Coma (Entre comillas, #1) [¡D...

Oleh CupcakeGreen

269K 25.5K 5.5K

Ella le salvó la vida. Él... puso en peligro la suya. Ella no sabe dónde está. Él solo anhela que ella regre... Lebih Banyak

🌠Epígrafe🌠
🌠Prefacio: "Si amas a alguien..."🌠
🌠PRIMERA PARTE🌠
🌠Capítulo 1: El blanco no es un color🌠
🌠Capítulo 2: El tiempo puede jugar sucio🌠
🌠Capítulo 3: A través del Túnel🌠
🌠Capítulo 4: Más allá de "la luz"🌠
🌠Capítulo 5: La mentira duele, la verdad mata y la duda tortura🌠
🌠Capítulo 6: No todo lo que brilla es oro🌠
🌠Capítulo 7: Un plan nada amistoso🌠
🌠Capítulo 8: Engaños y secretos solo envenenan al corazón🌠
🌠Capítulo 9: Lo que sabemos es apenas una gota del océano🌠
🌠Capítulo 10: Y aun así...🌠
🌠Capítulo 11: Benvenuto, cugino! Ti odio🌠
🌠Capítulo 12: Bajo el Gran Árbol🌠
🌠Capítulo 13: No hay nada más trillado que un cliché🌠
🌠Capítulo 14: Preguntas sin respuestas, verdades a medias🌠
🌠Capítulo 15: Si no es por la garrita, no es un juramento🌠
🌠Capítulo 16: El café recogido es el nuevo rojo al viento🌠
🌠Capítulo 17: Nunca hagas enojar a una fangirl🌠
🌠Capítulo 18: Nuevo miembro, nuevos equipos. Escoge tu bando con cuidado🌠
🌠Capítulo 19: Los hermanos mayores protegen a los (débiles) menores🌠
🌠Capítulo 20: La sombra de los enamorados🌠
🌠Capítulo 21: Un lugar para descansar🌠
🌠Capítulo 22: Mientras tanto en la Vida Terrestre🌠
🌠Capítulo 23: Ser fuerte está sobrevalorado🌠
🌠Capítulo 24: Todo está al revés🌠
🌠Capítulo 25: Cuando se formó el naranjo🌠
🌠Capítulo 26: ¡Feliz cumpleaños, Zeli!🌠
🌠Capítulo 27: If you can dream it, you can do it🌠
🌠Capítulo 28: "...déjalo ir"🌠.
🌠SEGUNDA PARTE🌠
🌠Capítulo 29: La Oveja Rubia de la familia🌠
🌠Capítulo 31: Esa sonrisa, ese cabello amarillo... tú debes ser un Sommer🌠
🌠Capítulo 32: Un largo y peligroso viaje para recuperar una vida🌠
🌠Capítulo 33: Revelaciones🌠
🌠Capítulo 34: Oculto entre los árboles🌠
🌠Capítulo 35: Tablas de oro por aquí, estrellas de David por allá🌠
🌠Capítulo 36: Nuevos comienzos🌠
🌠Para mi Lirio Angelical🌠
🌠Capítulo 37: Peligro de extinción🌠
🌠Capítulo 38: Conflictos familiares🌠
🌠Capítulo 39: "...un Huracán que atravesar"🌠
🌠Capítulo 40: ¿Y si no es suficiente?🌠
🌠Capítulo 41: Aquel sin pasado se libra de ataduras🌠
🌠Capítulo 42: De lo indecible🌠
MUY IMPORTANTE❗
¡Habemus grupo de lectores!
¡Coma saldrá en físico!
¡Sobre la publicación en físico de Coma y varios!
🌠Especial 150K: Eva mordió la manzana, pero nadie castigó a la serpiente (1)🌠
🌠Especial 150K: La soledad puede ser una actividad en conjunto🌠
🌠Especial 150K: ¿Cuántos genios se necesitan para cambiar una bombilla?🌠

🌠Capítulo 30: El impredecible género femenino🌠

3.1K 399 108
Oleh CupcakeGreen

28 de octubre de 2013

—¿Por qué demora tanto en regresar? —Lauren estaba a punto de perder la paciencia—. No es como si pudiera hablar con Sam ni...

—Zack —la cortó Grace—. Su condenado nombre es Zack —repitió Grace alzando la voz—. Así que no te atrevas a confundir al novio de Lisa, o a cualquier otra persona, con el nombre de Sam.

—Grace, ¿te encuentras bien?

La británica se tomó más tiempo del necesario para responder una pregunta tan simple como esa. No, ella no se encontraba bien. Ella nunca se encontraba bien. ¿A qué se debía el interés de pronto?

