Acordes menores

بواسطة sasofiasedani

351K 13.7K 7.1K

Se llama Marcos. Se apellida Cooper. Y toca la guitarra. Jude Brown es una estudiante de periodismo, tras un... المزيد

Capítulo 1
Capitulo 2
Capitulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capitulo 7
Capitulo 8
Capitulo 9
Capitulo 10
Capitulo 11
Capitulo 12
Capitulo 13
Capitulo 14
Capitulo 15
Capitulo 16
Capitulo 17
Capitulo 18
Capitulo 19
Capitulo 20
Capitulo 21
Capitulo 22
Capitulo 23
Capitulo 24
Capítulo 25
Capitulo 26
Capitulo 27
Capitulo 28
Capitulo 29
Capitulo 30
Capitulo 31
Capitulo 32
Capitulo 33
Capitulo 34
Capitulo 35
Capitulo 36
Capitulo 37
Capitulo 39 - Final
Epílogo
Nota;)

Capitulo 38

5K 236 80
بواسطة sasofiasedani

Perdón por tardar en subir el capítulo. Tuve un pequeño bloqueo pero ya lo tenemos y es bastante largo, pasan bastantes cosas, así que espero que os guste<333

—¿Estás segura de esto? —me preguntó Irina.

—Si.

—Jude, recuerda que la entrevista es en público, todo el mundo espera vuestra aparición juntos y cualquier paso será vigilado.

Ir a una sesión de terapia con Marcos una vez más había sido diferente y mucho más relajante, incluso había tomado otras decisiones, aparte de una mudanza.

Me cruzo de brazos mientras espero, intentando calmarme unos segundos antes de salir. Es bastante extraño contar lo que está pasando, pero hoy los chicos lanzan un nuevo álbum por la noche, y Ane me pidió que fuera la entrevistadora de la premier. No pude negarme. Es en el teatro central de la ciudad. Aunque sé que ha habido mucho caos entre la banda, sus fans y yo, esta es una oportunidad que no se puede rechazar, especialmente porque Marcos fue el primero en pedirme que lo hiciera. Esto podría ser un impulso importante para mi carrera como periodista.

Lo sé, bastantes medios de prensa roja se van a apoderar de esto. Pero no puedo seguir huyendo. Espero no recibir críticas después. Pero esta es mi última oportunidad para poner fin a todo. Quizás, mi relación con Marcos vuelva a ser el enfoque, pero ya todos saben que estamos juntos, y esta sería la primera vez que nos verían públicamente y, encima, de un escenario, pero por trabajo.

Cabe recalcar que entrevistar a una banda nunca es fácil y más cuando tu novio está entre los miembros. Estamos justamente en una sala de reuniones y Irina, hubiera preferido no venir para no tener que ver a Nian pero no pude negarse a venir para verme.

—¿Vas a decir algo públicamente sobre la mudanza que haréis juntos? —me preguntó.

—No, solo hablaré sobre el álbum y poco más —contesté—. Me he preparado un par de cosas, pero no sé si realmente impactarán.

—¿La universidad sabe de esto?

—Sí, lo sabe y les parece bien.

Se hizo un silencio tenso.

—¿Sabías que tu relación volverá a ser cuestionada? Jude, por dios, no te metas más en estas cosas y vámonos.

—No puedo dejarlos tirados.

—Joder, me da miedo estas mierdas. Suelen romper relaciones en estas situaciones. ¿Te imaginas que lanzan un video tuyo de ese día en la pantalla...? O peor aún, ¿y si empiezan a tirarte tomates?

—No ocurrirá. Recuerda que dentro de una semana tendré que vivir con Marcos en la misma casa y estaré protegida.

—Ese también es un mal plan...

—No es mal plan vivir con la persona que amas —dije.

—A mí me parece un tres cuando una pareja decide vivir juntos —comentó.

—Es un diez —repliqué.

—Bueno, si te toca un Nían en tu vida, todo te parecerá un menos cinco.

Teniendo en cuenta que su relación con Nian está rota, he decidido no decirle nada al respecto. Así que me puse a memorizar el diálogo para la entrevista y en directo, tengo que aprender bastantes cosas, para no fracasar porque ya sabemos como se ponen las cosas con las fans cuando se trata de mí, tiene que fluir de forma más natural y no sacar las cosas de contexto.

