Cautivando a Ashton (BG.5 LIB...

By darlis_steff

9.8M 842K 867K

Fiestas, chicos, coqueteos y bailar. Si, esas definitivamente no son las palabras correctas para definir a Ka... More

Prólogo
Capítulo Uno
Capítulo Dos
Capítulo Tres
Capítulo Cuatro
Capítulo Cinco
Capítulo Seis
Capítulo Siete
Capítulo Ocho
Capítulo Nueve
Capítulo Diez
Capítulo Once
Capítulo Doce
Capítulo Trece
Capítulo Catorce
Capítulo Quince
Capítulo Dieciséis
Capítulo Diecisiete
Capítulo Dieciocho
Capítulo Veinte (Final)
Epílogo
Agradecimientos

Capítulo Diecinueve (Penúltimo)

468K 37.8K 38.5K
By darlis_steff

Capítulo diecinueve

Ashton.

26 de Diciembre, 2012.

—¿Entonces Glorie está planeando esos conciertos para ti en Estados Unidos?—pregunta mamá, alzo la vista de mi celular.

—Sí, hubo buenas ofertas, me gustaron y como en mi agenda ya estaba dos presentaciones en programas para esa fecha.

—Si... ¿Por cuánto tiempo estarías fuera?

—Una semana y media—respondo con cautela, la parte de separarnos por mucho tiempo, nunca la ha tomado muy bien—como siempre el tiempo pasará bastante rápido.

—Sí, bastante rápido—murmura terminando de picar los vegetales.

Un torbellino de cabello rubio llega saltando a la cocina y abraza mi pierna mientras sus ojos claros se abren mucho. La mirada que usa cuando quiere pedir algo a lo que posiblemente voy a negarme.

—Llévame a manejar la bici, porfis, porfis, pofis—pide parpadeando continuamente y dando saltitos mientras se mantiene abrazando mi pierna.

—Sophie, ya sabes que cuando Ashton esta acá los vecinos quieren abrazarlo mucho y él quiere estar en casa.

—Pero...pero...

Sus ojos se abren mucho más. Mamá no miente, cuando vengo siempre me mantengo en casa, evitando se intersectado para una foto o autógrafos porque sólo quiero pasar tiempo con mi familia. Pero entiendo que Sophie es una niña que sólo quiere jugar conmigo. Me pongo de pie y me coloco mi gorra junto las gafas.

—Muy bien, vamos a que manejes esa bici.

—¡Sí! Te amo mucho Aton.

Río mientras caminamos hacia la puerta, tomo la bicicleta morada en nuestro jardín delantero y camino fuera de éste para llegar a la calle del conjunto residencial. Sophie me ve con una mirada de desaprobación.

—¿Qué?

—No tomaste mi casco cubre cabello rubio ¿Y lo que cubre mis rodillas? ¿Y si me caigo y me golpeo aquí?—pregunta señalando uno de sus codos.

—Lo siento, ya voy a buscarlo.

Me devuelvo y sólo vuelvo cuando tengo toda la protección que Sophie necesita. La ayudo a ponérselo, ella me sonríe todo el tiempo pareciendo entusiasmada.

Mamá suele decir que Sophie me ve como la mejor persona del mundo, con admiración, creo que a mí me sucede lo mismo con ella, es como la persona a la que espero nunca defraudar.

A pesar de que su bici tiene una ruedita adicional a cada lado, no me permite soltarla mientras pedalea. Me causa gracia que cante una de mis canciones mientras vamos de un extremo a otro por la calle.

—¿Y sí te suelto sólo un poco?—cuestiono.

—Sólo un poquito.

—Muy bien, no dejes de pedalear y no sueltes el volante. Recuerda que yo te estoy viendo y no te dejaré caer.

—¡Ay! Me da miedo—dice, pero su voz infantil está teñida de emoción, no puedo evitar reír.

La sostengo durante segundos antes de soltarla y verla manejar, puedo escuchar como ríe mientras pedalea.

—¡Eso es Sophie! ¡Viva la princesa Sophie!—grito aplaudiendo, veo hacia atrás y mamá está sonriendo, le guiño un ojo.

Me volteo justo para ver a Sophie caer junto a la bicicleta en el jardín de la casa de la esquina. Corro rápidamente hacia ella.

