A ti querida Niebla, la Setenta y Tres original, tú extravío inspiró esta obra. Aún con mirada triste al pasar por esa calle donde nos dejaste solos, buscamos tú mirada, esperamos saltes a nuestros hombros y ronronees en nuestros oídos. Esta y las demás historias que viva la pequeña Setenta y Tres son las aventuras que imagino estés viviendo.
A ti querida Umi, una tarde de febrero llegaste a nosotros, débil y sin esperanzas de vida, "un día, a lo mucho sobrevivirá", esas fueron las palabras del veterinario. Tú hermano murió esa noche y allí mismo Niebla te adoptó, gracias al tiempo que estuvieron juntas viviste más de lo diagnosticado. Un día se convirtió en seis grandes años, una triste mañana de febrero mientras dormías nos abandonaste, la debilidad provocada por la enfermedad solo te permitió llegar al lugar donde amabas dormir, a nuestro lado.
A ti Niebla (la reina), a ti Umi (la princesita) les dedico esta obra.