Un sonriente Joshua se despidió de su tío, quien le fue a dejar al aeropuerto y animado le recomendó de algunos lugares que podía visitar, el americano asintiendo emocionado.
Con eso listo arrastró su maleta al interior del aeropuerto, sintiendo mucha ilusión al poder viajar a la isla de Jeju, un hermoso y único lugar de Corea del Sur que había querido conocer desde hace años cuando se vino a estudiar a este país siguiendo las raíces de su familia.
Ya había dejado su maleta y realizó todos los trámites con su pasaje y documentos, para ya más tranquilo ir a la zona de embarque a esperar, sintiéndose tranquilo al llegar con un buen tiempo de anticipación.
Estaba distraído mirando su móvil cuando sintió claramente unos ojos sobre él, a lo que incómodo miró de reojo para ver quien era, sobresaltándose porque sus ojos se encontraron con los de Jeonghan.
- H-Hola, Shua, ha pasado tiempo, no estaba seguro de sí eras tú así que lo siento si te mire mucho rato - Saludo algo nervioso el coreano al notar la expresión tensa del menor, peinando con torpeza su castaño cabello. El menor trago saliva y se recostó en su asiento, intentando fingir indiferencia.
- Si, ha pasado tiempo. Toma asiento, aun falta como una hora para nuestro vuelo - Dijo algo distraído mientras miraba su móvil, intentando no perderse admirando a Jeonghan. El maldito se veía muy bien, teniendo un estilo de ropa muy casual, combinando con su relajada actitud. Cuando este no se sentó es que con duda le miró, notando que el coreano estaba nervioso y al notar sus ojos es que se animó a hablar.
- ¿Desayunaste? Si quieres podemos hacer tiempo comiendo algo, o al menos bebiendo un café - Propuso, haciendo una leve señal a las tiendas que habían en esa zona. Joshua enarco una ceja, sorprendiéndole que fuera él quien diera esa idea.
- ¿Tu invitas? - Cuestiono sin humor, a lo que Jeonghan asintió rápidamente. La verdad es que Joshua no quería, pero el mayor sería quien gastaría dinero y si le rechazaba es que estarían incómodamente haciendo tiempo ahí, así que no quedaba de otra, por lo que con pereza se levantó para seguirle.
Pronto compraron unos cafés y pastelitos, acomodándose en una pequeña mesa del lugar, en donde cada uno se distrajo con su comida, Joshua sintiendo como su corazón se sentía tan pesado.
De reojo miro a Jeonghan, aprovechando que este miraba concentrado algo en su móvil, apreciando bien su atractivo rostro, pero esta persona era un idiota, así que lo mejor era no intentar nada, no más.
Ellos hace cuatro meses habían comprado estos pasajes de avión a Jeju y reservaron con anticipación una habitación de hotel, todo porque en ese entonces estaba muy económico este viaje y querían hacer algo especial para celebrar su cuarto aniversario que sería hoy.
Sin embargo, hace ya siete semanas ellos tuvieron una fuerte discusión y terminaron.
Se habían conocido mientras estudiaban en la universidad y pronto se enamoraron, quedando encantados con lo compatibles que eran, por lo que cuando egresaron en sus carreras hace un año es que pronto consiguieron algún trabajo para empezar a ahorrar y cumplir ciertos planes que tenían a futuro, siendo uno de estos el viajar a Jeju y otro el irse a vivir juntos, algo que claramente no llegaron a conseguir.
El principal problema, al menos para Joshua, era el trabajo de Jeonghan y la actitud de éste, ya que le exigen tanto y le ofrecían tantas horas extras que el coreano no negaba cumplir, centrándose solo en ganar más dinero, pero en cambio tenía poco tiempo para su propia vida. Intento comprenderlo, pero eso junto a otros detalles empezaron a arruinar la confianza entre ellos e incluso empezó a dañar su autoestima.
Jeonghan siempre había sido atractivo y tenía un carisma que hacía que la gente se sintiera cómodo con él con facilidad, por lo que se llevaba bien con sus compañeros de trabajo, quienes lo invitaban a beber y en una de esas salidas lo vio muy cerca de algunas mujeres, lo cual le hizo dudar de la fidelidad del mayor, así que en una de las tantas discusiones que empezaron a tener es que terminó por expresar sus inseguridades y miedos.
Ante eso Jeonghan le calmo con sus palabras, ya que el idiota era muy elocuente y bueno al expresarse, sin embargo, no notaba ese amor en sus acciones.
Por eso en otra noche, luego de que Jeonghan llegara tarde al restaurante en el que quedaron para cenar, es que le reclamó, preguntando si realmente era tanto el trabajo que tenía o si eran otras cosas, a lo que Jeonghan cansado le llamó exagerado y dijo que si iba a andar de ese humor que mejor no se reunían y se fuera cada uno a su casa.