—¡Sophie!—quito la bicicleta de su pie y retiro todo esos mechones rubios de su rostro. Ella me ve con sus ojos muy abiertos. Quizás no va a querer volver a manejar su bici.

Pero ella comienza a reír mientras cubre con sus pequeñas manos su boca, la miro desconcertado.

—¡Otra vez! ¡Otra vez Aton!—pide emocionada, no puedo evitar reír y ayudarla a ponerse de pie para luego levantar a la bici, parece que una de las rueditas adicionales ahora esta hacia arriba.

—De acuerdo, hagámoslo de nuevo—anuncio viendo su loca emoción infantil.

***

01 de enero, 2013.

—Feliz año nuevo—murmura la voz de Katherine. Me giro y ella me sonríe.

Me distraigo brevemente por el abrazo rápido de Hilary quien luego le da un abrazo un poco más largo a Doug mientras caminan hacia el resto. Doug no lo sabe, pero está perdido, muy perdidamente enamorado de Hilary, lo suficiente para mentir a sus amigos y compañeros de banda.

Vuelvo mi atención a Katherine, tiro de su brazo y atraigo su cuerpo al mío antes de sostener su rostro entre mis manos y darle un beso. Me gusta besarla realmente.

—Feliz año nuevo, novia—murmuro, sus mejillas se sonrojan.

—Me has besado frente a mis padres—susurra viendo tras de mí.

Río guiándonos hacia uno de los tantos asientos en el jardín de la familia Stuart. He tomado una buena decisión al aceptar a venir a Liverpool a recibir el año nuevo con ella.

Paso mi brazo por sobre sus hombros abrazándola, ella juega con los botones de mi camisa.

—¿Lo has pensado Katherine?—murmuro acariciando el dobladillo de su vestido de manera distraída.

—¿Realmente tú quieres que yo vaya?

—¡Que va! Sólo te invité por cortesía—mascullo con sarcasmo, ganándome que ella entrecierre sus ojos hacia mí. Resoplo y me inclino besando su nariz—claro que quiero que vengas conmigo a Estados Unidos.

—No sé cómo decirle a mis padres. Nunca he hecho algo así.

Me pongo de pie y tiro de su mano, nos guío hacia sus padres, ella abre sus ojos con sorpresa. Me agradan los padres de Katherine, su mamá es muy cariñosa.

—¿Qué haces?—murmura apretando mi mano.

Los padres de Katherine parecen realmente entretenidos hablando con la señora Jefferson y Emma. Aclaro mi garganta.

—Oh, feliz año nuevo a ti—indica la señora Kancy dándome un breve abrazo.

—Igual para usted—indico asintiendo con la cabeza.

—¿Por qué estás tan sonrojada?—pregunta el señor Kevin a Katherine, la señora Jefferson y Emma se alejan mientras continúan conversando.

—¡Por nada!—prácticamente grita Katherine, ella nunca sabrá actuar con naturalidad bajo los nervios o bajo la presión.

—Eso no parece como nada—señala el señor Kevin cruzando sus brazos. Aclaro mi garganta.

—Verá señor Kevin. En poco tiempo estaré dando unos conciertos en Estados Unidos, será poco más de una semana y media quizás lo que duraré allá, y me gustaría...

—Quieres que Katherine vaya contigo—completa e interrumpe la mamá de Katherine, la observo con sorpresa. Ella sonríe—Katherine habló un poco muy alto sobre eso ayer en la noche con Hilary. Kevin y yo escuchamos fuerte y claro sobre que le gustaría ir, pero nunca había comentado algo sobre eso con nosotros.

—¿Eso fue lo único que escuchaste verdad?—pregunta Katherine con los ojos muy abiertos, quiero reír por un momento del reflejo de horror en su rostro.

—¿Había algo más que debíamos escuchar?—pregunta Kancy entrecerrando sus ojos hacia ella.

—¡Cristo! No, no, definitivamente no.

—Entiendo que Katherine es nuestra nenita, pero soy consciente que desde el momento en el que mi hija se ha ido a vivir sola a Londres para estudiar, ha adquirido parte de su independencia. Confiamos en ella, siempre lo hemos hecho y sabemos que no es una niña de quince años a la que vamos a prohibirle que hacer.

