t w e n t y o n e.
michael entró arrastrando sus pies a la habitación, sintiendo como en un lapso de treinta minutos ya los fármacos comenzaban a apoderarse de su organismo.
"lukey, ¿por qué te gusta tanto la cerveza?" su voz somnolienta apenas podía escucharse.
el rubio se dio vuelta, terminando de colocarse sus pantalones de chándal.
"¿a qué te refieres?" frunció el ceño, acercándose al chico.
"ni siquiera sabe bien."
luke abrió los ojos.
¿cuándo michael había probado la cerveza?
"mikey, ¿cómo sabes qué sabor tiene la cerveza? ¿cuándo tomaste?" sus nervios comenzaron a hacerse presentes.
"dejaste una en la cocina y quise probarla. sabe horrible." se refregó los ojos mientras que sentía como un mareo lo sacudía fuertemente.
"no, no, no." luke sintió cómo su corazón bombeaba con fuerza contra su pecho. "tú no hiciste tal cosa, no ahora. no luego de que tomaste las pastillas." tomó el rostro de michael entre sus manos. "mikey," vio como los ojos verdes del recién nombrado eran cubiertos lentamente por sus párpados. "¡michael!" gritó cuando su novio se desvaneció justo frente a él.
digamos que los fármacos y el alcohol etílico nunca fueron ni serán una buena combinación.
-
perdón.
i'm not feeling fine.
pregunta seria; ¿esto de verdad les gusta? estoy pensando en borrarla.