- ¿Realmente te importo? ¿Me consideras tu pareja? - Terminó por cuestionarle con seriedad, sintiéndose que sus inseguridades lo hacían sentir muy miserable. Esperaba que Jeonghan le respondiera que sí, que lo amaba y era feliz con él, pero para su sorpresa es que este incómodo miro a su alrededor, como esperando que nadie lo hubiera escuchado y le hizo una seña de que bajara el volumen.
Eso le recordó esa amarga parte de su relación que intentaba ignorar, así que colapsado de malos sentimientos es que lo mandó a la mierda y se fue del restaurante. En teoría terminaron, pero nunca hablaron bien las cosas, o al menos Joshua no quería, ya que ignoraba los mensajes que le dejaba Jeonghan, pero a la vez no quería bloquearlo de las redes sociales.
De esa forma pasaron los días y hasta semanas, hasta que un correo electrónico les recordó de sus pasajes de avión, así que con mucha incomodidad es que conversaron sobre qué hacer con este viaje, ya que ambos siempre habían querido conocer Jeju, así que acordaron ir y si bien compartirían el hotel, es que ya ahí cada uno haría lo que quisiera por su lado.
Por eso ahora el ambiente entre ellos era de incomodidad pura, ya que los dos tenían muchas cosas que querían decir, pero descartaron el hacerlo. Querían saber si el otro la pasó igual de mal en este tiempo.
Jeonghan luego de comerse un emparedado es que se animó a iniciar una conversación - ¿Y tuviste algún problema para conseguir estos días libres? Ya que igual son dos semanas - Preguntó curioso.
El pelinegro se notaba algo tenso, pero pronto dejó de comer su pastel para responder - Poco después de que compramos los pasajes es que lo converse con mi jefe, así que tenia todo ya preparado desde hace tiempo - Aclaro con tranquilidad, pero entonces noto algo raro, el hecho de que Jeonghan estaba ahí sin problemas ni estar su móvil vibrando por mensajes de su trabajo - ¿Y tu? - Recordaba que la empresa de Jeonghan era muy exigente y estricta, como si olvidara que sus trabajadores eran también humanos.
- Ningún problema. Hace un tiempo me di cuenta de que ese lugar consumía mucho de mi vida, al punto de que empecé a perder cosas valiosas para mi, así que renuncié hace una semana - Le contó con un tono demasiado serio, agitando un poco el pecho de Joshua, pero se limitó a asentir comprensivamente, sin decir mucho, cortando pronto esa conversación.
El coreano quería decir más, pero al ver como Joshua volvía a comer de su pastel es que decidió no preguntar más - Si te distraigo te demoraras más en comer, así que ve a tu ritmo - Dijo con una pequeña sonrisa, decidiendo seguir bebiendo de su café .
Joshua casi se atraganta ante sus palabras, odiando como su corazón se aceleraba tan solo porque Jeonghan demostraba que le conocía bien. Mentalmente se autoconvencía con que eso ya no era suficiente.
De esa forma se quedaron en silencio hasta que fue hora de su vuelo, tomando asiento uno al lado del otro y Jeonghan pensaba preguntarle algo o solo comentar que era su primer viaje en avión, pero Joshua de repente se puso sus audífonos y cerró los ojos, queriendo descansar un rato.
Eso desanimó un poco al coreano, pero no podía culpar a Joshua, de hecho aun le sorprendía que estuviera ahí aceptando realizar ese viaje con él. Por eso es que en silencio e intentando ser sutil es que admiro a Joshua, como se veía su perfil en contraste a la luz que entraba por la ventana del avión, viéndose hermoso.
Tenia un gran impulso de tomar su mano y acariciar ese negro cabello, pero sabia que solo arruinaría todo, así que prefirió también escuchar música para distraerse, aprovechando de planear bien lo que haría al llegar, porque definitivamente iba a recuperar a ese hombre, quien se dio cuenta de que era el amor de su vida.
De esa forma, sin novedad alguna, es que llegaron a la hermosa isla de Jeju y en un taxi llegaron al hotel que tenían reservado desde hace tiempo, en donde al entrar a la habitación es que más incomodidad los rodeo, hasta tristeza, pero Joshua se repitió en su cabeza que eso estaba mejor para evitar problemas, así que en silencio se fue a su cama, pero Jeonghan con vergüenza miraba ese lugar.
Era una hermosa habitación con una buena vista de la playa, sin embargo tenía dos camas individuales, tal como la había reservado cuando aún eran pareja.
