Drogas, alcohol y sexo era lo único que estaba frente de él, podía ver chicas las cuales se notaban que ya estaban resignadas a su destino, otras que llevan a la fuerza a las habitaciones de arriba, y por último habia chicos que tambien eran utilizados como objeto sexual.
¿Que era este lugar?, realmente conocía las cosas por anécdotas de amigos pero nada era igual a la realidad.
Lo subieron, pudo ver el interior de la casa, muebles algo viejos, paredes del mismo color del sotano, gente entre treinta a cincuenta años, jovenes de unos trece a veinte años trabajando, claro si a eso se le podia llamar trabajo ; aun lo tenian atado, el efecto del sedante ya habia pasado, podia mover su cuerpo, forsejeava, pero era inútil.
- atención, hoy tenemos carne fresca - aplausos se escucharon en la casa - veamos, podemos iniciar con 10,000 pesos
- por aquí - levantó la mano -
- ¿Quién da más ?
- 15,000 - otra mano alzada -
- 20,000 - el mismo tipo del inicio -
- 30,000 - era una batalla -
- 50,000 - persona ajena a la batalla inicial -
- vendida - se acercó al comprador - le daremos la habitación especial, espere en ella la llevaremos lista -
Lo bajaron al sótano, una inyección se acercó a su brazo, la sensación del líquido en su cuerpo era horrible, entumecimiento, de nuevo no podía mover su cuerpo.
- pónganle nueva ropa y llevenla con su comprador -
Dos chicas de no más de veinte años lo desamarraron, quitaron su ropa y pusieron una nueva; una lenseria que era de color negro, un top transparente, unas bragas de hilo, un tipo vestido que dejaba ver a través de el; le quitaron su trenza y la peinaron.
- lo siento - decía mientras la llevaban a la habitación -
- permiso - las dos chicas salieron de la habitación dejándolo con el tipo -
Pánico y miedo, único sentir, su cuerpo no reaccionaban, manos asquerosas tocando su rostro .
- eres realmente bonita, malo que eres una puta - la cargo a la cama -
Un beso forzado, un asco tremendo, era la peor sensación del mundo.
- quiero que hagas un trabajo para mí - saco su miembro y se lo puso en la cara - con esa boquita de puta quiero que me la chupes - paseo su miembro por los labios de la chica - se ve que sabes hacer esto - con una mano le abrió la boca y metio su miembro -
Un sabor agrio recorrió si lengua, no podía moverse, en otros momentos, si tuviera consciencia sobre su cuerpo hubiera molido a golpes al sujeto.
Un líquido espeso cubrió su boca, unas ganas de vomitar lo invadieron, odiaba esto
- vamos cariño, no pongas esa cara - empezó a quitarse la ropa - se que te gusta esto - también quitó la lencería que traía Ranma - pronto te sentirás mejor que no querrás irte .
Empezó a besar su cuerpo, manocio y tocó todo, y sin preparacion previa lo penetro.
Un ardor junto con dolor recorrió su espalda y piernas, un grito fue lo que se escucho antes de que el tipo le diera una cachetada.
- se que se siente rico, pero no grites tanto - movió sus caderas -
Nunca había tocado ese lugar, no sabía que realmente funcionaba, pensó que solo podría ser de adorno debido a su maldición.
Agradecía que el sujeto que lo estaba violando se puso condón, en estos momentos ya no sabía si podía quedar embarazado.
- mierda, estás tan apretada - la tomo por las piernas -
- po... Porfavor pare - con sus últimas fuerzas le metió un golpe en el estómago -
El tipo se quitó de encima debido al dolor y la falta de aire. Ranma no sabía que hacía, sabía que no podía huir lejos debido a lo que le inyectaron pero debía tratar.
Se arrastro por el piso, estaba a un metro de llegar a la puerta cuando una mano lo tomó del pie y lo regreso.
- MALDITA PERRA, ME LAS VAS A PAGAR - la subió a la cama y la empezó a violar -
El dolor volvió, ya no habi más, era una pesadilla, quería despertar, quería estar con ryoga, quería que esté lo abrazara y le dijera que solo era un mal sueño.
El atroz acto terminó, la dejo ahí, como un simple objeto, como una basura.
Ya podía moverse un poco más, la inyección estaba perdiendo efecto. Vio un reloj que colgaba de la pared, había pasado solo una hora.
Se sentó en la cama, el ardor y dolor volvieron, vio su vagina, estaba llena de sangre y está había manchado la cama.
Se levantó, quería irse, ya no quería estar ahí, pero el dolor hizo que callera al piso en el cual solo lloro.
Pasaron cuatro minutos y las mismas chicas volvieron a entrar, se la llevaron mientras que otras empezaban a limpiar la habitación.
Regresaron al sótano y la metieron al baño.
