Tal como Iseul había sugerido, los dos entraron al auto de Jun para dirigirse a casa de él, esperando poder hablar de una manera más tranquila y racional. Evitando caer de nuevo en el juego de poder y manipulación que Jun había usado en el bar.
Jun – Ya que estamos en casa, creo que podemos hablar con tranquilidad. Dijo al sentarse en el sofá a un lado de Iseul.
Iseul – Claro, podemos empezar con el motivo por el cual hiciste tremenda escena en Kazino.
Jun – No respondías a mis llamadas y tampoco salías de tu departamento, quería volver a verte y cuando por fin lo hice, pensé en no desaprovechar la oportunidad.
Iseul - ¿Tenías que hacerlo de esa forma? ¿Siempre actúas de esa manera cuando algo no sale como quieres? Pregunto al mirar a Jun con gran enojo
Jun – Si, lo tenia que hacer de esa manera. He actuado de peor forma, pero ya que se trataba de ti, tuve que usar la alternativa menos agresiva.
Iseul – Es un completo berrinche de niño pequeño. Dijo al reírse. – Es increíble que pienses que actuando de esa manera tú y yo vamos a regresar. Eso no va a suceder, no después de ver y conocer el tipo de hombre que eres.
Jun – Esa persona que tanto odias y desprecias en estos momentos, es la persona de la que estas enamorada y eso no vas a poder olvidarlo tan fácil. Puedes decir que, soy inmaduro, despreciable e impulsivo, pero eso no va a evitar que regresemos. Dijo al acercarse a Iseul y robarle un beso.
Iseul - ¡¿Qué crees que haces?! Grito con fuerza. – Nosotros no vamos a regresar, no quiero verte más, no quiero volver a sentirte cerca de mí. Dijo al levantarse del sofá y caminar a la puerta, tratando de abrir la cerradura sin tener éxito.
Jun – Ninguno de los dos va a salir de este lugar, no hasta que podamos reconciliarnos. Dijo al recargarse en la puerta, evitando que Iseul saliera del lugar.
Iseul – No va a suceder si te comportas de esta manera.
Jun – Estoy seguro de que no será sencillo, pero más tiempo vamos a permanecer de esta manera si no aceptas volver conmigo.
Iseul – Por favor, quiero volver a mi departamento. Dijo al mirarlo con un par de lagrimas a punto de ser derramadas. – Solo iré a mi departamento por un par de cosas, voy a regresar.
Jun – No lo harás, yo sé que no lo harás. Dijo al verla con desánimo. – Aquí hay suficiente ropa y cosas tuyas, para que pases la noche aquí conmigo.
Iseul - Solo será por un corto momento, no voy a tardar mucho en regresar.
Jun - Si tanto quieres ir, iré contigo para asegurarme de que no te vayas a algún lado.
Iseul – Está bien. Respondió con completa resignación mientras regresaba al sofá para recostarse y cubrirse con su abrigo, cerrando sus ojos.
Jun – No tienes porque dormir aquí, duerme conmigo en mi habitación.
Iseul – Lo haré mañana, déjame dormir sola. Solo por hoy. Dijo al cerrar sus ojos y tratar de dormir con rapidez, para así olvidar todo lo que había y estaba sucediendo.
Jun – Lamento todo lo que hice en el bar, quería ser mejor persona y alejarme de este mundo, para vivir con tranquilidad, pero nada resultó como yo quería. Dijo al sentarse en el piso frente a Iseul, acariciando levemente su rostro antes de caminar a su habitación. - Vas a tener que entenderlo con el tiempo.
Al día siguiente de la conversación entre Jun e Iseul, ella se mantuvo recostada en el sofá durante gran parte de la mañana sin tener energía para levarse y tomar una ducha o desayunar.
Jun se acercó a ella en varias ocasiones para convencerla de probar bocado, sin obtener respuesta de ella o si quiera una palabra que saliera de sus labios, de esa manera pasaron algunos días y la preocupación en Jun aumentaba pues, no veía que ella quisiera comer, cambiarse de ropa o ducharse. Él no estaba seguro de lo que estaba sucediendo ya que, desde que había conocido a Iseul no había tenido que presenciar ese tipo de acciones en ella, lo que sin duda era algo que comenzaba a causar inquietud en él.
Logrando que se planteará la forma en la cual podría lograr que ella comenzará a comer o siquiera hablar con él.
Jun – Iseul debes comer algo, he preparado varias cosas que podrían gustarte, no debes terminarte todos, pero al menos probar un par. Dijo al acercarse a ella, observando un rostro sin expresión y una mirada perdida en los alrededores de la sala.
Jun – Si comes un poco, te duchas y comienzas a hablar un poco conmigo, te prometo salir por un momento de casa.
Sin decir palabra alguna, Iseul lo miró con intensidad mientras trataba de reincorporarse y sentarse en el sofá, levantándose con lentitud para después caminar rumbo a la habitación de Jun, pasando a un lado de él, ignorándolo completamente.
Tiempo después de ella haber entrado a la habitación de Jun, se dirigió a la mesa cerca de la cocina en la que visualizó varios platillos, decidiendo acercarse y sentarse cerca de un par, para comenzar a comer con velocidad, terminando con algunos de dichos platillos. Al terminar de comer, Iseul comenzó a arreglar sus pertenencias y ropa en el closet de la habitación de Jun, dando a entender que desde esa noche iba a dormir a su lado.
Iseul – He hecho todo lo que pediste, ¿Podemos ir a mi departamento a recoger un par de cosas?, voy a quedarme contigo, pero debo regresar a mi departamento por el resto de pertenencias. Dijo con completa decisión, mirando directamente a los ojos de Jun. - No voy a escapar, solo quiero ir a mi departamento.
Jun – Podemos ir a tu departamento, pero no estoy seguro sobre el que quieras quedarte conmigo, en un inicio no te parecía una gran idea regresar conmigo o siquiera levantarte del sofá. Dijo con desconfianza
Iseul – No tengo opción y no quiero dormir para siempre en tu sofá, creo que podemos darnos otra oportunidad. Dijo al acercarse a él para abrazarlo.
Jun – Bien, vamos a tu departamento. Imagino que quieres regresar cuanto antes a la fábrica y a Kazino.
Iseul – Si, he faltado algunos días y no creo que pueda faltar más.
Jun – En cuanto regreses, me haré cargo de dejarte y recogerte de esos lugares, en caso de que no pueda hacerlo, mandaré a Chang Wook.
Iseul – Si, está bien por mí. Dijo al tomarlo de la mano y salir de la casa de Jun.