—No —confesó ella, y antes de que alguien agregara algo, los calló alzando la palma de su mano—. Pero no es nada que los incumba.

John le sonrió.

—Cada quien tiene el derecho de mantener su vida privada tal y como el adjetivo lo señala.

Patrick carraspeó y, de brazos cruzados, preguntó:

—¿Deberíamos ir a buscar a la señorita cereza o nos quedaremos esperando a que solucione sus problemas con su novio, que no la escucha, ni la siente, ni la ve, y encima es daltónico?

—Has desbloqueado un nuevo nivel de celos —se burló John.

—Sin importar lo que pienses de Zack, está buenísimo. Tienes que admitirlo, Patrick. Sinceramente prefiero a los morenos, pero no voy a negar que el novio de Eli parece sacado de alguna epopeya griega o romana —comentó Grace. Los tres chicos, parecían no creer sus palabras—. ¿Qué? —preguntó a la defensiva.

—Creo que es lo más femenino que te he oído decir —comentó John.

—No es la gran cosa —aseguró Patrick, mordiéndose el labio—. Apuesto que solo es músculos. No debe tener nada en el cerebro —agregó ceñudo.

—El tipo podría ser modelo de Calvin Klein, acéptalo. No tienes oportunidad —dijo Grace.

—Número uno, no daré mi opinión sobre la belleza de un hombre. Y número dos, ¿quién dice que quiero una oportunidad?

—Yo —dijo John.

—Yo —agregó Lauren.

—Y yo —terminó Grace—. Prácticamente requieres un babero para hablar con ella, o simplemente observarla.

—No engañas a nadie, te gusta.

Patrick suspiró.

—¿Soy tan obvio?

—Sí —dijeron todos a coro.

,

28 de octubre de 2013

—Usted tiene diecisiete nuevos mensajes de voz —avisó la voz femenina, cambiando su tono de voz al momento de pronunciar el número—. Para escuchar, presione uno.

Siguió las instrucciones, aun cuando no estaba preparada para oír lo que sea que fuera tan urgente.

02 de octubre de 2013

—Ignoraré el hecho de que estás con basura importada de Europa en este momento para avisarte que tendremos pasado mañana justo después de la escuela, una intervención para Zack sobre... bueno, creo que es obvio. ‹‹Fin del mensaje››.

—Para terminar, solo cuelgue...

03 de octubre de 2013

Una gran patada le llegó a su puerta desde afuera.

—¿Vas a abrirme o qué? ¡Llevamos dieciséis años compartieron habitación, no tenías por qué cambiarte de cuarto!

04 de octubre de 2013

—No sé qué diablos te pasa con Amy, pero se supone que nos juntaríamos hace media hora. Tú nunca llegas tarde. ‹‹Fin del mensaje››.

06 de octubre de 2013

—¿Quieres, de una maldita vez, contestar el celular? ‹‹Fin del mensaje››.

07 de octubre de 2013

—Tú ignóralos y ya. No comprendo cómo pudiste soportarlos por tanto tiempo. Esos chicos no son tus amigos.

—Lo dice el que vivía con uno de ellos —contestó alegremente. Siempre se sentía así con él.

—Exacto, por eso sé de lo que hablo.

09 de octubre de 2013

Sus ojos color vida. Esos ojos cálidos, grandes, frágiles, y a veces algo perdidos, se clavaron en los de ella. Sintió que se la engullía, pero él le sonrió y la saludó con la mano. Igual que como hacía con sus amigos. Con todos ellos.

Solo eso le bastó para recordar que aquellas hermosas esmeraldas, brillarían por siempre para alguien más.

10 de octubre de 2013

—Te echamos de menos. Sé que Eli también lo haría. ‹‹Fin del mensaje››.

,

Desconocido

—¿Que Lisa y tú qué? —preguntó John pasmado.

—O sea que entonces... Lo sabía —Grace parecía hablar consigo misma.

—¿Cómo estás seguro?

—A ver, a ver. Aclaremos las cosas: yo no estoy nunca convencido del todo, y mucho menos de algo tan grande como esto. Pero si es cierto... —dejó la oración a medias, no muy seguro de cómo terminarla.

¿Qué pasaba si era verdad? Si sus descabelladas conclusiones eran correctas y ellos eran esos bebés, ¿cómo lo ayudaba a él a salvarse? ¿Y qué había pasado después de ese encuentro? Patrick intentó evocar algún recuerdo, mas su mente seguía tan blanca y austera como siempre. Seguía sin poder saber absolutamente nada de su vida, salvo por los fragmentos de una historia de amor, en la que no era protagonista, sino un oyente cualquiera.