Esta era una de las razones por las que Joshua empezó a ser infeliz a su lado, y es que a diferencia suya Jeonghan no se sentía con la confianza y seguridad de dar señales en público de que le gustaban los hombres, al punto de que incluso en este apartado lugar donde nadie los conocía es que igual pidió una habitación con camas separadas, para que nadie en el hotel sospechara que eran pareja.
Por su parte el americano siempre fue abierto con eso y cómo le amaba mucho es que al inicio entendió que necesitará tiempo para adaptarse a esto, ya que igual Corea era bien conservador a pesar de que sus familias los aceptaron sin problema, pero con los años Jeonghan nunca cedió, escondiéndose como si le avergonzara que el resto se enterara de su amor por Joshua, por un hombre.
Por eso es que con dolor recordaba lo que le dijo Joshua una vez y no tuvo el valor de responderle, "Solo no has roto conmigo porque aun no encuentras una mujer que te haga sentir normal". Cuando escucho eso, noto cuanto había estado dañando a Joshua.
Cansado Jeonghan se sentó en su cama mientras ordenaba su maleta y Joshua de repente se puso de pie - ¿Vas a algún lado? ¿Tan pronto? - Pregunto impresionado, porque este parecía estar arreglando un pequeño bolso para salir.
El americano le miró algo pensativo y asintió - Iré a pasear para conocer un poco la zona, caminar un poco y quizás tomar algunas fotos - Explico y al final habló con lentitud, como esperando que Jeonghan le dijera algo, que quizás quisiera acompañarlo.
Con pereza el mayor se dejó caer en su cama, estirándose - No sé como tienes tanta energía. Vuelve a la hora de almuerzo y pregunta a los lugareños si hay un restaurante que recomienden - Dijo con una perezosa voz, ni siquiera dándole un vistazo.
Joshua apretó su mano en un puño, no entendiendo que esperaba, así que irritado tomó una de las tarjetas de la habitación y se fue sin decir más, conteniendo sus ganas de golpear a Jeonghan, de quien se supone ya no debía exigir nada.
El coreano se quedó unos segundos acostado y luego suspiro, arrepintiéndose un poco de lo frio que le respondió, pero era parte de su plan, ya que se imaginaba que el curioso y entusiasmado Joshua iba a querer salir en cuanto llegaran al hotel a dejar sus maletas.
Rápidamente se levantó para mirar por la terraza la zona de la entrada del hotel, logrando reconocer a Joshua cuando este salió, así que confirmando que este no volvería de repente a la habitación es que rápidamente fue a por sus cosas y salir a ciertos locales que confirmó que había por ahí cerca mientras estaba en el aeropuerto.
Sabía que Joshua seguía sin salir con alguien nuevo y no quería desaprovechar los días que estarían ahí, así que si bien podía verse apresurado, es que debía hacer su movimiento cuanto antes y en especial cuando se suponía iba a ser su aniversario, así que fue a comprar lo necesario para su plan y al volver a la habitación del hotel es que rebusco en su maleta otras cosas de decoración que había estado preparando, en donde se sentía muy nervioso, sabiendo que este era un paso importante en su vida.
Sin embargo, cuando se imaginó que al fin podría ver de nuevo la sonrisa de Joshua dirigida a él es que reunió la determinación para continuar con este cursi plan.
Como no sabía cuánto tiempo se demoraría Joshua en volver es que decidió apurarse en decorar y preparar todo.
Por su lado, Joshua había salido del hotel algo irritado, pero mientras caminaba por las calles de ese hermoso lugar es que comenzó a relajarse y sentirse más libre, estando entusiasmado al descubrir tantas cosas nuevas y fascinantes, anotando mentalmente lugares que luego tenía que visitar con más detenimiento.
Sin embargo, cuando pasó por la zona de la playa es que vio a muchas familias, grupos de amigos y parejas paseando, teniendo un agradable momento juntos, provocando que un amargo y pesado sentimiento apretara su pecho.
Vino aquí sin pensarlo mucho, pero ahora se sentía muy solo y deprimido, recordando cómo habían sido sus días desde que mandó a la mierda a Jeonghan.
Le gustaría decir que exageraba, pero realmente se sentía como si una parte de sí mismo hubiera muerto, que ya no podía creer de nuevo en el amor o más bien es que no quería volver a ofrecerle su corazón a alguien, sentirse así de débil y vulnerable ante otro humano.
Fue horrible como le había dolido ese sentimiento, además de que se sentía culpable, ¿Quizás tuvo que haber sido más comprensivo con Jeonghan? Porque luego confirmó que este nunca le fue infiel ni estuvo cerca de serlo, de hecho cuando lo dejo en ese restaurante es que la expresión en el rostro de Jeonghan era como si lo hubiera apuñalado, así que tenía claro que debía juntarse con él para hablar bien las cosas, pero le daba miedo enterarse que en realidad nunca le importo a Jeonghan y que de hecho este estaba mejor sin él, así que termino ignorando sus mensajes.
