POV Vanessa.
Abrí los ojos y estos podían verlo todo de una manera extrema y definida. Pero sin usar mis ojos de mujer loba.
Mi nariz podía olerlo todo, desde el olor de humedad en unas hojas mojadas por una pequeña lluvia que sucedió hace unas horas, hasta el olor a sangre que corría por las venas de una ardilla a lo alto de un árbol.
Mis patas podían correr a una velocidad que nunca había sospechado que podía alcanzar. Era rápida con mi cuerpo de mujer, sí, pero nada comparado con esto. Literalmente, podía correr y no sentir el aire en mi cara porque incluso era más rápidos que este.
Mis orejas estaban tan desarrolladas que podía escuchar los latidos de un venado a kilómetros y kilómetros de distancia, mucho más lejos de lo que podía escuchar en mi forma de loba anterior.
Mis papilas gustativas estaban más desarrolladas también, podía sentir el sabor de la humedad en el bosque.
Estuve días internada en el bosque, logré aprender a controlar mi transformación a la brevedad.
Era todo tan fácil en mi forma de loba completa, solo tenía que adaptarme a las reglas de supervivencia, pero con mi inteligencia humana era mucho más fácil atrapar un animal para comerlo cuando tenía hambre.
Encontré una cueva cerca de un arrollo donde podía vivir, la comida era abundante en estos bosques, nadie se metía conmigo aquí y si lo hacía, terminaba muerto.
Todo era muy fácil y me gustaba.
Como loba no tenía que preocuparme por los problemas, no tenía que preocuparme porque me mientan o usen, no tenía que preocuparme por el amor. No, nada de eso tomaba control en mi cuerpo cuando estaba como loba.
Mi instinto animal podía salir a relucir. Lo adoraba.
Una nota fue lo único que le dejé a los chicos para que no se preocupen por mi, lo escribí y se lo dejé a Scott en su casa, pero controlé estar en forma de mujer cuando lo hacía. Los seres sobrenaturales pueden sentir mi olor cuando soy mujer, pero cuando me transformo en loba completa, este cambia y no saben que soy yo.
Podía mantener este secreto solo para mi. Podía vivir como loba lo que queda de mi vida y no preocuparme por nada más.
Tenía ganas de hacerlo.
POV Scott.
Mi asma había vuelto. Tan malo como era antes de ser hombre lobo.
Habían pasado cinco días, cinco días en los que no hubo otras Quimeras, no hemos visto a los Médicos del Pavor y no supimos nada de Vanessa.
Pasamos dos días enteros buscándola por los bosques, pero parecía que se había desvanecido en el aire. Nadie sabía nada de ella ni pudimos captar su aroma o ningún rastro. Como dije, parecía como si se hubiera desvanecido en el aire.
Eso, hasta que luego de una sesión de búsqueda había vuelto a casa cansado y con el humor por lo suelos. El aroma que respiré ese día en mi habitación me hizo detenerme.
'' Caminé hasta mi habitación dispuesto a tomar un baño. Estaba cubierto de suciedad del bosque.
Habíamos estado horas buscando a Vanessa.
No encontramos nada, ni un rastro de ella. El hecho de que lloviera el día que se escapó hizo que el pequeño rastro que tenía fuera cubierto por la humedad y el agua. Y desde entonces, no supimos nada de ella.
Estaba devastado y desesperado por encontrarla, todos lo estábamos, pero el que peor se tomó la noticia fue Stiles. Era de esperarse.
Él se enojó con todos y nos gritó a todos mientras maldecía, creo que nunca le escuché decir tantas malas palabras juntas. Luego empezó a tirar cosas de su habitación mientras lloraba y seguía gritando. Intentamos calmarlo, pero nos apartó con toda la fuerza que tenía y nos golpeó con sus cosas.
Finalmente, mi madre llegó con nosotros y le puso una inyección para dormirle. Lydia la había llamado mientras nosotros le reteníamos.
Stiles, cuando se despertó al día siguiente, no quiso hablar con nadie sobre ella. Solo hablaba con nosotros para realizar la búsqueda por los bosques, en lo que siempre participaba y buscaba solo. Intentamos que nos acompañara, sería mejor buscarla en grupos así tenía quien lo protegiera de los seres sobrenaturales, pero él se negó. Aún así alguno de nosotros le seguía por detrás para mantenerlo vigilado.