>>Me gusta que ella aun quiera consultarnos sus planes para obtener nuestra opinión y lo que ella llama permiso. Me agradas joven, realmente eres un buen chico y quiero creer que eres lo suficiente listo para saber que estas saliendo con una chica que vale más que el oro.

>>Me gustaría saber las fechas y dónde van estar hospedándose. Tres llamadas por día y muchas postales—finaliza el señor Stuart pasando su brazo por sobre los hombros de su esposa.

Lo miro durante varios segundos, tengo buen karma. Conseguí buenos suegros.

—Mi agente puede pasarle toda la información señor...

—A mí no me interesa tu agente hijo, yo me estoy entendiendo contigo. Así que dejemos la conversación de detalles para mañana, tu y yo tomaremos un café.

—De acuerdo...—concedo asintiendo con mi cabeza, un poco nervioso, es el papá de mi novia después de todo.

—Ahora dejemos toda esta seriedad y disfrutemos de los fuegos artificiales que ese Jefferson no deja de lanzar. Compró muchos—murmura la señora Kancy viendo a Dexter reír y arrojar más con Ethan.

***

03 de enero, 2013.

—¿Vas a decirme algo o sólo vas a verme con esa nota de incredulidad?—pregunto rasgando las cuerdas de mi guitarra, jugando con las melodías.

—¿Realmente me estás pidiendo que consiga boleto para... ella?

—Para Katherine—señalo—eso mismo es lo que he dicho.

—¿Por qué quieres llevarla?

—Porque es mi novia y voy a extrañarla mucho si ella no viene. Ella está de tiempo libre de la universidad, es una buena idea.

La expresión de Glorie se vuelve aun más agria, pero finjo que no me doy cuenta mientras continúo con mi guitarra.

—¿Durante todo el tiempo que estemos en Estados Unidos?

—Sí, siempre juntos.

—Cursi.

—Bueno, tengo que ser cursi, la amo.

—La amas...—respira hondo—necesito su pasaporte, documentos y más para más tardar las seis de la tarde o de lo contrario no irá con nosotros.

Dejo de tocar para observarla con fijeza, me pongo de pie, camino hacia el mesón de mi apartamento y tomo un sobre de manila amarillo, lo dejo frente a ella en el sofá y vuelvo al suelo con mi guitarra a tocar.

—Ahí tienes todo lo que necesitas de ella. Espero que me devuelvas el pasaporte más tarde ocho de la noche que voy a encontrarme con ella.

>>Sólo recuerda algo mientras te encargues de esto Glorie. Por primera vez seré caprichoso y voy a decirte que si no consigues que ella vaya, yo no iré.

Ella abre su boca con sorpresa y comienzo a tocar realmente mientras canto. Sé que Glorie no va a correr el riesgo de que yo no vaya y rompa un contrato. Me detengo brevemente para decir una última cosa.

—Por cierto, asegúrate de que en cada hotel, ella y yo estemos en la misma habitación. No habitaciones separadas. Una sola habitación.

***

06 de enero, 2013.

—Me da nervios conocer a Glorie—murmura mientras caminamos por el largo pasillo donde han sido mis ensayos los últimos dos días.

—No te preocupes, ella no va a ser grosera.

—Bueno, recuerdo como sonó por teléfono, eso me hace recordar que no le agrado.

—Ella no te conoce.

—Bueno...

Me detengo y tiro de su mano hasta pegarla a mi cuerpo, tomo su rostro en mis manos de manera de que puedo ver muy directamente a esos ojos avellana verdosos que lucen nerviosos.

—Aun si tú no le gustaras, eso no me importa. Eres mi novia, no la de ella. Si no le gusta pues pobre de ella porque eres parte de mi vida.

—Escuchar eso ha calmado un poco mis nervios.

—¿Qué puedo hacer para calmarlos un poco más?

Ella me da una mirada divertida antes de flexionar sus labios de una manera que resulta graciosa. Río antes de presionar mi boca en la suya y besarla.

Me sorprende que de manera entusiasta meta sus manos en los bolsillos traseros de mi pantalón mientras nos besamos. Una de las cosas que me encantan de Katherine es que de alguna forma, consigue el modo de siempre sorprenderme.