Estoy tratando de encontrar maneras de calmarme, ya que los nervios poco a poco se apoderaban de mí antes de salir. ¡Quedan exactamente treinta minutos! Conté hasta diez durante un par de segundos, porque después de todo el drama que hubo entre nosotros en las redes sociales, esto resulta ser un tanto extraño. Caminaba de un lado a otro, en el camerino detrás del teatro de la presentación, entre los comentarios de Irina y lo que podría pasar, me alteraba. No podía pasar nada malo, no es un cine, no tocaré a Marcos, se que no sacaré nada de mi pasado y sólo presentaré el nuevo álbum.

Sé que todos confían en mí para que esto salga bien, pero a veces yo no confío en mí misma. Porque resulta, que siempre que intento que algo salga bien sale mal. Joder. joder. joder. Me siento un poco mareada, no puedo pensar en que toda la vida me saldrán las cosas mal. Pero, ¿qué hago? Siempre suelen ganar los malos pensamientos que los buenos y eso, es una mierda.

—Tendrás que admitir que tienes muchas cosas que resolver esta noche, al menos, ¿no? —Espetó levantando una ceja Irina.

—No, solo les haré una entrevista, sobre el álbum que saldrá esta noche y actuaré como una más, no como la novia de uno de ellos.

—¿Sabes que se te complicaría?

—¿Por qué?

Ella sonrió de lado.

—Cariño, las fans saben que sois novios y eso no es el problema, lo que pasa es... ¿no has notado lo descarado que te mira Cooper cada vez que te tiene entre la multitud?

—Sí, pero seremos profesionales.

—Si, pero..

—Cierra la puta boca, me pongo más nerviosa cada vez que sueltas algo y estás siendo ahora mi mayor enemiga, tienes que calmarme, ayudarme, no recordarme cosas que vayan a alterarme...

—Solo te diré que te apoyo, claro que lo hago... y me abandonas, Jude... Ahora que te irás de la residencia estaré sola, te echaré de menos.

—Irina, el curso se acaba y nos echarán a todos de ahí.

—Cierto y por desgracia tendré que volver a casa—dijo resoplando

—¿Emocionada por eso?

—No. Nada.

Debería concentrarme más, dejar a un lado las mudanzas y la vida cotidiana, y centrarme completamente en lo que tengo que hacer en los próximos veinte minutos. Cierro los ojos por un momento, respiro hondo para despejar mi mente y me preparo para la tarea que tengo por delante. El tic-tac del reloj que hay en la pared me molesta.

Todo te molesta Jude.

Cierto. Estoy bastante nerviosa.

Que novedad...

No quiero renunciar a esto, no quiero dejar pasar esta oportunidad. Es un buen comienzo, es la banda más querida y aunque sus fans me odien y pueda perder todo de la noche a la mañana, puedo enfrentarlo. Ya no hay nada que me pueda asustar, he pasado por lo peor.

Veo a Marcos entrar por la puerta, del camerino, viene serio pero cuando me ve sonríe. Lleva una elegante camisa negra y pantalones del mismo color, con el cabello cuidadosamente peinado, hacia adelante. A su lado, entran también los demás chicos, y en este caso, Clara también se une al grupo. Nían entra también. Hay un silencio incómodo y puedo tomar la tensión que se ha formado de repente entre ellos dos.

—Voy a salir fuera, no quiero verle —me susurra Irina.

—¿En serio?

—Sí, muy en serio.

—¿No habéis hablado sobre el tiempo que os habéis dado...?—pregunte

—Ya no hay tiempos Jude.

—Ten cuidado, y por favor no le insultes porque hay cámaras por todos lados.

Sonríe y se levanta para salir, Justo pasa al frente de él, le persigue con la mirada pero Irina lo ignora. Incluso he sentido que se le ha cambiado por completo el rostro a Nian cuando la vio salir sin saludarlo y sin nada. Irina se merece su propia versión, no soy nadie para contar lo que ha pasado.

—¿Quieres abrazarme, pegarme, besarme, insultarme o algo antes de salir? —me comenta Marcos.

¿Se valen todas?

—Solo quiero que me digas que todo estará bien y que esto es lo correcto..

—Nada está bien, Jude —bromea.

—¿Por qué...? ¿Quieres que me vaya? Vale, pues abandonaré de inmediato esta idea, buscaros a otra periodista que pueda hacer esto, que le salga mejor y que no sea tu novia.

Marcos sonríe.

—No, yo no he dicho que quiera buscar a otra...

—Se entendió así.

—Lo harás bien, tranquila... ¿Puedes ayudarme a ponerme la crema en los brazos por si alguien me toca en la entrevista o algo?

—No.

Al principio no pensé mucho en esa respuesta, los nervios me pasan factura y se nota mucho, estoy totalmente bloqueada pensando en cómo saldrá esta entrevista, especialmente estando junto a él.

—¿No quieres, Jude? —insiste.