Una noche, luego de la búsqueda, sentí su aroma en mi habitación cuando entré.
Su aroma se centraba en una nota que estaba doblada sobre mi cama, la desdoblé y noté que era la letra de Vanessa. La leí.
Chicos, voy a ser lo más breve posible.
No me busquen. Estoy bien.
Lamento haberlas asustado, Lydia y Malia, no quería hacerles daño, por eso huí por la ventana.
Sé que probablemente estén intentando encontrarme en estos momentos, por lo cual les pido que no lo hagan. No quiero ser encontrada, por lo menos por unos días. Tómenlo como unas pequeñas vacaciones. Les aseguro que me encuentro bien y nada me ha pasado, nada malo por lo menos.
Vanessa.
Miré la carta sin creer lo que veía y tuve que leerla tres veces más para darme cuenta que era verdadera y hecha con mi lápiz y papel que guardaba en mi escritorio.
Vanessa se fue por cuenta propia. ''
Los chicos no quisieron dejar la búsqueda al principio, discutimos casi una hora sobre eso, pero al final, decidimos dejar la búsqueda luego de la carta.
Ese día intenté captar un rastro de ella por mi casa, pero su aroma solo se encontraba en mi habitación, para luego perderse en la ventana. Olí por los alrededores de mi casa, pero no encontré nada. Ni tampoco Malia o Liam encontraron algo.
El sheriff mandó patrullas y hombres en su búsqueda también. No le importó su carta, hasta el día de hoy sigue buscándola con sus hombres por los bosques. Él se veía dolido por su huida, desesperado. En ese momento me di cuenta que el padre de Stiles no solo veía a Vanessa como la novia de su hijo, ya la veía como parte de su familia.
Lydia se encontraba como si hubiera perdido a alguien importante. Supongo que lo era. Pero divagaba e intentaba no ocupar sus poderes, no quería hacerlo, porque ella sabe que si la encuentra hay posibilidades de que la encuentre muerta. Eso es lo que hacen las Banshees, predicen las muertes y encuentran los cuerpos.
Liam y Hayden se encontraban siempre juntos. Ellos son los más estables de nosotros, Liam se sintió devastado al principio. Lloró y todo. Pero Hayden estuvo ahí al instante para contenerlo, él intenta parecer fuerte pero en momentos en los que piensa que nadie está mirando, su rostro se ensombrece y sus ojeras se acentúan. Noté que seguía queriendo a Vanessa como mujer, y no como amiga. Intentó ocultarlo, porque ahora tiene a Hayden y él la ama, pero no olvidó del todo a la chica.
Incluso Malia se vio afectada por su desaparición. Se muestra arisca con todos, está enojada casi todo el tiempo. La busca día y noche, ella fue una de las que se negó a dejar la búsqueda pero por mayoría se decidió que se tiene que dejar.
Stiles... él cambió considerablemente desde que Vanessa se fue, se volvió más frío con todos nosotros.
Nos hablaba lo justo y necesario para noticias, la única que cruzó más que unas palabras con él fue Lydia. Stiles también la apartaba a ella, pero no tanto como a nosotros.
De alguna manera, preferiría el Stiles enojado con todos al que es hoy. El Stiles que es desde que se despertó, luego de la huida de Vanessa, es el peor que vi desde que lo conozco. Este no estaba enojado, triste, nervioso... no, este Stiles era vacío. No expresaba nada, parecía no sentir nada tampoco.
La última vez que le vi sentir en estos días fue cuando se volvió loco ante la noticia de Vanessa y el enojo y desesperación al negarse cancelar la búsqueda. Y al ver la nota, claro. Desde entonces, mantiene una expresión indiferente en el rostro con ojeras. La voz plana y los ojos vacíos. Como dije, parecía no sentir nada más.
Todos volvimos al instituto. Caminando por los pasillos de la secundaria de Beacon Hills viendo a los demás seguir con sus vidas.
Con las preocupaciones normales de un adolescente, como los exámenes, la universidad a la que asistirán, tal vez piensen en esa persona que les gusta, tal vez tengan el corazón roto por las personas que les gustan... preocupaciones normales de humanos, de adolescentes. O eso pensaba.
Mientras les veía, pude notar algo. Tenía la sensación que, aunque sean humanos y se preocupaban de su vida día a día, sentían que algo estaba pasando. Que algo iba a ocurrir.