Una brisa comenzó a formarse frente a sus ojos, volviéndolo a la realidad.

—¡Por fin! —exclamó Lauren victoriosa—. ¡Andando!

—Lamento el retraso —se disculpó Elizabeth mirando el suelo.

—¿Problemas en el Paraíso? —bromeó Grace.

Ella no contestó. A nadie pareció importarle.

—Vamos por Jazzy —dijo al fin la pelirroja. Fue la primera en Canalizar y desaparecer.

Grace tomó a Patrick de la mano. Lauren, a su mejor amigo. Amabas chicas se miraron durante una fracción de segundo antes de viajar de vuelta. Patrick sonrió ante la inminente aventura que se les venía encima.

El horror comenzó, sin embargo, en la prácticamente inexistente pausa entre la Vida Terrestre y el Coma, donde Patrick sintió los dedos de su mejor amiga separándose de los suyos. Casi como si se estuvieran soltando. Se dio cuenta enseguida que había perdido la única conexión energética que le permitía viajar. Aun desesperado por encontrarla, intentó hallar esa mano, pero su cuerpo se vio limitado por una fuerza sobrenatural; sintió una muralla de ladrillos frente a él, que se le acercaba de a poco al pecho, impidiéndole avanzar.

Entonces, sin tener idea de lo que ocurriría a continuación, cayó hacia el mismísimo vacío.

,

La paciente se encuentra en una situación complicada en este momento, y no quiere cooperar con la fecha de esta historia. Lamentamos los inconvenientes.

Lisa rogó que sus ojos no siguieran rojos. Ya con el cabello así era más que suficiente. Se quitó los rulos que no le permitían tener una completa visión del lugar

—Vaya, con cada viaje te haces mejor —opinó Lauren mientras se volvía a tomar el pelo en una cola de caballo.

—Ya aprenderás tú a hacerlo sin despeinarte ni un poco —respondió Grace guiñándole un ojo.

—¿Dónde estamos? —preguntó Lisa. Parecía que ambas chicas sabían perfectamente de lo que hablaban; casi parecían sincronizadas. Elizabeth nunca se había sentido tan fuera de lugar.

—Metrópoli —dijeron al unísono.

—Mundo libre de peligro, mayormente habitada por adultos —añadió Lauren.

¿Cuándo se volvió esa niña una experta? Grace le chocó los cinco. ¿Cuándo se volvieron esas dos amigas cercanas? ¡Dioses, ellas no se soportaban! Tal vez John las había hecho entrar en...

John.

—¿Dónde...?

Miró a todos lados. John no estaba.

—¡John! —lo llamó Lisa desesperada.

Lauren rápidamente intentó calmarla negando con la cabeza. Oh, claro, porque eso era mucho más reconfortante, estúpido pitufo castaño. Vaya, hasta cuando le llegaba el período era más dulce y tierna. ¿Era acaso eso posible? Estúpidas hormonas. Estúpidos sentimientos. Desgraciado corazón roto.

—No está aquí —explicó Lauren—. Grace y yo pensamos que sería mejor dejarlo fuera de peligro.

—De hecho decidimos que ambos se quedaran, pero al parecer no te importó mucho su ausencia. —Grace parecía algo molesta con ella. Quizás incluso más que de costumbre—. ¿O me equivoco?

Lisa bajó la mirada a sus muñecas.

"El rojo para tu izquierda, porque como no te gusta ese color, recordarás que debes liberar recuerdos tristes El amarillo, en cambio, es tu color preferido, por lo que va en tu mano derecha. Así sabrás que debes absorber todas aquellas cosas que te llenen de alegría".

—Ambos me importan, pero solo John me preocupa —admitió Lisa alzando la vista—. Sé que Patrick puede cuidarse a sí mismo.

Grace carraspeó.

—Muy bien. Patrick dijo que Jazzy se está muriendo, por lo que debemos descartar todos los Mundos seguros para los pacientes en Coma y centrarnos únicamente en los que causen muerte cerebral con mayor facilidad y una vegetalización más rápida.

—Suena prometedor —comentó Lauren.

—Pero la idea es salir con vida, ¿no? —dijo Lisa enrulando un mechón de su cabello.

—Me alegra que pienses así Lisa —estuvo de acuerdo Grace—, porque tú eres la razón por la que dejamos a John atrás. Imagina un escenario en el que John corre peligro, y tú estás con él. ¿Qué es lo que harías?

—Salvarlo —contestó como si fuera la cosa más obvia del mundo.

—¿Y qué hay de ti?

—Pues eso no me interesa, si John está corriendo peligro haré lo que sea para salvarlo.

