Era vampirica

By NancyACantu

3.7M 222K 32.5K

Se decía que en año 2012 todo se acabaría y así sucedió. Nadie hubiera creído una historia tan loca, pero aho... More

Aclaraciones
Dedicatoria
1. Cruel realidad
2. Despedida
3. Conociendo al pelirrojo
4. La gran subasta
5. Cambio por monedas
6. La Luna será mi aliada
7. Sorpresa
8. Ataque sorpresa
9. Lord Dagon
10. Prueba acreditada
11. Mírame a los ojos
12. Su interés por mi
13. Sin su presencia
14. Liam regresa
15. Presa del pánico
16. Bloody Town
17. Castigo
18. Bienvenida
19. Volker
20. Diario
21. Asalto
22. Río de sangre
23. Manchada en pecado
24. Remordimiento
25. Soy alguien diferente
26. Karen Divella
27. Culpabilidad
28. Último asalto
29. Mala madre
30. Perdóname
32. La reunión del congreso
33. Su sangre
34. Evangeline
35. ¿Un sueño?
36. Demetrio Rumannoff
37. ¿Estaré loca?
38. Mi mejor amigo
39. Expulsada
40. ¿Un ser amado?
41. Bosque traicionero
42. Mi padre
43. Reencuentro
44. Su diario
45. Cara a cara
46. Última noche
47. Tras la tormenta
48. Vino rojo
49. La verdad duele
50. No me odies
51. Me doy por vencida
52. Venganza
53. Corre mientras puedas
54. El mesías
55. Epílogo
Agradecimientos

31. La boca del lobo

58.2K 3.1K 274
By NancyACantu

Tras sus palabras, pude sentir como su mano volvía a estirarme para que camináramos más aprisa. Mi boca yacía perpleja, no podía siquiera entender que era lo que había pasado. ¿Había declarado mi adición en su viaje? Temblé como nunca antes. Realmente, no deseaba ni verle. ¿Cómo sería capaz de ir con él a quien sabe dónde? Respire con fuerza mientras sentía como me llevaba de nuevo a aquella alcoba donde yacía la poca ropa que había traído de casa.

—Empaca para tres días —Soltó dejándome libre—. Tienes cinco minutos

No intente ni mirarle. Estaba hecha roca con sus palabras. ¿Cuál sería nuestro destino? ¿Me volvería a dejar en un bosque? ¿Para qué quería que llevase ropa, entonces? Trague saliva con cierto miedo al recordar el supuesto castigo que aún no me ponía por bajar a la cocina sin permiso.

Cerré los ojos con fuerza intentando pensar en que debería de hacer. Mi obligación era cumplir todos sus caprichos, pero mi subconsciente recordaba la promesa que había hecho; ser una muñeca.

—¿Qué no me escuchaste? —Liam bramó tras de mí— He dicho que empaques

Su grito no hizo más que endurecerme aún más de lo que ya estaba. ¿Cómo pensaba que podría andar como si nada? No sabía a dónde iría. Estaba asustada por su presencia y su voz.

—¿Estas ignorándome? —Escuche sus pasos acercarse— ¿Quién te crees para silenciar mis preguntas en el aire?

Pude sentir su mano tocarme de nuevo. Su tacto no era agradable ni gentil. Por cómo me aprisionaba el hombro, era claro su enojo. Estaba enfurecido por mi atrevimiento. Respire con fuerza cuando me obligo a girarme por completo, justo para mirarle como él quería.

Mis ojos grises se posicionaron con confusión en su mirada de fuego. Esta, que pareció algo sorprendida por encontrarme en tal estado, simplemente se encendió más de lo que ya estaba.

—¿Por qué me miras así? —Soltó entre dientes— ¿Quién te crees para mirarme así?

Mi rostro pareció encenderse casi después de sus preguntas. Mi cuerpo se movió torpe pero por si mismo. Mis manos, cual temblorosas como gelatina, fueron directas hacia los cajones, sacando casi todo por mera consciencia. No quería admitirlo, pero aquella voz me hacía hacer cosas que odiaba. Por más que tratase ir en contra de sus caprichos, su mera presencia me dominaba por completo… y creo que Liam lo sabía.

