. . . . ° ۣۜ ᬽ 𝗜'𝗺 𝘀𝗼 𝗴𝗹𝗮𝗱 𝘆𝗼𝘂 𝗺𝗮𝗱𝗲 𝘁𝗶𝗺𝗲 𝘁𝗼 𝘀𝗲𝗲 𝗺𝗲
𝗛𝗼𝘄'𝘀 𝗹𝗶𝗳𝗲? 𝗧𝗲𝗹𝗹 𝗺𝗲, 𝗵𝗼𝘄'𝘀 𝘆𝗼𝘂𝗿 𝗳𝗮𝗺𝗶𝗹𝘆? |. . ° • . .
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Cuando menos se lo espero, un año había pasado delante de sus ojos.
Soltó un bostezo, despabilando por unos instantes en los que terminaba de averiguar quién era y dónde estaba antes de levantarse de la cama y acto seguido, sin intenciones de dejar el acolchado, se permitió un momento para meditar.
Se quedó sentada en el colchón con el pelo revuelto y en silencio se repitió el mantra para aligerar las voces que le acompañaban. Inhala, respira... hazlo profundamente... exhala.
Tras conseguir al fin despertar, fue capaz de levantarse de su lugar.
Llevar a cabo su rutina diaria fue casi un acto robótico. Ya sabía lo que debía hacer y cuánto tardaba con ello, sin embargo, ese día fue diferente. Una extraña sensación le carcomía en las entrañas en cada una de sus actividades matutinas. Se calzó las botas con un rápido movimiento y tras terminar, se cuestionó si estaba lista para lo que se vendría.
Los nervios la hacían mostrar un entrecejo fruncido, lo que daba a entender que estaba enfadada cuando no era así. Se dirigió por el corredor hasta la cocina, donde buscaría algo que engullirse para su trayecto, sintiéndose extraña por los jovencitos que le saludaban con amabilidad y que se marchaban a sus clases.
Al fin volvería al complejo de los Avengers. No se había comunicado con Nath desde que ocurrieron los hechos y lo poco que sabía sobre sus amigos es que intentaban salir adelante a su modo.
Todo el mundo lo hacía al parecer. En cuestión de doce meses más estudiantes llegaron y se le brindó asilo en las instalaciones de la escuela de Xavier por un tiempo a personas que se desplazaban buscando nuevas oportunidades después de lo ocurrido con el blip.
Y ella seguía atascada en ese fatídico día.
Se apresuró a terminar su manzana al llegar al patio delantero, donde Logan le esperaba junto al vehículo en el que llegó hace tanto tiempo. El mutante parecía no estar de acuerdo con su partida, lo cual ella comprendía. Se habían vuelto amigos en ese tiempo. Mientras nadie más quería estar cerca de ellos por desconfianza o intimidación, allí estaban ese par de amargados que se reían de sus bromas acidas y malas o de sus propias terribles desgracias.
—Buenos días —saludó ella, alzando una bolsa de papel en la que llevaba dos sándwiches, uno para cada uno, lo cual lo hizo enarcar una ceja— traje el almuerzo.
—Que considerada —dijo y eso la hizo soltar una risita melancólica ante sus propios recuerdos que él prefirió no mencionar, como siempre hacían— tienes solo dos horas para preparar lo que vayas a hablar con Nath —recordó, usando un tonito que le hizo rodar los ojos a la blonda.
—No hace falta repetirlo —farfulló malhumorada, todo a causa de la preocupación que le revolvía en el estómago y que se acrecentó apenas subieron al vehículo— me fui sin explicaciones en un momento de vulnerabilidad. No la culpo si me odia.
Se quedaron en silencio, como solían hacer. Logan no era buen consejero, pero tampoco era crítico, como en ocasiones le pasaba con Charles, quien a pesar de su vejez a veces a Arcane le resultaba demasiado ingenuo o puede porque a pesar de que ambos fueran tan mayores, los dos tuvieron experiencias diferentes. Sea lo que fuere, no le ayudaba demasiado pedir socorro con el Professor, así que lo mejor para ella, era solo quejarse poco y limitarse a conversar.
