Condusco sin cuidado.
Llegar sano o no me importa poco. Solo quiero llegar.
La policía ha intentado detenerme dos veces en mi camino, pero no pienso disminuir la velocidad por ellos.
¿Dónde está _______?
Riker dijo que se ha ido, pero: ¿Puedo confiar en Riker?
Ya no puedo confiar en nadie, he decepcionado a todos.
Todos.
No voy a poder mirar a mi madre a los ojos.
Giro hacia la izquierda y los neumáticos hacen un gran chillido.
________ no puede estár lejos si no está en casa.
No tiene familia acá.
O está en la casa de sus padres o...
Palidezco.
No puede salir del país.
No puede.
Maldición.
Sí puede.
Saco el móvil del bolsillo y tecleo su nombre.
Su sonrisa de recién despertada aparece en la pantalla mientras la llamo.
¿Cuándo fue la última vez que llamé a mi esposa? No he visto esa foto en meses.
Una, dos, tres...
No contesta.
Cuatro, cinco, seis....
Lanzo el móvil al suelo.
Acelero.
Giro nuevamente, alcanzo a ver nuestra casa y llego al límite de la velocidad.
Me estaciono.
Bajo.
Mi corazón late demasiado fuerte.
Subo las escaleras de la entrada, abro la puerta y me enfrento con un salón solitario.
***
-¡Noo!- pateo la mesa.- ¡Mierda!
¿Dónde está?
Habitaciones vacias y cosas por todo el suelo.
Empacó demasiado rápido como para que ya no pueda estár acá.
No quiere verme realmente.
Corro hacia la casa de su madre.
Se que no quiere verme, pero debo intentarlo. Por dentro ruego que ella este allí.
Toco la puerta y a los pocos segundos su madre sale a abrirme la puerta.
Se sorprende al verme.
-Ross.- dice.- ¿Puedo ayudarte con algo?
-¿Está _______ aquí?- pregunto con la voz temblando.
Niega con la cabeza.
-No me escuchó.- responde.
-¿Dónde está?- pregunto.
Me mira y se que siente lástima por mí.
-No puedo decírtelo.
-Por favor.- suplico.- Tengo que hablar con ella.
Veo como sus ojos se llenan de lágrimas.
Bienvenida al club, Sra. Red.
-Lo siento.- dice.
Y antes de que pueda decirle algo más cierra la puerta.
Pierdo el control.
Ahora sí puede estár en cualquier lado y no creo que pueda encontrarla.
Chequeo el móvil para ver si tengo alguna llamada y ,tal como lo pensé, solo tengo las de mamá.
Está probablemente buscándome. Y me encontrará, puede rastrear mi móvil desde el suyo...
Mierda, sí.
Desbloqueo la pantalla y voy hacia la aplicación que me dice donde está _______.
Dejo que cargue unos segundos, y se me hacen eternos, me apresuro para subir al auto mientras continúa cargando y cuando el mapa se dibuja, otro de mis mayores miedos se vuelve realidad.
Está en el aeropuerto.
Y no está sola.
Dos de mis hijos están ahora mismo en un avión. Y los otros dos aún con ella.
***
Siempre me he preguntado si las personas tienen tiempo para prestarle atención a otras en los aeropuertos.
Mis experiencias en ellos no han sido agradables. Usualmente llegaba tarde y tenía que hacer todo apresurado.
Y nunce tuve tiempo para realmente detenerme a mirar a las personas.
Tal vez algunos estaban cansados, otros emocionados, otros tristes, algunos apenas casados.
Y me pregunto si todos los rostros que voltean a mirarme mientras me abro paso entre las personas están interesados realmente de lo que me pasa.
Probablemente ya lo saben.
Pero no saben que hago acá y porque corro con tanta desesperación hacia mi esposa.
¿Dónde en todo el maldito aeropuerto está ella?
Olvide mi móvil en el auto, de otra forma ya la hubiera encontrado.
"Ya se fue"
Chequeo los vuelos en la pantalla y varios acaban de despegar.
Mierda.
Miro a todos lados pero no la encuentro.
Ni en los asientos, ni en las pequeñas tiendas, ni en ningún lugar.
Camino y me paro en una silla para poder ver mejor y tengo tanto éxito como las veces anteriores.
¿Dónde estás, _______?
Bajo de la silla y recibo algunas miradas de desaprobación.
Como si me importaran.
Estoy cerca a los baños cuando la encuentro.
________ se detiene en seco y se queda inmóvil.
Con una mano sosteniendo un pequeño pañuelo cerca a sus ojos y la otra sosteniendo un bolso.
Ella palidece.
Está claro que no me esperaba.