Sin querer observarlo ni una sola vez más, saque a velocidad inhumana lo que necesitaría para el viaje. No deseaba hacerle esperar, no quería pensar en lo que pasaría si eso pasaba.

—Lista… —Solté perturbada por verme terminar, pero mirando el suelo tan cabizbaja como si no quisiera irme del lugar que tanto me había visto sufrir

—Bryant —Su voz hizo que volteara al frente. El recién llamado ya estaba en la puerta

—¿Mi lord?

—Toma sus cosas —dijo mientras le veía entrar al cuarto—. Y Bryant…

Se hizo un silencio.

—A la próxima que tu juguete decida ir a alborotar al mío, tú te quedas sin dedos

—Si señor…

Sorprendida, pude ver como mi hermanastro tomaba mi maleta. ¿Había escuchado bien? ¿Me había humillado por nada, verdad? ¡El ya sabía que Karen había entrado a mi cuarto! ¿Entonces por qué castigarme? Estreche la mirada sin comprender nada en lo absoluto. Si él sabía que la culpa la tenía el juguete de su hijo, entonces… ¿Por qué me estaba obligando a empacar? Mi cuerpo tembló de ira al recitar su desplante en la cocina. ¿Por qué me había denigrado entonces?

Mordí mis labios intentando no decir nada que empeorara la situación. Estaba realmente enfurecida pero no deseaba que me castigase con verdaderos motivos. Respire con fuerza y, tratando de actuar natural, tan solo camine hacia afuera de la habitación.

Al pelirrojo le importo poco mi actitud, ya que, al verme andar, comenzó a marcar el rumbo a las escaleras. Era extraño verle desde atrás. Era como si su gran espalda y su cabello rojo meciéndose como el reloj de péndulo, me guiasen a mis últimos momentos de vida… el camino a la guillotina. Mi decapitación estaba cerca, lo presentía. Algo malo iba a pasar en el periplo pero estaba tan molesta que poco me atemorizaba.

Respire con fuerza y sin dejar que la meta me quitase la valentía, mire hacia el frente con la dignidad en alto. Si llegaba a tocar el tema de castigarme iba a recordarle la amenaza que le había hecho a Bryant. Esta vez no iba a dejarme, incluso si el revelarme podría traerme peores pasadas.

Sonreí entonces y, siguiéndole en silencio, mire a mis alrededores. No sabía realmente a dónde íbamos, pero sin sus secuaces, ¿Tendría que recurrir a mí, o no? ¿Estaría bien manifestar mis quejas? Mis puños lo afirmaron. Esta vez, incluso si me amenazaba, iba a defenderme; lucharía.

                                                                 * * *

Atravesamos el jardín rociado por el agua de la noche pasada. El olor a pino y lodo estaba mezclado en el aire de la entrada oscuridad. La Luna estaba de nuevo en el cielo, pero esta vez no me saludaba para recibirme con una sonrisa. Era una Luna gorda, llena. ¿Por qué presentía que tenerla encima de mí iba a causarme problemas? Trague saliva mientras pude y, observando aún a Liam y su hijo caminar frente a mí, simplemente pensé en lo que pasaría de ahora en adelante.

Era seguro que el pelirrojo no me diría el destino y que en el camino, solo tormentos recibiría. Podía imaginarme el recorrido. Su voz martirizándome, seguramente recordando mis pecados. Inhale tanto aire pude. Mentalmente, aún no estaba lista para esto.

—¿Desea algo más, mi señor? —Bryant habló de repente, acaparando mi atención de inmediato

Liam volteo a verme tras su hombro, sonriendo como si algo macabro acabase de pasarle por la cabeza.

—Nada —Escupió, volviéndose hacia el frente— ¿Has metido ya el regalo para Leonard en el auto?

—Si señor

Mi cuerpo tembló casi al instante. Mis piernas se hicieron de madera. Pude jurar escuchar algo dentro de mí romperse y si no me equivocaba, creo que habían sido mis agallas. ¿Le había escuchado bien? ¿Esto debía de ser una broma?

