POV Juliet
Tenía calor.
No puedo recordar como he llegado a mi cama. Lo último que recuerdo es tener mucho dolor de cabeza y un susurro tranquilizándome.
- Agua... - logro murmurar, tengo calor, mucha calor.
- Aquí tienes – me contesta una voz cálida, susurrante, mientras puedo notar como me acercan una botella de agua a los labios. – Bebe despacio.
Consigo beber un poco de agua ayudada con la cabeza un poco inclinada, poco después noto como me cubren la frente con una toalla húmeda, que bendición.
- Gra...cias – consigo susurrar mientras noto como el sueño me vuelve a vencer.
POV D.O
Llevo más de tres horas en su habitación y es que cuando se ha desmayado en brazos de Chanyeol en el coche me he asustado como nunca. Quiero pensar que es debido a que su tapadera de hombre podría haber sido descubierta pero si me paro a pensarlo con detenimiento puede que no sea debido a eso.
En todo este tiempo des de que descubrí que era una mujer me he acercado mucho más a ella de lo que imaginé en un momento y es que en realidad compartimos muchos de nuestros gustos y a su lado he encontrado una parte de mí que me gusta.
Esta sudando mucho, hace poco que le tome la temperatura y tenía más de 38 de fiebre.
- Agua... - oigo su susurro, se nota que se está forzando para hablar.
- Aquí tienes – le contesto, bajito y suave para no asustarla, consigo inclinarle la cabeza mientras se la levanto para evitar que se ahogue cuando beba el agua. – Bebe despacio.
Consigo hacer que beba un poco, aun así la mitad del agua se le cae por la barbilla. Cojo un trapo y le limpio el agua sobrante luego lo humedezco con un balde que me he traído previamente y se lo coloco en la frente mientras le doy un ligero masaje, se nota que lo debe de estar pasando mal.
- Gra...cias – consigue susurrar antes de caer rendida otra vez.
No pasa mucho tiempo antes de que la puerta de la habitación se abra dejando pasar a Chanyeol.
- Que tal esta? Los chicos también están preocupados – comenta mientras se sienta en el suelo a mi lado y se queda mirando a una Juliet acalorada.
- Tiene mucha fiebre.
- Antes de traerlo a la habitación conseguimos que se tomara las pastillas pero parece que aún no están haciendo mucho efecto.
- Tardará – le contesto sin apartar la vista de ella, se ve tan frágil.
- Ten – me dice mientras me tiende una mascarilla.
- Nada nos impide cuidarla pero no podemos contagiarnos, acabamos de hacer el comeback, órdenes del mánager – me comenta mientras me tiende una mascarilla, rápidamente me la pongo y veo como él hace lo mismo.
- Se ve tan frágil... - comenta, distraído mirando también hacia ella, curioso que haya pensado lo mismo que yo. – Y en realidad es tan fuerte, siempre sonriendo y feliz.
- Sí – concuerdo con él, inevitablemente me sale una sonrisa. – Sabes que me dio las gracias antes de salir al escenario hoy?
- A si? – me contesta, contagiándose de la sonrisa.
- Sí, decía que para él era un sueño – susurro mientras inconscientemente vuelvo a dirigir la mirada hacia ella.
Ríe, sin decir nada.
Se crea un silencio, solo roto por el sonido de la puerta y las cabezas de Baekhyun, Kai, Lay, Sehun, Xiumin, Tao, Chen y Suho asomados.
- Que tal está? – susurra Lay, hablando por todos.
- Aun no le ha bajado la fiebre – contesta Chanyeol.
- El mánager ha dicho que si mañana también sigue malo que lo más seguro es que se quede unos días en casa. – nos informa Suho, parece que todos se han preocupado por su situación.
Asentimos en acuerdo.
- Será lo mejor – dice Xiumin al ver que nadie dice nada.
*
Poco a poco se han ido yendo todos, solo quedamos otra vez Chanyeol y yo.
Le retiro el paño de la frente, lo escurro y vuelvo a mojarlo en agua fresca y se lo coloco otra vez, ella suspira y a mí se me escapa una sonrisilla, es tan mona.
- Te llevas bien con él – me afirma Chanyeol más serio de lo normal.
- Si – murmuro vacilante.
- Ya veo
Me sorprende que este tan serio; me giro en su dirección y me quedo observándole a la espera de que siga hablando, no lo hace, solo mira a Juliet.
- Me sorprendió que te llevarás tan bien con él, normalmente te cuesta abrirte con la gente que no conoces – acaba diciéndome después de mucho tiempo.
- Me gusta – le digo, mi voz sale más calmada y baja de lo usual, es la primera vez que digo algo así. – Tenemos muchas cosas en común y lo encuentro muy refrescante el estar con él.
- Sí, te entiendo – murmura con una sonrisa sin apartar su mirada de ella; no sé a qué es debido pero me molesta que el también haya apreciado esa parte de ella.
POV Juliet
- Si, te entiendo
Llevo un rato escuchando la conversación de ellos y aunque no está bien escuchar las conversaciones ajenas tampoco se podría decir que este escuchando a escondidas ya que están hablando delante de mí. Cuando quería hacerme notar ya era demasiado tarde y no podía interrumpirlos, además quería saber que pensaban de mí.
Vaya, no sabía que me encontraban de esa manera.
- Puedes irte si quieres a dormir, yo le cambiaré la compresa de la frente y también me iré ya.- le dice D.O a Chanyeol.
Qué lástima, parece que ya no hablarán más.
Oigo como la puerta se abre y posteriormente se cierra avisando de la marcha de Chanyeol.
Poco después noto como las manos de D.O me retinan la compresa de la frente y se escucha el ruido del agua mientras la remoja otra vez.
Es cuando me la está volviendo a colocar que abro los ojos.
- Gracias – le susurro con un amago de sonrisa mientras lo veo en frente de mi cara, inclinado hacia mí.
Se sorprende pero no tarda en responderme a la sonrisa.
- De nada, te encuentras mejor? – me pregunta sin apartar sus manos de la compresa que inconscientemente ha empezado a darme pequeños masajes en la frente con ella.
- Un poco, creo que aún tengo fiebre pero mejor que antes seguro, gracias por cuidarme, si no hubiera sido por ti lo más probable es que me hubieran descubierto.
- Esta noche de sueño y mañana de reposo y estarás como nueva; y no te preocupes, yo te cuido, nadie te descubrirá – me comenta mientras me baja la compresa a las mejillas y al cuello limpiando el sudor que me ha producido la fiebre.
- Muchas gracias... Kyungsoo, lo he dicho bien – le comento con una risita nerviosa, es la primera vez que lo llamo por su nombre.
- Lo has dicho bien – me contesta riendo también con un claro rubor en las mejillas.
Acaba enjuagando por última vez la compresa y colocándomela en la frente.
- Será mejor que te deje descansar – me dice mientras se incorpora con el cubo de agua en las manos mientras se dispone a salir. – Hasta mañana.
- Vale, hasta mañana – me despido mientras veo cómo sale de la habitación y me cierra la luz.