lo hago no se como voy a reaccionar. Estoy realmente enfadada, no se que pensar, porque los labios de esa estúpida estaban encima de mi novio, MI NOVIO.
Al cerrar la puerta, me apoyo en ella hasta terminar en el suelo sentada y mis lagrimas empiezan a salir de nuevo.
–¿de verdad?, si parezco un pozo sin fondo– digo
–cariño, ¿qué te pasa?– escuche a mi madre
–estoy bien……– logro decir
–tontorrona, soy tu madre y te conozco
–hoy vi a Diego y una chica besándose – dije
–pero sabemos que es para que tengas celos
–no es eso…….–me limpie mis lagrimas– es que no sabes una cosa…
–¿qué es lo que no se?– me pregunta
–no quiero que lo sepa papá, de momento no– le miro– promete que no se lo vas a decir hasta que este preparada y se lo diga
–esta bien …
–Diego y yo somos novios hace pocas semanas, por eso estoy así, no se que pensar mamá, ahora me encuentro en la duda………porque cuando regreso a Canadá se volvió un mujeriego, pero cuando me volvió me dijo que estaba arrepentido, muy arrepentido, pero al verlo con la chica volvió aparecer ese temor y ¿si no ha cambiado? ¿y si sigue siendo el mismo don Juan que era en Canadá? ¿y si todo este tiempo era solo una actuación? – dije, sentía a mi madre acariciar mi pelo
– es normal que pienses que no haya cambiado, pero si esta arrepentido y ha luchado por ti, ¿por qué lo ha hecho no?– asiento, mientras recuerdo todo lo que ha hecho– así que habla con el, porque lo mas seguro que aquella chica haya besado a Diego, recuerda lo que me hizo Samantha para separarme de tu padre, a veces las chicas no conocemos de medida para conquistar a un hombre, así que cariño– me da un beso en la frente– ve hablar con Diego, te quiere, esta a fuera hace mas de una hora– me quede sorprendida– no pongas esa cara, fui a ver que quería, me dijo que no se iría hasta hablar contigo
–¿y si se encuentra con papá?– pregunte
–le dijo que le daba igual, quiere hablar contigo– me dice con una gran sonrisa– ese chico te quiere, mi hermosa Valentina– me ayuda a ponerme de pie, limpia mis lagrimas– anda ve– me dice, pero cuando estoy pensando en ir, me acuerdo de Philip
–esta bien– digo– pero antes tengo que hacer una cosa– abrazo a mi madre– ahora vuelvo– salgo de casa y me monto en la moto, aun esta Diego fuera, pero tengo que hacer una cosa. Acelero para pasar a lado de Diego, se que me esta mirando pero tengo que hacer una cosa, me siento muy mal, al avanzar hasta donde quería ir detuve la moto y me baje.
–¡Valentina!– escucho a Diego, me doy la vuelta
–¡ahora no!– le grito y sigo caminando– ¡Philip!, ¿dónde esta?– grito, sale de su puesto donde esta para abrir las puertas
–dígame señorita– al verlo se me llenan los ojos de lagrimas, me acerco y lo abrazo
–lo siento mucho– digo– no quería hablarte así, eres una de las personas mas buenas que conozco y de verdad, no quería, lo siento mucho– digo– ¿me perdonas?– le miro– tendría que haberlo pagado con la persona que me ha hecho enfadar y no contigo, ¿me perdonas Philip?, que si no lo haces me sentiré mal, pero lo aceptare – digo- me lo merezco, soy una tonta
– no diga eso Señorita Valentina, a veces acurre y claro que le perdona
–¿en serio?– digo aun llorando
–claro
–muchas gracias – le abrazo– de verdad muchas gracias
–ahora vaya con su novio que le esta esperando
– de acuerdo – dejo de abrazarlo, le observo hasta que vuelve a su puesto de trabajo, cierro los ojos y tomo aire para así tranquilizarme, al sentirme mejor me doy la vuelta y ahí esta, tan hermo…………¿espera? ¿qué le ha pasado?
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LO SE, LO SE…………… He tardado mas tiempo de lo normal, antes fue por culpa de mi musa rebelde que se marcho a darse una vuelta, pero esta vez fue por un motivo familiar………pero gracias a Dios todo ha salido bien :).
Espero que os haya gustado este capitulo, como siempre lo deseo que os encante!!!!!!