Recordar todo eso lo deprimió, pero también le dio el valor para enfrentar a Jeonghan y discutir bien las cosas y definir bien el fin de esto, ya que veía difícil el solucionarlo, así que aprovecharía bien este viaje para ya dejar de torturarse con esto.
En su caminata paso por una zona bien animada y que de hecho había un local que ofrece un tour por zonas turísticas de la isla, orientado especialmente a parejas. Debido a que Joshua se quedó mirando por un tiempo la lista de lugares a visitar en el tour es que un vendedor se acercó entusiasmado a convencerle de contratar el tour, diciendo que su pareja lograría apreciar la belleza de la isla, pero Joshua sonrió sin humor por sus palabras.
- No ando con mi pareja, sino que con un amigo - Le aclaro, sintiendo algo desagradable en su garganta, ya que muchas veces Jeonghan había dicho esas palabras al querer aclarar la relación entre ellos, escondiendo el hecho de que eran pareja
Con cierto nerviosismo el vendedor se disculpó y aclaró que igual era una buena experiencia para buenos amigos, el hacer buenos recuerdos, pero el americano con educación escucho un poco más y luego se excusó para irse, sintiéndose desanimado al recordar como por todos esos años Jeonghan logro decir esas palabras sin problema y ciego de amor le acepto todo.
Sabía que en Corea en general te verían mal por andar con gente de tu mismo género, pero ya no pudo aguantar más eso y colapsó. Quizás esa era una de las cosas que debía aclararle a Jeonghan cuando hablaran las cosas.
No quería seguir deprimiéndose tanto por los recuerdos de la relación que tuvo con Jeonghan, así que decidido fue de regreso al hotel, porque si posponía más esta conversación es que más incómodo sería este viaje y no quería desaprovecharlo, además de que ya habían pasado como dos horas desde que salió del hotel.
Ya frente a su habitación es que tomo una larga bocanada de aire para calmarse, en donde luego de mentalizarse un poco sobre lo que quería decir es que al fin abrió la puerta, rezando para que Jeonghan no estuviera durmiendo y arruinara su idea, sin embargo, algo más derrumbó todo este plan que tenía en mente.
En cuanto abrió la puerta noto que estaba algo oscuro dentro como si tuviera todas las cortinas cerradas, pero el interior de la habitación se notaba claramente porque habían velas prendidas iluminando. Aún más inquieto noto que habían pétalos de flores en el suelo y que en medio de la habitación estaba Jeonghan de pie, cargando un hermoso ramo de flores.
Estaba muy consternado, no sabiendo qué hacer, pero entonces escuchó ruido en el pasillo así que muy nervioso y avergonzado ante la idea de que alguien viera lo que pasaba ahí dentro es que rápidamente entró y cerró la puerta tras suyo.
Estando ahí considero que decir, porque no entendía nada, pero entonces noto que en las paredes había unas decoraciones que no estaban antes y eran... ¿Fotos de ellos? Muy perplejo se acercó a una, reconociendo pronto que eran todas las fotos que Jeonghan tomó de ellos pero no publicó en ningún lado, tan solo apreciándolas en privado.
Muy confundido miró de nuevo a Jeonghan, quien estaba con una gran sonrisa, ya que había estado atento en la terraza para cuando volviera Joshua, así que calculo bien las cosas aprovechando bien las flores frescas que compro y poniéndose ropa más formal, pero al ver la expresión tan aturdida del menor es que se sintió nervioso - ¿Qué estás haciendo? - Le pregunto un alterado Joshua, como si no entendiera que pasaba.
Jeonghan aclaró su garganta para hablar - Tu me conoces, si no me dices claramente las cosas como son es que no creeré en eso y tu nunca me dijiste directamente que rompiéramos ni que ya no me amas o que bien me odias - Empezó a hablar, intentando explicar de dónde nació la esperanza de que esto podría servir - Por eso pensé en estas semanas como un tiempo, una pausa en nuestra relación, ya que yo aun espero tener un futuro juntos, porque te amo, amo demasiado a Joshua Hong, el hombre que me demostró lo hermosa que puede llegar a ser la vida, cómo se siente ser amado y que también me demostró cuán imperfecto y estúpido soy al no poder devolver adecuadamente este amor a la persona más valiosa de mi vida - Compartió sus sentimientos.