Gira y me da la espalda, empieza a caminar con prisa de regreso a los baños, y la sigo.
-_______.
La oigo soltar un pequeño sollozo.
Corro y la tomo del brazo antes de que entre al baño de chicas.
-No me toques.- me advierte.
Cuando me dice no... Solo eso puede ser lo que me detiene.
Y la suelto.
Ella entra al baño de chicas y yo también lo hago.
Recibo gritos alarmados de mujeres allá adentro.
_________ camina hasta el fondo, y trata de ver como escapar.
Pero no tiene a donde ir.
Muchas chicas salen del baño lanzandome malas miradas y nos dejan solos.
-_________, lo siento.- avanzo para estár cerca a ella.
La aprisiono contra el espejo y la pared y ella no protesta.
Me mira atenta con esos ojos hermosos que me tienen malditamente enamorado de ella.
-¿Lo sientes?- pregunta.
Asiento.
No está intentando escapar y eso es algo que me sorprende.
Una parte muy muy muy pequeña de mí recuperar su esperanza.
-Yo iba a decírtelo, nena. Lo juro, solo que cada vez que lo intentaba era...
Gruño de frustración.
Ni siquiera tengo una explicación concreta para eso.
No se lo dije porque sabía que no le iba a gustar, y yo quería ir.
Sostengo una de sus manos y ella no las desenlaza.
Siento otra de sus manos deslizarse por mi mejilla hasta llegar a mi mentón.
Me levanta el rostro.
-Lo haces tan bien.- dice.
No se a que se refiere.
-¿Qué...?
-¿Aun que sea puedo saber por qué?- pregunta.- ¿Fue por que te cansaste de mi? ¿O porque vino alguien mucho más hermosa y no pudiste...?
-¡No!
-¡Entonces no entiendo!
Sus lágrimas amenazan con salir de nuevo.
Mierda, no.
Las mías también.
-No fue nadie, no fue por tí, nena...
-Dímelo, entonces.
Respiro hondo.
Está actuando tan tranquila. Completamente opuesto a lo que esperaba. Y me gusta.
-Estoy enamorado de tí...
-No lo estás.- dice tensando la mandíbula. Aparta mis manos de su cuerpo.
-Claro que sí.
-No me estás enamorado de mí.- me empuja.- Estás enamorado lo que sientes cuando estás conmigo.
-Preciosa, esto tiene que ver mucho más que solo...
-Estás enamorado de que tú seas todo lo que me importa.
Empieza a caminar hacia la puerta. La sigo.
-Estás enamorado de que este loca por tí, Estás enamorado de que deje todo por tí, Estás enamorado que tú seas el centro de todo mi maldito universo.- abre la puerta y la empuja hacia mí cuando sale.
-No, preciosa...- corro detrás de ella.
-Apuesto a que te gustó lo que acabas de oir.- dice girando a mirarme.- ¿Ya te quedaste sin chicas? ¿Es eso? ¿Por eso viniste hasta acá?
-¡No! Vine por tí. Lo siento mucho.
Se acerca peligrosamente a mí.
-Pues estás 3 meses tarde.
Mis manos rodean su rostro y pego los labios a su frente.
-Iba a decirte, solo que con los niños y...
-No los metas en esto.
-... Es como si ya no tuvieramos tiempo solo para nosotros, para hacer todo lo que hacíamos antes.
Algo se enciende en ella, tal vez un recuerdo.
Si ella me deja...
Veo su sonrisa cínica.
-Entonces ellos tienen la culpa de todo esto.-dice.
Sonaba mucho más racional en mi mente.
Sé que esto está bastante jodido.
Me quedo sin palabras y solo puedo mirarla.
Riker tenía razón. Estoy igual que Rocky.
Hermosa esposa, hermosos hijos. Tenía todo.
Siento el pánico al imaginarme la vida sin ella.
Las mañanas sin ella...
Las noches sin ella...
-Tú no necesitas una esposa.- dice.- Tú necesitas a alguien que esté contigo las 24 horas dispuesta a dejarle que hagas todo lo que...
-¡Tú eres perfecta para eso!- grito sin pensarlo.
-¿Quieres eso entonces? ¿Por eso estás acá?
-_______, esto no es por el sexo.
-¿Estás seguro?
Sï, pero no puedo comprobarlo. Ella no me creería.
No imagino hacer el amor con alguien que no sea ella. Y sé que ella también está de acuerdo. Han sido muchos años juntos...
_______ asiente.
-Lo imaginaba.- dice.-¿Fue eso lo que siempre te importó?
Niego con la cabeza y la abrazo.
-Por favor, no te vallas.- suplico enterrando la cabeza en su cuello.
