Una insistente voz me atrajo hasta acá, no podia ver nada además de una brillante y afilada punta al final de la oscuridad, no sentia mis piernas moverse pero el metal puntiagudo estaba cada vez mas cerca, faltaba poco, sólo queria tocarlo, que mi dedo entrara en contacto con el gran alfiler, de repente unas hipnotizantes luces verde esmeralda tóxico danzaban al rededor de lo que ahora parecia una estructura de madera, un rueca para ser precisos. Estaba tan cerca, no resistí más y mi índice se posó sobre el huso de la rueca, justo antes de caer la noche. Un segundo después me dio un pequeño mareo y sentí como mi cuerpo se desplomaba pero a la vez me sentia levitando, era extraño.
Todo estaba oscuro, soló pequeñas telarañas verdes brillantes acompañaban la falta de luz, no sabia donde estaba, tal vez era mi mente. Quiero despertar, hago varios esfuerzos por levantarme, todos en vano. Quiero que Malefica este conmigo, pero recuerdo que fue ella quien me hizo cargar con este maleficio y el dolor se apodera de mi. La quiero, realmente la quiero, los momentos a su lado fueron increibles...pero que ella sea una hada no le da un final feliz al cuento, todo fue arruinado por este hechizo, confíe en ella y me mintió, nunca me dijo que ella era el peligro del que no me podia salvar. Siento que lloro, pero en realidad son las lagrimas de mi alma, mi cuerpo solo puede dormir o eso creo, trato de odiarla por lo que me hizo, más sé que es solo el dolor que produce el impacto de la noticia, jamas podria odiarla...no, ella es demasiado dulce para no quererla, se que se ve fria, de temperamento fuerte y muy seria pero cuando la ves sonreir, esa sonrisa queda grabada en tu corazón hasta la muerte, esa sonrisa que me acompaña en este sueño enterno. Se ve mala pero por dentro es buena y dulce, tiene un buen corazón pero no quiere demostralo. Así es mi Maléfica.
No sabia cuanto tiempo habia pasado, solo el recuerdo de la pelea con Maléfica y los sentimientos que venian con este me hacian compañia. Depronto sentí tres auras cerca de mi, mis tias. En definitiba tenían que ser ellas, el tormentoso rojo del liderazgo , el verde locura y el pacífico pero deschavetado azul revoloteaban a mi alrededor como si fuera el fin del mundo, eran luces pequeñas y rapidas. De pronto un aura café "inocente" y cazanova llego a la escena, tal vez es ese muchacho del bosque, Philip, él se dirigia al castillo de mi padre. Se acercaba cada vez más a mi en la oscuridad y desprendia un brillo de lujuria que me asustó, pense cosas terribles, pero mis tias aún estaban aqui asi que confie en que nada mala pasaría. Entonces lo senti, era aspero, sin sabor, repugnante, aburrido y sobre todo, falso, no se cómo pero supe que me habia besado, sus movimientos guardaban un toque lascivo y brusco que chocaba en mis labios. No sentí más que un gran fastidio. Lo habia visto una vez, me agradó como amigo al igual que Diaval pero Philip solo era un principe galán que quiere a la primer chica bonita que se le cruce por el camino. Un patán de cabello largo y sonrisa que derretiria a cualquier princesa o plebeya, menos a mi, yo ya tenia otra sonrisa por la que moriría, la misma sonrisa que me condenó a dormir por los siglos de los siglos.
Philip se fue tan pronto como llegó y mis tias desaparecieron. Dos auras mas se sintieron en el lugar. Una negra pero llena de lealtad, el pequeño pajaro, mi amigo Diaval. Y la otra...¡No!, tengo que estar equivocada, no quiero que esté aquí, ella fue quien me hizo daño...pero su aura... ese radiante verde esmelarda estaba lleno de tristeza y dolor, no era la misma mascara de seriedad que escondia felicidad y ternura, no, ahora se sentía apagada, sin vida...tal vez lo mejor sea perdonarla, ese murmullo en mi cabeza dice que enserio está arrepentida de sus actos, no puedo tenerle rencor a tan hermosa criatura. Su triste luz se acerca a mi, puedo sentirla tan cerca incluso creo que puedo sentir el calor que emana su cuerpo, es extraño e increible a la vez, empiezo a sentir mas cosas a pesar de estar bajo el encantamiento, quizás...bumm! De golpe senti sus labios sobre los mios, eran delicados, suaves, calidos, gruesos...tan perfectos, su sabor a frutos silvestres y ese aroma a flores, sentí todo de ella en ese beso, todo ese amor escondido que ambas sentimos; mis sentidos se agudizaban pero mi cuerpo no podia reaccionar aún, era fantastico,tierno, hermoso, su amor reprimido fue liberado con un acto tan humano que me sorprendia que me amara tanto como para hacerlo... ¡ESPERA! ¡Maléfica me ama! A mi y solo a mi. Es real, por fin es real. Sus celestiales labios se separaron de los mios con un movimiento suave y pausado que parecia querer durar toda la vida. No queria alejarse de mis labios y yo tampoco lo deseaba asi.