—Si yo fuera ella te odiaría —dijo Howlett al fin. La rubia se mostró ofendida al apretar las cejas y él se rio por su gesto de pocos amigos— no podría perdonar que no me devolvieras mi moto si te la llevaras —remató entonces, consiguiendo que Cane sonriera sin gracia.
—Definitivamente tenemos un sentido del humor terrible.
El viaje hasta la ciudad fue tranquilo hasta donde se podía. En el exterior, no reflejó las emociones que le acongojaban y los dos charlaron sobre el hecho de que algunos estudiantes estaban siendo demasiado... imprudentes, en el aspecto de que lanzaban comentarios como que el chasquido fue algo bueno en la humanidad.
Para Arcane, que le dijesen eso, era un golpe directo al hígado. La hacía apretar la mandíbula con fuerza e incluso su pobre sándwich terminó aplastado entre sus manos ante la ira y el dolor que le recorría al pensar en ello.
La imagen de su paso yendo hacia ella y cayendo hecho polvo era una escena que vivía rent free en su mente.
Ir ingresando a la ciudad era una cosa que le hizo arrugar el entrecejo. New York era una ciudad sucia, sin embargo, era a causa de la basura generada producto de la gente con poca capacidad para colocar sus deshechos en su lugar, además de la contaminación que generaba tanta gente junta, las luces fosforescentes por todos lados y los autos yendo y viniendo mientras el sonido ensordecedor venía de cada esquina.
La clase de desastre que había era por entero diferente. Algunos vehículos fueron acomodados a las orillas de las calles para hacer algo de espacio y la gente que transitaba era poca. Hallándose en una ciudad como lo es New York, ver tal panorama era cuanto menos angustiante.
La maleza comenzaba a brotar por las aceras y los árboles juraba que jamás se vieron tan verdes.
Salió de su ensoñación cuando notó movimiento a su lado, uno verdaderamente importante. Logan tendió su mano hacia su asiento para buscar en la guantera un par de habanos que le arrojó a su regazo, solo para aparentar tranquilidad cuando incluso él no se hallaba del todo estable. Cane arrugó el entrecejo, viéndolo como si no comprendiera sus intenciones cuando claramente, lo hacía.
—Te estás poniendo nerviosa —aseguró él con amabilidad, sin apartar su mirada de la calle casi desolada.
—Ja, ¿ahora sabes cuando estoy nerviosa? —Soltó con una sonrisita juguetona, mientras tomaba el tabaco para ella y lo le pasaba el de él con dedos titubeantes.
Las cosas con Logan se estaban volviendo cuanto menos curiosas. La última semana estuvo tratando de engañarse y de hacer ojos ciegos a lo que claramente estaba ocurriendo y se reusaba a ello, porque a pesar de que transcurrió un año, no iba a decir que consiguió superar lo ocurrido en Wakanda.
Toda su historia. Todo con Bucky.
Un susurro apareció en su cabeza y le hizo volver la vista enfrente y que sin remordimientos encendiese su habano y procedió a ayudarle a él con el suyo, fingiendo naturalidad.
—No estoy nerviosa —mintió con seguridad, cambiando su postura y sonriendo de oreja a oreja.
Poison Ivy le felicitó.
—Es emocionante —explicó entonces, bajando la ventanilla de su puerta para que el humo no se guardase en la cabina. Su acompañante enarcó una ceja con incredulidad, pero de manera ingenua le creyó, incluso para ser él, Logan Howlett, Wolverine; ese era uno de los encantos de Snake, que sabía bien cómo convencer y engañar incluso sin intentarlo demasiado, solo actuaba por inercia así— es como en las películas de terror. Le dices al protagonista que no abra la puerta porque del otro lado estará el monstruo y aun cuando lo sabes te llevas un susto cuando sucede. Así se siente —farfulló— sé que Nath va a detestarme y aun así quiero verla.