Con ella nada es predeterminado o planeado.

—¿Encontraron tus manos un lugar cómodo?—murmuro contra su boca. Ella aprieta su agarre y río—¿Acaso acabas de pellizcar mi culo?

—Lo he hecho, me declaro culpable.

—Chica tonta—le doy un beso rápido antes de sacar sus manos de los bolsillos de mi pantalón y continuar caminando.

—¿Debo llevar trajes de baño?

—Sí, pretendo que tengamos tiempo para disfrutar—respondo.

Abro una de las puertas y adentro se encuentra la banda que suele acompañarme en mis conciertos, parece que el director musical que hemos elegido para esta mini gira está dándoles instrucciones.

Ellos voltean a vernos cuando la puerta se cierra tras de mí. La mano de Katherine aprieta la mía.

—Hola a todos ¿Cómo va ese ensayo? ¿Estamos listos para enloquecer al público en los conciertos?

—Bastante listos—responde Karl, el bajista. Él ve con curiosidad a Katherine.

—Esta es mi novia Katherine, Katherine ellos son mi banda—señalo—él es Karl, Mason y bueno, ya conoces bastante bien a John.

—Siempre es bueno verte de nuevo Katherine—saluda John guiñándole un ojo.

—Y él director musical Bruce.

—Hola a todos—saluda con un gesto de su mano y una sonrisa.

Miro alrededor.

—¿En dónde está Glorie?

—Salió a atender una llamada—responde John—en cualquier momento vuelve a botar veneno. Ya sabes que ama drenar su veneno.

Para no presionar, ni estorbar, nos guío hacia el lado más alejado del salón y abrazo a Katherine, ella presiona su barbilla de mi pecho.

—Estoy emocionada de viajar contigo. Nosotros nos conocimos en un viaje.

—En las Bahamas—concuerdo sonriendo—la chica más hermosa y la única que sólo se alejaba y observaba a los demás bailar y hacer el tonto.

—Porque soy muy madura.

—Ay, tampoco exageres—la fastidio ocasionando que me pellizque el brazo—no me pellizques chica mala.

—Te amo.

—Yo también te amo aunque estés bien tonta. Pero bien dicen que el amor es ciego.

—Ya sé que sólo buscas molestarme Ashton bonito.

—Bonito aquí, bonito allá ¿Alguna vez el adjetivo bonito desaparecerá de mi nombre?

—No, porque no importa que hayas cortado tu cabello y ahora seas un hombre caliente y sexy. Siempre serás Ashton bonito.

—Fastidiosa.

Ella deja un beso en mi barbilla y escuchamos a alguien aclararse la garganta. Katherine se gira y yo observo a Glorie.

—Hola a ti, señora representante—saludo—aquí te tengo a la preciosa Katherine Stuart, novia esta es mi... peculiar, representante.

Glorie estrecha su mano y sorprendentemente Katherine esta seria. Creo que es de las pocas veces que la veo tan seria.

—Hasta que finalmente te conozco, Katherine.

—Sí, nunca es de muy buena educación hacer las primeras presentaciones por teléfono—censura Katherine, me sorprendo aún más de que ella aluda de hecho a todo lo que sucedió con su llamada siendo atendida por Glorie tiempo atrás.

—Claro...

Se hace un silencio bastante incómodo. Katherine sólo observa a Glorie, parece en realidad muy curiosa.

—¿Quieres que vayamos por algo de comer o ver a los chicos ensayar?—pregunto llamando su atención.

—Creo que me gustaría ver a tu banda ensayar.

—De acuerdo, entonces pongámonos cómodos.

—Luego tu y yo debemos hablar Ashton—indica Glorie antes de retirarse.

—Esas son exactamente las palabras que usa una novia antes de terminar una relación.

—No creo que Glorie vaya a dejarme.

—No, sobre todo porque ella no es tu novia. Tu novia soy yo.

—Cierto—finjo haberlo olvidado y ella rueda sus ojos.

****

08 de enero, 2013.

—¿En qué piensas?—pregunto viendo al igual que ella por la ventanilla del avión.

—En que estamos muy lejos de tierra y si este avión cae moriremos.

—Qué bonita manera de pensar.