—No.

Él sonríe de lado y gira su rostro hacia una dirección que no me gusta... hacia su ex, Clara, que está justo al lado de Chris, sentada en una mesa y viendo algo en internet. Si antes estaba molesta, nerviosa, perdida, sin un buen sentido del humor... Ahora todo se ha multiplicado.

—Clara, ¿tú me pondrás la crema? —le pregunta Marcos.

Clara, sorprendida, asiente y se levanta para ayudarlo, pero se detiene al mirarme un momento. Mientras tanto, siento una punzada de incomodidad al ver la interacción entre ellos. Intento disimularlo, pero la idea no me resulta agradable.

Putos nervios. Y putos tactos.

Relájate, Jude. Es solo crema.

Mi novio no pidió a otra que le pusiera la crema.

Mierda sí lo hizo.

Me tragué el nudo que se me formó. Solo yo puedo tocarlo. Suena egoísta y tóxica, pero es lo que hay.

—¿Le dejas a otras chicas ponerte crema?—pregunte

Vuelve a sonreír.

—¿Ahora quieres ponerla tú o no?

—No.

Mierda. Basta de impulsividad.

Me crucé de brazos, incomoda, y me volví a sentar, cogí las mil hojas que tenía preparadas para la entrevista y las repase. Aunque tengo un ojo encima de las hojas, y el otro está encima de ellos dos. Están parados sin hacer nada. Sí, le había regalado esa crema para que se la aplicará cada vez que tuviera que lidiar con el contacto con los demás, pensando que así no le molestaría tanto. Era como un experimento novedoso, pero ahora veo que le gusta que otras personas le apliquen la crema.

¿De gira también permitiría que otras lo hagan?

Esta noche duerme en el sofá. No. Eso es demasiado cómodo, mejor en el suelo.

—¿Qué esperas, Cooper?—le pregunte alzando una ceja—Deja que te ponga la crema.

—¿Qué, te la pongo o solo soy una jugada de las tuyas? —se queja Clara.

—Me has descubierto —le responde Marcos con una sonrisa.

—¡Qué hijo de puta, me interrumpes mi momento con Chris!—se queja

La ignora y se acerca a mí.

—Tú deberías saber que no permito que nadie más me toque y que solo mi novia tiene permitido esto—me susurra.

—Menos mal que me lo recuerdas.

—No puedes quejarte, te lo he pedido y no has querido —me dice.

—Estoy realmente pasándolo mal, entre lo que tengo que hacer, entre la semana que viene nos mudamos juntos y entre las últimas notas de la universidad, ya no sé ni cómo respirar.

—Cogiendo aire y dejándolo salir por la nariz o por la boca, sirve... —bromeó, intentando aliviar la tensión.

—Muy gracioso... ¿Saldrá bien...?

—Si Jude, saldrá bien... Solo es una presentación de álbum—me dijo—No es para tanto.

—Tengo que hacerlo bien o tus fans me odiarán más que antes.

—Mis fans ya no te odian.

—¿Seguro...?

Se lo pensó un par de segundos.

—Los... En los últimos conciertos conocí un par de fans y parecían felices porque estaba en una relación.

—¿Seguro?

—Si.

—¿Muy seguro...?

—Demasiado.

Los últimos comentarios en internet sobre nuestra relación han sido positivos, algunos incluso logran arrancarme una sonrisa. Parece que a algunos les gusta la idea de que los entreviste para ver cómo interactuamos entre nosotros. Solo espero que todo fluya bien.

Por un rato, ayudar a Marcos con sus cosas me da un respiro. Siento que el ambiente se relaja para todos, aunque ellos ya están acostumbrados, mientras que para mí, siendo mi primera vez en un evento público, todo es un poco abrumador. Además, es, frente a los fans de mi novio, quienes supuestamente no me tenían mucha simpatía. No quiero darle muchas vueltas a eso ahora, ya que podría tentarme a no salir al escenario para presentar el sencillo y realizar la entrevista.

Nos acomodamos en una sala con unos sofás, quedando a solas. Con calma, empecé a quitarle la camiseta a Marcos, para ayudarlo. Supongo que es como un ritual esto antes de salir a una presentación.

—¿Te duele? —inquirí.

—No, no me duele.

—¿En serio, nada?

—Absolutamente nada.

—¿Entonces estás completamente bien o simplemente no sientes dolor cuando te toco yo?

—Quiero decir que solo cuando me tocas tú, no siento dolor. Si alguien más lo intentara, probablemente me llenaría de dudas y bloqueos.

—Tienes que permitir que alguien más, aparte de mí, te toque —comenté.

