(La imagen no tiene nada que ver, pero no pude evitar ponerla, es que es perfecta)
Epílogo.
Seis años después, Camila y Lauren estaban de viaje de luna de miel por Hawai. Eran pasadas las nueve de la mañana cuando Lauren estaba tendida en la arena, solo con un ropa interior y los ojos cerrados, disfrutando de la calidez del sol. Tenía el mar frente suyo. Lo que más le gustaba era poder oír el sonido del mar romper contra las olas. Sentía una enorme felicidad en su interior, y eso sólo ocurría en las mañanas al despertar y encontrar a Camila a su lado.
Camila apareció en la puerta de la cabaña. Lauren abrió los ojos y se inclinó para verla y admirar la hermosa imagen de su ahora, esposa. Se veía adorable con las mejillas sonrojadas, y el pelo alborotado cayendo por encima de sus hombros. Le encantaba la imagen que tenía de ella después de haberle hecho el amor.
- Lolo.- dijo ella, con una voz suave que a Lauren le pareció de lo más seductor.- levántate de ahí, alguien te puede ver.
- No lo creo. Es muy temprano aún.- estiró su mano hacia ella.- ven aquí y hazme compañía, amor.
Ella obedeció y caminó hacia Lauren. Se sentó a su lado, mientras Lauren pasaba un brazo por sus hombros y la acercaba más a ella. La besó y ella sonrió.
- Me encantas.- susurró Lauren.- te amo.
- Aww.- dijo, rozando su nariz con la suya.- y yo a ti.
Lauren le tomó la mano y la alzó. Besó el anillo de oro puro que adornaba su dedo anular.
- Ansiaba tanto que llegara el día de la boda.- dijo, con un brillo especial en los ojos.
- Yo también.- sonrió.- ¿Sabes? papá llamó ayer.- dijo, mientras apoyaba su cabeza en el hombro de Lauren y le acaricio el pelo.
- ¿Y que dijo?
- Dijo que la mudanza ya estaba casi lista. Tendremos nuestra casa la próxima semana.
- Me alegra oír eso, nena.- sonrió.- ¿Te acuerdas cuando Alejandro y Clara salían y nosotras aprovechábamos ese tiempo para estar juntas?
- Ni me lo recuerdes, el susto que pasábamos después…
- Pero valía la pena correr el riesgo, todo por estar contigo.- susurró, besando el lóbulo de su oreja. Un estremecimiento recorrió a Camila.- lo único que espero es poder tenerte junto a mí, juntas, por siempre.
- Bien, porque yo tampoco planeo alejarme de ti por un laaaargo tiempo.- se río.
- En ese caso, ven acá y bésame.- ordenó la ojiverde roncamente.
Camila se inclinó y mientras la besaba, Lauren supo al fin que había encontrado la paz.
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Hola!
Me alegro de decir que la historia esta finalmente terminada...Espero que le gustara la historia tanto como a mi.
Estoy pensando en adaptar otra historia y bueno, les dejaré el prólogo otro día para que me digan si les gusta la historia.
Muchas gracias a las personas que leyeron la historia, que comentaban y votaban.
Nos vemos!😊❤❤