NARRA JUSTIN.
Salgo al frío de la ciudad pero para mi es como si nada.
¿Que hago ahora?
Todo a acabado ahí arriba, ya nada existe entre nosotros por mucho que yo la quiera.
Maldición, tengo tantas ganas de entrar a ese lugar y partirle la cara a ese idiota por meterse en mi camino pero eso no me va a devolver a Hailey.
Entró al coche ignorando todas las personas con cámaras que me acosan.
-Diplo- digo cuando mi amigo responde el teléfono- ¿dónde estas?
-En la quinta avenida de camino al puerto, bro- responde- ¿y tu?
-Por aquí, ¿qué vas a hacer?
-Fiesta con los chicos- responde dándome exactamente lo que quería.
-Te alcanzó en veinte- respondo y cuelgo-al puerto- le ordenó a Hugo y salimos disparados de ese lugar donde se a quedado una parte de mi.
Siento un vacío enorme en el pecho cuando recuerdo nuestro último abrazo.
¿Luchamos tanto para quedarnos aquí?
Pero yo ya no puedo hacer nada, trate de recuperarla y ella va y se besa con ese idiota en mi cara.
No soy alguien que soporta esas cosas y si ella quiere jugar sus cartas así lo vamos a hacer a su manera.
Llego al puerto y veo el gran yate blanco de Diplo con las luces encendidas, sabiendo que está noche será lo que necesito para ahogar todas estas mariposas que van muriendo poco a poco.
-Eso te pasa por idiota- se burla mi yo interno con toda la razón del mundo.
Bajo prometiendome a mi mismo olvidarme de todo por esta noche y entro al yate donde saludó a Diplo y veo a más de cinco hermosas mujeres.
NARRA HAILEY.
Se me hace muy difícil abrir los ojos cuando me despierto, deben de estar demasiado hinchados.
-Hailey vuelve a dormir- dice la voz de Robert asustandome, esta sentado en el sillon de enfrente leyendo un libro.
-No puedo- susurro.
-Sólo has dormido media hora, por favor inténtalo- me ruega.
-Sólo quiero darme una ducha y comer- respondo y el sonríe un poco.
Tener apetito es una buena señal.
Pero es que en realidad no me siento mal, sólo tengo mucha pena y decepción, por por lo demás todo está bien en mi.
-Haré algo de comer- me avisa saliendo de la habitación.
Me meto en la ducha y después de un largo período de pensamientos salgo a vestirme y bajo a la cocina, donde encuentro a Kendall y a Kylie.
-Hola- saludo en bajo.
-Buenos días- dicen las dos a la vez haciéndonos reír.
-¿Alguien sabe donde está mi teléfono?- pregunto.
Todos se miran entre sí escondiendo algo y estoy segura de saber lo que es.
-No hace falta que me oculten nada, estoy preparada para todo- les digo.
-Hailey...- me dice Kendall dulcemente.
-¿Con cuantas estuvo? ¿al menos eran guapas?- pregunto sacándole una sonrisa a Robert.
Es algo a lo que ya estoy acostumbrada, Justin es propenso a hacer esas cosas.
-Eran rubias- responde Robert.
-Pero para nada comparadas contigo- agrega Kylie y yo le sonrió en agradecimiento.
-Sinceramente no me interesa- respondo.
Eso me hace sentir mejor de lo que estaba, si él se hubiera ido a casa y no sabría nada hasta ahora habría sido lo peor, pero al hacer eso me hace saber que lo superará y me hace enfadar por lo dramático que fue anoche.
Yo también, claro que lloré y claro que me sentí mal, por que eso se sintió como un adiós definitivo al menos para mi y no pienso volver a eso, ya no van a jugar conmigo.
-¿Qué vamos a hacer hoy?- pregunto devorando el plato de huevos revueltos que me a preparado Robert.
-Día de chicas- responde Kylie.
-Hoy llega Gigi- agrega Kendall.
Perfecto, hacia tiempo que no la veía.
-Vamos al gimnasio y luego pasamos por ella- le digo a Kendall que asiente rápidamente.
-Vayan al gimnasio y yo paso por ella- se ofrece Kylie- tengo que llevar a Tyga al aeropuerto.
-Listo- respondo feliz de tener un día de tranquilidad con mis chicas.
-Iré a cambiarme- les digo subiendo a la habitación después de recuperar mi teléfono con el que me lanzo a la cama a mirar las fotos que me ocultaban mis amigos.
En el Instagram de Justin hay una en la que está sentado hablando rodeado de chicas.
Encuentro más subidas por una página de noticias y le doy like a todas, para que se de cuenta de que no a sido para tanto.
A decir verdad me esperaba algo peor.
Como si mis palabras fueran magia una notificación me llega, Justin acaba de subir una foto.
Entro a verla con toda la valentía que tengo que se desvanece en cuanto veo la foto.
Es él de espaldas cubriendo la figura de una chica.
Muchas menciones me llegan de aquella foto, todo el mundo piensa que soy yo y eso me hace reír.