Me volvió a mirar y esbozó una sonrisa.

—¿Y si mi novia se pone enferma por eso? Porque estuvo apunto de hacerlo una chica y reaccionó mal.

—No tiene por qué ser necesariamente una chica.

—No tenía intenciones de que otra chica que no fueras tú me tocara, Jude. ¿Alguna otra cosa que quieras decirme?—preguntó, sonriendo

—Si, que cuando salgamos al escenario con todos los chicos y esas cosas, no puedes mirarme con esos ojos.

—¿Con qué ojos, Jude?

—Ya sabes... —insinué, sonriendo.

—¿Acaso hay algo malo en mirarte con estos ojos? —preguntó con diversión.

—No, pero quiero que mantengamos ciertos límites profesionales en el escenario.

—Entendido, señorita periodista. Seré todo profesional cuando estemos frente al público.

—Por ahora, eso es todo. Solo quiero que todo salga bien esta noche.

—Lo harás bien. Y recuerda te miraré con los ojos más profesionales que tenga —dijo con picardía.

—Sé que no lo harás.

—Eres mi novia y para que te miren profesional, que lo hagan los demás, yo no.

—¿No me podrás dejar de mirarme como tu novia por media hora de una presentación importante frente a tus propios fans?—pregunte

No parece no dudar la respuesta.

—No. ¿Tú no me mirarás como si fuera tu novio?

—Seamos profesionales y mírame como una periodista más.

—No quiero ni puedo mirarte como una más, y no lo haré—dijo, serio.

—Marcos.

—Jude.

—Cooper.

—Brown.

—De acuerdo. Mírame como te dé la gana—dije

—Lo estaba por hacer igual.

Dejé de echarle crema y solo se rió. Tenía que entender que no solo el público me hacía sentir nerviosa, sino que sólo él tenía ese efecto en mí y que mirarme con esos ojos me harían decir tonterías frente a todos, innecesarias. Joder, ahora que lo pienso, yo tampoco podré mirarlo como un simple guitarrista más en la banda. Es imposible.

Al poco tiempo, Ane interrumpió y me dio una pequeña charla. Sus palabras resonaron en mi mente, recordando la importancia de mantener la compostura antes de una presentación. Mentiría si dijera que no estoy a punto de retirarme de esta idea. Pero ya he dado mi palabra. Estaba detrás del escenario, esperando la hora marcada para salir, Marcos está a un lado, parado y mirándome, los demás haciendo tonterías. Y Irina no está por ningún lado.

—¿Cómo están yendo las sensaciones desde aquí? —me pregunta Chris.

—Mal.

—¿Sabes lo que hago yo antes de salir a una presentación importante? —pregunta Chris.

—No, pero te escucho —respondo, con curiosidad.

—Pegarme a hostias con Alex —dice, con una sonrisa.

Arrugó el ceño, sin entender del todo su método.

—No creo que me sirva mucho y tampoco tengo con quién pegarme las hostias —respondo.

—Está Clara, y es la ex novia de tu novio —añade, con un brillo travieso en los ojos.

Miró a Clara, que está ocupada charlando con otros miembros del equipo, y luego a Marcos, quien parece estar totalmente ajeno a la conversación y solo mirando a Chris serio.

—¿Tu no eras el que estaba con la ex novia de tu amigo?—le pregunté a Chris

—Solo tenemos encuentros casuales, la formalidad no me gusta.

—Nian, Alex... Tu... Sois bastante informal, menos mal que Marcos no es así.

—Ante la chica correcta todos somos formales—me contestó.

—Irina es también una chica correcta.

—No para Nían, ese es un caso complicado—suspira.

Marcos rodea mi cintura con sus brazos y me abraza por detrás.

—¿Todo bien aquí?

—Muy bien.

—En realidad la estaba distrayendo un poco—le dijo Chris

—Pues no desconcentres a mi novia, déjala —le dice Marcos.

—Solo trató de distraerla.

—No necesita tus distracciones—le dijo

—No celes ahora—le digo.

—Vale... Como la niña quiera.

Ane pide que salga en cinco minutos, me dan un micro y lo sostengo aun sigue apagado. Irina no parece, lo más probable es que esté entre el público para evitar a Nian.

—Suerte, amor.—me susurra Marcos

—Gracias.

Respiro hondo antes de salir. No tengo que pensar demasiado, solo quiero que todo fluya de manera natural. Si fuerzo las cosas y me pongo a pensar demasiado, sé que será peor. Así que, salgo directo hacia el escenario, con los nervios recorriendo todo mi cuerpo y un escalofrío que me atraviesa la espalda. Los focos me iluminan desde arriba, y suspiro tres veces antes de saludar al público.

