Sus ojos caramelos se apoderaron de mis sueños durante 8 años.
Aun no puedo olvidar esa imagen por más que quiera hacerlo.
He observado todos los dias la ventana de su habitación, nada habia cambiado excepto ella con unos años de más.
Escuche su primera palabra, sus primeros pasos, su primer dia en la escuela. Y algo en ella me hacia sentir orgulloso.
Despues de casi una decada decidí entrar de nuevo, sintiendo una mezcla de miedo y emoción por volver a verla. Sus padres no estaban y aproveche la ocasión.
Mi corazón se adecuó a un ritmo más rapido al observarla. Como la ultima vez.
Ella me miro asustada tapando su carita con las sabanas.
-Hola. -me coloque de cuclillas a un lado de la cama.
-¿tu eres Peter Pan? -su inocencia hizo enternecer mi corazón y asentí lentamente.
-Si mi Wendy, yo soy tu Peter pan.