Solo que no saben qué es o que tan malo va a ser.
Siempre que siento como que debería hacer algo con ello, me encuentro alcanzando mi inhalador de mi bolsillo trasero. Como si me fuera a dar un ataque y fuera a darme una brillante solución para salvarlos a todos. Pero la verdad es... que no sé que hacer.
Creo que nadie lo sabe.
Quizás ese es el porqué nadie habla con nadie. A veces ni siquiera sabes que otro está allí. Nos encontramos pensando en nuestros propios problemas.
En el amor perdido, el amor huyendo, el miedo por lo que va a suceder, el miedo por no saber cuando van a venir a por ti, en lo que te vas a convertir... cada uno tenía esos pensamientos en sus cabezas, aislándonos sin que lo sepamos.
Pero creo que algunos de nosotros nos parece bien eso. Porque no hablar hace más fácil mantener los secretos para uno mismo.
Y no sé si realmente alguien está mintiendo sobre algunas cosas. Tal vez son mentiras que se muestran como omisión de datos, detalles, hechos, lo que sea. Pero aunque sea para proteger o guardar algo, son mentiras que nos alejan más y más.
Personalmente, creo que la peor mentira es a el sheriff. Porque nadie le ha contado aún lo de Parrish.
Pero él no tiene la culpa, porque tampoco se le contó a Parrish lo que está sucediendo. Él no parece recordar que se está llevando los cuerpos. Y creemos que él solo es muy peligroso si se intentan poner en su camino.
Si Stilinski supiera la verdad, sin duda se interpondría en su camino.
Así que Lydia y Stiles están intentando encontrar los cuerpos. Lo que significa encontrar el Nemeton. El centro de nuestros problemas, lo que inició todo.
No, es mentira. El Nemeton no inició todo, lo iniciamos Stiles, Allison y yo.
Y no hemos encontrado el Németon desde que los tres nos metimos en esas bañeras con hielo ese día.
Ambos van por los bosques intentando encontrar el Nemeton. Creo que ambos lo utilizaban, de alguna manera como una excusa, para buscar no solo el árbol si no también a Vanessa. Al principio no lo hacían para encontrarla, pero luego al terminar la búsqueda se dedicaron a hacerlo para mantener la mente en algo más. Y ese también es el porqué Stiles no aleja a Lydia tanto como a nosotros.
No somos lo únicos buscando Quimeras. Stilinski tiene a Clark, la hermana de Hayden, y a Parrish buscando el siguiente objetivo.
Normalmente él llevaría toda la estación de policías pero como lo está utilizando para la búsqueda de Vanessa, se conformó con tenerlos solo a ambos en la búsqueda. Cuestionando a todos los que tengan genética de Quimera. Es decir, cualquiera que tenga dos grupos de ADN.
En verdad, nadie sabe lo que están buscando. Algunos piensan que es un asesino en serie que anda suelto, otros piensan que es algo peor.
Las dos Quimeras que conocemos y que siguen con nosotros, Hayden y Corey, lo están haciendo bien. Esperamos que Vanessa lo esté haciendo de la misma manera. Y no solo es eso, no lo están haciendo solo bien. Sanan más rápido que nosotros y son fuertes.
No necesitan nuestra ayuda. Y de todos modos, no creo que la quieran tampoco.
Aún no he sabido nada de Kira.
Estoy cada vez más y más preocupado por Deaton. La veterinaria cerró luego de que no obtuviera respuesta de él por semanas. Desde que le informó a Vanessa qué especies tenía en su ADN, no hemos sabido nada más de él.
Y cuando la llamó, se le notaba nervioso.
- Sé que algo se acerca. Y lo único que puedo pensar es en qué voy a hacer si en ese momento no pueda respirar. - Dejé mi inhalador sobre la mesa de metal de la sala de observaciones.
- Pareces como si estuvieras tratando de disculparte...
Levanté el rostro y vi al hombre lobo en frente mio.
- Viniste aquí buscando un Alpha. Supongo... que siento que me encontraras.
- Yo no lo siento.
- ¿Aún quieres ser parte de la manada, Theo?
- Scott... aún estoy contigo. Para bien o para mal.
Le miré un poco agradecido, para luego bajar la mirada pensando en lo que pasará. Ya he vivido situaciones parecidas, pero ninguna como esta.
- Créeme, será mucho peor.