Jude, relájate un poco más que te está por salir el corazón...

Joder. Tengo un nudo en la garganta de nervios.

Tú puedes.

No realmente.

Venga, tienes que saludar a las fans.

—Buenas noches, yo soy... Jude Brown, y supongo que a muchos os sonará mi nombre por los dramas que hay diariamente con alguien, no vamos a nombrar mucho esas cosas —se escucharon risas—. Sé lo nerviosos que estáis todos, al igual que yo. No quiero desesperar mucho, tampoco hablaros de miles de cosas que podrían pasar esta noche, ¿qué tal si les pedimos que pasen?

Muy corta la presentación.

Cállate.

Siento que lo estoy haciendo fatal.

Las cámaras comienzan a disparar, y los gritos del público resuenan en mis oídos. La adrenalina me envuelve mientras me sumerjo en la presentación. Las luces, la energía del público, todo se conjuga para crear un ambiente vibrante. Hay lugar asignado cada uno encima del escenario, los cuatro juntos mientras que yo estoy en una esquina sentada sola. Salen, me saludan y cuando Marcos lo hace se me seca la boca. Casi le beso, pero tuve que disimularlo. Y luego me siento en mi lugar asignado.

Captó a Irina entre el público al lado de la puerta de emergencias, me guiña el ojo y sus ojos captan los de Nian, al momento los aparta.

—Ya era hora de teneros aquí—dije

—Bueno, nos has tenido detrás del escenario, no te quejes—comenta Chris.

—Tu eres tonto—le murmura Marcos.

—Venís preparados por lo que veo—comente.

—Cuando se trata de hacer una entrevista contigo siempre venimos preparados, estamos realmente nerviosos...

—¿Por el lanzamiento de vuestro nuevo álbum está noche?—lancé la pregunta

—En realidad tú tienes el efecto de ponernos nerviosos a todos—bromea Chris

Y Marcos le lanzó una mirada asesina. Las fans, no paran de grabar y estar atentas a todo lo que pasa en el escenario. Necesito romper ese maldito momento incómodo.

—¿Estáis nerviosos por el nuevo álbum?—retome la pregunta

—Si. Es un estilo completamente distinto y no sabemos cómo será recibido, aunque en cierto punto aceptamos cualquier crítica de esta nueva era—contesta Nian.

—¿De qué estilo será el nuevo álbum?—mire a Alex.

—R&B.

—¿A qué se debe este estilo?

—Cooper fue el primero en interesarse por el R&B, luego nos introdujo a todos los demás en esto.

—Tiene un buen gusto el chaval no solo en la música—comenta Chris.

Hubiera preferido no mirar a Marcos cuando lo han mencionado, pero me está mirando de una manera descarada. No sabía si mi mirada suplicaba que parara o que siguiera haciéndolo.

—Por lo que veo estáis realmente nerviosos—comente—Bueno, un segundo álbum siempre suele ser diferente al primero, la historias cambian y supongo que vosotros también. ¿Esperabais que hubiera millones de fans esperando el lanzamiento?

—No. Ninguno esperaba que la gente estuviera esperando un álbum y más nuestro, ¿Tú también lo esperas con ansias Jude?—preguntó Marcos.

Dios, decirme que no me ha lanzado una pregunta también...

Si lo ha hecho.

No por dios, estoy roja de repente y todos me están mirando...

—Soy una fan más de vuestra banda, también soy una de esas millones que esperan el lanzamiento—dije

—Pero si ya has escuchado la mitad de las canciones—comenta Chris.

—Joder, cállate ya—le murmura Marcos.

—¿Os habéis inspirado en algo específico para este nuevo álbum?

—En lo que nos rodea diariamente—respondió Alex.

—¿Cuál consideráis que es la clave esencial para el buen funcionamiento de la banda y para entenderos?—pregunté.

—No nos entendemos. Somos todos diferentes, cada uno tiene sus manías y sus cosas raras, ¿no Cooper?.—Chris le miró.

Joder. Joder. Joder. No es momento de hacer ese puto comentario. Marcos se puso incómodo al instante; frunció el ceño y un nudo se formó en su garganta. Le vuelve a mirar con cara de asesino y tras unos minutos me mira. Estoy segura que ahora mismo hubiera abandonado el escenario pero está siendo consciente de dónde está y de las personas que le rodean.

Lancé miles de preguntas más, y terminé con algo improvisado.

—Pasaremos a las preguntas que quieren haceros las fans—dije en el micro.