—Mete a la cría —Añadió tomándose de la sien—. Quiero terminar con esto cuanto antes

Pude observar a mi hermano observarme y sus piernas moverse. Mi corazón pegó un latido en mi pecho. ¿Leonard? ¿Me llevaría con Leonard? ¡¿Iba a abandonarme?! ¿¡Iba a regalarme?! Mi mente dio vueltas, sentí las lagrimas revolverse en mis ojos. Me dolió el estomago, sentí miedo una vez más. Mis piernas hicieron lo impensable, comenzaron a moverse. En cuanto quise fugarme del lugar, sentí las manos de Bryant tomarme de la cintura. Pegue un chillido que hasta a mi me pareció ensordecedor. Patalee como nunca lo había hecho. Grite lo que había enmudecido tantas semanas.

—¡NO! ¡No quiero ir! ¡Por favor, no! —Agite mi cuerpo para que me soltase— ¡Bryant, no! ¡No dejes que me lleve!

—¿Qué te ocurre? —Bryant no me entendía. No esperaba que lo hiciese

—¡Suéltame! ¡Por favor, no! ¡NO!

—Mete a la cría ya, Bryant —Liam esperaba en el auto, parecía no importarle mi desplante—. No tengo tiempo para esto

—Caroline… no hagas esperar a mi señor

—¡No quiero ir! ¡No quiero!

En ese preciso momento, sentí alguien levantarme en el aire. Deje de agitarme. Por cómo podía observar, era Liam el que me había cargado, ya que Bryant estaba frente a mí, con los ojos tan abiertos como yo.

—Bryant, me decepcionas —soltó con una voz grave—. No puedo creer que te tardes tanto

Mi corazón dio otro latido, síntoma de la desesperación. A manos de Liam, ya no había escapatoria. ¿Y entonces porque no me movía? Ni yo misma lo sabía. Era como si sus manos me hubieran congelado por completo. Quería seguir ajetreándome, quería huir, correr tan lejos como se pudiera de ese auto, pero simplemente no pude. El pelirrojo me alzó hasta el automóvil y tirándome como una bolsa, se metió en la limosina conmigo.

El tremendo azote hizo que me levantase como resorte. Mire a un Bryant preocupado afuera. Mi boca tembló al sentir a Liam mirarme pero mis manos actuaron solas para querer sobrevivir. Tome de la manija con cierta fuerza y la jale hacía mi. Fue agobiante saber que estaba cerrada. No podía salirme.

—¿Podrías quedarte quieta?

—¡Abre la puerta! —Le grite sin importarme nada. Dándole la espalda, golpeando el vidrio.

—¿Realmente crees que voy a hacer eso?

—¡Por favor, abre la puerta! —Volví a gritar, ahora más desesperada que antes— No quiero ir ahí, por favor, no me lleves ahí ¡He aprendido bien! No volveré a salir, pero no me lleves ahí

—¿Por qué no quieres…?

—¡Abre la maldita puerta! —Chille más fuerte al escuchar el motor encenderse— ¡Ábrela por favor! No quiero… ir

Sentí el auto moverse. Mi boca tembló al escuchar en mi cabeza como el gordo murmuraba sus experimentados movimientos y el nombre de quien no me había dejado dormir durante tantas noches seguidas.

—¿Al fin?

—¿A-A dónde vamos?

Mis labios temblaban aún, estaba deseando que lo que había escuchado antes de subirnos al coche, fuera nada más que una simple mentira.

—¿Después de tú comportamiento crees que voy a decirte?

Respire profundamente, intentando tranquilizar mi cuerpo alterado.

—¡Por favor! ¿Podrías decirme a donde vamos?

—¿Desde cuándo crees que tienes boca como para preguntar?

—¡Por favor! —Voltee a verle, llena de lagrimas— ¡Dime a donde vamos!

—Osa en preguntar una vez más y te corto la lengua —Soltó ahora más serio

Mis ojos se llenaron de lágrimas esta vez. Sabía que era capaz de hacer aquello, pero simplemente no podía quedarme con la duda. Si íbamos a ir a ese lugar, entonces tal vez, mi vientre podría volver a salir herido y ocupado.

—¿Vas a regalarme?

Mire sin cargos a quien estaba aún lado de mí. Ahí, con los brazos cruzados, tan solo conectaba su miraba con la mía. Por alguna razón, esta vez, sonreía.