Theo sonrió con amargura luego de un rato y me miró.
- Cuento con ello.
POV Stiles.
- Es casi como si esta cosa no quisiera ser encontrada. - Me quejé.
Lydia y yo nos encontrábamos buscando el Nemeton en el bosque. Lydia me miró atenta ante mi comentario y supe inmediatamente a que se refería.
Desvié la vista. No quería pensar en ella, en su estúpida nota, ni en mi corazón roto.
No quería pensar en nada más que encontrar el árbol que vi cuando morí en la tina de agua helada.
- Tal vez, sabe que llegamos tarde a clase... - Intentó bromear Lydia, no le presté atención. - Ya sabes, porque hemos estado en este sitio dos veces.
Le miré y ella me señaló un árbol con dos cruces blancas.
Las había escrito para indicar que ya habíamos ido por este camino, y así lo hicimos. Dos veces. Esto no está dando frutos.
- ¿Podemos hablar con Parrish ahora? - Preguntó la Banshee cansada.
Ella había querido hablar directamente con el ladrón de cuerpos desde el principio, pero cuando descubrí que hay una posibilidad de que él se acuerde de los cuerpos que roba... se iba a dar cuenta de quién mató a Donovan. Y no podía arriesgarme a que lo descubran.
- No. Si el Németon está cubierto de cuerpos, deberías ser capaz de encontrarlos.
- ¿Yo? - Preguntó confundida.
- Sí, tú. Eso es lo que las Banshees hacen. Encuentran los cuerpos. - Murmuré cruzándome de brazos y mirándola seriamente.
- Bueno, la Banshee se está tomando el día libre, así que ¿por qué no hablamos con Parrish?
- ¡No podemos! - Le contesté un poco enojado y elevando la voz.
- ¿¡Y por qué no?!
- ¡Solo no podemos! ¡Uno de los cuerpos-...! Uno de ellos podría... podría ser... - Me callé al darme cuenta de que casi digo el nombre del chico.
- ¿Podrían ser qué?
- Podrían ser una pista. - Contesté luego de un rato, mirando hacia otro lado.
Sentí la mirada de Lydia en mi, sabía que no me creía nada y no la culpaba. Mi respuesta fue muy escasa y estúpida, pero estaba bajo presión así que no se me ocurrió algo mejor. Ella habló luego de un momento.
- Me voy a ir ahora, Stiles. Voy a hablar con Parrish, y decirle que él es el que se está llevando los cuerpos. ¡Siempre es mejor cuando lo saben! - Gritó Lydia con amargura.
Sabía que en ese momento se acordó de Jackson, pero él era demasiado idiota para aceptar su verdad cuando se lo dijimos hace unos años.
En mi fuego interno, antes de empezar a seguirla, pensé que Parrish no solo debía saber que era el ladrón, si no que también me debía un Jeep. Pero no dije nada mientras caminaba hacia el auto de Lydia.
Antes de entrar, miré a los alrededores para ver si veía algo rubio rojizo moviéndose por los árboles del bosque. Cuando no encontré nada, suspiré frustrado y entré en el auto dando un portazo.
Intentaba matar el pensamiento triste de que nunca iba a encontrarla de nuevo.
Dos horas después me encontraba entrando a la biblioteca con Theo Raeken siguiéndome detrás.
- ¿Están seguros que es allí donde Parrish lleva los cuerpos? - Me preguntó.
Le había informado de la situación y de lo que tenía planeado Lydia, creo que debería saberlo ya que como yo maté a Donovan, él había matado a Josh.
- Lydia dice que eso es lo que pasa en su sueño. Dice que en el, Parrish tiene todos los cuerpos a su alrededor y él está en medio sentado, rodeado de fuego y sus ojos brillan como este también.
Theo se quedó callado un segundo antes de hablar.
- Sabes que si Lydia encuentra el Nemeton, también va a encontrar a Donovan. - Me detuve en medio de las escaleras para mirarle directamente con dureza. - Lo siento... - Murmuró viendo a todos lados.
Imbécil.
- Por eso te lo estoy diciendo. También va a encontrar a Josh.
Theo se quedó en silencio un momento, mirando al suelo y cuando habló, lo hizo con incomodidad.
- ¿Sabes? Tal vez debería. - Le miré fijamente. - Creo que las cosas son diferentes ahora para Scott. Especialmente luego de lo que le hizo a Corey. No creo que vaya a culparnos por defendernos. Sé que a ti no te culpará.
