AU: los Smiling Critters se encuentran en el Playcare
Smiling Critters, pequeños animales de aspecto tierno, una colección de 7 hermosos peluches. Pero los "trabajadores" (por no decir científicos que hacían experimentos algo... curiosos) querían volver a esos peluches juguetes con conciencia, convirtiéndolos en algo así como juguetes gigantes con conciencia propia, obviamente no se les hizo difícil, ya habían hecho algunos como Huggy-Wuggy, Mommy Long-Less, y algunos juguetes más, hacer animales con aspecto tierno no iba a ser tan complicado.
Y dicho y hecho lograron crear a todos los Smiling Critters, el primero en crear fue Dogday, y luego le siguieron los demás.
Todos los Smiling Critters se encontraban en el Playcare, para acompañar a todos los niños que se quedaban en el orfanato, tenian una muy buena vida sin preocuparse por nada más que ver a los niños felices.
Aunque, Dogday, el cual era el líder del grupo, siempre tuvo curiosidad por ese gato morado que había visto en posters y publicidad en si, el punto es que el gato llamado Catnap estaba en todos los pósters promocionales y existían peluches de el, pero nunca lo había visto como un juguete con conciencia, solo era un peluche más de el montón.
Siempre creyó que quizás Catnap nunca había sido creado, y que solo era un peluche, pero siempre tuvo la ilusión de poder conocerlo en persona, ¿Como sería su personalidad? ¿En verdad oleria a Lavanda? ¿Que tal funcionaria su gas rojo de Amapolas?.
Ilusión que fue rota en cuanto se enteró que habían eliminado a todos los peluches de Catnap de la línea de los Smiling Critters, pensó que si lo habían eliminado de los pósters y de toda publicidad seguramente era porque no lo querían crear, y Dogday no entendía el porque de la situación.
Bueno, Dogday creía que Catnap no existía, o eso era lo que creía. Una noche decidió quedarse en la habitación de un niño ya que este no quería que él se fuera, se quedó con el niño un largo rato,
esperando que se duerma y afortunadamente el niño no duró mucho tiempo despierto. Fue entonces que escucho pasos por el pasillo que conectaban las habitaciones de los niños del orfanato, pensó que quizás era una maestra o algún tutor así que salió al pasillo para decirle que el niño apenas se había dormido, pero cuando salió espero encontrarse a quienes es menos a quien encontró.
En cuanto salió al pasillo pudo visualizar a un juguete un poco más alto que el, no lo podía ver bien gracias a que las luces estaban apagadas y la única luz era la de la luna que entraba por las ventanas, pudo ver qué el supuesto juguete tenía orejas puntiagudas, y una larga cola, a demás de ser de un color morado o azul, pero aún no lo reconocía por completo.
—¡Hola! Soy Dogday, el líder de los Smiling Critters, ¿Quien eres tú?— Dogday hablo con amabilidad y una sonrisa tratando de recordar quien era ese extraño juguete, o lo que fuera.
El "juguete" se quedó estático donde estaba, no tenía una expresión nueva ni ningún movimiento, Dogday se preguntó a si mismo si solo era un juguete sin conciencia y en realidad estaba hablando solo, fue entonces cuando recordó a cierto gato de color morado y entonces callo en cuenta de que muy probablemente aquel era Catnap.
—¿Te llamas Catnap, no es así?— Pregunto con suavidad aunque estaba muriendo de emoción, se acercó un poco más a el y el gato en vez de seguir quieto comenzó a alejarse lentamente primero y luego salió corriendo del lugar.
—Uh...— Dogday no sabía porque estaba corriendo pero decidió seguirlo a casi la misma velocidad "¿Lo habré incomodado?" se preguntó a si mismo mientras salía de los dormitorios de los niños, pudo ver cómo Catnap se detenía por un momento apoyándose en una pared de allí, ahora pudo verlo mejor claro que era Catnap, su color morado, el medallón de Luna y su forma de gato lo delataban
Catnap estaba de espaldas así que Dogday creyó que era su oportunidad de hablar con el.
—Por favor no te vayas— al decir esto Catnap se dio la vuelta rápidamente, Dogday creyó que quizás lo había asustado —¿Te asusté? Lo sie...—
—¿Por qué no estás dormido?— Pregunto Catnap sin dejar que Dogday terminara de hablar, su voz era profunda y gruesa pero de alguna manera también era una voz dulce, a su manera claro, Dogday se había quedado sin palabras después de escucharlo hablar, tenía una voz muy diferente a la que se había imaginado pero eso no apartaba que su voz fuera igual de linda.
—Oh bueno, es solo que estaba ayudando a un niño a dormir... ¿Que haces tú despierto?— Pregunto con curiosidad, siempre había querido hablar con Catnap y ahora que lo tenía en frente no sabía que decirle, e incluso estaba nervioso, a saber Dios porque.
