NARRA NATSU
Los niños no paran de gritar y de andar de aquí para allá, cuando solo los cuidaba por ratitos no era tan complicado...
- Tengo hambre!
- Me cargas?
- Y mamá cuando regresa?
- Quiero jugo!
- Ya tengo sueño
Los dos hablaban al mismo tiempo y me costaba trabajo seguirlos
- Niños! Por favor vayan a la sala a jugar, en un momento les llevo todo lo que quieren
Los niños salieron corriendo de la cocina... Me di la vuelta para ver la olla de la comida, le quité la tapa y desprendió un olor ligeramente a quemado, busqué por toda la cocina un guante para quitarla de la estufa, pero no me fijé que mi camiseta se atoró con el mango y tiré la cacerola por accidente al suelo... Se hizo un batidillo espantoso, había guiso por todos lados.
La cabeza me empezó a dar vueltas, esto es un desastre, golpeé lo primero que tenía en frente... Más trastes que por mi culpa cayeron al suelo...
Me apoyé en una alacena y me dejé caer lentamente al suelo, me quedé sentado a un lado del guiso que había tirado y empecé a llorar otra vez
- Mierda... Lucy... Porqué no estas aquí?... Me haces tanta falta
Me quedé así un buen rato hasta que sentí como los niños entraban a la cocina y fueron hasta mi, Luna me abrazó y Nash se acurrucó entre mis piernas
- Te quiero papá
Susurraron los dos al mismo tiempo...
Qué me pasa? Prometí que los iba a cuidar bien y lo único que estoy haciendo es caer en la desesperación
- También los quiero
Le di un beso a cada uno en la frente, se quedaron dormidos sobre mi y yo en el suelo, desperté en cuanto escuché la puerta de la casa abrirse, era Happy... Olía a sal...
- Natsu?
Entró a la cocina viéndonos con extrañeza
- Esta todo bien?
- Si Happy... Es solo que se me quemó la comida y luego se me cayó la olla
- Puedo verlo... Tremendo desastre... Es casi media noche, los niños no han comido nada?
Negué con la cabeza, ya no me dieron ganas de despertarlos, así que me levanté con ellos en brazos y los llevé hasta sus cuartos, bajé y Happy estaba limpiando mi desorden.
- Natsu... No puedes seguir así, ahora eres padre, tienes que salir adelante
Cada palabra de Happy era como una apuñalada, tenía razón y empecé a llorar otra vez
- Happy... La extraño demasiado...
Caí al suelo y lloré casi toda la noche, Happy se quedó a mi lado hasta que logré quedarme dormido...
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NARRADOR OMNISCIENTE... DOS AÑOS DESPUÉS DE LO OCURRIDO
Se puede observar a cierto pelirrosa parado frente a un árbol viendo algo detenidamente, hay dos niños jugando a sus espaldas correteando las mariposas que había por el lugar.
- Niños despídanse, es hora de ir a casa
Los niños fueron corriendo hasta el llamado de su padre, se acercaron a una estatua de piedra
- Adiós mamá! Nos vemos!
Casi siempre hablaban al unísono, a veces era divertido pero para ciertas cosas era un poco molesto... Ambos le dieron un abrazo rápido a la estatua y emprendieron su camino, pero el pelirrosa se quedó viéndola un momento y puso su mano sobre la mejilla de la chica de piedra.
- Te amo Luce, nos vemos
Después de eso emprendió el mismo camino que sus hijos habían tomado.
Esa pequeña y linda familia repetía la misma rutina cada fin de semana, nunca faltaban, era como una cita y dependiendo de las fechas le daban los cuidados necesarios, bastante sencillos por cierto, porque aunque lloviera, granizara o nevara, las nubes jamás estaban sobre ella, ella siempre recibía la luz del sol.
Incluso a los niños se les hizo costumbre agarrar las novelas del estudio de su casa y las leían frente a la estatua, incluso el pelirrosa se había puesto a escribir una historia cuando la iba a ver.
A veces iban en grupo a verla, los magos de hielo y agua, los de escritura sólida y hierro, la de re equipamiento, incluso muy de vez en cuando los magos de luz y sombras se daban una vuelta.
Ella nunca estaba sola, siempre había alguien que le contara algo nuevo sobre la ciudad, algún chisme, incluso para muchos era confidente, le contaban sus más profundos secretos, iban a mostrarle los anillos de compromiso y luego las grandes barrigas de ombligos saltones.
Había personas en la ciudad que decían que ella era un ángel y durante las festividades les iban a dejar velas y collares de flores, flores de Magnolias... Le oraban y pedían milagros, le pedían que cuidara de ellos.
Al poco tiempo se empezaron a esparcir los rumores de que veían a la estatua moverse, incluso juraban que las heridas que inicialmente mostraba iban desapareciendo, como si estuviera sanando, algunos decían que en su lugar movía los ojos, algunos decían haberla escuchado llorar, otros decían que movía la boca como si quisiera hablar, unos cuantos más, que bailaba de noche con las hadas.
Cuando ese último rumor se esparció la pregunta de todos fue... Las hadas existen?... Si... Si existen...
Con el paso de los años la vegetación se encargó de embellecerla, flores crecían a sus pies, finas enredaderas envolvían sus piernas, las hojas que caían del árbol daban sobre su mano estirada... Se veía llena de vida...
Esa bella estatua era bien conocida ya casi por todo el mundo, ese bello ángel que no llegó ahí por casualidad estaba feliz, estaba dando gracias por que todo era mejor...
- También te amo Natsu
Se alcanzaba a escuchar ese fino susurro en medio de la noche, tan fino y firme que lograba llegar a los oídos correspondientes.
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Hallo! Este es el cap final, espero y les haya gustado, no me maten... Aún hay una sorpresa :-D