Yo estoy observando a todos, tu estas... con tus tonterías, contando chistes con Sans.
Eres muy rara, demasiado rara. ¿Cómo alguien puede estar con ese esqueleto?.
Simplemente eres rara.
Ajuste un poco más mi bufanda, dime, si te matará ¿podría salir ya de aqui?.
Algún día lo intentaré.
Claro que si.
Deje mi escondite y me largue de ese lugar tan despreciable.
Llegue a mi "casa" Si se le puede decir así a esta mierda.
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Estaba junto a Sans caminando y contando chistes. Sentía que me observaban, y observe a todos lados buscando la mirada.
-¿Qué pasa? -Me pregunta Sans.
-Siento que me observan -Susurre preocupada.
-Tranquila Ángel no te preocupes tanto -Dijo alargando la A.
-Sí tu lo dices -Le digo desconfiada.
-Bueno, ¡mira la hora!, ya te tengo que llevar con Toriel -Dijo mi amigo.
-¿Cómo lo sabes? No tienes reloj -Le digo.
-Bueno,-Dijo alargando la E- Simplemente vámonos.
-Bien -Dije mientras hacia un puchero, el esqueleto me sonrió y yo le regrese la sonrisa.
Después de aquello nos fuimos a mi hogar. En todo el viaje hablamos y... eso.
Cuando llegamos, me despedí de Sans y entre a mi hogar.
-Ya estoy aquí Mami -Le dije a mi mamá.
-Me alegro pequeña ven te preparé un postre -Dijo mientras me sonreía.
-Vale -Le dije y la seguí a la cocina.
Comí del rico postre de mi mamá y me fui a la cama, yo le obedecía siempre como lo hacía con mi... ma...ma.
Ella me quería mucho, ella me dejo ir a la montaña, las lágrimas empezaron a bajar, la extraño tanto.
Ya olvide su voz pero no su rostro.
Me gire y gire en la cama para poder dormir tranquila y sin preocupaciones.
Y al final pude dormir en paz.
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Chara.
Estoy en el lugar de siempre, apoyado a un árbol pensando en cómo asesinar a todos.
Lo normal, ya saben.
Hasta que escuche tu molesta voz.
-¡Hola! -Dijiste con esa sonrisa que tanto odio, no eres mi "conocida", eres sólo una molestia.
-¿Qué quieres? -Te pregunté.
-Buu, sólo quería hablar contigo, no debes de ser tan frío -Dijiste de forma infantil.
-Lo que digas -Dije frío.
-Bueno, me llamó ___!-Dijiste, no deberías decirle tu nombre a personas desconocidas.
-¿Y a mi que me importa?-Dije.
-Deja de ser frío~ Sólo quiero hablar-Dijiste.
-¿Por qué?-Dije.
-Por qué eres el único humano que ahí aquí, aparte de mi claro-Dijiste.
Antes había más pero... ya están muertos, que más da pensé.
-Por lo menos... ¿me puedes decir tu nombre?-Preguntó.
-Chara-Susurre.
-Lindo nombre-Dijiste.
-Lo que digas-Dije.
-Me gustan tus ojos-Dijiste tratando de sacar tema de conversación.
Eres molesta, pero creo que eres algo lin...
¡Va! No importa eso.
-¿Gracias?... Supongo -Dije algo dudoso nunca me a gustado decir esa maldita palabra.
-Pues, de na... -No pudiste terminar por que habías estornudado.
¡Baya idiota!, sale al frío y sin algo con que estar caliente.
Suspire, ¿debería hacerlo o no?
No pierdo nada intentándolo o ¿si?.
Bufe.
Me quite la bufanda roja y te la puse en el cuello, tu cara se volvió roja.
-Gracias Chara -Dijiste roja.
-Si claro -Dije y me fui de ahí.
¿Me la regresara?
Mejor... que se la quedé, no soportará este frío sin la bufanda.
⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐⭐
Ya tengo el final preparado jaja.
Y se que me queran matar~.
Nos
Leemos luego y gracias por sus comentarios tan positivos ♡
-Inutil-Inutil-♬♪♪♬