Podría verla dormir toda mi vida, pero no fue el caso.
Dan subió a la habitación pidiendo por favor, que la despertara de su plácido sueño y que la ayudara a bajar las escaleras.
Dijo, que habíamos venido (los chicos y yo) a verla, y sólo fui yo quien la vi.
Me armé de valor y la moví levemente, haciendo que ella soltase un ronroneo.
Adorable.
-Minah, pequeña. -dije dulcemente.
-¿Qué pasa? -se talló los ojos y me miró con esos ojos café.
-Voy a llevarte abajo. Sube a mi espalda. -dije.
Ella se destapó. El pijama era de cuerpo entero.
-Minah, te elijo a tí. -dije divertido.
-Cállate, Hope. -sonrió y se subió a mi espalda.
Sentí la respiración pesada en mi cuello y un leve jadeo, se había dormido, otra vez.
-Pero. Qué facilidad tienes. -susurré.
Suspiré y la bajé al salón.
-Wow, un pokemon. Pero no parece Pikachu, es más bien un Pichu. -dijo V.- Es pequeña, ya saben.
Jungkook le dio unas palmaditas en la espalda en modo de pena.
Las demás chicas rieron.
Tumbé a Minah en el regazo de Dan y me acomodé al otro lado de Jungkook.
*
Minah no despertó esa tarde, al parecer le habían dado un relajante para que no le doliese la pierna.
Nos fuimos a casa.
Todos hablaban sobre que las demás chicas eran simpáticas y muy atentas.
Yo... no podía dejar de pensar en ella.
Quiero tenerla a mi lado.