—Luego también pienso que si estuviese viajando y saliendo con actor él a través de sus conocimientos de papeles sabría cómo hacer que sobreviviéramos en caso de que el avión cayera, pero salgo con un cantante.

—Totalmente cierto—digo riendo, no puedo dejar de reír. Ella sonríe.

—Realmente nunca me ha dado miedo subir a un avión, ni siquiera la primera vez.

—Chica valiente.

—Es lo más cercano que estaremos de volar ¿Por qué temer entonces?

La observo con fijeza, viendo su perfil y sonrisa mientras mantiene la vista en la ventanilla. Volteo hacia el otro lado del pasillo y Glorie parece estar durmiendo al igual que la banda. Me acerco a ella y dejo un beso en su oreja.

—A veces me sorprenden tus pensamientos

—¿De buena manera?

—Definitivamente de buena manera—respondo. De hecho, de una excelente manera.

—Entonces esta va a ser nuestra habitación—indico cerrando la puerta tras el personal del hotel que dejó nuestro equipaje.

—Es muy amplia.

—Sí, bastante grande...

—Con una cama muy grande—murmura cruzando sus brazos a la altura de su pecho y observando a la cama con fijeza—estamos compartiendo una habitación.

—Vamos a compartir habitación en cada hotel ¿Estás bien con eso? ¿O quieres tu propia habitación?

—Claro que me gusta compartir habitación contigo—murmura, sus mejillas se sonrojan mientras sonríe—es que soy muy mala para iniciar las cosas.

—¿Qué cosas?—pregunto divertido. Ella le da una mirada rápida a la cama, entiendo el gesto, pero decido molestarla.

—Ya sabes qué cosas.

—¿Quieres hacer cosas?

Ella cubre su rostro con sus manos. Me acerco a ella y dejo un beso en sus labios.

—Voy a desnudarte y vamos a hacer cosas—susurro sacando su chaqueta—me encanta que seas como eres. Amo cada cosa de ti.

***

12 de enero, 2013.

—¿Y bien?—pregunta Katherine cuando he terminado de leer la nota en su celular.

—Parece que tenemos un nombre oficial como pareja.

—¡Alguien publicó lo de nuestra relación!

—No voy a desmentirlo. Supongo que ahora lo nuestro es oficialmente público.

No tengo ni idea de cómo las noticias se hicieron de mi relación con Katherine, pero lo hecho, hecho esta. Katherine mordisquea su labio inferior y estruja su falda.

—¿Qué sucede Katherine?

Ella suspira y se sienta a mi lado, recuesta su cabeza de mi hombro.

—Tengo miedo de no saber hasta qué punto voy a perder mi privacidad.

No sé qué decirle, hasta hace poco ella dijo que sabía las locuras que vienen conmigo, pero no puedo exigirle adaptarse a algo si no se siente cómoda. Pero tampoco estoy viéndome terminando mi relación con Katherine.

—No puedo prometerte que las cosas serán tranquilas a partir de ahora Katherine.

—Lo sé, sé que esto es parte de tu mundo. Sólo estoy nerviosa, nunca he sido buena para ser el centro de atención. Soy más de estar en el fondo.

—Para mí tu eres mi centro de atención.

—Sólo estoy nerviosa y un poco asustada. Pero es parte de ti, dije que iba a amarte con todas las locuras que son parte de tu vida. No mentía Ashton.

—Sé que no lo hacías—murmuro besando su entrecejo—ellos van a amarte de la manera en la que lo hago yo, quizás menos, pero nunca más que yo.

***

16 de enero, 2013.

Sonrío un poco a todos esos fotógrafos frente a nosotros. Es algo bueno que llevemos gafas, de lo contrario los flashes podrían atontarnos.

En ningún momento libero la mano de Katherine de la mía, pretendemos seguir nuestro recorrido junto a John mientras somos fotografiados. Ignoro las preguntas y la única razón por la que me detengo de cuanto en cuanto, es para acceder a tomarme fotos con mis fanáticos y darles autógrafos.

New York es definitivamente ruidoso, pero Katherine parece fascinada por cada detalle. A pesar de que puede que momentáneamente la abrumen tantas cámaras fotografiándonos, lo está manejando bastante bien.