Con cierta duda se acerco y tomo la mano de Joshua, tirando levemente de ella para que caminara hacia el centro de la habitación y pudiera mirar mejor las fotos que le rodeaban, siendo muchas memorias del tiempo juntos, muchos momentos felices, pero que vergonzosamente escondía porque eran una pareja de hombres.
- Tu trajiste muchos momentos felices a mi vida, pero yo te termine haciendo infeliz, te hice daño por mis dudas y miedos sin sentido, mis malas decisiones en donde no priorizaba bien lo importante de mi vida, así que no te culpo porque quisieras alejarte de mi, que me dijeras esas cosas y dudaras de mi - Dijo muy apenado, sujetando tembloroso su mano.
El americano trago saliva, sintiendo como su corazón estaba muy alterado entre la ilusión y miedo de esto - Que bueno que sepas que fuiste un imbécil - Murmuro molesto, sintiendo un nudo en su garganta. Jeonghan sonrió triste ante sus palabras.
- Si, lo fui, porque por culpa de eso te perdí, perdí la oportunidad de hacerte feliz, pero ¿Podrías aceptarme de nuevo a tu lado, Hong Joshua? Porque quiero amarte de la forma en que nunca me permití hacerlo, dejar de ser un maldito cobarde que nunca se atrevió a decirte "Te amo" cuando estábamos en nuestras citas, cuando tu eres el único que realmente ha estado en mi corazón todos estos años. Te amo demasiado y aun tengo mucho amor que demostrar, muchas palabras y cariños que darte, así que, ¿Puedo estar de nuevo en tu vida? - En cuanto empezó a compartir sus sinceros sentimientos es que olvido los nervios, siendo mayor su desesperación por recuperarlo.
Joshua se sintió muy conmovido por sus palabras, pero aun seguía la ansiedad e inseguridad en su corazón por culpa de las actitudes que había tenido Jeonghan antes - ¿Si te preguntan que tienes novia les aclararías que en realidad es un novio? - Cuestiono serio, recordando los momentos de su relación que dañaron su corazón.
El coreano tenso su rostro, recordando lo mismo que Joshua - Hasta les mostraría una foto de nosotros para demostrar que nadie más me haría igual de feliz que tú - Respondió con seguridad.
Joshua odio cuan rápido se ilusionó su corazón - ¿En público en nuestras citas dirás que somos un par de amigos? - Dijo con un tono agrio, a lo que Jeonghan uso su pulgar para acariciar su mano.
- Diré que eres mi futuro esposo, si es que me lo permites - Aclaró, mirando soñadoramente a Joshua, quien tragó saliva intentando calmarse.
- ¿Me dejaras sostener tu mano en público? - Dijo eso al sentir la mano de Jeonghan rodeando la suya, temiendo que solo lo hacía por estar en un lugar cerrado.
- Con eso puedo decirle al mundo que eres mío, así que llegaras a odiarme por cuanto sujetare tu mano - Susurro sonriente, enredando sus dedos con los de Joshua.
- ¿No tendrás vergüenza al aclarar que te gustan los hombres? - Dijo con un tono duro, dando un paso atrás.
- Más que eso diría que soy Joshuasexual, y definitivamente no me da vergüenza tener tan buenos gustos - Dijo con un tono más juguetón acortando ese paso que dio, recibiendo un golpe en su hombro.
- ¿No te incomodara besarnos en público? ¿Realmente quieres vivir junto a un hombre? ¿No vas a decir luego que solo somos compañeros de piso o alguna mierda por el estilo? ¿En serio vas a...? - Esta vez soltó preguntas con rapidez, callándose solo porque la mano de Jeonghan soltó la suya para ir a su mejilla, su corazón volviéndose loco en su pecho.
- No me incomodaría, pero no lo haría porque terminaría queriendo comerte ahí mismo y sería un sueño vivir junto a la persona que amo - Respondió con un suave tono, sintiéndose ligero al por fin sincerar lo que hay en su corazón, así que más tranquilo le ofreció el ramo de flores a Joshua - Ahora sé bien que sin ti mis días son monótonos y sin gracia, que cuando consigo hacerte sonreír es como si mi vida cobrara sentido. Te amo y ahora solo me importa lo que tu pienses de mi, no gente a la que apenas les hablo, así que ¿Tu aguantarías el volver con el idiota que no supo valorar bien a la hermosa persona a su lado? ¿El compartir tu vida con un hombre que ahora nunca te dejará irte de su lado? En un momento me sentí muy abrumado al saber cuántos sentimientos tengo por ti, así que necesito que seas feliz y en especial si es junto a mi - Confesó, mirando muy esperanzado a Joshua, quien tenía su rostro ligeramente sonrojado como si quisiera llorar.