Nían, con disimulo se levanta y señala a una fan para que le haga una pregunta. Irina, no le mira por mucho que él intente llamar su atención.

—Dios mío, estoy muy emocionada. Yo quiero preguntar, Nian.., ¿tienes novia?—le preguntaron.

Vaya pregunta. Viene como anillo al dedo, todos querremos saber que responderá. Incluso yo. Miro a Irina, ella suspira y no le mira.

—Estoy en una relación complicada—le respondió.

—¿Eso es soltero o...?

—Digamos que soltero pero nunca solo, ¿sí?

Puse los ojos en blanco y, con disimulo, sonreí. Es lo más estúpido que he escuchado en mucho tiempo. Irina, no se mueve, incluso creo que intenta mostrarse firme tras esas palabras. No creo que estén en un tiempo, han roto.

—¿Cuál será vuestra canción favorita de todo el álbum?—pregunta una chica.

—Cada uno tiene una diferente, y personalmente me gusta Girls in the cinema—comenta Marcos

—Vaya, que sorpresa—murmuré

—Alex, ¿Tú has producido el álbum?—le preguntó

—No, este no.

—Yo le quiero decir a Cooper, que... You look so daddy—comenta la fan.

¿Hoy es el día nacional de los celos?. No... No esperaba de repente ese comentario. Ni siquiera quiero mirarle a los ojos a Marcos, después de que le tiraran ese piropo delante de mí.

Por favor, que no le han llamado Daddy...

Si lo han hecho.

El comentario de la chica resonaba en mi cabeza, realmente es muy daddy pero el mío. No podía evitar sentir una ola de calor atravesarme todo mi cuerpo de golpe, ¿Porque tenía que decirlo mientras su novia estaba ahí? Pero lo confirmamos. Hoy Marcos, se ve muy papi, está precioso con ese estilo de camisas que se pone últimamente. Además, el comentario viene de una fan y entiendo el hecho de que le comente ese tipo de cosas. No puedo quejarme. Mis manos comenzaron a temblar ligeramente, porque nadie decía nada, mientras que yo trataba de mantener la compostura.

No quiero mirar a Marcos.

Mírale, mujer.

No.

Si.

—No tengo hijos, para lucir muy daddy—comentó en el micro él.

Se retumbó la sala de una risa.

—Ahhh, yo quiero preguntaros algo, tengo la oportunidad y no la pienso dejar pasar...—me miró la fan y temí lo peor—Hay varias teorías, sobre... Jude y Cooper, ¿Es cierto y empezasteis a salir poco después del drama cine o después de la entrevista del concurso?

—Solo se permiten preguntas de la banda, no personales—intervino Ane.

—Nian, contestó una sobre su vida supongo que me merezco también dar mi respuesta personal a cosas fuera de la banda—le dijo Marcos a Ane.

—Danos tu respuesta—le exigió la fan entre el público.

—Creo que poco después del cine es la más correcta.

Suspiro, suspiro, suspiro varias y miles de veces. Acaba de confirmar a todos que empezamos a salir poco después del cine. Las fans, en lugar de reprochar, se sorprendieron y se les vio eufóricas de todas maneras. ¡Volveremos a ser titulares en la prensa roja! La energía en la sala no disminuyó, y las reacciones del público seguían siendo positivas.

—Chris, ¿Qué piensas sobre este álbum?—preguntó una fan.

—A mi me gusta. Mostraremos una parte más enfadada. Al principio si que es cierto no teníamos idea de que hacer este álbum, pero supongo que al ser el segundo se merecía algo diferente y con mucha más calidad.

—¿Tenéis pensado en hacer otro tour?

—Acabamos de volver de uno, creo que nos merecemos un par de semanas de descanso y dejaros primero con el álbum, lo demás ya vendrá—contesta Alex.

—¿Qué tal si les ponemos el single a vuestras fans..?—dije en el micro.

—Si, por favor.

Todos se habían apartado, y los chicos bajaron a las primeras butacas para sentarse y ver juntos el videoclip del single. Yo me quedé en el escenario hablando y presentando. Lo que nunca me esperé es que Marcos aún estaba parado a mi lado y me robó un beso delante de todos.

Me besó delante de sus fans, de la televisión y la prensa, de su equipo y su banda, de sus padres y los míos que estaban viendo el programa. Marcos Cooper me besó delante de todos sin importarle nada.

No por dios, estoy ardiendo de calor y vergüenza. Se separa de mi pero se mantiene quito mirándome a los ojos. No sé cómo reaccionar. Me quedo paralizada, con la mente girando en mil direcciones, mientras intento procesar lo que acaba de suceder. En medio de la confusión, siento que el mundo entero se detiene por un instante, como si el tiempo mismo se hubiera congelado.

