Era un noche hermosa, las luces de París alumbraban y embellecían la ya de por sí hermosa ciudad, era la hora habitual en la que ella terminaba de patrullar la ciudad, por lo que se dirigió a el punto de encuentro destinado para esperar a su felino compañero.
Se hacia un poco tarde y el carismático chico no llegaba, comenzando a creer que no llegaría, Ladybug estuvo dispuesta a irse a casa, entonces, unas manos la abrazaron por detrás con gentileza.
-Hola mi lady-Saludo contento el gato, apartándose de ella un poco.
La chica volteo y le dirigió una sonrisa amigable al gato.
Chat Noir se sentó en el suelo, fijando su mirada en algún punto del suelo y la oji-Celeste se dispuso a observar con atención las luces de parís, notando casi de inmediato lo callado que estaba su compañero, decidio averiguar que pasaba, la azabache chica se sentó al lado del gato y comenzó a acariciar su rubia cabellera.
-¿Que tienes gatito?-Pregunto a su felino amigo procurando ser cuidadosa, recibiendo un gran suspiro como respuesta.
-Nada mi lady, solo estoy algo pensativo-La chica comenzó a acercarse al gato y le dio un pequeño beso en la mejilla y le dedicó una pequeña sonrisa.
El gato respondió comenzando a ronronear; Un lindo y suave ronroneo... Realmente encantador.
El encantador ruidito que emanaba de Chat comenzó a retumbar en sus oídos y su cabeza no dejaba de repetirlo una y otra vez, ese sonido por alguna razón le provocaba una cálida sensación en su pecho.
-Se hace tarde, me tengo que ir-Interrumpio el gato sonriendo-Buenas noches, mi lady.
-Claro-Respondio algo alterada, saliendo bruscamente de su cabilaciones mentales-yo también tengo que irme...Nos vemos luego gatito.
Los 2 chicos se habían ido después de despedirse brevemente, cada uno por su lado y Ladybug mucho mas rápido ya que sabia que aquel gato travieso iría a visitar a Marinette, a ella.
Como había estado haciendo últimamente.
-Donde esta ese gato tonto?-pregunto subiendo las escaleras de su habitación hasta la terraza extrañada al no ver al felino por ahí.
-Y yo que creía que me querías y sales que soy Tonto-Respondió una oscura silueta apoyada en el techo.
Marinette río suavemente.
-Hola Gatito tonto-Saludo tiernamente al joven.
El adolescente vestido de negro con un salto se adentro a la pequeña terraza y se acerco a saludar a la torpe chica con un beso en la mejilla.
-Te ves algo rara Marinette, ¿Te pasa algo?-Pregunto lleno de curiosidad y algo de preocupacion el gato.
-Nada en especial, solo...mi cabeza tiene muchas cosas revueltas. Exámenes, tareas, la panaderia... cosas asi-La azabache le respondió distraidamente.
El chico se sentó a su lado y la abrazo brevemente, casi dando a entender que la apoyaba y que seguro todo se tranquilizaria pronto, se separo de ella lo suficiente, pero siguió sentado a su lado y la chica inconscientemente reposo su cabeza en el hombro de Chat soltando un exagerado suspiro.
-Gato, Puedo hacer algo?-La chica pregunto sin malas inteciones.
El rubio asintió con su cabeza y la oji-celeste reposo su cabeza en las piernas de Chat y cerrando sus ojos, totalmente agotada comenzó a dormitar. La chica dejo de pensar y se relajo, se sentía tan protegida junto a el.
El siguiente día desperto acostada en su cama, arropada y había una nota al lado de su cama, que era de chat.
"Lo siento por no quedarme mas tiempo, pero las transformaciones no duran tanto...No vemos en otro momento Princesa"
Era consciente que algo estaba creciendo en su interior. La calidez que la invadía en presencia de Chat Noir era en muchos aspectos alarmantes... acaso... ¿Chat le gustaba?