—Estoy ansioso por llegar…

Mis ojos se abrieron al escuchar tal oración salir de su boca. ¿Estaba escuchándolo bien? Mordí mis labios esta vez, y girándome para no voltear a verlo, simplemente me resigne. ¡Bien! Tampoco es que desease estar a su lado. No importaba con quien lo estuviese, yo los iba a odiar a todos como quiera.

                                                                 * * *

La limosina se aparco justo fuera de una grande puerta de cristal. Mis ojos, ya perdidos de esperanza, voltearon a ver con suma preocupación hacia el exterior. A comparación de la mansión de mi próximo ex-dueño, esta era más pequeña pero moderna. Podría suponer un cupo para veinte o treinta personas. Estaba ubicada a lo largo de un lago en donde cisnes dormían por ser aún de noche.  

—Bájate

Mi rostro, que estaba rojo de tanto llorar, simplemente hizo caso a lo que me habían ordenado. ¿Dónde había quedado tanta valentía? Suspire al verme caminar a aquel lugar, que en primera instancia, había intentado evitar. Era increíble que ahora mis piernas se sometieran a lo que estaba por venir. En el camino, había entendido una sola cosa; Liam iba a regalarme por haber sido tocada, ultrajada. Por no defenderme… por permitir ser usada antes de que él mismo me estrenara.

Y era por eso que no me quería cerca de él.

—Si tratas de correr o decir algo sin permiso, te aniquilo ¿Entiendes?

—Entiendo…

La brisa de la noche hizo bailar mi cabello cuando di un paso hacia el frente. Mi cabello azulado cubrió mi mirada perdida. Por alguna razón, en el recorrido me había deprimido de sobremanera, justo porque no podría ver a Karen o a Bryant  de nuevo, creo que lo peor era que no podría enviarle ni un solo mensaje a mi madre por medio de mi hermanastro. Respire con cierta tristeza cuando pasamos por la fuente media del jardín principal.

Esto sería mi nuevo hogar…  

—¡Bienvenido a mi humilde morada, Dagon!

Una voz frente a nosotros me hizo dejar de pensar y pararme. Aun y a pesar de que Liam yacía frente a mí, pude ver un cabello oscuro y piel morena recibirlo. ¿Sería él?

—Buenas noches, Black —Liam le saludo de lejos, el reciente sonrió mientras se inclinaba

—Buenas noches —El recién nombrado se irguió con una sonrisa maliciosa— ¡Vaya! ¿Traes compañía?

Llegue al lado de Liam con cierto miedo, sin poder evitar arrugar el smoking oscuro que el pelirrojo portaba esa noche.

—Algo así

—No esperaba que acarrearas más gente —Pude sentir un escalofrió por cómo me miraban esos ojos verdes—. Por la reunión, hay pocas habitaciones, pero buscare alguna libre…

Mi dentadura se enterró una con otra. ¿Reunión? ¿De qué estaba…?

—No te molestes —Soltó Liam de repente—. Se quedará conmigo, tengo asuntos pendientes con ella.

—Ya veo… entonces —Se dirigió hacia mí—. Bienvenida a mi humilde morada, Caroline

Trague saliva atemorizada al saber que sabía mí nombre, pero agradeciéndole con una reverencia, me incline como me habían enseñado de pequeña. El pelinegro que yacía frente a nosotros, sencillamente sonrió débilmente antes de darnos la espalda. Pude sentir cierto alivio cuando este, abriéndonos la puerta, dejaba de observarme. Por alguna razón, mi sexto sentido me decía, que la boca del lobo estaba descubierta. 

Continue Reading

You'll Also Like

46.1K 5K 118
La historia se centra en Yuki , una exorcista.En medio del siglo XIX. Yuki es miembro de la Orden negra, una organización religiosa integrada por exo...
20.2K 900 23
Una bella historia de amor entre Rivers y Producción - FINALIZADA!!
3.4K 105 24
¿Qué sucedería si de un momento a otro, en cuestión de segundos, tu vida cambiara para siempre? Si así como si nada, todo lo que conoces se fuera a l...
4.5K 411 13
¿Que pasaría si Damon y Stefan tuvieran una hermana mayor? ¿Y si creyesen que estaba muerta? ¿Y si Stefan encontrará a su hermana en Chicago mientra...