Los flashes de las cámaras y los murmullos del público se convierten en un eco lejano mientras me encuentro atrapada en este momento surrealista. No puedo evitar preguntarme, si es solo un gesto impulsivo o para callar para siempre este drama. Mientras tanto, Marcos me mira con una expresión intensa, como si estuviera esperando mi reacción. ¿Debería de susurrarle algo? ¿O debería ignorarlo y continuar como si nada hubiera pasado? Las preguntas siguen multiplicándose en mi mente, pero por ahora, solo puedo quedarme allí, en medio de la multitud, tratando de encontrar una respuesta.

—¿Qué acabas de hacer?—le pregunté.

—Lo que sentía que debía hacer.

—Nos están mirando—le susurre.

Él mira al público, y su rostro se retuerce en una expresión de pesar mientras encoge los hombros. Rápidamente, me aclaro la garganta. Él baja del escenario y se une a los chicos, saludando a Nían con un gesto que parece decir: "Lo he hecho bien".

—Wow... Eso sí que no me lo esperaba —dije en el micrófono—. Bueno, os dejo disfrutar del videoclip y recuerden, a medianoche el álbum estará disponible en todas las plataformas digitales. Gracias.

Dios mío...

Nunca pensé que podría pasar esto.

Solo quería bajarme del escenario; habían pasado muchas cosas a la vez. Mi corazón latía a mil por hora, podía sentirlo en la garganta, en las muñecas en la boca. Al salir del escenario, me encontré con Irina, parada y esperándome en el camerino. La abracé con fuerza, dejando ir un suspiro de alivio. Había salido todo bien, mejor de lo que esperaba. Joder. Si. Lo había conseguido.

—¿Qué tal me has visto? —le pregunté, buscando su opinión después de todo lo ocurrido.

—Te he hecho un pequeño análisis, y me he dado cuenta de que te sienta muy bien el escenario —me contestó Irina, con una sonrisa tranquilizadora.

—¿Y cómo has visto lo demás...? Me refiero a lo otro, Marcos... —pregunté, refiriéndome al beso inesperado.

—Bien, un poco exagerado el beso, es un peliculero, ¿se cree Romeo por besarte ahí? Por poco salgo vomitando. Siendo sincera... Valoramos poco a los chicos que sí hacen las cosas correctamente. Porque nos gustan más los que nos hacen sufrir, por ejemplo, Nian. Es un capullo, consentido, fracasado y es un fuck boy a toda costa, pero ahí me tiene siempre como una tonta. Perdón, es tu momento, lo has hecho muy bien, Jude. Eres una maldita profesional. Con y sin Cooper delante. —me vuelve a abrazar—Yo me hubiera mareado antes de que me besara alguien en un escenario, lo has hecho de diez —Irina comentó con su característico sentido del humor y sinceridad.

—Lo de Nían, es temporal se te pasará ya verás, y lo del diez, gracias. —respondí, sintiéndome reconfortada por sus palabras.

—Te quiero mucho, Amichi —dijo Irina, abrazándome con ternura.

—Y yo a ti también —respondí, devolviendo el abrazo con igual cariño.

Los chicos vuelven de la presentación y lo primero que veo es a Marcos acercarse a mi, no me abraza, solo se queda mirándome.

—¿Te ha gustado?—me pregunta.

Jude, cálmate aunque se que estás por gritar.

—¿El beso, el daddy, la entrevista, el álbum por que cosa preguntas..?—le mire.

—El beso.

—¿Delante de todos? Te dije que quería que fuéramos profesionales. No que me besaras delante de todos, ahora todos hablarán de eso —me quejé.

—No me importa, siempre hablan y lo sabes—respondió Marcos con indiferencia.

—¿A ti te gustó? —le pregunté

—Siempre me gustan tus besos —contestó él con una sonrisa, provocando un ligero rubor en mis mejillas.

—¿Quieres un brindis por eso?

Miré hacia unas copas dispuestas en una mesa cercana y, con una sonrisa cómplice, me acerqué a ellas. Tomé una botella de champán y descorche con cuidado, dejando que el sonido característico llenará el aire cargado de emociones. Llené las copas con el líquido dorado y luego levanté la mía en alto.

Él levantó su copa en respuesta y nuestros cristales chocaron en un brindis silencioso.

—La próxima vez que me beses te haré la cobra—le dije

—Atrévete.

Ane me quitó la copa de la mano y frunció el ceño con evidente molestia.