—Estaba haciendo mi trabajo, tengo que hacer dormir a todos los niños— Contesto Catnap mientras miraba de pies a cabeza a Dogday, era un poco más pequeño que el, tenía un medallón de sol y un bonito color naranja, unas esponjosas orejas al lado de su carita, además de que su cola no paraba de moverse, con tal simple acción de mirarlo Dogday estuvo aún más nervioso.
—Bueno, es un buen trabajo— soltó una risita nerviosa mientras se preguntaba qué más decir para no volver a la situación incómoda.
—¿Ya te vas a dormir?— Catnap se acercó un poco más a él, tenía curiosidad, nunca había visto a otro Smiling Critter de cerca.
—Si, si, me voy a ir a dormir, así que quizás podamos charlar en otro momento así que, buenas noches— Dogday estaba dispuesto a irse, Catnap le ponía de los nervios, pero no como una sensación de miedo, era un sensación rara que no sabía explicar, en cuanto comenzó a caminar para irse a la casa de todos los Smiling Critters sintió como lo agarraban de la cintura y lo alzaban en el aire —¡Oye! ¡Bajame de aquí!—
—Solo te ayudaré a dormir, es todo— Catnap acababa de tomar a Dogday con su cola, este no pesaba mucho así que solo lo levanto y comenzó a caminar hacia donde se suponía que estaban los demás Smiling Critters.
La verdad Dogday quería bajarse, le gustaba hacer las cosas por cuenta propia, estuvo un buen rato pataleando y pidiendole a Catnap que lo baje pero este solo siguió caminando haciendo caso omiso a lo que Dogday decía, y este, resignado, decidió quedarse allí hasta que Catnap lo baje.
Un muy buen primer encuentro si me preguntan a mi, Dogday acababa de encontrar a un juguete que creía descontinuado y ahora este juguete lo cargaba para ayudarlo a dormir, lo normal.
En cuanto llegaron a las habitaciones de los Smiling Critters Catnap bajo a Dogday, y tuvo que sostenerlo por los hombros antes de que Dogday saliera corriendo.
—Tranquilo, no quiero lastimarte— Catnap se sentía un poco mal, no entendía porque Dogday se quería ir, se preguntó a si mismo si en realidad le causaba miedo o algo así —Solo... ¿No te asustes, si?—
Dogday iba a replicar cuando Catnap comenzó a soltar un gas rojo, claro, era ese gas de Amapolas del cual había oído que Catnap tenía, pero esto solo hizo que Dogday quisiera irse de allí en un segundo, pero sus planes se vieron interrumpidos cuando comenzó a sentirse cansado, sintió que ni siquiera podía estar de pie.
Catnap creía que Dogday caería dormido rápido como cualquier niño, pero al ser un juguete supuso que quizás era diferente, vio como Dogday estaba casi cayendo al suelo así que se acercó y lo cargo con cuidado, al estilo nupcial por supuesto.
Catnap entro a la pequeña casa, no sabía dónde estaban las habitaciones así que solo entro y camino por el pasillo, había muchas puertas y cada una tenía una figura diferente fuera, cuando paso por una puerta que tenía un sol supuso que era la habitación de Dogday así que entró junto con el.
Al parecer el gas de Amapolas no tuvo efecto muy rápido, además de que puso a Dogday un poco más relajado que de costumbre, decía cualquier cosa sin sentido mientras reía y también hablaba sobre cosas que seguramente nunca diría en un estado más consciente.
—Sabes, siempre quise conocerte sinceramente creí que nunca te harían como un juguete con conciencia— Catnap trataba de ignorar todo lo que estaba diciendo Dogday, solo porque este no estaba del todo consciente, pero ese comentario solo le hizo prestar más atención —Siempre quise escuchar tu voz, es taaaaaaan linda— Dogday hablo alargando la "a" mientras se reía, Catnap en ese momento sintió como el color le subía a las mejillas.
—Ademas me gustan mucho esas orejas, son muy tiernas... ¿Si te beso tus labios sabrían a Amapolas o a Lavanda? — Dogday volvió a hablar con suaves risas, bueno pues ciertamente el no estaba en sus cinco sentidos, y Catnap solo podía sentir que se ponía de uno y mil colores al escucharlo hablar así.
Mientras Dogday seguía diciendo cosas de ese estilo, Catnap lo dejo en su cama y lo arropó con una manta mientras seguía escuchando todos los ¿Halagos? ¿Intento de coqueteo? bueno, fuese lo que fuese sinceramente le gustaba, e iba a decirle algo a Dogday pero fue demasiado tarde cuando se dio cuenta que este estaba dormido.
Se veía tan tranquilo durmiendo, en contraste a como hace unos segundos por poco y decía que tal sería besar a Catnap, aún así, Catnap le tenía cierto aprecio, aunque a penas lo conociera y esperaba que pudieran conocerse un poco más.
Mientras tanto, estaba seguro que al día siguiente podría molestar a Dogday con todo lo que había dicho esa noche.
Pedido para villian_loser
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