Troye abrió los ojos de golpe encontrándose a Nara mostrándole una foto, su foto. La foto de Tyler y él. Troye se levantó de golpe de la cama enfadado.
-¿Estabas rebuscando en mis cosas?-preguntó mientras reducia la distancia con unos andares que no mostraban serenidad.
Nara se quedó callada, casi petrificada por la reacción del chico. Si hubiesen estado en otra situación no se hubiese dejado agarrar por Troye, pero antes de que pudiese pensar que hacer se encontró con la mano de él apretando su muñeca fuertemente, buscando hacerle daño, haciendo que gimiera de dolor y tirase la foto.
-Dime ¿quien es?- volvió a insistir sin querer darse por vencida.
Sus facciones se relajaron cuando agarró la foto del suelo y la puso en su bolsillo. Sus ojos estaban clavados en ella, parecía que se debatía internamente sobre que hacer, sobre que decir.
-Es mi hermanastro. Falleció el año pasado. Estábamos muy unidos aunque no fuésemos de una misma madre. Le echo mucho de menos - un par de lagrimas cayeron por sus mejillas en silencio. Nara sitio lastima por él, se acerco temerosa con la intención de darle un abrazo recibiendo un empujón por parte de Troye, el cual casi la hace perder el equilibrio.
Más lagrimas comenzaron a caer por sus mejillas, colocó un brazo cubriendo su cara y chillo, tal vez el recuerdo del dolor todavía lo atormentaba. Ella no quiso seguir indagando en el tema, se dio por vencida por una vez en su vida y aceptó que de algunas cosas mejor no seguir preguntando.
-Lo siento tanto por tu hermano. Yo no pensé...- dijo asustada por haber causado esto.
-¿Crees que quiero tus disculpas?- dijo enfadado volviendo a acercarse peligrosamente a ella, haciendo que esta retrocediera intimidada.
-¡No me trates así! Lo admito, me he equivocado y no sabes cuanto lo siento. Pero no tienes ninguna derecho a tratarme como lo haces- chilló alterada, moviendo los brazos para dar mas fuerza a su palabras.
Troye se quedó sin palabras, nunca nadie le había hablado así, excepto ella. Así que dijo lo impensable.
-Perdón por gritarte, no debí haberlo hecho. Pero a veces esto me supera.
-Lo sé.
Finalmente Troye la tomó entre sus brazos dando por finalizada la pelea. Ella aceptó el tratado de paz y escondió su rostro en su cuello. Troye intento besarla aunque ella no se lo permitió.
Aun le dolían las marcas de las muñecas.
Troye no volvió a insistir, se conformó con dejar un beso en su cuello.
-No soporto estar aquí, pienso que cada segundo que paso aquí dentro me vuelvo aun más demente que el segundo anterior.- afirmo el joven con la mirada perdida en otra esquina de la habitación, la cual estaba comenzando a ver números con caras los cuales le saludaban.
-Huyamos juntos-no pudo evitar decir Nara dándose cuenta segundos después de la estupidez que había dicho. Paciente esperó el rotundo "no" o una risa al ver lo estúpida que era. Pero nunca llegaron.
-Juntos- repitió él susurrándole al oído.
Como si fuera uno de los grandes secretos del univeso.