—O sea que te matarías —esclareció Laury

—Yo no lo llamaría así —repuso Lisa molesta.

—Nosotras sí —zanjó Grace—. Estás aquí por salvar a un chico que amas. —Ouch—. Eso demuestra que estás dispuesta a sacrificarte por cualquier otro ser querido. ¿Amas a John?

—Por supuesto que sí, es como mi mejor amigo...

—¡Eh, eh! —la regañó Lauren—. Consíguete el tuyo.

—El punto es ya me agradas un poco, así que no quiero que te andes matando sin ninguna razón válida.

—¿Salvar a John no lo es?

—No es necesario si se queda a donde lo enviamos. Él y Patrick están seguros, no te preocupes. Lo único en lo que tenemos que focalizarnos ahora es en Jasmine.

O sea que ellas prefirieron a Lisa antes que a John o Patrick; Elizabeth sonrió. La felicidad no es propia del amor de pareja. Los amigos también la crean, incluso sin quererlo. Se imaginó una pequeña parte de su corazón cosiéndose, y el interior de su pecho más lleno.

Puede que la escogieron debido a que ninguno de los chicos era capaz de Canalizar, pero no le matemos la alegría y pensemos que fue porque la querían un montón.

,

Desconocido

—No puedo creer que nos dejaran aquí —se quejó Patrick de brazos cruzados.

—No nos dejaron aquí, Patrick. De seguro fue un error.

—Grace no comete errores.

—Todos cometemos errores.

Patrick frunció el entrecejo. John era demasiado amable como para tragarse que las chicas los habían botado ahí sin más. De seguro lo tenían planeado desde mucho antes. ¿Cómo no lo pensó? Era obvio que ellos dos no servían para una peligrosa misión de rescate en la que, para empezar, necesitaban Canalizar para transportarse de Mundo en Mundo. Y sin embargo, él siempre albergó la esperanza de que podía haber sido útil. En algo. Lo que fuese. Pero ahí estaba, junto a su amigo en un Mundo que ni siquiera era el suyo.

—Deberíamos averiguar cómo regresar a Pueblito —propuso Patrick.

—Yo pienso que lo mejor sería esperarlas. Imagínate nos vamos, y justo vuelven.

—Pero no lo harán. No nos necesitan.

—Pesimista —soltó John, pellizcándose el puente de la nariz.

—Realista.

—Eso es un pesimista disfrazado, lo cual me parece aún peor. ¿Qué tiene de malo este lugar?

Patrick alargó la vista hacia el interior de la isla. En ese momento, ambos se encontraban de pie junto a la orilla del mar, completamente solos. Se podía escuchar la música a todo volumen, proveniente del interior de los matorrales a unos pocos cientos de metros. De seguro se trataba de una fiesta llena de alcohólicos. Después de todo, ¿qué más podría caracterizar a los Suvhâe en coma etílico?

—John, tú eres bueno hablando con la gente. Preguntémosles cómo salir de aquí sin utilizar Energía.

—A veces odio ser el sociable —se sinceró su amigo.

Se aventuraron entre la vegetación tropical, siguiendo la música desenfrenada y los gritos aún más escandalosos. Y más allá de un par de árboles y palmeras, descubrieron una gran fiesta de vacaciones. Estaba repleto de adolescentes, algunos de no más de trece años; llevaban vasos en las manos y confeti en todo el cuerpo. Bailaban como si no existiera otra preocupación más que menear con ritmo el culo.

Mientras caminaban por entremedio de las personas, algunas los miraban con curiosidad, incluso unos cuantos pararon de bailar para quedárseles viendo fijamente. Los observan mal. Con desaprobación. ¿No tenían nada mejor que hacer que fijarse en dos chicos sin alcohol en el cuerpo?

En cuanto dejaron de prestarles atención, Patrick aprovechó de recoger un cuchillo que vio entre la tierra; se lo guardó, en caso de que las cosas se pusieran feas.

—Eh... ¿Patrick? —lo llamó John vacilante. El rubio lo vio señalar hacia arriba con el dedo.

Un gran árbol había sido convertido en una auténtica pista de baile. Y a su lado, otro más, y otro. Patrick se fijó en que había decenas de chicos y chicas sobre todos los troncos existentes; había varias tablas de madera entre los troncos que se usaban como pisos. En una de ellas, se encontraba el DJ mezclando música. Y en otra, un chico le estaba quitando la playera a otro mientras ambos reían.

Patrick se dio cuenta que John también estaba mirando a los dos adolescentes, pero no cómo él lo hacía. Tenía la nariz arrugada, como si estuviera disgustado u olfateando algo apestoso. Patrick se molestó.