- Lo siento mucho - la chica tenia los ojos llorosos - todas pasamos por lo mismo, así que trata de acostumbrarse - dio una sonrisa que mostraba dolor - el agua está fría, no nos dejan tener agua caliente ya que sale más caro, así que voy a bañarte, no te preocupes yo no te haré daño
Ranma estaba en shock, no podía creer nada de lo que pasaba.
Pudo sentir el agua caer sobre su cuerpo, no opuso resistencia, ya no tenía fuerzas para aquello.
La terminaron de bañar, le dieron ropa nueva y la maquillaron .
- mira, tendrás que hacerlo con tres o cuatro personas más - acaricio los cabellos rojos - el jefe dijo que volviera a inyectarte ya que el cliente de hace un momento se quejó de que lo golpeaste, así que perdoname - lo volvió a inyectar - está ves la dosis es menos, podrás moverte un poco más, pero tus fuerzas estarán limitadas
Y así, la noche pasó, cinco personas habían abusado de él, no pudo defenderse, se sentía asqueroso, sucio, no era el.
El segundo día fue peor, diez personas estuvieron con el.
La semana paso, lo habían mantenido drogado. La siguiente semana fue igual, nada cambio hasta la semana quinta, exactamente el quinto día, el viernes.
- oye, son las cinco, hemos dormido todo el día, bueno, se que terminamos de trabajar a las cuatro de la madrugada, pero faltan dos horas para que abran, asi que tenemos dos horas, podemos platicar - sonrió - no me has dicho cual es tu nombre
- Ranma - la volteo a ver - ¿Y el tuyo ?
- Hazel
- bonito - no quedaba más que aceptar la realidad -
- gracias, el tuyo igual es bonito - lo vio directamente - veo que quieres preguntar algo
- ¿Como lo sabes?
- se ve - rio levemente - creo que no eres buena ocultando tus emociones
- no, no lo soy - suspiro - ¿Sabes cuando dejaran de drogarme ?
- eso... - cambió su semblante - depende de ti, estos últimos días has golpeado clientes así que talvez te sigan drogando un mes más - sonaba triste - pero hey, si mejoras ti comportamiento te lo quitaran pronto - trato de sonar animada - como a mi, me lo quitaron al mes
- ¿Cuanto llevas aquí?
- mm..., pues un año, era la "oveja negra " de mi familia, así que por eso no me han buscado, pero no me quejo, este lugar de algún modo me hace sentirme en casa - una lágrima rodó por su mejilla -
- yo sé artes marciales, cuando me quiten la droga te juro que los mataré a todos a golpes y nos iremos de aquí, te llevaré con mi novio y te ayudaremos a encontrar un trabajo y que puedas salir a delante por ti misma - se había emocionado de más -
- ¿Sabes artes marciales?, pero, ¿como es que te atraparon?
- larga historia
- y ¿También tienes novio?, seguro te está buscando
- bueno..., no somos novios como tal, pero, ya nos besamos y sabe que me gusta, aparte, es un amigo de mucho tiempo así que no dudará en ayudarte
- oh, entiendo, pero ¿Cómo se llama?, ¿Es guapo? - se sentó en la cama - dijo, no porque quiero robartelo pero, hace tanto que no salgo al exterior que saber de otras personas me emociona
- se llama ryoga, es muy guapo, es algo y tiene una sonrisa encantadora, tiene colmillos que cuando ríe se notan, siempre huele bien, siempre lleva puesta una bandana amarilla y tambien hace artes marciales - las demás chicas y chicos se acercaron a escuchar la conversación - también es muy atento, cuando me le confece no se alegó de mi, nuestra amistad es muy fuerte - suspiro y una imagen de ryoga apareció en su mente -
- ¿Encerio es tan lindo? - otra chica habló -
Pasaron las dos horas hablando de su vida, cada una de las personas de ese lugar habían sidos traídos a la fuerza, unos se resignaron ya que no tenían familia que los buscará, otros como Hazel eran excluidos por sus familias, unos más habían sidos vendidos por si propia familia.
Cuando abrieron la puerta era señal de que tenían que trabajar.
No tardo mucho para que alguien comprara los servicios de Ranma.
Lo volvieron a drogar y fue llevado a la habitación, sabía que tenía que portarse bien, quería salvar a sus amigos.
- Page demasiado por ti - dijo mientras agitaba un látigo - soy una persona persona con gustos diferentes - se acercó a ella - así que por la cantidad de dinero que gaste podré hacer lo que quiera -
Realmente esto se ponía cada vez peor .
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Hola gente, soy el escritor, quería decirles una cosa.
Primero, tuve un poco de bloqueo creativo pero espero ya poder actualizar más seguido.
Tambien quería especificar que va a haber más abusos sexuales.
Por otro lado, quiero agradecer por su tiempo que se tomaron para leer mis esquizofrenias.
Muchas gracias, voten por la obra de favor y si pueden difundirla estaría perfecto, sin más los dejo
Tomén agüita y bañense