La senti alejarse, no podia más, tenia que despertar, obligar a mi cuerpo a moverse, parecia sedada pero tenia que reaccionar, su brillante aura estaba algo mas lejos y no aguante un segundo más sin Maléfica, Mi Maléfica.
Abri los ojos de golpe y vi su hermosa y familiar silueta de espaldas a mi, disponiendose a salir de la habitación, no se en que cuarto del castillo estaba y tampoco importaba, Maléfica me habia eclipsado, Eramos solo ella y yo.
-hada madrina- la llame como en los tiempos antes de saber quien era en realidad.
Su cuerpo se tensó de inmediato y giró sobre sus pies para mirarme, sus pupilas se dilataron tanto que sus ojos verde-miel se veian totalmente negros y una amplia sonrisa se dibujó en sus labios carmesí. Podia ver las marcas de llanto en sus mejillas.
-bestia- dijo aún sonriente y con los ojos llorosos
Se acercó a paso lento mientras yo la miraba con una pequeña sonrisa de labios. Recoste mi espalda en la cabecera de la cama y ella se sentó junto a mi. Con un delicado movimento tomó mis manos entre las suyas, estaban cálidas, suaves y acojedoras, cuando me tocaba me sentia segura no solo de lo que pasaba a mi al rededor si no de mi misma, ella me daba la confianza suficiente como para creer que podia lograr cualquier cosa.
- pensé que no volveria a verte sonreír- expresó con voz algo ronca. Efecto de las lagrimas.
-y yo pensé que los besos de amor verdadero no existían- solté una dulce indirecta. La leve sonrisa no desaparecia de mis labios.
- nunca dejarás de ser Mi bestia, pequeña Aurora- su mirada desprendia dulzura y su agarre era firme pero delicado, cómo haciéndome entender que sus palabras eran honestas.
- yo tambien te Amo Maléfica - solté sin rastro de duda en mi voz
Sus ojos se abrieron a más no poder, eran negros como el cielo nocturno. Senti el calor en mis mejillas, probablemente estaba roja. Tenia miedo de confesar mis sentimientos pero con ese beso supe que ella sentía lo mismo que yo.
Amor. Amor verdadero. Puro como el más fino cristal y tan real como una persona de carne y hueso.
-pe-pero yo no he dicho que te-te,eso- tartamudeó apretando un poco mis manos. Mi linda hada estaba nerviosa.
-tu beso lo delata todo- sonrei de oreja a oreja y las lagrimas comenzaron a emanar de mis ojos.
Los lagrimales de Mal tampoco resistieron y gotas saladas se desprendieron de sus bellos ojos verdes manchando su nivea piel. Separó nuestas manos e inclinó su cuerpo hacia el mio. sonrió y sus lagrimas cayeron en mi cuello. Puso su mano en mi costado izquierdo y se sostuvo de la cama con la mano derecha. Mi corazón latía rápido y mi mente solo me daba una orden, así que puse mi mano en la parte de atrás de su cuello y mantuve su cara a escasos centimetros de la mia.
-no sabes cuanto te odio- dijo aún llorando. Su aliento como una calida brisa y sus palabras la forma de expresar su amor.
- pero aún asi me despertaste- sonreí mientras lagrimeaba.
Eliminé toda distancia y esta vez fui yo quien la beso. Una danza lenta y acompazada, llevavamos bien el ritmo, nuestros ojos cerrados; la ternura de sus labios rozando los mios, su sabor a frutilla fundiendose con mi sabor a vainilla. Era perfecto, como si minutos antes no me hubiese besado, parecia la primera vez que lo haciamos. La amaba tanto y en ese beso quería que lo supiera todo sin nesecidad de palabras. Sentí que ella me correspondía y que estaba dispuesta a todo por mí.
---desde las sombras el fiel amigo de las dos mujeres observaba la escena con felicidad, esas dos por fin habian abierto su corazón y revelado sus sentimientos. Diaval sonrió con complicidad, el observador cuervo ya lo sabia todo desde hace mucho mucho tiempo.---
Nos separamos lentamente, queriamos hacer de este momento algo infinito, pero allá afuera nos esperaba la furia de cientos de hombres sin corazón y su despiadado líder, a quien lamento tener que llamar mi padre.
Mal me ayudo a levantarme de la cama y junto con Diaval salimos de la habitación a enfrentar la realidad.
DÍAS DÉSPUES, EN LA CORONACIÓN DE AURORA...