Traté de pensar en lo que dijo Theo. Traté de imaginarme la situación, yo diciéndole a Scott qué sucedió esa noche y porqué lo hice. Él me decía que estaba todo bien, que no fue mi culpa, que solo me estaba defendiendo a mi mismo.
No logré capturar esa imagen.
En mi pensamiento él me decía que era un asesino.
Desvié la vista amargado por la situación, para encontrarme con el mismo lugar en el que había muerto Donovan por un tubo en su pecho. Cuando vi allí, había un cadáver con el tubo en el pecho, sangrando una sustancia negra parecida a sangre, mezclada con mercurio.
Pero no era Donovan el que estaba allí. Era yo.
Cerré los ojos una vez más y la imagen desapareció.
POV Scott.
Me encontraba en clases de Matemática intentando resolver unos problemas, no tenía mucho éxito. Me encontraba pensando más en los problemas que estaban sucediendo, preguntándome dónde estará Vanessa. Pero fui interrumpido por mi compañero que se sentaba en frente mío.
- Hey... - Dejé de jugar con mi bolígrafo para ver a Theo dado vuelta y viéndome preocupado. - Necesito hablarte de algo después.
- ¿Estas bien?
- Sí, yo estoy bien. - Me tranquilizó. - Pero es algo que probablemente debería haberte contado desde hace mucho tiempo.
- ¿Qué es? - Pregunté confuso.
Theo dudó un poco, pero terminó diciéndome con tristeza el tema.
- Es sobre Stiles...
Iba a preguntarle qué pasó con él, pero mi pregunta fue interrumpida por el sonido de unas sirenas, algo se estaba acercando a la escuela.
- Espera. ¿Escuchas eso...?
- ¿Es una patrulla de policía? - Preguntó confundido y agudizando el oído.
Pero no lo era, había escuchado ambos sonidos demasiadas veces para saber la diferencia entre los dos. Eso no era la sirena de un policía.
- Es una ambulancia.
Corey.
Todos saltamos de nuestros asientos, incluso la profesora, para ver que sucedía. Theo y yo salimos apresurados empujando a los estudiantes en nuestro camino.
Encontramos a Mason histérico y asustado. Él estaba manchado en sangre y algo más... mercurio.
- Empezó a sangrar, por todas partes... yo no... yo... - Mason no podía coordinar las palabras.
- ¡No dejes que lo hagan! ¡No dejes que me maten! - Gritó Corey con dificultad ya que estaba largando sangre negra y mercurio por la boca, los ojos, la nariz y las orejas.
El chico estaba empapado en ella.
Miré al chico siendo ingresado en una camilla a la parte trasera de una ambulancia. Sabía lo que significaba que estuviera así. Liam nos contó a todos lo que descubrió mientras estaba secuestrado, lo que un tal Zach le había dicho.
Si sangraba mercurio, era un fracaso. Y los Médicos del Pavor iban a por él.
Theo me sacó de mis pensamientos.
- Scott, debemos seguir la ambulancia. Tenemos que protegerlo, ¿verdad? - No le contesté mientras veía como se lo llevaban. - ¿Scott? ¡Scott! ¡Vamos! Eso es lo que haces ¿verdad? ¿Proteger a los demás?
No respondí y salimos corriendo a un auto.
Mientras corría, pude sentir la mirada de Mason en mi nuca.
Theo conducía hacia el hospital, siguiendo la ambulancia. Yo solo miraba distraído por la ventana, hasta que recordé lo que me dijo el chico en clase de Matemática.
- Hey, ¿de qué querías hablarme?
Theo me miró unos segundos para luego negar con la cabeza.
- Puede esperar.
- Escucha... - Suspiré. - si algo va mal, deberías contármelo. Todos deberíamos empezar a hablar con el otro de nuevo.
Theo se quedó callado unos segundos para luego murmurar con cansancio.
- Puede que este no sea el mejor lugar para empezar, Scott... - Murmuró.
- ¿Crees que me voy a enfadar?
- No, no conmigo.
- Theo, puedes decirme lo que sea. - Theo dudó unos segundos pero finalmente decidió hablar.
- Abre el maletero. - Lo hice, estiré la mano para abrirlo y dentro encontré una llave que por una punta, estaba manchada de sangre seca. - Perteneció a Stiles. Se le cayó en la escuela.