Con duda el pelinegro aceptó el ramo de flores, sintiéndose esperanzado y emocionado, aunque también aterrado con que esta felicidad solo sea temporal - Si alguna de tus palabras es mentira te juro que me devolveré a Estados Unidos y te bloqueare de todas las redes sociales, además de que expondré lo gay que realmente eres - Intentó amenazarle, apareciendo una brillante sonrisa en el rostro de Jeonghan, quien al ahora tener sus manos libres es que con ternura sujetó las mejillas de Joshua, acariciándole con cariño.
- Nunca había sido tan sincero en mi vida. Te amo Joshua Hong, ¿En serio me permitirías de nuevo estar a tu lado? - Cuestiono para estar seguro, a lo que un avergonzado Joshua bufo.
- ¿Quién eres? ¿Por qué ahora estás diciendo todas las cosas cursis y vergonzosas que nunca dijiste estos años? - Cuestiono tímido. Jeonghan con ternura beso la frente del menor.
- Dime que me amas, por favor, lo haces y te juro que me tendrás a tus pies - Rogó en un susurro, aun acunando con cuidado el rostro de Joshua, quien nervioso se abrazaba a ese ramo de flores, en donde al ver la expresión de Jeonghan tan iluminada y sus ojos cargados de amor es que decidió dejar caer las paredes que puso a su alrededor.
- Lo hago, te amo, pero que sepas que también tengo mis defectos y... - Los labios de Jeonghan callaron sus palabras, recibiendo un dulce y suave beso que terminó por quitar las dudas de su corazón.
Fue un pequeño beso, pero igual cuando se separaron es que se sintieron sin aire, Joshua mirando realmente estupefacto a Jeonghan, quien tocaba su rostro con mucho cuidado y adoración, sus ojos apreciando cada detalle de él - Tus defectos son lo que te hacen tan adorable y encantador, en cambio los míos realmente me hacen una horrible persona, así que gracias por aceptarme de nuevo a tu lado - Dijo con cierta frustración.
El americano frunció el ceño, así que dejando el ramo de flores a un lado es que atrajo a Jeonghan a un abrazo, obligándole a esconder su rostro en la zona de su cuello, así que podía acariciar su negro cabello sin problemas - Si todo lo que me dijiste lo vas a cumplir entonces vas a solucionar lo que me empezó a molestar de ti, pero tu nunca llegaste a ser una horrible persona ante mis ojos. Todos tienen miedo de algo y tu me habías contado cuánto sufriste en secundaria porque se enteraron de tus gustos, así que encuentro muy valiente de tu parte el querer dar este paso, el reunir el valor para enfrentarte a estos aterradores recuerdos - Había decidido seguir amando a Jeonghan, así que no permitiría que se sintiera mal y menos que se menospreciara tanto a sí mismo.
Jeonghan no se esperaba ser de repente abrazado de esa forma con Joshua y que este le consolará con tan bonitas palabras, así que conmovido se aferró a él - Pero aun así me tomo mucho tiempo, abuse de tu paciencia y amor - Replicó con culpa, relajándose ante los cuidadosos dedos que peinaban su cabello.
- También eres consciente de tus errores y reflexionaste al respecto, por lo que no puedo evitar seguir enamorándome de ti, así que deja de tratar mal a la persona que amo, a ti - Le regaño con cariño, dejando en beso en sus cabellos - Somos humanos, así que seguiremos cometiendo errores, pero como pareja nos vamos a apoyar, arreglar las cosas para ser mejores y salir adelante, ¿Cierto? - Le pregunto con un suave tono de voz. Jeonghan sentía ganas de llorar, así que se limitó a asentir mientras se quedaba entre los brazos de Joshua que tanta seguridad le daban.
- ¿T-Tienes idea de cuanto te extrañaba? Te amo demasiado, así que si me volvías a mandar a la mierda y decirme directamente que t-terminábamos, que no me querías más yo... no sé que iba a hacer - Confeso Jeonghan, sintiéndose muy afectado, pero también aliviado.
Joshua rio ligeramente, entendiendo muy bien esos sentimientos, así que con cuidado rompió el abrazo para poder ver bien el rostro de Jeonghan, quien tímido tenía la mirada gacha, por lo que suavemente alzó su mentón para besarlo, provocándole ternura como el mayor se sobresaltó y luego se derritió contra él. Al terminar el beso es que le miro con mucho cariño y una amplia sonrisa - Yo también te extrañaba, Hannie - Susurro feliz.
El mayor se quedó un momento paralizado ante la imagen frente a él.
Luego de siete deprimentes y oscuras semanas, es que se sintió iluminado ante la hermosa sonrisa de Joshua y sus cálidos ojos que le miraban con un amor que pensaba que se había marchitado.