-Necesito saber por que lo hiciste.- me pide.
Es tiempo de decirle todo, Ross.
-Cada noche llegaba y me emborrachaba tanto que cada vez que veía un chica imaginaba que eras tú y que habías venido conmigo. Me ponía tan duro imaginar que estábamos...
-¡Ya estamos de vuelta con el sexo!- grita lanzando los brazos.- ¿Sabes qué?
Me pone las manos en los hombros y me empuja de vuelta en el baño. Cierra la puerta detrás de nosotros y se asegura de que no se pueda abrir por afuera.
Todo lo que puedo pensar es: ¿Qué?
Me guía hasta el lavamanos y se sube en él.
-¿Esto es lo que te gusta?- se quita la camiseta.- ¿Así es como me amas?
-Nena, no...- intento sujetar de las manos pero me las golpea.
Se quita el sujetador y empieza a quitarse toda la ropa.
-Vamos, Ross. Pierdete en mí y dime que me amas mientras lo haces.
El bulto en mi pantalón empieza a crecer.
-Estás loca.- le digo.
Tiene puestas aún unas pequeñas bragas pero es suficiente como para distraerme.
Extiende su mano y me toca el paquete.
-Oh Dios Mío, ________.
Abre sus piernas y me invita a entrar.
¿Dónde está Riker para aconsejarme en los momentos más difíciles?
-Nena...
Mi cuerpo quiere algo y mi corazón otra.
Enrolla las piernas a mi alrededor y yo no aguanto y le devoro la boca.
Se sorprende por lo posesivo que reacciono pero no tarda en dejarse tomar.
Mis manos no salen de su rostro, y mis caderas se pegan a las suyas. Mi polla siente su calor y me ruega que me deshaga de toda la ropa que aún nos separa.
¿Me va a dejar?
¿Esto es como sexo de despedidad?
No puede ser eso.
No puede dejarme.
No puedo volver a tener el corazón roto...
¿Por qué hice todo eso?
Mierda.
Yo le pertenesco a ella, a nadie más.
Ay, hombre. Quiero volver en el tiempo y cambiar todo.
Empezamos tan bien...
-Te amo.- susurro y noto que mis manos ya están dentro de sus bragas.
________ tiembla y me mira a los ojos.
Beso de nuevo sus labios y también las lágrimas que salen de ellos.
-Nena, ¿Por qué estás llorando?
Oculta el rostros bajo su cabello.
-Preciosa, ¿Qué pasa?
Mis labios siguen recorriendo su piel mientras mis caderas se mueven contra las suyas.
-¿No te das cuenta?- dice con la voz apagada.
¿Darme cuenta de qué?
Todo esto es malditamente confuso.
-¿Qué?- insisto.
-Mírate.- grita de pronto.
Me detengo.
Mis manos están tocando su cuerpo, haciéndola mía con mis manos.
Veo mi reflejo en el espejo del frente.
Tengo ojeras.
Luzco cansado.
No es el Ross feliz.
________ se ve pequeña en mis manos. Muy frágil.
-¿Te das cuenta?- pregunta.
No lo hago.
-No me amas.- agrega.- Amor y placer no son lo mismo.
Empieza a separarse de mí.
Estoy demasiado confundido.
Me veo de nuevo en el espejo y luego mis ojos bajan a donde está ______.
Oh, Dios. ¿En serio estaba apunto de hacérselo en un baño de aeropuerto?
¿Desde cuándo no significa nada para mí?
Cada vez que lo hacíamos, para mí era mucho más que simplemente follar. Era hacer el amor.
Y ahora...
-_______, lo siento.- digo y me separo de ella.
Todo lo que hace ella es mirarme.
-Así es como te gusta, ¿verdad?- se cubre los pechos con sus brazos y cruza las piernas.- Te gusta verme así.
-No, nena.- me disculpo.- Lo siento, no se que pasó...
-Ha sido así todas las veces.- me interrumpe y no me dí cuenta.
-Sabes que no...
-Solo me amas cuando te doy lo que quieres. Yo no puedo darte lo que quieres, Ross.
-Si puedes...
Niega con la cabeza.
-No quiero.
Baja del lavamanos y rápidamente se coloca los jeans, las zapatillas, el sujetador y se mete dentro de su camiseta.
Me odio.
-Ahora, dime que amas.
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Solo porque siento que hay algunas cosas que faltan explicar, voy a publicar también un capitulo narrado por _______. Que va a incluir partes de este y al mismo tiempo el final del capitulo anterior.
Apreciaría mucho que voten y comenten por que eso es lo que me motiva a seguir escribiendo.
Las quiero.
_R5FamilyLatina_