Ya quisiera.
Bloqueo el teléfono con el ánimo por el piso y me cambio rápidamente para irme con Kendall.
-No paran de comentar que eres tu la de la foto- dice Kendall después de haberle contado que ya vi aquella estúpida foto.
-Subiré una en Snapchat para que sepan que no soy yo- respondo.
Le entrego el teléfono a Robert y poso en la foto junto a Kendall de lo mas feliz, más que nada para que lo vea y sepa que yo tampoco estoy mal.
NARRA JUSTIN.
-No paso nada- le respondo a Maejor que a entrado como un desquiciado a casa.
-Me voy dos días y arruinas todo- me regaña como si fuera mi padre.
-Déjame en paz- respondo.
-¿Por qué terminaste en un yate lleno de mujeres cuando debías de estar en la fiesta con Hailey?- vuelve a insistir.
-Porque beso a ese idiota en mis narices- escupo notando como duele recordar eso.
-¿Qué?- pregunta Maejor incrédulo.
Si, tu pequeña Hailey no es del todo perfecta.
-No quiero hablar de eso- le ruego.
-¿A donde vas?- pregunta viendo como me pongo los zapatos.
-Dejare a Amanda en casa e iré a firmar mi presentación en el Today Show- respondo guardando mi teléfono.
-¿Amanda?- pregunta.
-Si, una amiga que conocí ayer.
-¿Te la tiraste?
-No, Maejor, no- suelto cansado- ahora corre a contarle a Hailey que no lo hice, suguro la encuentras en la cama con ese.
Salgo ignorando la mirada de mi amigo y entro al coche donde Amanda espera algo molesta.
-¿Por qué tardabas tanto?- me pregunta y la miro enarcando una ceja.
¿Quieres eres tu para darte explicaciones?
-Estaba hablando con mi amigo- respondo sin emitir mis pensamientos.
Salgo de casa directo a la dirección que me a dado lo más rápido que puedo, queriendo intimidad para pensar en lo que vendrá apartir de ahora.
-Espero verte pronto- dice con una voz muy extraña cuando baja del auto.
-Si, yo te llamo- respondo y me voy.
Lo siento Amanda, pero creo que no te llamaré.
Una vez en la carretera el unico lugar al que quiero ir es uno y voy directamente hacia allí.
♢
Media hora después estoy en nuestro escondite en Malibu, donde tantas veces pasamos horas y horas hablando mientras observabamos el mar y escuchábamos música cuando ella no me obligaba a cantar.
¿Por qué aún pienso en ella después de lo que pasó ayer?
Cuando pensé que mi corazón ya no podía ser destruido acabo con el al verla besando a Jordan.
Creía conocer a Hailey, estaba seguro de que ella era incapaz de hacer algo así en mi presencia y eso fue lo que más dolió ayer, la decepción que sentí fue lo que me hizo irme por que de no ser así habría terminado con el Ken australiano a golpes.
Vuelvo a entrar a su Snapchat pero no a subido nada aparte de la foto y el video con Kendall.
Reviso Instagram y veo la foto que a subido Kylie, está con ellas y se la ve feliz.
-Eso era lo que querías- me acusa mi subconiente.
-¡Si, pero que lo sea conmigo!- respondo molesto y me siento estúpido por hablar sólo.
¿Debo dejar las cosas como están o volver a intentarlo?
Esa es la pregunta que me llevo haciendo desde ayer y de la cual no tengo respuesta.
¿Por qué debería intentarlo yo si la del error fue ella?
-Porque ella te perdonó muchas cosas más- responde una vez más mi subconsciente y una vez más tiene razón.
Suspiro lentamente bajandome del capó de mi coche y veo a Hugo a lo lejos dentro del furgon, entro al coche y lo enciendo para volver a la ciudad donde tomaré la última decisión entorno a ella y si está vez no funciona es por que las cosas deben de quedarse así.
NARRA HAILEY.
-¿Por qué se fue?- me pregunta Gigi después de contarle todas las cosas de las que se a perdido.
-Porque Jordan la besó- responde Kendall y Kylie se queda de piedra.
-¡Yo no sabía eso!- dice haciéndonos reír.
-Bueno, basta de eso- dice Kendall notando lo incómoda que me siento- ¿que hay de ti?- le pregunta a Gigi.
-Les tengo que contar algo...- murmura un poco nerviosa.
-¡Habla!- decimos las tres a las vez entre risas.
-Estoy con Zayn...- dice dejándonos de piedra.
-¿Malik?- pregunta Kendall dudosa.
-¿Hay otro?-responde Kylie.
-¿En serio?- añado yo.
Gigi asiente con una enorme sonrisa y me siento demasiado feliz por ella.
-Sólo faltas tu con Harry- le dice Kylie a Kendall.
-A mi déjame en paz- responde la aludida.
Es cierto, no me a contado nada más desde la vez que me dijo que estaba sintiendo algo por él, tengo que sacarle información.
La noche de chicas termina entre películas de miedo a las que se une Robert.