—Vosotros dos. ¿Qué significa besarse en medio del escenario durante una presentación importante del álbum? ¿Os habéis vuelto locos? ¿Dónde quedó tu profesionalidad, Jude?¡Joder, ¿no podéis hacer las cosas bien de una vez?!

—No —responde Marcos.

—Por estos mismos motivos perdemos a fans, querido guitarrista —añadió Ane con un tono de reproche.

—Bueno, si no quieres que sea el guitarrista de esta banda, no tengo problemas en irme. Espera, ¿tú eras la que me necesitaba para la imagen? —respondió Marcos, desafiante ante las críticas.

—Te estoy cumpliendo tu sueño, no podías haberla besado—replicó Ane, sin retroceder en su posición.

—Mi sueño no es ser guitarrista soltero. Si esa es la imagen que quieres dar al público de mí, te has equivocado, Ane.—contradijo Marcos, defendiendo su postura con firmeza.

—Solo te pido hacer cosas bien, te lo he repetido siempre.

Me quedé en silencio, incapaz de encontrar las palabras adecuadas para intervenir. En ese instante, me invadió una sensación de intranquilidad al darme cuenta de que las cosas no estaban progresando como había pensado inicialmente, sino que se estaban complicando más de lo que había imaginado.

—Perdonadme—intervino Irina con una voz que resonaba en el camerino—. Pero Cooper es el único que tiene los cojones de hacer lo que acaba de hacer delante de todos. Ninguno se atreve a confrontar un equipo grande, ninguno se atreve a decir lo que siente y a hacer lo que le da la gana. Todos los chicos intentan encajar, pero Cooper no. Él no trata de encajar con la sociedad, le gustó Jude y dio todo por ella. ¿Cuántos han hecho eso? Ninguno de ellos. Todos hacen lo que les dices y él no. Al menos me queda la esperanza de creer que hay chicos como él en el mundo, que pueden tener los dos cojones de afrontar todo por quienes aman. Porque nadie es capaz de hacer eso. Joder, un brindis por Jude y Marcos, porque son un ejemplo que, aunque sean dos celosos, dos idiotas enamorados, están juntos y le plantan cara a todo.—Mira a Ane sonriendo—No seamos idiotas Ane, somos conscientes de que Romeo moriría por su Julieta, no por unas pobres como nosotras.—Irina mira de reojo a Nian y luego me miró— ¿No queréis adobatarme? Lo digo en serio, sois increíbles. Y no estoy celosa porque Jude tenga un Marcos en su vida, sino que estoy celosa de que Marcos, tenga una Jude en su vida. Y si en algún momento pensáis en romper, solo recordar lo mucho que habéis luchado por llegar a estar donde estáis ahora.

—Yo... Eh...—Nian se queda a medias.

—Joder, si que he bebido mucho. El alcohol tiene sus encantos, pero odio que me ponga sentimental.

Sale tras la puerta, dejando un aire frío que se cuela entre nosotros, envolviéndonos en un silencio incómodo. Marcos me mira, buscando una respuesta en mis ojos, pero yo desvío la mirada, incapaz de enfrentar la intensidad de su mirada en ese momento.

—El caso es que no tendrías que haberla besado delante de todos, era la presentación de vuestro álbum.—comenta Ane.

—Eres muy pesada, búscate una vida o un amor y déjanos en paz.—le dijo Marcos.

واصل القراءة

ستعجبك أيضاً

81.1K 5.7K 48
La Tierra es el lugar de lo transitorio, de aquello que pasa, de aquel que cae, de aquel que yerra, de aquel que muere...nada es prefecto. El Cielo e...
51.3K 7.7K 54
Marcus juró que nunca volvería a amar. Luego de regresar a Nueva York por petición de su padre, Marcus intenta retomar su vida, intentando ignorar la...
26.8K 2.3K 25
Sinopsis: Se podría decir que todo comenzó con un castigo para unos jóvenes que empezaron su primer día con el pie izquierdo. Layla por cosas desafor...
52.7K 3K 18
𝑬𝒍𝒍𝒂𝒔 𝒔𝒆 𝒄𝒐𝒏𝒐𝒄𝒆𝒏 𝒅𝒆𝒔𝒅𝒆 𝒍𝒐𝒔 𝒅𝒐𝒄𝒆 𝒂𝒏̃𝒐𝒔, 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝑴𝒂𝒅𝒊𝒔𝒐𝒏 𝑳𝒆𝒐𝒏𝒐𝒓 𝒏𝒖𝒏𝒄𝒂 𝒇𝒖𝒆 𝒎𝒂́𝒔 𝒒𝒖𝒆 𝒖𝒏𝒂 𝒄�...