Se sentía tan extremadamente afortunado.
Por eso sin pensarlo más es que tiró de su nuca para besarlo, inclinando su rostro para que no chocaran sus narices mientras profundizaba el encuentro de sus bocas, siendo correspondido por un entusiasmado Joshua, quien sin dudarlo lo fue arrastrando a una de las camas de la habitación en donde lo empujo, pero antes de acomodarse sobre él es que se dio cuenta de algo, soltando una animada risa.
- No me había fijado que juntaste las camas y encima hiciste un corazón con los pétalos, ¿De donde se te ocurrió una idea tan cursi? - Dijo divertido, pero demasiado feliz así que rápidamente se quitó su ropa, en donde al verlo es que Jeonghan le imitó con torpeza.
- DDe alguna forma quería decir que de aquí en adelante evitare dormir lejos de ti, así que en cuanto vuelva buscaré un buen trabajo para ahorrar y esta vez sí conseguir el vivir juntos, porque ahora que me aceptaste de nuevo es que mi siguiente sueño es despertar siempre a tu lado - Dijo rápidamente las palabras que con cierta vergüenza había estado pensando.
El americano quedó algo impresionado, era absurdo lo feliz que le hacían esas promesas que le decía Jeonghan aunque no hubiera nada que respaldara que fuera a cumplirlas, pero quería creer, quería confiar en esos hermosos ojos que le miraban con mucho amor y determinación.
En cuanto quitaron la ropa de en medio es que lentamente se acomodó sobre Jeonghan, poniendo una rodilla a cada lado de la cadera del mayor, quien estaba sentado y embobado mirándole - Yo me estaba rindiendo con ese sueño, así que gracias por atreverte a acortar la distancia entre nosotros y hacer todo esto. Gracias por seguir amándome, pero ahora toca demostrarlo con acciones - Admitió un poco sobre lo que tenía en mente hacer en este viaje, pero ante sus últimas palabras es que tomó las manos de Jeonghan para guiarlas a su pecho y sintiera como de acelerado estaba su corazón.
Jeonghan trago saliva y se animó a deslizar sus manos a través de ese cuerpo que conocía muy bien, acariciándolo para luego dejar un beso en el centro de su pectoral izquierdo - Gracias por permitirme seguir amándote - Susurro, dando inicio a lentas e íntimas caricias, cada vez pegando más sus cuerpos mientras con sus manos iban recordando bien como se sentía la piel del otro, sus músculos y calor.
Pronto se perdieron en las sensaciones y sentimientos que habían empezado a desbordarse con lo que conversaron, así que entre besos fueron presionando sus cuerpos contra el otro, rodeándose con sus brazos y piernas, aumentando el calor y deseo en ellos, así que pronto Jeonghan alcanzó el lubricante que había dejado por ahí cerca en caso de que resultaran bien las cosas.
Intercambio miradas con Joshua, quien asintió sonriente, así que mientras seguían acariciándose es que Jeonghan comenzó a prepararlo mientras susurraba palabras de amor.
Con lentitud fueron transmitiendo sus sentimientos y preparándose para dar el siguiente paso, en donde llegado el momento es que con cierta ansiedad Jeonghan se acomodo sobre el americano posicionándose entre sus piernas, dando inicio a ese íntimo acto que no habían hecho hace tiempo, así que extasiados por todas estas sensaciones es que sin decir más palabras es que fueron transmitiendo cuanto se extrañaron, cuanto se necesitaban y cuanto se amaban, sus cuerpos no dejando de tocarse y sus manos no dejaban de repartir suaves caricias en la piel contraria.
Gracias a que aún era de día y que las velas seguían prendidas es que una íntima luz los iluminaba, así que con ojos cargados de amor se admiraban, sus ojos achicándose cuando se sonreían en medio de ese acto, no pudiendo evitar besarse una y otra vez, a veces callando los sonidos que dejaban escapar por el placer del momento.
En ese ambiente cargado de placer y ternura es que tiempo después consiguieron llegar a sus límites, sintiendo que saciaron un poco la necesidad de sus corazones y cuerpos, en donde les habría gustado continuar, pero Joshua con fatiga le gruño - E-Es temprano y tengo hambre - Explicó con fastidio porque no podía seguir, a lo que Jeonghan que había ido a botar el condón es que sonriente se acerco a dejar un beso en su frente.
- Lo sé, así que te seguiré amando más en la noche - Con cariño peino los negros cabellos del americano, quien relajado cerro sus ojos. De repente recordó algo que había comprado, así que rápidamente se fue a otro lado de la habitación - Mientras tanto recupera energías con esto, ya después de ducharnos iremos a algún restaurante de la zona - Joshua le miró con curiosidad, sorprendiéndose al ver que regresó teniendo un bombón de chocolate entre sus labios, ofreciéndoselo.
