Lunes otra vez y Mariana ya se prepara para ir a la empresa. Se habia quedado dormida y sus papas decidieron no levantarla ya que la semana que viene empieza a trabajar.
Se prepara y baja a desayunar. Se sienta en el sofa, luego de que Juana le deje el desayuno ahi y prende la tele.
''Exclusivo: Lali Esposito y Benjamin Amadeo, separados?''
Y por todos los canales esa noticia de una supuesta crisis entre Benjamin y ella. Apago la tele y ya estaba de mal humor. Pretendia estar todo el dia con la mejor onda pero cuando ve a los periodistas injunables hablando de ella, se molesta.
Su celular empieza a sonar y una llamada de Benjamin mostraba la pantalla. Apago el celular tambien y salio de su casa malhumorada.
No tenia ganas de hablar con Benjamin, ni tampoco explicarles de donde habian salido esos rumores, porque sinceramente ni ella sabia. Penso que era hora de terminar la ''relacion'' para siempre, ya que si no habia amor, no habia nada.
En estos 3 años que pasaron desde que Peter la dejo, Benjamin fue el que mas estuvo con ella en los momentos mas dificiles. Aunque ella no queria, el rubio, insistio con ser algo mas que mejores amigos, asi que Mariana acepto e intento amar a Benjamin de la misma manera que amo a su querido Peter, pero no pudo ser, estuvieron un año juntos como la mejor pareja ante su familia y los medios, pero ella cada dia se convencia que Pedro Lanzani era inremplazable y que Benjamin no pudo, ni iba a poder ocupar su lugar.
Aunque el cariño que le tenia al rubio de ojos turquesas era unico.
Llego a la empresa y le indicaron donde seria su nueva oficina.
Esta era bastante espaciosa y ya tenia las cosas que habia pedido para diseñarla a su manera (porque era algo que le encantaba)
Pero no se olvidaria de dar una pasada a la oficina del mas potro de los empleados: Mariano Martinez. Sonrio al recordarlo y recordar la noche que pasaron y su reaccion a la mañana.
No se concentraba en la revista de diseño que estaba mirando, ya que sus pensamientos se basaban solo en el morocho de ojos bipolares.
Dejo la revista a un lado y se dirigio a su oficina. No sabia que iba a hacer ahi, ni tampoco que le iba a decir, solo lo que queria era verlo.
Golpeo varias veces y nadie contestaba, entonces entro y no se encontro a nadie en aquel lugar, entonces supuso que todavia no habia llegado.
Se sento en uno de los asientos que habia en frente del escritorio de Mariano y empezo a jugar con un conejo que habia ahi de adorno, esperando al mas potro de la empresa.
Escucho unos pasos acercarse y la puerta abrirse. Sonrio. Mariano Martinez habia llegado.
-Buen dia compa.- le dice la morocha, dando vuelta el asiento, con sus piernas cruzadas y una mirada de picara. Haciendose la linda y para Mariano le salia perfectamente.
El morocho suspira. Ya empezaba la tortura. La mira nuevamente y ella sonrie con ese rostro lindo que tiene.
-Buen dia Lali.- le dice Mariano, tomando coraje. Se acerca a ella, para darle un beso en la mejilla, pero esta corre la cara y hace que le deje un beso en la comisura de los labios.
Se dirige a su asiento para empezar a trabajar, no dijo nada sobre al acto anterior, si ya sabe que Lali es asi y que esto recien empezaba.
Mariana da vuelta la silla nuevamente y coloca sus codos en el escritorio, apoyando su menton sobre su mano izquierda.
-Y tu compañero no viene hoy?- pregunta ella, sacando tema de conversacion. Mariano la mira y vuelve la vista sobre el monitor de la notebook. Estaba nervioso.
-Si.. nose..- suelta el.- No tengo ni idea, no hable con el y pense que ya habia llegado.
Se concentra en las carpetas que tiene en la mano, pero con Lali mirandolo se le hace una tarea dificil.
-Mariano..- dice Lali manteniendo su sonrisa. Mariano no aguanta mirarla.- Todo bien, no?
-Vos pensas que todo esta bien.- le contesta el, despues de un largo suspiro. Deja su trabajo a un lado y se tapa la cara con sus manos, era una tortura.
Lali se levanta y va hasta el lado del escritorio en el que estaba Mariano. No queria que se sienta mal en su propio trabajo y queria que se lleven bien, ya que se van a ver todos los dias. Realmente queria que olvide aquella noche, aunque al parecer para el no era tan facil.
Agarra una silla y se sienta a su lado.
-Mariano, yo no vine aca para torturarte.- le dice ella y el morocho le presta atencion, mirandola a sus ojos, negros y profundos.- Nose para que vine en realidad..- admite ella.- Lo que quiero es que olvides la noche del sabado..
-No es tan facil.
-Si lose..- dice la petiza.- Ya se que es dificil para vos..- y se renueva en su asiento para seguir.- Pero yo necesito que lo hagas. Vas a verme todos los dias basicamente y no podemos estar todo el tiempo asi, al contrario, quiero que nos llevemos bien, como compañeros de trabajo que somos.- se le escapo una sonrisa, que a Mariano lo encadilo. Creia en las palabras de ella, pero como le pide que olvide ESA noche!? Suspira una vez mas y la vuelve a mirar.
-Esta bien..- le dice el.- Te prometo que lo voy a hacer.
Mariana sonrie una vez mas y sus miradas se conectan. El oscuro y el claro hacian una convinacion perfecta, aunque ellos no lo notaran.
Mariano empieza a admitir que le gusta la morocha, pero.. y Mariana? Ella no claro. Le pasan cosas, si. Siente esas cosquillas en la panza, si. Pero en vez de admitir lo que le pasa, se asusta por eso que le pasa en su interior. No queria que le pase, no de nuevo.
Baja su mirada, intentando cortar con la coneccion entre Mariano y ella, para evitar cualquier tipo de ''cosas''.
Se abre la puerta de la oficina y Nicolas habia llegado.
-Perdon..- se disculpa.- interrumpo algo?
-No, no te preocupes.- dice Lali, parandose de su asiento.- Ya me iba.
Se aproxima hasta la puerta y Mariano no le quita la mirada de encima. Ella, por su parte, solo se limita a mirarlo antes de salir y el amor cada vez era mas fuerte.
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Ese pedido Esposito Jajaja! Holaaaa, como va?
Aca les dejo otro capitulo!
Aclaro que si notan a Lali un poco bipolar, quiero decirle que si, es bipolar! Osea, yo soy bipolar, pues ella tambien.
Los capitulos son inspirados a mi estado de animo, asi que nada eso ahr jaja..
Muchas gracias por leer y nos vemos ¿mañana?