Diaval, Philip, Malefica y yo estabamos en El Páramo. Era el dia de mi coronación, estaba muy nerviosa, pero creo que me llevaré bien con el reino y sabré afrontar las situaciones por mas difíciles que sean, solo que me duele tener que hacerlo sola.
-te ves hermosa,bestia- susurró Malefica mientras me acariciaba la mejilla- serás la mejor reina que haya tenido este lugar.
Y sin mas preambulos anunció:
- criaturas del Páramo y humanos, desde hoy dos reinos se unen, al coronar a nuestra querida princesa Aurora como reina de las tierras humanas; cooperará conmigo para reestablecer la paz que nuestros reinos perdieron hace años. Desde hoy todo humano debe obedecer a su reina. si hay alguien que se oponga a estos acuerdos que hable ahora o calle para siempre.
-yo tengo una objeción- me opuse con voz firme.
Sus cejas alzadas y su expresión de confusión me parecian tiernas y graciosas pero me contuve y la miré con seriedad.
-adelante, princesa-dijo ella algo impresionada.
- no quiero gobernar sola- afirmé mirandola directo a los ojos.
- ¿entonces con quien deseas gobernar?- se estaba poniendo nerviosa pero no apartaba la mirada.
- con la mas hermosa hada, la reina del paramo. Tú.- le sonreí dulcemente, tomé sus manos y entrelacé sus dedos con los mios.
-lo que la nueva reina del Páramo y los humanos desee- mi corazón latió fuerte y ambas teniamos una gran sonrisa colmando nuestros labios.
- ahora las dos somos reinas de ambos mundos.- un gran aplauso colmó el aire.
Miré a mi alrededor sin soltar las manos de Mal, todos nos miraban, unos lloraban de alegria otros sonreian, aplaudian o simplemente permanecian expectantes.
Málefica me tomó de la cintura y me acercó a ella, agachó la cabeza y yo me puse de puntitas, nuestros labios se unieron por un breve instante y se separaron, gritos de euforia y silbidos resonaban por todos lados, miré a Diaval, el pequeño cuervo estaba feliz, voltee hacia donde estaba Philip y vi como se alejaba hacia su caballo con sus manos en puños a paso rápido, se veia... ¿indignado? la verdad no me importa mucho, me da algo de lástima pero amo a Maléfica y no la cambiaría por el niño consentido del Rey John.
Mal y yo nos abrazamos, pude sentir como mi reina miraba a Diaval y después me habló al oido:
-sujetate fuerte, linda bestia, vamos a dar un paseo por los aires.
la mire con los ojos muy abiertos y la sujeté fuerte por la cintura. ella me besó en la frente y afianzó su agarre en mis curvas.
Mis pies se elevaron del suelo y el aire fresco me invadió, tenia algo de miedo al estar volando asi que recosté mi cabeza en el pecho de Maléfica y sentí la brisa que me proporcionaba el aleteo de sus grandes alas. Tomamos altitud y cerré mis ojos con tanta fuerza que dolían.
-Aurora, abre los ojos, pequeña. No te va a pasar nada malo. Es el vuelo mas seguro que he hecho.- me animaba Mal con un toque de humor
-pero tengo miedo. ¿y si me caigo?- aprete aún más los ojos al pensar en lo que podia pasar y un gemido de terror se escapo de mi garganta.
-Linda- dijo alzando mi mentón y haciendome abrir los ojos. Confié -prometo que voy a cuidarte todos los dias de mi vida y nunca, escucha bien, nunca voy a permitir que algo o alguien te dañe. Te quiero dulce Aurora.
- confiaré en ti hada madrina- le sonrei y ella me respondió con otra sonrisa.
-eso espero, las reinas necesitan confianza entre si, ahora sostente bien y mira a tu alrededor.
Le hize caso y heche un vistazo. era hermoso, tanto que no podia creer que fuese un lugar real. sin duda el atardecer más asombroso que he visto en mi vida, los tonos rojos, amarillos, azules e incluso blancos se mezclaban, podia ver la luna asomar entre las nubes. Era mas lindo que verlo desde alli abajo.
-¿te gusta?- preguntó con ansias disimuladas
-No.- su cara de desilusión me conmovió- ¡Me Encanta! ¡gracias, Mal!
-y este es el primero de muchos atardeceres así, mi pequeña reina
- que asi sea reina mía- dije riendo.
Ella se contagió de mi risa y entre carcajada y carcajada terminamos besandonos dulcemente con el crepúsculo como testigo de nuestro amor.
FIN.
Y este chic@s es el final del fic espero que les haya gustado, comenten, voten, y muchas gracias por invertir algo de su tiempo en esto.
Ba-Bay
AVISO ESPECIAL 2019
Se viene la continuación de este fan fic, está vez mucho más largo, ya no sólo será un one-shot! Esperenlo muy pronto... Se estrenará cuando tengamos 400 estrellas en este. Así que a votar!