- ¿En qué momento los compraste? Eres tan adorable - Dijo con cierta diversión, levantándose un poco para alcanzar a Jeonghan, pasando su lengua por su labio inferior antes de quitarle la mitad del bombón para comérselo.
El coreano sonrió satisfecho mientras se comía lo que quedó en su boca y luego se inclinó para compartir un beso con Joshua, saboreando muy bien el dulzor en su boca, teniendo que separarse solo por la falta de aire - Antes de ir a ducharnos, ¿Puedo tomar una foto de nuestras manos juntas? Quiero alardear en las redes sociales del hermoso hombre que tengo a mi lado - Pidió emocionado, a lo que Joshua algo tímido asintió.
Un feliz Jeonghan fue a por su móvil y cerca de la luz de una vela es que entrelazo su mano izquierda con la derecha de Joshua, tomando una foto que definitivamente imprimiría para decorar el futuro hogar que tendrían - ¿Cómo quedó la foto? - Pregunto curioso el menor, apoyándose en el hombro de Jeonghan para mirar bien su móvil, sintiendo su pecho cálido por cómo de bien se veía y las palabras bonitas que el coreano le estaba poniendo en la descripción de la publicación.
- Quedo perfecta - Afirmó sonriente, pero luego hizo una mueca al darse cuenta de algo - Por el tamaño de nuestras manos pensaran que yo soy el de abajo, pero no importa, quiero que sepan que al fin vuelvo a sentirme feliz - Dijo algo divertido, terminando por publicar la foto en su red social que más usaba.
Joshua rio ante sus palabras, pero quedó pensativo, ya que en todos esos años siempre se mantuvieron con la misma dinámica porque a Jeonghan le gustaba tener el control y bueno, de forma inconsciente evitaba ser tan "gay" o dar señales de esto - ¿Te gustaría probar como se siente? - Decidió preguntarle, a lo que Jeonghan le miró sorprendido, pero asintió sin dudar.
- Es solo otra forma de expresar cuánto nos amamos, así que hazme todo lo que quieras esta noche - Dijo con una coqueta sonrisa. Joshua sintió su corazón agitarse, así que no pudo evitar sonreír nuevamente a Jeonghan y con renovadas energías se levantó y tomó de la mano a su pareja para que le siguiera al baño de la habitación.
- Aún queda mucho para la noche, pero podemos adelantar un poco en la ducha, ¿No lo crees, Jeonghannie? - Propuso con una media sonrisa, tomando desprevenido a Jeonghan, quien tiró su móvil a la cama para seguir más rápido a Joshua a la ducha.
Luego de abrir la llave de la ducha es que entre torpes besos el pelinegro lo empujo contra la pared de cerámica, haciendo suspirar a Jeonghan quien satisfecho lo rodeo con sus brazos - Te amo, Joshuji - Susurro, devolviendo con cariño las caricias y besos.
Al final acordaron que ese día si fuera su cuarto aniversario, por lo que en este viaje consiguieron obtener muy buenos recuerdos juntos, en donde Jeonghan con felicidad cumplió su palabra arrastrando de la mano a Joshua a todos lados y dándose pequeños besos mientras paseaban, pareciendo un par de recién enamorados.
Las fotos tomadas esos días fueron una destacada parte del álbum de recuerdos que harían a futuro, pero solo fue una pequeña cantidad en comparación a todas las fotos que fueron tomando a lo largo de los años.
En un inicio no sabían cómo amar, pero con paciencia y esfuerzo consiguieron aprender, evitando que fuera a marchitarse ese amor como casi ocurrió en esas semanas lejos del otro, ¿Y de qué forma lo consiguieron?
Simplemente buscaban reconquistarse cada vez que podían, en especial sorprendiéndose cada 22 de Mayo, en el aniversario de ellos.
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FIN
Gracias por leer este nuevo oneshot, espero lo hayan disfrutado~
Esto también lo escribí porque una de mis amigas hermosas preciosas geniales que son carats y escritoras cumple años hoy, así que espero que cuando pueda leerlo lo disfrute, ya que hemos estado todas muy ocupadas. Recuerden que aunque estén muy ocupadas y estresadas es que deben cuidar su salud lo que más se pueda, porque sin salud es difícil disfrutar el resto de cosas en la vida.
De aquí en adelante no tengo más regalos que dar/escribir hasta fin de año, pero espero pronto volver a traerles algo que puedan leer a gusto por un tiempo. Hasta entonces cuídense y gracias por seguir leyendo lo que escribo ❤