—¿Entramos a tomar un café?—pregunta John, me encojo de hombros mientras lo seguimos dentro de la cafetería dejando a todas esas cámaras fuera del local. Katherine suspira.

—¿Muy duro?—cuestiona John con diversión.

—Creo que tienen fotografías de cada uno de mis movimientos.

—Suerte que en cada movimiento eres hermosa—señalo guiñándole un ojo, John finge arcadas—sólo estas siendo un envidioso porque no puedes ser cursi con Becca ya que no está aquí.

—Mi amada Becca—niega con su cabeza—Iré por cafés, dejen la elección en mis manos, no los defraudaré.

Aceptamos, y mientras John va por los cafés, Katherine y yo tomamos asiento en una de las mesas. El local no está muy concurrido y en su mayoría, hay personas algo mayores de edad. Centro mi atención en Katherine, porque hay algo de lo que he querido preguntarle en todo el día.

—¿Qué te dijo Glorie?

—¿Qué?

—No te hagas la desconcertada. Cuando las encontré en el Lobby estabas pálida y luego estuviste muy silenciosa ¿Qué sucedió?

Ella juega con las puntas de su cabello, señal de que está pensando que contestar.

—Nunca me has mentido Katherine, no comiences ahora, por favor.

—Sólo... ella cuida mucho de tu carrera.

—¿Qué dijo?

—Nada, sólo me pidió que no te distrajera.

—¿Te lo pidió?

—No exactamente, pero eso seguro quiso decir.

Está diciendo menos de lo que fue, pero no voy a presionarla, quiero creer que en algún momento va a decirme que fue exactamente lo que sucedió en esos minutos en los que no estuve.

***

19 de enero, 2013.

Podría comenzar a babear sobre mí mismo mientras Katherine está en su traje de baño de dos piezas color negro con flores. Ella puede ser una chica tímida, pero es realmente atractiva y tiene su toque sensual. Además de que su cuerpo puede resultar delicado y elegante, pero tiene las curvas perfectas en las que me gusta perderme.

Ella estira su pie hasta el agua y da un gritito mientras ríe y luego me observa.

—No estoy segura de sí quiero entrar. Está muy fría.

—No puedes irte de Los Ángeles sin entrar al agua.

Ella frunce el ceño viendo hacia el agua; aprovecho su distracción y la abrazo desde atrás alzándola un poco. ella grita sobresaltando a Pincky y Cerebro que nos protegen, siento todos los flashes, pero no me importa.

—Suéltame, suéltame.

—No, vas a entrar al agua.

—¡Ashton!—grita cuando comienzo a caminar dentro del agua, haciendo que nuestros cuerpos se mojen con cada paso que doy más hondo.

Nos hundo en el agua y cuando volvemos a la superficie, ella toma un gran respiro y arroja agua hacia mí.

—¡Eres un fastidioso!—me grita, pero está riendo.

—Tu no ibas a entrar sola, decidí ayudarte.

—No pedí tu ayuda.

Río y nado a su alrededor mientras ella me observa divertida. Me detengo tras de ella y beso su mejilla.

—Quiero hacerte el amor de nuevo.

—¡Ashton!

Le guiño un ojo y continúo nadando. Da la impresión de que Katherine fue hecha especialmente para mí.




Holaaaaaa aquí el penúltimo capítulo, de poco a poco nos vamos despidiendo de estos dos como principales, pero sabremos de ellos por las otras historias.

Espero les guste, un beso.

Continue Reading

You'll Also Like

2.8M 440K 18
Los que conocen a Emma a lo largo de los años se han encargado de resaltar que ella no es más que una reina. Una mujer que sobrevivió a años de trist...
987K 26.6K 31
Cuando las personas que más amas, te rompen, es difícil volver a unir esos pedazos. Victoria Brown, creía que cuando amas, la brecha para perderte a...
99.7K 11.5K 16
Kim Jongin quería un gatito, uno que le diera amor y le hiciera compañía. Do Kyungsoo era un gatito híbrido, un arisco y mal humorado gatito. *******...
1.4K 65 19
"Yo se, yo se, yo se Que soy el monstruo que te enamoro" Porque Lena y Rodrygo se vuelven a encontrar, esta historia promete volver a comenzar. ¿Pre...