Miré la sangre seca un momento más para luego hablar.
- ¿Se le cayó cuándo?
- Cuando mató a Donovan.
Levanté el rostro con brusquedad y quité la mirada de la llave para mirar a Theo en busca de respuestas. No creía lo que mis oídos estaban escuchando.
- ¿De qué estas hablando?
- ¿Te acuerdas... cuando se hirió el hombro verdad? Incluso hasta el día de hoy le duele un poco. Oliste su sangre ese día.
Negué con la cabeza intentando apartar los pensamientos de él matando a la Quimera.
- Pero... él dijo que se golpeó con el Jeep. Que el capó se le cayó encima.
- No, no, no. ese fue Donovan. Fue a por Stiles en la biblioteca. Y yo solo vi el final de eso... cuando vi lo que Stiles estaba haciendo, no pude detenerle. Se puso tan o más violento como se puso cuando se enteró de que Vanessa se fue. - Tomó aire. - Yo no... yo no debería estar contándote esto. Deberías oírlo de él-...
Le interrumpí.
- Cuéntame. - Theo me miró un segundo y asintió.
- Vi a Donovan caer. Stiles le pegó con la llave ingresa, y luego... y luego simplemente le siguió golpeando. - A Theo se le humedecieron los ojos y habló con voz temblorosa. - Yo... quizás fue porque él amenazó a su padre ¿verdad? O quizás Stiles pensó que tenía que seguir defendiéndose... pero simplemente le siguió pegando.
- Eso no es posible... - Miré a otro lado mientras murmuraba eso.
Pero algo me decía que sí lo era. Me acordé de las veces en las que Stiles se puso igual de violento como Theo estaba contando, en la escuela luego de que se llevaran a Vanessa, cuando se enteró de que ella se fue... él reaccionó tan violentamente como estaba contando Theo.
- Él aplastó el cráneo de aquel chico. Yo... lo oí romperse y hacerse añicos... - Se secó una lágrima con la mano derecha. - Cuando logré sacar a Stiles de encima de él, la mitad de la cabeza de Donovan estaba destrozada... ni siquiera parecía real. - Susurró la última parte. - Me sigo diciendo que fue en defensa propia. Pero... pero... - Se detuvo sin palabras. - Scott, lo siento. Nunca había visto nada parecido. Y nunca había visto a alguien tan enojado. Tú lo viste cuando se enteró lo de Vanessa y cuando los Doctores se la llevaron, imagina eso pero mucho peor. Deberías hablar con Stiles. Tienes que hablar con él.
Miraba con horror la llave inglesa que sostenía en mi mano.
- ¿Por qué... por qué no me lo dijo? - Susurré con dolor.
- Él... no quiero decir esta palabra pero creo que es lo que más se acerca a lo que sucedió, él me amenazó para que no lo dijera. Me dijo que no quería que nadie se enterara, en especial Vanessa. Yo... lo siento, Scott.
Llegamos al hospital de Beacon Hills para encontrar a mucha gente desesperada allí. El lugar era un desastre, habían cosas rotas y tiradas y gente en el suelo con heridas.
- Ya estuvieron aquí... - Murmuré mirando el desastre.
Theo llegó corriendo detrás mio para verlo todo.
- Esto no parece obra de los Médicos del Pavor... - Murmuró.
Miré el suelo al sentir un olor raro en el piso, vi que al lado del mostrador había unas gotas plateadas mezcladas con algo negro. Sangre y mercurio. Y en ese momento me di cuenta de algo, no fueron ellos los que hicieron un desastre en el hospital.
- Fue Corey...
Corrimos por los pasillos esquivando la gente que se nos ponía en el camino. Estuvimos así unos treinta minutos, interrogamos gente por separado y revisamos en todos lados. No había nada.
Me encontré a Theo en la esquina de un pasillo.
- Los de seguridad tampoco saben nada. - Murmuré cansado.
- Yo tampoco conseguí mucho...
Nuestra conversación fue interrumpida ante el sonido del ascensor detrás nuestro, el sonido que hace al cerrarse y abrirse las puertas. Y eso estaba haciendo, abriéndose y cerrándose sin parar y sin que nadie esté dentro.
El sonido de electricidad se incrementó. Supe lo que estaba pasando.
- Ahora están aquí.
Los Médicos del Pavor habían llegado al hospital.