—¿Cómo estás segura de eso? —Cuestionó él.
—Creí que la optimista en esta amistad era yo —dijo y por algún motivo, decir en voz alta ese límite entre ellos se sintió extraño... bueno, para ella no, sin embargo, Poison Ivy no lo culpaba.
No sabía cómo le contaría esa parte a Natasha. ¿Cómo le iba a decir que vivía mano a mano con esa parte terrible que por tanto tiempo vivió encarcelada?
Había sido una locura e incluso, creyó que era una tontería cuando escuchó al Professor decirle con seguridad que aceptara esa parte de ella cuando él fue el primero en decirle que la única solución era encerrarla, metafórica y literalmente hablando.
Cuando llegó por primera vez a la escuela de Charles Xavier, pasó un transcurso de ocho meses en una celda con un collar que limitaba sus poderes mutantes mientras intentaban controlar a ese lado radical de su cabeza que en ese momento no tuvo nombre. En ese entonces, la llamaban solo Vigilante Snake y cuando estaba en conjunto a su equipo dentro de los Purifiers, su nombre se limitaba a "Experiment 1989".
Debido a su mutación y pasado, lo mejor era entregarla a alguien que supiera la manera correcta de lidiar con ella. Eso solo provocó que la metieran a otra celda, más cómoda que la anterior, pero celda a final de cuentas.
Pasó encerrada allí otros siete meses en los que creyeron que entraría en razón y pues, hasta cierto punto le funcionó. Meditó y consiguió que la persona que ahora era tomara forma.
Con ese pequeño montoncito de arcilla, fue que Charles creó magia y trajo al exterior a Arcane Peacock, atrapando a eso que por tanto tiempo dominó sus ideales y creencias en una jaula interior en el fondo de su mente, un monstruo que esperó con paciencia en la oscuridad un momento en el cual demostrar, que era tan real que no podría deshacerse de ella nunca.
Las voces incrementándose con el paso de los años, sus poderes dándole ese fragmento de libertad y por eso tuvo que vivir con miedo por ellos y mostrarlos en su totalidad, ansiosa porque sabía que era más difícil de controlar a Poison Ivy.
Pero ahora, después de más de diez años, el que le condenó a vivir con un ser despreciable en su inconsciente, era el mismo que le dijo que lo mejor era vivir mano a mano con ella.
Eso había sido igual —peor, mucho peor— que un golpe bajo. Después de tanto tiempo viviendo con el terror de traer a colisión ese oscuro lado de sí misma, que le dijesen que debía aceptarse tal como era le parecía una clase de terapia barata que se negó a aceptar.
Por supuesto que se marchó por unas semanas de la escuela, porque estaba enfadada y ofendida —lo que le seguía de ello—, sin embargo, sin nada más que arriesgar, pronto se vio regresando con la cola entre las patas como dirían por allí. ¿Qué más le quedaba?
Sin muchos amigos, sin un lugar al cual llamar casa, ni Bucky, definitivamente, valía la pena el riesgo, ¿no?
Así que allí estaba, viviendo con su alter ego sociópata mano a mano.
—Espero que esto salga bien —murmuró, más para sí misma que para que la escuchasen.
Extrañaba mucho a su familia.
***
HOLAAAA
Adivinen quién ha andado escribiendo? 7u7
Espero traer pronto la siguiente actualización, ya tengo unos poquitos capítulos preparados y además, PRONTO ENTRAREMOS A END GAME (ya no soporto esta tortura llamada Cane no está con Bucky)
¿Qué opinan de Logan? Yo lo quiero mucho, es un buen bestie y tal vez hasta más pero esto es un fic de Buckycito jiji
Cómo creen que le va a ir a Cane con Nath? Se imaginan algo? Mmmm
Espero que les haya gustado ☺️ cuéntenme qué les pareció 🤍 no se olviden de votar y comentaAr 🥂✨
Nos leemos prontoo
Bye! 💕