—Deja de mirarlos así —le regañó.

John desvió la atención del árbol.

—¿Esos son los gais?

—Ambos son hombres y se están acercando íntimamente, así que sí. Deja de mirarlos como si fueran un espectáculo de circo. —Patrick de verdad no entendía el disgusto de John por los dos chicos, ni sus fervientes ganas de defender a la pareja.

—Nunca había visto a dos gais antes, es incómodo.

—Tal vez no lo recuerdas. —Ignoró el ofensivo adjetivo.

—Tú tampoco, y sin embargo se te hace normal —comentó John con recelo.

—Es porque es normal. Al menos, así lo siento.

Ambos chicos comenzaron a besarse. Patrick se alegró por ellos durante un segundo, luego volvió a creer que eran una basura de persona. Y no por ser gais, sino por no saberse medir con el alcohol. Por Dios, no podían tener más de dieciséis años.

—¡Y qué es lo que hace un bonito par de adolescentes sin un buen vaso de vodka! —exclamó una animada voz detrás de ellos.

Un brazo lo rodeó a él y otro a John. Los muchachos se dieron vuelta, encontrándose con un chico de la misma edad de Patrick. Tenía el cabello castaño y la piel clara. Sus ojos cafés, estaban muy abiertos, y su boca, parecía solo sonreír.

—¡Por los Neófitos! —gritó eufórico alzando el vaso. El DJ detuvo la música.

—¡Salud! —respondieron riendo, luego la canción volvió a oírse y todos siguieron bailando.

—Entonces, ¿qué los trae por aquí? —preguntó el muchacho agitando el vaso de manera inconsciente—. ¿Fiesta de graduación?

—No —respondieron ambos.

—¿Matrimonio? ¿Bautizo? —Negaron la cabeza—. El chico tomó una actitud más solemme, se les acercó y susurró—: ¿Funeral? No tienen por qué avergonzarse chicos, se sorprenderían la cantidad de ebrios de luto que tenemos aquí.

—Una amiga nos dejó aquí —explicó Patrick de mal humor—. Y queremos saber cómo regresar a nuestro Mundo sin Energía. Somos de Pueblito.

—No en realidad —intervino John—. De hecho, nos preguntábamos si la habías visto. Su nombre es Grace Ryan. Pelo negro, ojos marrones, actitud escalofriante.

—Quién diría que esa chica sería tan mentirosa. —El chico miró al cielo—: ¡Esperaba más de ti Grace!

John y Patrick compartieron una mirada cargada de confusión.

—¿Es que tú la conoces? —quiso averiguar John.

—Por supuesto que sí, llegamos al mismo tiempo, solo que de distintos lugares.

—¿Qué? —exteriorizó Patrick sorprendido—. Eso no tiene ningún sentido, se supone que los que están aquí llegaron por sobredosis de alcohol o drogas.

—Claro.

—Pero Grace tuvo un accidente en lancha —argumentó John.

—Ay, esa Grace es toda una embustera —dijo el chico.

—Yo pienso que tú lo eres —declaró Patrick cruzándose de brazos—. Conozco a Grace, y ella no es la clase de persona que malgastaría su vida con fiestas.

—¿Quién dice que fue una fiesta lo que la trajo aquí?

—Acabas de decir que fue por alcohol, por un coma etílico.

—¿Y crees que una fiesta es el único motivo para emborracharse?

—¿Qué otro sería?

—El odio hacia sí misma, tal vez —dijo el muchacho—. El alcohol quema lo peor de nosotros, pero a veces es necesaria una completa incineración para matar la toxina que vive dentro.

John abrió los ojos con verdadero espanto.

—¿Quieres decir que ella...? —John se detuvo.

—Grace llegó a Isla por una sobredosis de alcohol y drogas. Está en Coma por un intento fallido de suicidio.    

Lanjutkan Membaca

Kamu Akan Menyukai Ini

324K 21.9K 46
ANTES CONOCIDA COMO CLUB DE DADDY'S (RENOMBRADA) ¿Una mujer para una docena de hombres? Suena a muchos, por no decir que parece sacado de una pésima...
88.5K 5.1K 37
Cuando Alexa regresa a su país natal, todo parece haber seguido igual a antes de que se fuera. Sin embargo, muchas cosas cambiaron desde entonces; la...
87.4K 6.1K 56
Liah, princesa de Evigheden, próxima monarca del reino más grande y poderoso conocido hasta la fecha. Luna, princesa de Calanthe, próxima esposa de l...
47.1K 1.7K 39
Les vengo a informar que si demoró en publicar más capítulos es por falta de ideas o porque estoy ocupada y si no les gusta el ship por favor no haga...